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Capitulo 48: Los Guerreros del Dragón Carmesí

https://youtu.be/aVTMNkWiPf4

Por que sabiendo, cuan larga es la vida me deprimo con facilidad.

(Cuando comienza la canción, se ve viejo Reactor del Momentum en su mejor estado, y frente esa imagen aparece un joven Rex Goodwin que estira las manos, para que en un efecto de viento, la imagen se reemplace por el viejo Momentum y Roman con la capucha puesta, sonriendo siniestramente)

Quiero empezar de nuevo y lo inconcluso de una vez realizar.

(Se ve a un Kazuto de niño cerrarle la puerta, a Shiryu levantar su cabeza y el sol refleja un momento sus lentes)

(Cuando la música suena se ve una llama que toma forma, hasta mostrar al Dragón Carmesí, y frente al dragón el titulo de la historia)

Qué irónico es vivir motivando a otros, sin querer seguir.

(Kazuto camina a través de las calles llenas de basura de Satélite, que cambian a las calles limpias de Neo Domino, con la mirada hacía adelante y levanta las palmas)

Con sueños por lograr, tropezando con otros en mi caminar.

(Se ve a Shiryu en medio de un campo de césped con el viento sacudiendo el césped, sus ropas y cabello. Sus ojos siendo bloqueados por el reflejo de sus lentes. Shiryu da la espalda y la imagen se aleja y cae, hasta que el pasto bloquea la vista, haciendo un efecto de cambio)

No es que quiera arrepentirme ni regresar aquel pasado. Solo quiero recuperarlo.

(Se ve a Kazuto y Teresa de niños acompañados de una niña rubia, durmiendo en el suelo con almohadas esparcidas, para luego mostrar a Yusei acostado en la arena de la playa de Satélite, abriendo los ojos)

Mi cielo azul.

(Yusei estira la mano al cielo cubierto de contaminación por las fábricas de producción de Satélite).

No quiero ver en tu reflejo, esa expresión anegada ni de sacrificio.

(Se ve los pies de Rally y el resto de amigos de Yusei corriendo por las calles, para luego mostrar a Gai, enfocándose en su rostro. La imagen se mueve hasta la espalda de Ricardo y en cuanto se empieza a enfocar a su rostro, se ven ráfagas de viento hasta que se muestra la expresión horrorizada de Ricardo, rodeado por ráfagas que pasaban, como si estuviera al frente del origen)

Entiéndelo.

(Se ve a Tomoe. Ella tiene los brazos cruzados frente a sus ojos, viéndose solo su boca que dice la palabra de la letra)

El llanto no borra los pecados.

(Se ve a Kazuto, rodeado de los espíritus de su mazo, como protegiéndolo de algo)

Tu y yo llevaremos esta culpa.

(Se ve a Yusei, también rodeado de los espíritus de su mazo, con el Dragón de Polvo de Estrellas a su espalda)

Como escapo de este laberinto si esperándote estoy.

(Se ve a Jack con su disfraz, solo, tras perder su titulo de Rey)

Si esperándote estoy.

(Se ve de manera rápida desde abajo hasta arriba a Shinji, Rafael, Boomer y Sect, haciendo un acercamiento a la sonrisa loca de Sect)

Todo se ha escapado de las manos y ser honesto tan solo me hace daño.

(Se ve a monstruos distintos atacar por orden de sus duelistas: Exseñor Lavalval lanzar una ola de fuego. Brionac lanza una ráfaga de viento frío. Alanegra Maestro de Armadura da un puñetazo al aire)

Qué hago para encontrar una salida de esta realidad.

(El Dragón de Herramienta Poderosa emerge, con Leo sonriente. Se ve el edificio del Movimiento Arcadia, y a Divine en la cima, haciendo un acercamiento rápido a su rostro sonriente)

Cuál es el motivo por cual aun vivo. Cada noche mis recuerdos se van perdiendo.

(En un Turbo Duelo, Kazuto le ordena a Vajrayana atacar a Highlander Oscuro, ocurriendo una explosión, para que su oponente lo sobrepase e invoque al Dragón Ogro del Vacío. Kazuto juega una carta, invocando a Ascalon)

Nada es como antes. ¡Perdí toda mi seguridad! Y solo quiero escapar.

(Jack, con su disfraz, esta de de pie encima de un edificio con el clima oscuro. Ve una mano extenderse, alzando la mirada, viendo a Carly que le sonríe. En ese momento, los rayos de luz atraviesan el clima oscuro y Jack toma la mano, lanzando el gorro al aire)

Por que sabiendo cuan larga es la vida.

(Se ve a Martha en su orfanato, tomando té mientras ve afuera por la ventana)

Me deprimo con facilidad (cual es el camino).

(Kazuto derrapa su D-Wheel, persiguiendo a su oponente, mientras los dragones chocan, hasta que una gran sombra se muestra detrás del oponente de Kazuto)

Tal vez debería, ¡enfrentar esta debilidad!

(Kazuto extiende su brazo, tocando una lapida de monstruo, que brilla al tacto, cegando la imagen un segundo. Después, se ve a Kazuto con su D-Wheel en el horizonte, proyectando sus sombras con la luz del sol).
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Hoy era el día.

Hoy era el día en que Goodwin les contaba todo: el Dragón Carmesí, la guerra de hace 5000 años, los Dioses Terrestres y que debían hacer a continuación.

Los cinco Guardianes Carmesí iban en una limusina que fue a recogerlos a todos para llevarlos a la mansión del Goodwin, donde sería ahí que les explicaría todo.

El viaje fue de 10 minutos en donde los cinco jóvenes estuvieron en silencio, ninguno con muchas ganas para hablar, ni siquiera Takeru. Todos tenían la mente en lo que pasaría en los siguientes minutos.

Al llegar, Kazuto y los demás se bajaron, tomándose unos segundos para admirar la elegante y enorme mansión de cuatro pisos del Director de Seguridad Pública.

-Es... un poco simple- dijo Tomoe, observando la arquitectura y diseño de la mansión. -Esperaba algo más grande del Director de Seguridad Pública, pero supongo que esta bien-.

-Claro que para ti es simple, Reina del Hielo...- murmuro Lucy. Para ella, toda las mansiones eran extremadamente caras. Venía de una familia de oficiales, así que tenía una vida humilde, lejos de los lujos de la clase alta.

Tomoe hizo como que no escucho eso.

La limusina se marcho, solo para que unos segundos después entrara otra. De esa limusina, bajaron los Signos: Yusei, Jack, Aki y Luna, acompañados por Mina y Leo.

-Wow, esta mansión es enorme. ¿Es la casa del Director Goodwin?- Exclamo Leo, impresionado por la mansión.

-Yusei- Kazuto de inmediato fue hacía su amigo, saludándolo al estrechar sus brazos. -Es bueno verte. ¿Estas bien?-.

Yusei asintió. -Estoy mejor gracias a los cuidados de Martha y el Doctor. Lamento haberte preocupado, pero estoy listo para luchar-.

Kazuto sonrió. -Lo se. Nunca lo pondría en duda- miró a Jack, y su sonrisa fue reemplazada por un ceño fruncido. -Jack-.

-Kazuto- el rubio le devolvió el saludo de forma inexpresiva, mirándolo a los ojos.

Los presentes podían notar la tensión que flotaba alrededor de los dos hombres. Parecía que Yusei no era el único que tenía asuntos incompletos con Jack.

Pero antes que algo sucediera, las puertas de la mansión se abrieron.

-Los estaba esperando- dijo Rex, caminando desde el interior de la mansión para recibirlos.

Mina hizo una reverencia de respeto y los otros diez individuos miraron con diferentes expresiones al Director.

-Bienvenidos a todos y cada uno de ustedes, Signos- dijo Goodwin, deteniéndose delante del grupo y dirigiéndose hacía el grupo de Yusei. -Aunque se ha hecho de una forma muy rotunda, me siento satisfecho de conocerlos por fin en estas condiciones- su atención fue ahora al grupo de Kazuto. -Y por supuesto, también me alegra ver la reunión de los Guardianes Carmesí al lado de los Signos, algo que no había sucedido desde hace 5000 años-.

Jack bufo ante esas palabras elegante que contrastaban con todo lo que Goodwin hizo para reunirlos. -Eres la sombra oculta en todo esto-.

Akiza dio un paso hacía Yusei. -Yusei, ¿por que viniste aquí?- Murmuro tan bajo para que solo Yusei pudiera oírla. -¿Acaso no fue Goodwin quien rapto a tus amigos y te obligo a participar en la Copa de la Fortuna? ¿Y ahora vas a confiar en él?-.

Las palabras de Akiza eran ciertas y con valor. Nadie con una pizca de sentido confiaría en un hombre que lo chantajeo para hacer lo que quería. Yusei ciertamente no lo hacía. Confiaría más en los bandidos de Satélite que en Goodwin... pero no tenía otra opción.

-No confió en él, pero el mundo esta ahora al borde de la destrucción ante un misterioso fenómeno y no hay nadie más aparte de Goodwin que conozca la verdad que se oculta tras todo esto- respondió Yusei en voz baja.

-Entonces, te has debido arriesgar mucho al aceptar su invitación, ¿verdad?- Dijo Akiza.

-Esto es todo lo que podemos hacer por ahora-.

Leo se acerco a Goodwin. -Oiga, oiga, ¿qué quiere de nosotros? ¿Nos va a dar cartas raras o que?-.

Rex miró al niño de cabello verde con dureza. -No recuerdo haberte invitado-.

Leo, sabiendo que era el único de todos que no era un Signo o uno de sus guardianes, intento quitarle su importancia a su presencia con un gesto despreocupado. -¡Oh, vamos! ¡No seas tan estricto!-.

-No hago negocios con nadie que no sea un Signo o uno de sus guardianes. Te pido encarecidamente que abandones el territorio- dijo Goodwin con los rasgos endurecidos por seriedad, hablando en un tono firme y que exigía obediencia.

Al escuchar eso, Leo se desanimo. Sabía que no era tan especial como su hermana o el resto de los presentes, pero creyó que acompañándolos no se notaría. Pero no fue así. Tal vez lo mejor sería si se retirara.

Pero antes de que pasara algo más, Luna salto en defensa de su hermano, acercándose a él y tomándolo de un brazo. -¡Si Leo no se queda, yo tampoco! Estamos juntos en todo-.

-Luna...-.

Para sorpresa de varios, Rex suaviza la mirada levemente al ver a los hermanos apoyarse, antes de cerrar sus ojos.

-No hay de otra. Haré una excepción en esta ocasión por tratarse de un familiar de un Signo- acepto Goodwin la presencia del niño.

Luna inmediatamente se emociono y abraza más a Leo, que se anima un poco.

-Ahora, déjenme guiarlos al interior- dijo Rex, haciendo un gesto de brazo para que lo sigan. -Por aquí-.
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Tras unos minutos en que Rex los guio hasta un ascensor, donde estuvieron un poco apretados por ser una gran cantidad, llegaron a un sótano cuya estructura estaba hecha de piedra en bruto con pilares hechos del mismo material con antorchas en la cima.

-¿A donde vamos?- Preguntó Luna.

-El Rey ya estuvo aquí en una ocasión- comento Rex, caminando un poco adelante del grupo.

-Ese fue otra persona. Ya no soy el Rey- corrigió Jack.

Rex sonrió ante las palabras que representaban un gran cambio en Jack. Aunque los jóvenes no pudieron ver eso debido a que les daba la espalda. -Entonces, me tomaré el atrevimiento de llamarte "Jack Atlas" de forma más seguida a partir de ahora-.

Llegaron al final del pasillo, donde había dos enormes puertas de piedra de una altura superior a cualquiera de ellos con grabados Mayas. Las puertas se abrieron a los lados automáticamente, permitiendo que el gran grupo entrara a una habitación oscura, que se hizo más oscura cuando las puertas se cerraron tras ellos.

Pero la oscuridad no duro casi nada, ya que una luz rojiza ilumino todo el lugar desde el suelo. Los jóvenes miraron el suelo un segundo, antes de que su atención cambiara a algo más grande y obvio.

Delante estaba una estructura de piedra que parecía una especie de altar gigante con escaleras que subían hasta la cima. La estructura parecía tener la altura de un edificio de diez pisos. El altar estaba rodeado por estructuras más pequeñas de piedra y delante del altar, había un arco de piedra que parecía marcar la entrada.

-¿Qué es este lugar?- Preguntó Takeru, mirando a su alrededor.

-Se ve como ese altar de aquella película mexicanas antigua que mi padre nos hizo ver de niños- le comento Lucy a Soichi, quien asintió.

-Este altar técnicamente es de Perú, no de México, pero admito que la arquitectura tiene diseño similar- comento Rex.

Los cuatro Signos notaron algo al ver la estructura más cercana: en el centro, había un símbolo que era el de un dragón en forma de círculo.

-¡Esa forma...!- Yusei fue el primero en notarlo.

-¡Es la misma que nuestras marcas!- Continuo Luna.

-El Dragón Carmesí...- susurro Akiza.

-Si, este es el símbolo que los Signos han heredado del legado del Pueblo de las Estrellas- dijo Goodwin, girándose y viéndolos a todos de frente.

Las marcas de los cuatro Signos bombean en sus oídos y empiezan a brillar, llamando la atención de todos.

-Así que esas son las famosas marcas- comento Tomoe, viendo la marca de Akiza, que era la que estaba más cerca de ella.

El brillo en el suelo se hace más intenso, y de la nada, el Dragón Carmesí aparece frente a ellos, su cuerpo rodeando el gran altar. Su rugido agudo y estridente fue bastante claro para todos.

-Ya veo. Cada marce es una parte del Dragón Carmesí. Es obvio en retrospectiva- dijo Soichi.

-El Dragón Carmesí...- susurro Yusei. Recordó cuando lo vio por primera vez, en su duelo inconcluso con Jack. -Ese día, el Turbo Duelo que tuvimos en el vacío del Domo Kaiba se suponía que iba a ser un duelo con nuestro orgullo en juego-.

-Pero fue en ese momento donde el Dragón Carmesí apareció- dijo Jack, recordando el mismo suceso.

-Si. Ustedes fueron guiados por el Dragón Carmesí todo este tiempo, y fue su guía la que les permitió llegar a Ciudad Neo Domino- dijo Goodwin.

-¿Fuimos guiados por el Dragón Carmesí? ¡Creí que fuiste tú quien arreglo todo!- Exclamo Yusei.

-¡Nosotros solucionamos nuestras diferencias! ¡El Dragón Carmesí no tuvo nada que ver!- Dijo Jack, negándose a creer que ese dragón arreglo su duelo.

-En si mismo fue el destino quien despertó el poder del Dragón Carmesí- dijo Rex. -¿Crees que todo ha sido una coincidencia? Conocer a Yusei, dejar Satélite y conocer a los demás no fue una coincidencia. Fue la mano del destino, guiada por el Dragón Carmesí. Lo único que hice fue conducir mis acciones en función de la voluntad del Dragón Carmesí-.

-¿Esperas que creamos esa historia?- Cuestiono Yusei. -¿Y porque nosotros y no alguien más? ¿Es porque somos buenos en los duelos?-.

-Si lo creen o no, es cosa suya- respondió Goodwin indiferente a la primera pregunta. -Y con tus otras preguntas... esto va más allá de sus habilidades como duelistas. El Dragón Carmesí los escogió midiendo la fortaleza de sus corazones y los eligió como sus Salvadores, sus Signos, para enfrentar al ejercito de las sombras. Ese es su destino como Signos-.

-El destino de los Signos...- murmuro Akiza. Miró la marca en su brazo derecho. -Siempre pensé que era un monstruo debido a mis poderes, una bruja. Mis poderes no hacían más que crecer a causa de la ira dentro de mi. He lastimado a muchas personas, ¿qué clase de destino es ese?-.

-Pero si no tuvieras esos poderes, no hubieras podido conocer a Yusei, ¿verdad?- Señalo Goodwin. Akiza no pudo decir nada ante eso. -Esa marca que tienes se otorga únicamente a los elegidos por el Dragón Carmesí. El destino de los Signos se une a todos y cada uno de ustedes para guiarlos- miro fijamente a Luna. -Y eso se aplica a ti también, Luna-.

La niña peliverde mira la marca en su brazo. -El destino de los Signos... si... ya recuerdo esos momentos cuando era pequeña. Me comunicaba con los Monstruos de Duelo en un mundo muy distinto al nuestro. Allí fue donde conocí al Dragón Hada Antiguo. Por aquel entonces no me detuve a pensar si había algún motivo oculto para que nos conociéramos. Pero, ahora lo sé- la mirada de Luna se lleno de determinación. -¡Mi destino es salvar al Dragón Hada Antiguo! No, ¡es mi deseo! ¡Quiero salvarla, así como a los espíritus de ese mundo!-.

-Espera...- Soichi se dio cuenta de algo. -Dragón de Polvo de Estrellas. Dragón Rojo Archidemonio. Dragón de la Rosa Negra y Dragón Hada Antiguo...- por cada nombre que decía, miraba al respectivo duelista que tenía la carta del dragón que mencionaba. -Otra cosa en común que parecen tener los Signos es que sus cartas más fuertes son dragones, ¿eso tiene una conexión?-.

-Efectivamente. Me alegro que haya un oficial tan atento a los detalles como tú en mi departamento- dijo Rex, feliz de que alguien siguiera a detalle la conversación. -Para combatir a la amenaza de los Dioses malignos, el Dragón Carmesí creo a cinco seres a partir de su poder y esencia para que lo ayuden a pelear. Sus partes e hijos. Esos cinco son conocidos como los Dragones Salvadores, o Dragones de Duelo. Cada dragón esta destinado a un Signo en particular-.

-Eso quiere decir...-.

-Si- interrumpió Goodwin a Jack. -El que ahora tengan a esos dragones tampoco fue coincidencia o suerte. Ellos llegaron a sus manos por la guía del Dragón Carmesí, porque estaban destinados a tenerlos para este momento-.

Yusei se llevo una mano al Deck Box de su Extra Deck y saco la carta de su dragón. Desde que encontró la carta por primera vez, había sentido una conexión instantánea con él, una conexión que era más fuerte de la que sentía con otras de sus cartas, al punto de hacer que Polvo de Estrellas fuera su carta favorita a pesar de tener otras que funcionaban mejor con su Mazo o que eran más fuertes.

Pero ahora, que a tenido visiones, Duelos de las Sombras, a visto los espíritus de los monstruos de su baraja, y tiene una marca que brilla en su brazo derecho, la idea de que estaba destinado a tener a su dragón no sonaba tan descabellada, ni le generaba algún tipo de rechazo.

Goodwin siguió explicando: -¿Lo ven? Ustedes tienen dones especiales. No aparten la vista de ello. Incluso Jack y Yusei pudieron dar un vistazo al pasado. Todos comparten la misma marca y por lo tanto, fueron escogidos como los sucesores de los antiguos Signos. Satelitales o de la ciudad, profesionales o no, les guste o no, ahora todos estamos en el mismo lado, del lado de la luz, de la vida, del Dragón Carmesí. La esperanza para detener el fin del mundo ahora descansa en ustedes-.

Akiza miro la marca de la garra trasera que brilla en su brazo derecho. La marca que se manifestó al mismo tiempo que sus poderes por primera vez durante un duelo con su padre. La marca que había odiado por considerarla la culpable de tener sus poderes y de todo el dolor y soledad que vinieron con ellos. Esa misma marca, ahora la conecta con personas de buen corazón que tienen marcas iguales, a un destino mucho más grande del que imagino.

-Nuestro destino...- murmuro Luna.

-Oigan...- Lucy levanto la mano como si estuviera en una sesión de clases. -Entiendo que ellos son especiales y todo pero... ¿qué somos nosotros entonces?-.

-¿Yamato no les explico?- Preguntó Goodwin, arqueando una ceja.

-El abuelo nos dijo que los Guardianes Carmesí somo los protectores de los Signos y una especie de guardaespaldas, pero nada más- respondió Takeru.

-Es una versión resumida, pero si- asintió Goodwin. -Los Signos son elegidos por el Dragón Carmesí para la hora de luchar, pero antes de que el momento llegue, deben ser protegidos, ya que las fuerzas de la oscuridad usaran cualquier método que tengan para eliminar a sus enemigos de diferentes formas. Ahí entran los Guardianes Carmesíes. Guerreros entrenados con el único fin de proteger a los Signos para la batalla decisiva, y apoyarlos cuando dicha batalla llegue. A diferencia de los Signos, que son elegidos por el Dragón Carmesí, los guardianes son elegidos por el Guardián de las Estrellas en base a su habilidad, fuerza y conexión con los Signos para que sean su espada y escudo-.

-Ósea que nuestro deber es de guardaespaldas- resumió Soichi, cruzándose de brazos. -Creo que no hicimos tan bien el trabajo como parece-.

-No diría exactamente eso, al menos no con todos- dijo Goodwin. Sus ojos ahora se posaron en Kazuto. -La única excepción a la regla de la elección de los guardianes es quien porta la sangre del Rey de la Estrella Dragón, y quien tiene un pacto con los Dracounidad. Esa persona, al igual que el rey hace 5000 años, es el líder de los Guardianes Carmesíes y el protector principal del Signo con la marca de la cabeza del dragón. En este caso, ese eres tú, Kazuto. Al resto los elegí a base de sus habilidades y conexiones-.

Goodwin miro a Tomoe.

-A ti te elegí por ser también descendiente del Rey de la Estrella Dragón, además de poseer el poder de los Barrera de Hielo, un clan tan antiguo como los Dracounidad-.

Miró a Lucy.

-A ti por el potencial espiritual que mostraste durante tu duelo, además de que los Naturia son los principales guardianes del bosque sagrado, mismo bosque donde viven muchas criaturas, incluyendo monstruos del Deck de Akiza. Además de haber entrado en contacto con Kazuto-.

Akiza y Tomoe se miraron, ambas sorprendidas por la inesperada conexión que tienen a partir de sus barajas.

Rex miró a Takeru.

-A ti te elegí porque tu familia es uno de los pocos linajes que descienden del Pueblo de las Estrellas que quedan, por tu habilidad de duelista y tu conexión con tus cartas-.

Por último, Rex miró a Soichi.

-Y a ti por haber entrado en contacto con Kazuto y por tu creciente energía espiritual que empezabas a desarrollar. Además, me sentiría más cómodo con un miembro de Security involucrado-.

-¿Entonces no debió haber elegido a Ushio-san o a un oficial superior?- Preguntó Kazama.

-Eres mucho más confiable que Ushio. No te subestimes- respondió Goodwin con neutralidad.

El Dragón Carmesí ruge y desaparece, ocasionando que las marcas en los brazos de los Signos dejen de brillar.

En ese momento, Leo se percata de algo. -O-Oye, ¿no se olvidan de algo muy importante?- Preguntó, levantando su mano con la palma abierta y los dedos extendidos. -¿No se suponía que serían cinco Signos?-.

-El chico tiene razón. Falta al Signo que supuestamente debo proteger- dijo Kazuto.

-El quinto Signo se despertó hace mucho tiempo- revelo Goodwin, sorprendiendo a todos. -Por motivos de seguridad, me veo en la necesidad de ocultar su identidad por ahora, pero cuando se encuentren en un verdadero peligro, esa persona aparecerá junto con todo el poder del Dragón Carmesí-.

Kazuto entrecerró los ojos. Estaban a punto de ir a luchar contra seres de la misma oscuridad para salvar el mundo. ¿Qué sentido tenía guardar la identidad del quinto Signo a estas alturas? Y si despertó mucho antes que el resto, ¿donde esta? ¿Acaso esta desaparecido? Goodwin dijo que los enemigos usarían cualquier medio para atacar a los Signos, ¿acaso el quinto fue herido y por eso no esta ahora?

-O acaso... ¿Goodwin será el quinto?- Se preguntó en su mente, estrechando sus ojos hacía el Director de Security. Ciertamente tenía algo de sentido que la persona que se esforzó más en reunir a los Signos, fuera también el poseedor de la marca que lo hace el líder del grupo. -Si lo es, ¿por que lo oculta?-.

-Pero antes de seguir, es hora de una lección de historia- dijo Goodwin, levantando su brazo derecho.

Una luz surgió de la mano de Goodwin, cegando a todos unos segundos. Al abrir los ojos, todos vieron que ya no estaban delante del altar y las estructuras de piedra, sino que flotaban en el aire sobre unas tierras áridas donde habían unas marcas que hacían dibujos de diferentes criaturas.

-Hace miles de años, se libro una guerra enorme y el Dragón Carmesí y los Dragones Salvadores derrotaron al ejercito de las sombras que unieron fuerzas con el ejercito de los demonios del Pandemonio. Temerosos de que algún día las sombras regresaran, sellaron a los Dioses Malvados en estas tierras. Los sellos se conocen hoy en día como las "Líneas de Nazca". La verdad de esta historia fue prohibida por los supervivientes y solo unos pocos se les permitió conocer tal conocimiento. Y, recientemente...-.

Todos ven como la Línea de Nazca con el dibujo de la araña empieza a brillar de un color morado.

-Hace muchos años, el Momentum original exploto y libero un pico de energía tan grande que agrieto los sellos de los Dioses lo suficiente para que en la actualidad, los jeroglíficos en las llanuras de Nazca desaparecieran- a las palabras de Goodwin, el símbolo de la araña desapareció. -Con el sello roto y el paso de los años, han podido recuperar suficiente poder para encontrar duelistas capaces y... infectarlos-.

-¿A que te refieres con "infectarlos"?- Preguntó Jack.

-Ellos han encontrado huéspedes humanos a los que usar y manipular para que sean sus representantes en la Tierra, sus elegidos para llevar al mundo a la oscuridad: esos son los Signos Oscuros- describe Goodwin con voz neutra, pero que contenía un gran peso en sus palabras. -Poseen marcas como los Signos, pero las de ellos representan a los Dioses Terrestres que los escogieron. Hasta ahora, los Signos Oscuros han usado carnadas para probar las habilidades de ustedes-.

Yusei, Jack, Kazuto y Tomoe recuerdan sus primeros duelos contra los Signos Oscuros, contra sujetos que fueron controlados en donde el daño era real y fueron encerrados en un círculo de fuego del que no podían escapar ni nadie podía entrar a ayudarlos. También, estaban el hecho de que podían usar esas extrañas cartas de Monstruos de Sincronía Oscura.

-De la misma forma que nuestros duelos y la invocación de Sincronía se basan en el poder de la vida, los poderes de ellos se basan en el poder del Inframundo-.

-¿Poderes del Inframundo?- Exclamo Kazuto.

-Como ya deben saber, cada vez que un Signo Oscuro aparece, es muy probable que lo acompañe un Dios Terrestre. La llegada de no solo 1, sino 3 Signos Oscuros a la ciudad la sumergió en el caos y acabo con cientos de vidas al instantes para usarlas como combustible-.

-Si, lo he visto con mis propios ojos- dijo Yusei, recordando cuando Kiryu invoco a su Dios Terrestre al final de su duelo. -¡Vi como un montón de gente de Satélite se convertía en sus victimas!-.

-Y ahora que lo dices... Goodwin, dijiste que los Signos Oscuros estaban en Satélite, ¿por que vendrían a Ciudad Neo Domino?- Preguntó Kazuto.

-La única razón que se me ocurre es porque el complot de Divine para crear un ejercito de Duelistas Psíquicos debió atraer a los Signos Oscuros y decidieron eliminarlo al considerarlo un peligro- respondió Rex.

Los ojos de Akiza temblaron un momento. Con todo lo que había descubierto sobre Divine recientemente, de los experimentos que hizo a otros duelistas, la mayoría niños, que las acusaciones de Misty podrían ser ciertas, y que la engaño para usarla en sus propósitos, ya no sabía que pensar sobre él. Lo único de lo que estaba segura es que Divine no era el hombre que creyó que era.

-¿Pero porque absorben a las personas? Nunca había escuchado de monstruos haciendo algo así- dijo Tomoe.

-Los Dioses Terrestres pueden haberse liberado del sello, pero no han recuperado sus poderes al 100% y las leyes de nuestro mundo les obligan a usar a duelistas para que los llamen durante los duelos. Pero debido a que su poder es demasiado grande, absorben la energía vital de individuos para manifestarse en nuestro mundo- explico Rex. -Y ahora que Ciudad Neo Domino se convirtió en un campo de batalla, toda persona inocente es una victima en potencia-.

La imagen debajo de ellos cambio, mostrando a Ciudad Neo Domino de noche, más exactamente en el momento en que el edificio del Movimiento Arcadia cayó.

Todos observaron la imagen de los tres Dioses Terrestres rodeando el edificio. Uno era un lagarto, el otro un colibrí y el tercero un hombre lobo.

-¿Eso son los Dioses Terrestres?- Preguntó Takeru, observándolos con atención.

-Si. Los Dioses Terrestres se pueden invocar con los sacrificios de vidas inocentes. Si fallan en derrotar a los Signos Oscuros y evitar que las sombras se levanten, todas las almas del planeta caerán en la oscuridad- dijo Goodwin.

-¡¿Y que fue de la gente sacrificada?!- Preguntó Jack con brusquedad.

-Ni yo mismo lo sé. No puedo asegurar que están muertos, pero tampoco creo que estén vivos- respondió Rex con calma.

Jack apretó los dientes con frustración, sintiendo el peso de las gafas dañadas de Carly guardadas en un bolsillo en el interior de su chaqueta.

-Esta situación requiere de acción inmediata- dijo Goodwin con gravedad. -Si permanecemos con los brazos cruzados, todos los residentes de la ciudad y Satélite acabaran cayendo como peones en las manos de los Signos Oscuros y Ciudad Neo Domino entrará en un inminente colapso, y el resto del mundo le seguirá. Jack, tú y Yusei contemplaron el futuro: un mundo lleno de sombras donde todas las personas fueron absorbidas por los Dioses Terrestres-.

El peso de la responsabilidad que estaban asumiendo se sentía cada vez mayor con cada palabra de Goodwin. Una cosa era escuchar que tenían que salvar al mundo, pero otra era saber lo que podría pasar si fallan, las consecuencias para ellos y para miles más. Ya no era una exageración, sino un hecho que la vida de millones de personas en todo el mundo dependían de ellos nueve.

-Cuando te refieres a todo el mundo...- hablo Luna, con su voz que temblaba.

-¿Te refieres a todo, TODO el mundo? Ósea, ¿también nuestras familias y amigos que ni siquiera están en la ciudad?- Preguntó Lucy.

-Si. Esta batalla fue inevitable desde el inicio. Los Signos Oscuros y los Signos son, en esencia, oscuridad y luz. Son la otra cara de la moneda del otro, pero no pueden coexistir- dijo Goodwin. -Ahora ustedes deben elegir. Yo solo puedo guiarlos hasta este punto del sendero. Después de hoy, no habrá punto de retorno. Los Signos y sus guardianes son los únicos que pueden derrotar a los Signos Oscuros-.

El peso del mundo ahora estaban con ellos. Esta era la última oportunidad que tenían para echarse atrás, para que alguien más cargara esa responsabilidad que no fuera ellos.

-Desde que obtuve mis poderes he detestado a la gente, nunca pensé que vivir en la ciudad fuera tan agradable- dijo Aki, atrayendo la atención de algunos. -Papa... Mama- pensó en sus padres con los que recién pudo reconciliarse. Aunque quedaban cosas por hablar, tenían la oportunidad de empezar de nuevo y ser familia. -Antes, luchaba para defenderme, para sobrevivir, y luego porque me lo ordenaban, pero esta vez...- sus ojos dejaron de temblar, su mirada se volvió una de determinación. -Esta vez elijo luchar, no solo para proteger a las personas del mundo, sino para proteger el futuro de mis amigos y el mío propio-.

-¡Pues yo ya escuche suficiente!- Jack levanto la voz. -¡No me importa esas cosas del destino! ¡Déjenme ir por esos Signos Oscuros por mi cuenta!-.

Esas palabras hicieron reflexionar a Yusei, que baja la mirada. -Yo también quería ir por los Signos Oscuros por mi cuenta, hasta que hable con Martha- recordó las palabras de aliento que también fueron de regaño. -Estaba tratando de salvar Satélite y derrotar a los Signos Oscuros por mi cuenta. Afortunadamente me recordó que sin la ayuda de mis amigos, no tendría ninguna oportunidad- levanto la mirada y miro a Goodwin. -Goodwin, hay una cosa más que tengo que preguntarte-.

-¿Qué cosa?-.

-Cuando regrese a Satélite, un hombre que consideraba un amigo, un hombre que creía muerto, apareció ante mi como un Signo Oscuro-.

Jack y Kazuto miraron a Yusei, sabiendo que se refería a Kiryu.

-Kiryu Kyosuke. Una vez fue el líder del mismo equipo de duelos que teníamos Jack, Kazuto y yo. Fue encerrado por Security, pero ahora se convirtió en un Signo Oscuro con poderes terroríficos. Contaba con un Deck repleta de poderosos monstruos al que jamás había enfrentado. Su Dragón de los Cien Ojos tenía poderes increíbles-.

-Pero el verdadero objetivo de Kiryu era invocar a su monstruo más poderoso- continuo Jack, repasando en su mente ese duelo.

-Fue cuando notamos que había reunido a gente de Satélite que usaban la misma capucha que él como sacrificio- siguió Kazuto. -El Dios Terrestre Ccapac Apu era un monstruo con un poder que nunca había visto, parecía invencible-.

-Si el duelo no se hubiera interrumpido por la falla de mi D-Wheel, ahora estaría muerto- aseguro Yusei de manera sombría.

-Aunque es bueno que hayas adquirido información del enemigo, ¿cuál es tu pregunta?- Preguntó Goodwin, yendo al punto.

-¿Cómo se convirtió Kiryu en un Signo Oscuro?- Preguntó finalmente Yusei.

-¿Y que son los Signos Oscuros? Dijiste que fueron escogidos por los Dioses Terrestres, ¿pero por que ellos?- Preguntó Soichi.

Rex cerró los ojos, su expresión volviéndose oscura ante esas preguntas. -Es mejor que no sepan eso, créanme-.

-¡No fastidies!- Gritó Jack. -Yusei y yo vamos a tener un duelo de vida y muerte contra alguien a quien llamamos una vez amigo. ¡Merecemos saber porque se convirtió en nuestro enemigo!-.

-Y no solo él, ¿por que Beelze, el que traiciono al Dragón Carmesí, usa a Sect? ¿Qué quiere con él?- Preguntó Kazuto.

Goodwin miró primero al pelirrojo. -Para responder a tu pregunta, Kazuto, creí haberte dicho en el puente que desconocía esa información. ¿Por qué de todas las personas de Satélite eligió a tu amigo? Lo desconozco. Tal vez tengan una conexión-.

-¿Conexión?-.

-Temo que eso tendrás que averiguarlo tú- la mirada del Director se puso en Yusei y Jack. -¿Y están seguros que quieren saber eso?-.

-Estoy listo para enfrentar mis temores y enfrentar a Kiryu, para arriesgar mi vida para proteger a la ciudad y Satélite- declaro Yusei. -Pero, si hay una manera de volver a Kiryu y los otros a la normalidad...-.

-No la hay...- interrumpe Goodwin de forma tajante. -No hay forma de devolver a la gente que se convirtió en Signo Oscuro a la normalidad-.

-¿Por qué no?- Preguntó Lucy. -Si están infectados, ¿no podría haber una cura para desinfectarlos o algo así?-.

-No funciona así. Los Signos Oscuros son las almas de los muertos que han despertado en forma de habilidades con el cuerpo que tenían en vida, existiendo solo por la energía de los Dioses oscuros-.

La revelación impacta a todos y los deja en shock mientras comprenden lentamente las implicaciones.

-Quieres decir...- hablo lentamente Tomoe. -Qué los Signos Oscuros están...-.

Rex asintió. -Ellos ya están muertos y solo existen por el poder de los dioses a los que vendieron sus almas. Son literalmente muertos en vida-.

-¡Ya basta!- Gritó Jack, no aceptando ese hecho ridículo. -¡Los muertos no pueden volver a la vida! ¡Eso todos lo saben!-.

-Si fuera un caso normal, tendrías razón; pero nos enfrentamos a seres que son gobernados por el Rey del Inframundo, alguien que tiene el poder sobre la muerte misma. Cada vez que llevan a cabo una invocación de Sincronía Oscura es una clara prueba de que son mensajeros del Inframundo-.

Todos quedan con los ojos abiertos al escuchar eso, demasiado sorprendidos para hablar. Sus enemigos, como dijo Rex, son literalmente muertos vivientes, gente que ya no esta en este mundo, pero se mantienen solo para llevarlo a su destrucción.

No había salvación para ellos. Ese hecho era peor para los tres sujetos que conformaron el equipo Ejecutores con Kiryu y Crow. Aunque Kiryu ahora era un enemigo, fue un amigo al que Yusei hubiera intentado salvar.

Pero ahora no podía. Goodwin no lo dijo, pero era obvio lo que pasaría si ganaban un duelo contra los Signos Oscuros.

Goodwin levanta los brazos hacía los lados. -El destino esta en marcha. Ya no hay vuelta atrás. Ya sea la derrota de los Signos Oscuros o la de este mundo, junto con nosotros...- baja el brazo izquierdo mientras extiende el derecho como si ofreciera la mano para un apretón. -Esa decisión esta en sus manos ahora-.

La habitación vuelve a cambiar, devolviéndolos frente al gran altar ascendente con el suelo iluminando la cámara.

Goodwin se cruza de brazos tras su espalda. -Reflexionen sobre lo que deben hacer y denme una respuesta. Sin embargo, vamos algo mal de tiempo, así que no se tarden mucho-.

Goodwin empieza a caminar, pasando de lado al grupo. Las puertas se abren para darle la salida y él se retira en silencio. El sonido de sus pisadas dejando el lugar es lo único que se escucha en el silencio colectivo.

Cuando las puertas se cierran tras ellos, se quedan en silencio por más tiempo, cada uno perdido en sus propios pensamientos sobre lo que harán a partir de ahora. El destino del mundo depende de ellos, miles de personas sin saberlo confían sus vidas en ellos, y no pueden huir aunque quisieran, ya que si los Signos Oscuros ganan, no habrá lugar para esconderse.

Kazuto mira lo alto del altar. Luego, cierra los ojos un momento para abrirlos después. Asintiendo para si mismo, se volvió hacía alguien.

-Jack- llamo al rubio, que salió de sus pensamientos para verlo. -Tengamos un duelo-.
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N/A: Hasta aquí el capitulo. El primer capitulo del fic en 2025. Espero el mismo apoyo que han dado hasta ahora.

Aquí fue el momento donde Goodwin les explica a los héroes quienes son sus enemigos y lo que deben hacer. Algunos tienen ciertas dudas, pero ahora Kazuto sale de la nada con la idea de enfrentarse a Jack, que será el tema siguiente del nuevo capitulo.

También, habrá nuevo opening en el siguiente capítulo.

No hay mucho que tenga que decir esta vez. Espero que hayan tenido una buena navidad y buen año nuevo y les deseo que sus metas se cumplan para este 2025.

Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.

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