Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

💍31

El pelinegro tomaba sin parar en su oficina desde que había llegado de la casa de sus padres. Había recordado cuánto le dolió en su niñez y años de juventud, cuando quería un abrazo de sus progenitores y lo mucho que les hacía falta un buen consejo.

No solo él sino también su hermano mayor, quien maduro más pronto que él e hizo el papel de un padre para él. Sufrió mucho con todo el rechazo que le dieron desde muy joven y también le dolía lo de Taehyung. Sus padres lo trataron tan mal cuando se los presentó en aquella cena que Taehyung lloró a mares esa noche, y un más cuando me dijo que esperaba un lindo bebé.

Por parte de Jungkook él estaba feliz y por otro asustado porque era muy joven, pero ambos se enfrentaron a todo y lo tuvieron, aunque no terminó nada bien, pues cuando él falleció sus padres literalmente no fueron, no lo apoyaron como le hubiese gustado, no había pasado mucho desde el fallecimiento de su esposo cuando sus padres le presionaron con el tema de Kang Seulgi.

Fue la gota que derramó el vaso de la paciencia del pelinegro, él llevaba a su hijo con él a la oficina y lo alimentaba desde ahí, lo cambiaba y todas esas cosas. Incluso le compró un cunita y adornó parte de su oficina de cosas de bebés.

Sus padres miraban tan muy mal a su pequeño que para Jungkook una simple disculpa no valía la pena. Siguió bebiendo hasta la última gota, se levantó como pudo pues se sintió tan mareado. Trato de dar un paso, pero cayó en piso frío de madera.

—¡Maldición! —exclamó enojado y sin poder moverse.

Jimin, por otro lado, miraba la hora en el relojero, eran las cuatro de la mañana y no podía ni siquiera dormir. Su esposo seguía bebiendo y no quería que se intoxicara con el alcohol, se paró de la cama y tomó las llaves de repuesto de la oficina de su esposo, salió y acomodó su bata de seda. Al llegar tomó un suspiro y abrió la puerta lentamente, miró la oficina algo oscura y la peste a cigarro y alcohol, se adentra, prende la luz dejando ver a su esposo tirado en el piso.

—¡Jungkook! —se acercó aterrado y giró su cuerpo mirándolo dormido— Amor despierta, ¿estás bien? ¡Responde! —pero su esposo se quejaba y no parecía querer despertar.

Miró el sofá que estaba en su oficina y cómo pudo cargar el cuerpo de su esposo hasta ahí. La verdad es que Jungkook pesaba mucho y él no podía cargar cosas pesadas por su embarazo, pero a esta hora no tenía opción. Así que prosiguió, arrastró el cuerpo pesado de su esposo hasta que logró acostarlo.

—Dios pesas mucho —El peli-rosa miró el rostro adormilado de su esposo y lo mucho que olía alcohol, también noto las tres botellas vacías de vodka, se sintió mal de verlo de esa manera.

—Te amo, Jungkook, odio verte de esta manera. —Acaricia su mejilla con amor— Sueña lindo amor, mañana hablaremos con más calma —besó su frente para ir al armario que estaba en el pasillo, sacó una manta con una almohada, las tomó y se las puso para que durmiera mejor.

Salió y fue directo a su recámara para dormir, pero un pequeño cuerpo estaba entre sus sábanas, Jimin frunció el ceño y se acercó mirando a Soobin, este dormía tranquilo que le sacó una sonrisa al peli-rosa.

De seguro tuvo una pesadilla y vino a dormir, le restó importancia y se acostó con él abrazando su pequeño cuerpo.


El pelinegro fue abriendo sus ojos poco a poco, miró el sol entrar por su ventana lo cual le pareció algo muy extraño, ya que siempre cerraba sus cortinas. Su cuerpo crujió, el sofá no era nada cómodo. Tocó su cabeza con un gran dolor punzante.

Se paró y salió de ahí para sí mirar el bonito día que alumbraba por toda su casa, un delicioso olor llegó a sus fosas nasales y siguió el olor hasta la cocina donde pudo ver a su lindo esposo cocinar, sonrió por los movimientos de cadera que hacía pues cantaba una canción de Selena Gomez, le pareció tan tierno verlo de ese modo. Se fue acercando sigilosamente hasta abrazar su cintura exaltando al menor

—¡Dios! Me asustaste Jeon. —Chilló dándose la vuelta para mirarlo algo molesto.

—Lo siento mi amor, es que te movías y cantabas tan sexy que no pude resistir —besó sus labios pomposos.

—No vuelvas asustarme de esa manera, también asustaste a tus hijos, si nacen con traumas yo te mataré me escuchaste. —Amenazó, pero Jungkook solo se carcajeó.

—Ya nene no seas tan exagerado, mejor porque no me sirves un plato de lo que cocinas, huele delicioso.

—Primero date una ducha y después bajas, te cocine algo para tu resaca, también trae a Soobin, está en nuestra habitación dormido.

Jungkook giró su cara confundido. —¿Qué hace en nuestra cama?

—Ayer yo fui a ver cómo estabas y te mire tirado en tu oficina —le recordó y Jungkook lo miraba atento— Te levanté del piso y te acosté en tu sofá para que durmieras mejor, cuando subí a mi habitación estaba ahí dormido. Creo que tuvo una pesadilla, le deje ahí y dormimos los dos juntos. —explicó y su esposo lo miraba interrogante y no sabía el por qué.

—Jimin, ¿me cargaste?. —Pregunto en un tono molesto— Amor no debiste, estás embarazado y puede ser peligroso, debiste dejarme ahí tirado.

—Pero no quería dejarte tirado amor, no quería que durmieras en el suelo frío.

Jeon acunó sus manos en sus cachetes regordetes.

—No lo vuelvas hacer amor, prefiero el frío suelo que tú arriesgándote a cargarme sabiendo que tienes dos lindos bebés míos ahí adentro. —Jimin infló sus mejillas cabizbajo, pero su esposo le besó— Gracias nene, te amo mucho Jimin no sabes cuanto te amo.

—También te amo Jungkook, prometo que te dejaré en el piso si vuelve a pasar, pero espero que no pase otra vez, tenemos que hablar de eso, amor.

Y si era obvio que tenía que hablar con su lindo peli-rosa sobre lo que pasó y todas esas cosas dolorosas que no lo dejaban en paz.

—Está bien, primero iré a darme un baño y después desayunamos para más tarde hablar.

Jimin se conformó con eso. —Está bien amor ve y date una ducha, hueles mucho a alcohol.

Jungkook sonrió y besó por última vez sus lindos labios para sí darse un baño.

La mañana para ambos fue muy tranquila, Soobin les contó que soñó que a su papi Jimin se lo comía una serpiente y que también a sus hermanitos, Jimin le dijo que eso no pasaría y que solo fue una pesadilla, aunque pensándolo bien, no pensaba que fuese una pesadilla. Cuando terminaron de desayunar, Jimin dejó ir a Soobin a la casa de su amigo Yeonjun, ambos quedaron para jugar.

Jungkook empezó a contarle todo y de cómo sufrió en el transcurso de su vida con ellos como padres, Jimin lo oía atento a todo y hablaba cuando le daba un consejo. Sabía que no fue fácil para su esposo, pero tenía que ser su sustento y apoyo más que nada.

Eran una familia después de todo.

Al final Jungkook le dijo Jimin que dudaba en perdonar a sus padres por todo el daño causado, Jimin le aconsejó que guardar rencor no era nada bueno y que lo mejor era perdonar, pero su esposo se negaba a ello.

—Cuando estés listo, hazlo. No hay presión en ello. Sólo tú sabes cómo te sentiste en esos momentos.

—Fue una vida dura, fue mentalmente lo peor.

—Considera solo pensar las cosas, son tus padres después de todo.

Jungkook negó, le devolvió la pregunta a Jimin, no lo estaba entendiendo del todo.

—¿Y tú perdonarías a Yoongi después de todo lo que te hizo?

—Tal vez… Fue parte de la gran mayoría de mi vida, pasamos cosas buenas antes de malas. Se que lo hizo estuvo mal, pero creo que al final le daría el perdón. De todas maneras no es como que volvamos a hablar. Agregando que fue a mi academia a pedirme perdón.

La sorpresa de Jungkook fue escuchar eso, miró a Jimin incrédulo.

—¡¿Qué?! ¿cuándo pasó eso Jimin? ¿cuándo fue a verte?

La tormenta se acercaba.

—Pasó cuando supe que esperaba un bebé tuyo, él fue a la academia de danza ese día. —explicó— Me dijo que sentía todo el daño que me había hecho durante mucho tiempo, también se disculpó por lo de ese día. —El pelinegro no podía creer lo que escuchaba— Hablamos sobre eso y lo corrí, no lo perdone porque seguía enojado.

Jimin tomó las manos de su esposo y este estaba tenso y algo molesto.

—Lo pasado es pasado y no quiero que vivas con este rencor contigo amor, no eres una mala persona y demuéstrales que no eres igual a ellos.

—No, no lo entiendo Jimin, fue mucho daño y además ¿por qué carajo no me dijiste sobre lo de Yoongi? —musitó enojado— ¡Mierda! ni siquiera sabes cómo me siento, no sabes nada —dijo furioso— No comprendes y en vez de sentir apoyo de tu parte, no me lo das. Definitivamente no eres él.

Jimin sintió una punzada en su pecho y se paró del sofá empuñando sus manitas.

—¿No soy igual a él? —Contesto molesto— ¡No soy él, maldito idiota! Y claro que te apoyo Jungkook, pero no estoy de acuerdo en todo lo que haces, trato de aconsejarte y darte mi apoyo, "pero no soy él" no lo seré jamás. Solo soy Park Jimin.

—Lo siento, no quise decir eso.

—Si quisiste, y no tiene nada de malo lo que he dicho como para que me digas que no soy igual a él. —Lo mira con decepción, está enojado y no sabe lo que dice, eso lo comprende Jimin, pero le dolió— No sé cómo te sientes con respecto a lo duro que fue para ti todo lo que pasaste con tus padres y con tu ex, pero no dejaré que me compares, porque él y yo no somos iguales. Eres un idiota, y ahora mismo espero que te largues de mi vista antes de que cometa una locura.

—Jimin… lo siento no debí decir eso, se me salió, dios cuando estoy enojado digo estupidez. Lo siento, amor, de verdad lo siento. Perdoname.

Se inca frente a él soltando algunas lágrimas, Jimin no podía con esto, si en esto se basan su matrimonio, joder, no quería imaginar aquello más adelante.

—Dejame solo, ahora yo lo necesito.

—Jimin…

Jimin se apartó de él, tomó sus cosas y salió de su hogar sin rumbo alguno. Necesitaba estar solo para pensar las cosas sobre lo que pasó. Ama a Jungkook, pero hasta parece que de alguna manera quiere seguir viendo a su difunto esposo. Le dolía y espera ahora poder perdonarlo.

Que te perdone dios Jeon Jungkook. Jajaja lo maten en los comentarios plis.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro