La autoridad (9)
- Mi hermano ha sido golpeado por defenderme de un insulto. Un alumno que por su privacidad no voy a decir quién fue, me informó de castigos físicos por sentir atracción hacia los varones o por tener un mal comportamiento. Tiene cicatrices en la espalda...- se cruzó de brazos.- El infierno tiene nombre y es este lugar.
- ¿¡Cómo te atreves!?- exclamó una de las monjas.
- ¿De verdad usted cree estas barbaridades?- el director se mantuvo serio, y miró a su madre con la misma seriedad y casi denigración, porque parecía más bien que miraba a su padre que no a su madre.
- Confío tanto en mis hijos que pondría la mano en el fuego...- dijo su madre con una seguridad.- Y si Adam ha sido golpeado por defender a su hermano, tenga por seguro que pienso denunciarlo.
- Yo no he golpeado a su hijo, y tampoco y mucho menos he golpeado o maltratado a ningún alumno.
- Obviamente va a decir que no lo ha hecho delante de mis padres. Me golpeaste después de decirme que era un deslenguado insolente.
- Acabas de probar ante tus padres que lo eres.
- Y tú acabas de probar que me golpeaste.- Adam sonrió de forma tétrica y burlona; el director se mantuvo impasible.
Su madre, Becky, desvió sus ojos hacia su padre, Alan, y movió su cabeza hacia el exterior, el hombre asintió con la cabeza sacando el teléfono del bolsillo y empujando la puerta. Los dos adultos tenían una mirada seria y tenebrosa, pero el director no quiso verse afectado por tal intimidación.
- Su hijo tiene tan mal temperamento que tengo que pedir que lo matriculen en otro instituto más severo todavía. Deben convertirlo en un buen hombre de fe, y en este lugar, lamentamente no vamos a poder hacerlo... Lamentándolo mucho, me niego a tener un alumno con tan mal temperamento en este lugar.- Irwin entrecerró los ojos.
- ¿Ahora que ha quedado con el culo al aire como un maldito abusador y maltratador, pretende expulsar a mi hermano como si fuera culpa suya lo que ha pasado aquí?
- Irwin...- su madre dijo con severa autoridad. Después miró al director.- Señor Gabriel Cátedra...- la forma en la que dijo el nombre fue casi arrastrada por la rabia y el desdén.- Usted ha golpeado a uno de mis hijos, ha permitido que una de sus trabajadoras humille a mi otro hijo, y a saber que le ha hecho a otros pobres alumnos en este internado...- Apoyó una mano en el hombro de su hijo mayor. Después imitó lo mismo con su hijo menor.- Mi marido está llamando a las autoridades, usted hoy va a dormir entre rejas...
- ¿Cómo se atreve a amenazarme de esta manera?
- ¿Cómo se ha atrevido usted a golpear a uno de mis hijos por defender a su hermano?- Becky dejó de apoyar sus manos en los hombros de sus hijos.- Tómelo como una amenaza si quiere, pero vuelvo a escuchar que le pone la mano encima a cualquier niño o adolescente otra vez, y pienso romperle todos los huesos del cuerpo de una sola patada, y si duda de mis habilidades o de las posibilidades de que eso suceda... Soy campeona regional de kickboxing...
Alan entró una vez más en el interior con una patrulla simple de dos hombres, entre los cuales, una mirada llena de muerte se cernió sobre el director. Unos ojos que parecían los de la misma muerte parecía estar a punto de abducir el alma del pobre hombre que, sin poder evitarlo, se puso a temblar.
- Revisaremos a todos los alumnos de último curso, si encontramos un solo maltrato, o cicatriz, se viene con nosotros al calabozo.
- Las cosas no funcionan así.- se defendió el director.
- He dicho...- el tono de voz del oficial fue certero.- se viene con nosotros si encontramos marcas de maltrato. Si no fuera culpable de nada, no tendría que quejarse de nada...- sus labios tenían una línea recta, el agente era realmente intimidante, casi parecía la misma muerte.
Irwin y Adam no podían evitar sentirse intimidados por aquella presencia. El compañero se fue por el pasillo y hasta el patio, en el que buscó a varios alumnos, les pidió que les indicaran dónde estaban los alumnos del último curso. Mientras este buscaba a los alumnos, el compañero principal de ojos tétricos estaba en el despacho de la entrada, custodiando que el director no se fugara por un despiste, y tampoco lo hicieran ninguna de las monjas, ni la secretaría, porque en este caso, cualquiera podría ser testigo, o estar a favor de las ideas.
Pasaron al menos unos quince o veinte minutos hasta que el compañero llegó con dos alumnos. David Pérez, y un chico rubio bastante despeinado que habían visto sentado en otra mesa apartada de la que ellos estuvieron.
- Tienen cicatrices en los pies y en la espalda...
____________________________________________________________________________
Para aquellos que se estén preguntando cuando es el objetivo de esto...
Lo sabrán cuando sea el momento indicado...
Solo puedo decir que quiero crear una sensación de seguridad y calma, quiero estabilizar las cosas...
De hecho, considero la acción de los padres la misma reacción que tendrían que tener los padres de los personajes que viven tramas cómo estás en internados católicos o centros muy estrictos...
Lo que me preocupa mucho es la normalización que los autores y las autoras hacen sobre este tipo de sitio para crear a unos personajes mártires que "Deben sufrir por su amor"... yo no opino eso... De hecho, considero que nadie debería sufrir o llorar por poder amar.
Los padres de esas historias (lo digo porque las he leído, sé de lo que ha lo) son tan denigrantes y dan tanto asco que les deberían haber quitado la potestad / custodia sobre sus hijos hace tanto tiempo que resulta ridículo simplemente leer su papel como "padres del año" que pasan a ser "padres de mierda" de un capítulo a otro...
De hecho, hay muchos ejemplos de padres que trataban muy bien a sus hijosz los llevaban al internado y cuando tenían qué ir a recogerlos, no iban, o los llamaban enfermos y los abandonaban ahí, o estaban totalmente de acuerdo con los castigos que ese internado imponía sobre los alumnos "enfermos"...
No es nada coherente... y por eso quise cambiarlo...
Es lo mismo con el tema de la comida... Las descripciones de las comidas se resumen es un infierno o una tortura... No aparecen darse cuenta de lo exagerado y ridículo que es eso...
¿Sí se dan cuenta de que los alumnos pueden morir o enfermar por deshidratación o por falta de nutrientes? ¿Qué se supone que harían? La gente no parece darse cuenta que al escribir, simplemente da una imagen de "cárcel" cuando eso es un centro de estudio... Entiendo que la literatura y las películas no hayan ayudado en absoluto...
Pero la gente tampoco se esfuerza en querer cambiar esos estereotipos que se tienen sobre los internados católicos...
Por ello la sensación de seguridad... Quiero que los lectores que lean esto no sufran por el hecho de que en cualquier momento puedan hacerle algo daño a los personajes solo por ser afectivos...
Quiero que vean, que dentro de todo lo malo, hay personajes que tienen padres que los aman y dentro de ese instituto, hay personajes carismáticos que conviven con la religión sin mayor problema...
Eso es todo UwU
Aquí las opiniones ----------->
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line
[1250 Palabras]
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro