Cuando atravesó las puertas giratorias de la clínica, solo era capaz de escuchar el pum- pum - pum de su corazón embravecido. Ni siquiera fue capaz de registrar los horribles sonidos de la gran sala de espera. Sus ojos se movían veloces. Se anunció a la enfermera de la entrada, y esta le indicó por donde ir, pero delante del pasillo que da accesos al sector VIP del hospital los guardias de seguridad la detuvieron. Había una docena de ellos.

—No está permitido el ingreso a este sector, Señora. Por favor regrese por donde vino.

—Quita tus malditas manos de mí, déjame pasar.

—No puede pasar, Señora. Lo lamento.

—¿Tú y cuántos gorilas más no me dejarán pasar?

Cuando ella ya estaba a punto de dar pelea cuerpo a cuerpo, detrás del guardia se asomó Kim Namjoon.
Con una mano la tomó a ella suavemente por el hombro y contuvo al guardia con la otra.

—Es la mamá de Jimin, ella es la persona que estamos esperando que llegara, la única que puede pasar —Le dijo al hombre de seguridad que hizo mil quinientas reverencias ante la dama, en señal de disculpas.

Ella miró a Namjoon con desesperación, sus ojos bravos se habían tornado apacibles en cuestión de segundos.

—¿Dónde está mi bebé?

—Por aquí, ven Ha-Neul¹ —El líder la condujo hasta la habitación de su hijo.

—Jimin, angelito...

Jimin con su rostro hacia la ventana, tenía la mirada perdida hasta que hizo contacto con su mamá.

—¡Mamá! —Se incorporó en la cama, estiró sus brazos y abría y cerraba sus manitas a la espera de que su madre se le uniera al abrazo deseado.
La atrajo hacia él. Ella lo cobijó como si fuera su cachorrito y lloraron juntos.

—Hijo, basta, no llores así que va hacerte mal.
Pero él no podía detenerse.

—¡Jimin! —Ella levantó la voz con tono dominante.
—Controlate hijo. Vamos a hablar. Pero en ese estado no puedes. Si no te calmas llamaré al médico para que te seden.

—No, no, má, no quiero que me seden.

—Entonces haz un esfuerzo, angelito. Deja de llorar así. Respira profundo. Estás hiperventilando.

—Déjenme sola con mi hijo —ordenó ella —Ahora Jimin, cuéntame todo.

—Me dejó, mamá, Jungkook me dejó.

—¿Discutieron? ¿Andaban mal? ¿Qué pasó?

—Nada de eso, estábamos perfecto. Pero en casa, me dio la noticia de su decisión.

—¿Cómo? ¿Él solo decidió esto? No fue de mutuo acuerdo?.

—No, mami, no. Me dejó como a un perro...

—No digas así que vas a empezar a llorar de nuevo.

—Mamá... me quiero morir.

Ella lo atrajo a su pecho nuevamente. Arrulló una canción infantil mientras lo acunaba como si fuera un bebecito.

—Shhhh.... —susurraba la madre.

—Shhh, bebé, llora pero no entres en crisis. Sácate ese dolor de adentro, necesitas llorar, ya lo sé, pero no te descontroles hijo.

El pecho de Jimin hipaba de espasmos, ella lo acariciaba con amor y dolor por su hijo sufriente.

—Voy a morir —Volvió a decir

—No, Mimín, nadie se muere de amor.

—¡Sí mamá!! Me duele acá —Tocó su pecho.

—Escúchame bien, hijo, voy a contarte algo que solo lo sabemos tu papá y yo. Más nadie. Pero necesito que me escuches, que te calmes un poquito así podemos hablar.

—Bueno, má —dijo el cachorro.

—Hace muchos años, yo estuve en la misma situación en la que estás tú ahora, hijo.

Jimin emitía un hipo sistemático cada diez segundos, se secó la cara y prestó atención a su mamá.

—También creí que el mundo bajo mis pies se había hecho trizas. Sentí que nada tenía sentido y que mi vida no valía nada, y eso porque no podía estar al lado de la persona que amaba.

—¿Tú? ¿Papá y tú no podían estar juntos?

—No, no era tu papá....

—¿Quién era él? .

—No era él.... Era ella.

Los ojos de Jimin ahora no cabían en su cara...

—¿Quéé?

—Sí, hijo, mi primer gran amor, fue una chica, una dulce amiga que se convirtió en mi "todo". ¡Nos amábamos hasta las raíces! Éramos jóvenes, pero no niñas. Diecisiete años ambas, teníamos muy en claro que no era una confusión. Fue mi primer contacto con ese sentimiento que te abraza el alma, la amaba y me amaba, veía por sus ojos. Pero estamos hablando de hace treinta años atrás, Jimin.... La homosexualidad era impensable. Mis padres me ultimaron a dejarla bajo amenaza de enviarme al campo, a lo de mis abuelos. Sus padres en cambio, no perdieron tiempo en amenazas, solo se la llevaron lejos, la apartaron de mí.... Y nunca, nunca más volví a verla, Jimin...

La mamá es ahora quién ahogaba el llanto y su pequeño hijo es quién la acunaba entre sus brazos.

—Mamita mía, no sabía nada, mami... ¡Cómo habrás sufrido!

—Creí morir hijo, tal como estás tú, ahora mismo. Por eso es que me atrevo a decirte que nadie muere de amor. Yo sentí que mi vida no tenía sentido sin ella, fue todo tan difícil, hasta respirar era un suplicio.

—Así me siento yo.

—Ya lo sé, bebé, por eso te cuento mi secreto guardado bajo mil llaves. Porque quiero que sepas que no morí de amor. Que alguien rescató mi corazón y pude armar los pedazos hasta sanar por completo, porque nadie muere de amor, siempre hay una esperanza.

—¿Fue papá? ¿Él te rescató?.

—Sí hijo. Fue Park MinJun, tu padre.

Jimin sonrió, hacía muchas horas que él no emitía ni una leve sonrisa, pero lo hizo ahora, él sintió felicidad de saber que su progenitor había salvado el corazón roto de su mami.

—Tu papá y yo nos hicimos inseparables. Al principio solo amistad, porque ya sabes, yo aún suspiraba por mi chica, per...

—Qué raro oírte decir eso —La interrumpió, Jimin.

—¿Qué cosa?.

—«Mi chica» —Llevó sus manitas a la cara con un gesto tímido, hermoso, propio de él —Es raro saber que mi mami es gay³ , jaja.

—Lo fui, hijo, tiempo pasado. Yo prefiero decir que fui lesbiana, bisexual después y ahora soy hetero—Ella emitió una risa sonora y él supo que de allí había heredado la suya— al revés de lo que suele ocurrir con quiénes experimentan su sexualidad.

—¿Por eso tú y papá siempre me apoyaron cuando les dije que me gustaban los chicos?

—Bueno, sí, en parte sí, pero no solamente porque yo experimenté lo que es amar a alguien de mi mismo sexo, y ser rechazada, sino porque creemos que cada persona es dueña de amar a quien se le ocurra. Amor es amor, hijo.
Por eso celebramos que encontraras en Jungkook a la persona indicada y no solo lo aceptamos, lo adoramos a él también.

—Sí, lo sé, mami linda.

Su mamá limpiaba con el dorso de su mano los rastros que las lagrimas habían dejado en las mejillas de su hijo.

—Má... ¿alguna vez la buscaste?.

—No hijo. Después de que empezamos una relación exclusiva con tu padre, ya no tuve deseos de buscarla. La recordaba con amor, sí, pero ya no tenía necesidad de ella. Tu papá logró enamorarme y mi corazón empezó a curarse.
Por eso te digo que todo pasa, Jimin, esto también va pasar y vas a estar bien, te lo prometo.

—Bueno, mamá. Gracias por confiar en mí y contarme tu secreto.

—Era necesario, necesitas saber que hasta el corazón más lastimado, se cura. Ahora vamos a hacer esto, tienes derecho a llorar hasta que te quedes seco de lágrimas, y lo harás. Dejarás que el dolor habite en ti, no lo reprimas, siéntelo. Si lo evitas, regresará con más fuerza.

Jimin cerró sus ojos imaginando lo que su madre le decía, su voz era ensoñadora.

—Ya verás que paso a paso empezarás a tener pensamientos más sanos. Lleva tiempo, mi amor, lleva muuucho tiempo, pero no estás solo, aquí estoy yo y están tus amigos para cuidarte y quererte.

Dos golpes tímidos en puerta del cuarto interrumpieron la charla, Ha-Neul fue a abrir y Namjoon ingresó.

—Jimin, te ves mejor, tu mamá te hizo bien.

—Hola Nam. Gracias. Sí, mi mamá es mi oasis.

—Me alegra verte mejor.

—Gracias, Nam, gracias por cuidarme, por quedarte conmigo toda la noche.

—No me agradezcas, Jimin, tú harías lo mismo en mi lugar.

—Claro que sí —susurró con su voz más pequeña.

—Bueno, voy a dejarlos, debo ir a la empresa. Hoy tenemos la reunión con la junta directiva, ¿recuerdas Jimin? Hoy se firma la renovación de nuestros contratos.

—Es verdad, me había olvidado.

—No te preocupes, el señor Lee estuvo aquí anoche hasta tarde, preocupado por ti, por tu salud, él ya habló con los CEO de la empresa para ponerlos al tanto de tu estado en este momento. Se reunirán contigo cuando estés recuperado.

—Gracias de nuevo, Nam. Eres un gran amigo, y un tremendo líder. Te admiro —comentó Jimin, emocionado.

Namjoon sonrió, se acercó a la cama, abrazó a su pequeño amigo, se inclinó ante Ha-Neul y se retiró.

—¿Jimin, ya leíste bien el contrato?.

—Sí, má. Hay cosas que no me cierran. Pero firmaré igual.

—¿Qué cosas no te cierran?.

—Una cláusula que figura al final del contrato.

—¿Lo tienes digital? Envíamelo...

—Lo tengo aquí conmigo, formato papel.

—¿Dónde está?

—Entre mis cosas.

Ha-Neul tomó los folios que contienen el contrato y comenzó a leer, al llegar a la cláusula de la que hablaba Jimin, sintió que le iba a estallar la cabeza.

Tomó su cartera y guardó en ella el contrato. Recogió su abrigo, su móvil, le dio un beso en la frente a su hijo y salió disparada.

—Ya regreso angelito.

—Mamaaa ...

Algunos datos que me gustan dejar:

(¹) Ha-Neul (하늘 Pronunciado Ha-nul) nombre que significa cielo.

(²) MinJun: nombre que significa “el muy talentoso”.

(³) Gay. Luego de que me comentaran acá, acerca de por qué usé el término gay para referirme a una mujer homosexual, empecé a cuestionar por qué a las mujeres lesbianas también se nos llama gay (al menos en Argentina de donde soy) . Nunca me molestó pero leí algunas razones interesantes acerca de cómo el lenguaje puede incluir o invisibilizar.
Se trata de utilizar conceptos que nos representen, abarquen e incluyan. Tan simple como eso.

No voy a modificar esa parte del texto porque es escritura espontánea y porque gracias al comentario que hizo Mimi_Moon07 , leí cosas muy interesantes sobre el colectivo del que formo parte.