https://youtu.be/aVTMNkWiPf4

Por que sabiendo, cuan larga es la vida me deprimo con facilidad.

(Cuando comienza la canción, se ve viejo Reactor del Momentum en su mejor estado, y frente esa imagen aparece un joven Rex Goodwin que estira las manos, para que en un efecto de viento, la imagen se reemplace por el viejo Momentum y Roman con la capucha puesta, sonriendo siniestramente)

Quiero empezar de nuevo y lo inconcluso de una vez realizar.

(Se ve a un Kazuto de niño cerrarle la puerta, a Shiryu levantar su cabeza y el sol refleja un momento sus lentes)

(Cuando la música suena se ve una llama que toma forma, hasta mostrar al Dragón Carmesí, y frente al dragón el titulo de la historia)

Qué irónico es vivir motivando a otros, sin querer seguir.

(Kazuto camina a través de las calles llenas de basura de Satélite, que cambian a las calles limpias de Neo Domino, con la mirada hacía adelante y levanta las palmas)

Con sueños por lograr, tropezando con otros en mi caminar.

(Se ve a Shiryu en medio de un campo de césped con el viento sacudiendo el césped, sus ropas y cabello. Sus ojos siendo bloqueados por el reflejo de sus lentes. Shiryu da la espalda y la imagen se aleja y cae, hasta que el pasto bloquea la vista, haciendo un efecto de cambio)

No es que quiera arrepentirme ni regresar aquel pasado. Solo quiero recuperarlo.

(Se ve a Kazuto y Teresa de niños acompañados de una niña rubia, durmiendo en el suelo con almohadas esparcidas, para luego mostrar a Yusei acostado en la arena de la playa de Satélite, abriendo los ojos)

Mi cielo azul.

(Yusei estira la mano al cielo cubierto de contaminación por las fábricas de producción de Satélite).

No quiero ver en tu reflejo, esa expresión anegada ni de sacrificio.

(Se ve los pies de Rally y el resto de amigos de Yusei corriendo por las calles, para luego mostrar a Gai, enfocándose en su rostro. La imagen se mueve hasta la espalda de Ricardo y en cuanto se empieza a enfocar a su rostro, se ven ráfagas de viento hasta que se muestra la expresión horrorizada de Ricardo, rodeado por ráfagas que pasaban, como si estuviera al frente del origen)

Entiéndelo.

(Se ve a Tomoe. Ella tiene los brazos cruzados frente a sus ojos, viéndose solo su boca que dice la palabra de la letra)

El llanto no borra los pecados.

(Se ve a Kazuto, rodeado de los espíritus de su mazo, como protegiéndolo de algo)

Tu y yo llevaremos esta culpa.

(Se ve a Yusei, también rodeado de los espíritus de su mazo, con el Dragón de Polvo de Estrellas a su espalda)

Como escapo de este laberinto si esperándote estoy.

(Se ve a Jack con su disfraz, solo, tras perder su titulo de Rey)

Si esperándote estoy.

(Se ve de manera rápida desde abajo hasta arriba a Shinji, Rafael, Boomer y Sect, haciendo un acercamiento a la sonrisa loca de Sect)

Todo se ha escapado de las manos y ser honesto tan solo me hace daño.

(Se ve a monstruos distintos atacar por orden de sus duelistas: Exseñor Lavalval lanzar una ola de fuego. Brionac lanza una ráfaga de viento frío. Alanegra Maestro de Armadura da un puñetazo al aire)

Qué hago para encontrar una salida de esta realidad.

(El Dragón de Herramienta Poderosa emerge, con Leo sonriente. Se ve el edificio del Movimiento Arcadia, y a Divine en la cima, haciendo un acercamiento rápido a su rostro sonriente)

Cuál es el motivo por cual aun vivo. Cada noche mis recuerdos se van perdiendo.

(En un Turbo Duelo, Kazuto le ordena a Vajrayana atacar a Highlander Oscuro, ocurriendo una explosión, para que su oponente lo sobrepase e invoque al Dragón Ogro del Vacío. Kazuto juega una carta, invocando a Ascalon)

Nada es como antes. ¡Perdí toda mi seguridad! Y solo quiero escapar.

(Jack, con su disfraz, esta de de pie encima de un edificio con el clima oscuro. Ve una mano extenderse, alzando la mirada, viendo a Carly que le sonríe. En ese momento, los rayos de luz atraviesan el clima oscuro y Jack toma la mano, lanzando el gorro al aire)

Por que sabiendo cuan larga es la vida.

(Se ve a Martha en su orfanato, tomando té mientras ve afuera por la ventana)

Me deprimo con facilidad (cual es el camino).

(Kazuto derrapa su D-Wheel, persiguiendo a su oponente, mientras los dragones chocan, hasta que una gran sombra se muestra detrás del oponente de Kazuto)

Tal vez debería, ¡enfrentar esta debilidad!

(Kazuto extiende su brazo, tocando una lapida de monstruo, que brilla al tacto, cegando la imagen un segundo. Después, se ve a Kazuto con su D-Wheel en el horizonte, proyectando sus sombras con la luz del sol).
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(FLASHBACK)

Hace 4 años...

Yusei, Jack, Crow y Kazuto adolescentes estaban alrededor de una mesa. Los cuatro estaban en un edificio destruido y abandonado en el limite de la zona Este de Satélite. Todos ellos usaban chaquetas de cuero café sin mangas encima de sus camisas.

-Bien, me alegro que estemos todos- dijo una voz, mientras una quinta presencia se unía a ellos.

Era un chico de la edad de Yusei y Crow, de cabello celeste con ojos ámbar. Usaba la misma chaqueta que los otros cuatro, con una camisa roja manga corta debajo. También tenía una cinta morada atada alrededor de su frente.

-Se que todos saben por lo que estamos aquí, así que vayamos directo al grano- dijo el joven de pelo celeste, y dejo un mapa de toda Satélite en la mesa. El mapa estaba dividido en líneas rojas, y en cada espacio, había unas letras de cada distrito. -Como los de la ciudad no les interesa Satélite, tenemos que ser nosotros mismos quienes la salvemos-.

-¿Y cuál es tu plan, Kiryu?- Pregunto Jack, revelando el nombre del joven.

Kiryu Kyosuke sonrió, como si la pregunta que hizo Jack es una que hubiera esperado toda su vida.

-El plan es demostrarle a la gente de Satélite a no tener miedo, pero para hacerlo, tenemos que derrotar a cada pandilla que se mete con los inocentes. Tenemos que derrotarlos a todos. Así les mostraremos a todos que no hay que temer a esos matones-.

-Whoa, espera, ¿quieres ir a pelear con todas las pandillas de Satélite? ¡Son demasiadas!- Exclamo Kazuto. -Aunque hay algunas a las que podemos derrotar, como a los Magos, hay muchas otras que tienen muchos miembros-.

-Kazuto tiene razón. No solo será difícil, sino que peligroso- apoyo Yusei. -Aunque los derrotemos, las pandillas pueden atacarnos de vuelta, yendo incluso por nuestros amigos. No quiero exponer a Rally y los demás a esto-.

-Por eso, no se preocupen, ya arregle ese tema- de sus bolsillos, saco una especie de esposas, pero las cadenas que las unían era una larga cuerda metálica y el tamaño de las esposas era mayor de lo normal. -Esta se las robe a las pandillas del sector Norte-.

-¿Qué son?- Pregunto Crow, tomando un par.

-Ganchos de Detención. Conéctalos a los Disco de Duelos de cada duelista, y el que pierda, se le freira su Disco de Duelo. También impiden que escapen- explico Kiryu. -Usando estas al enfrentarnos a los miembros de las pandillas, podemos destruir sus Discos de Duelos al derrotarlos, y con lo difícil que son de conseguir...-.

-No tendremos que preocuparnos porque nos ataquen de vuelta- termino Jack, entendiendo la lógica. La comisura de sus labios se elevo. -Me gusta-.

Kiryu asintió. -Así es. Con esto, los Discos de Duelos que Pearson nos dio, nuestras barajas y trabajo en equipo, podremos poner fin a todas las pandillas de duelo. Podemos traer verdadera paz a Satélite- cada palabra que decía, lo decía con emoción y pasión.

Aunque sus palabras hicieron surgir en cada uno de ellos un sentimiento de esperanza, aun estaban algo inseguros de actuar, más por las consecuencias que podrían surgir que por miedo.

-No es que no te quiera apoyar, viejo...- empezó Crow. -¿Pero no sería mejor esperar a que Security se encargue de las pandillas?-.

-A Security no le importamos. Con tal de que tengamos la cabeza gacha y no hagamos problemas que los afecten, no se meterán- respondió Kiryu a Crow. -¿Creen que si esperamos lo suficiente, algún día las cosas mejoraran? ¡No sean ingenuos!- Les grito a todos. -Satélite es nuestro hogar y hay que protegerlo. Si no nos levantamos y lo hacemos nosotros mismos, ese "algún día" nunca llegara-.

Las palabras de Kiryu avivaron el fuego que había en todos ellos. Un fuego que se había encendido al ver la injusticia de las pandillas de duelos con las personas de Satélite que intentaban sobrevivir otro día sin causar molestias a nadie.

Lo que decía era cierto. No podían quedarse de brazos cruzados y esperar que suceda un milagro. Los milagros no existen en Satélite, así que tienen que crear uno ellos mismos.

-Cuentas conmigo- dijo Kazuto.

-Y conmigo- secundo Yusei.

-También conmigo- tercio Jack.

-Ya que todos se unen, no veo porque yo no. No puedo dejarles toda la diversión, chicos- y con Crow, todos se unieron a la causa.

Kiryu sonrió, más feliz de lo que quería admitir. Que todos sus amigos se unieran a su lucha por la libertad y justicia para su gente era de las mejores cosas que le habían pasado.

-En ese caso, hay que ponernos manos a la obra- señalo el mapa que había traído y dejado en la mesa. -Empezaremos atacando en la tarde al grupo más cercano, a los "Ogros". Son pocos miembros, no más de cinco, y todos usan monstruos de alto ataque, pero es lo único bueno que tienen. Estoy seguro que con nuestras habilidades podemos derrotarlos fácilmente-.

-Ya me he topado con alguno de esos sujetos en el pasado. Ladran mucho pero no muerden- dijo Kazuto.

-Oigan, si vamos a hacer esto, ¿no deberíamos tener un nombre?- Pregunto Crow, ganando la atención de todos. -Ya saben, como seremos los "buenos", deberíamos tener un nombre de equipo. Como los Vengadores-.

-Esa no es una mala idea- murmuro Kiryu, llevándose una mano a la barbilla. -¿Qué tal el "Equipo Satisfacción"?-.

-No- rechazaron los cuatro de inmediato.

Eso descolo a Kiryu, que no espero un rechazo rotundo.

-Ese nombre parece sacado de un burdel. Me niego que me asocien con un nombre tan bajo- explico Jack.

-Por esta vez, estoy de acuerdo con Jack- apoyo Crow.

-¿Qué tal, "los Refuerzos"?- Sugirió Yusei.

-Es mejor pero... no suena tan especial- dijo Crow.

-Tiene razón. Si queremos ejecutar este plan, tenemos que usar un nombre que imponga respeto. Un nombre que, cada que se escuche, haga que todos esos matones huyan de miedo- dijo Kiryu.

Entre las cosas que dijo, algo destaco para Kazuto.

-Espera. Repite lo que dijiste-.

-¿Qué cosa? ¿Lo de "que todos esos matones huyan de miedo"?- Pregunto Kiryu, repitiendo lo último que dijo.

-No eso. Lo primero que dijiste-.

-"Si queremos ejecutar el plan"-.

Kazuto chasqueo los dedos, señalándolo. -¡Eso! Creo que tengo el nombre para el equipo. ¿Qué les parece, "Los Ejecutores"?-.

Ese nombre provoco una buena reacción en todos, si el brillo y las pequeñas sonrisas eran un indicio.

-Me gusta- lo aprobó Jack.

-Suena genial- dijo Crow.

-Un poco fuerte, pero considerando todo, creo que es el nombre indicado- Yusei también lo aprobó.

-Los Ejecutores...- repitió Kiryu, probando el nombre en sus labios. -Si...- una sonrisa se asomo en sus labios. -Buena elección, Kazuto. Ese nombre le hará saber a todos que vinimos a ejecutar nuestra justicia, que seremos los que salvaremos Satélite, y que quien quiera meterse con nosotros, que lo intente, ¡pero protegeremos nuestra hogar, a como sea!-.

Palabras llenas de pasión por parte de un joven de la edad de los cuatro, pero con un espíritu y determinación mayor a la de todos ellos. Palabras llenas de determinación a lograr un solo propósito: hacer de la isla en la que vivían un mejor lugar para vivir.

-Podemos soñar todo lo que queramos, pero jamás vamos a salir de Satélite- siguió hablando. -Debemos convertirlo en un lugar donde podamos vivir y estar bien. ¡Acabemos con esas pandillas de duelistas y hagamos las calles seguras para todos!-.

Saben que la lucha será difícil, puede que tome semanas o hasta meses, pero en este momento, viendo a Kiryu levantando el brazo lleno de determinación, con el brillo del sol entrando por las rotas ventanas de cristal del edificio, sentían que podían lograr lo que sea.

-Al diablo con esperar a la tarde, ¡vamos ahora acabar con los Ogros! ¡¿Quién esta conmigo?!-.

-¡SI!- Gritaron los cuatro jóvenes a su amigo, y por decisión silenciosa y unánime, su líder.

-Muy bien. ¡Vamos, Ejecutores!-.
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(En la actualidad, con Jack)

Todos esos sueños, esas metas y fe en el futuro habían significado mucho para Jack. No lo diría en voz alta, pero los momentos que paso con Yusei y los demás, luchando juntos, teniendo duelos, cuidándose, conversando o discutiendo, fueron los mejores momentos de su vida.

Pero como pasa todo en la vida, esos momentos se fueron.

En retrospectiva, si lograron lo que se propusieron. Después de desbaratar a todas las pandillas, Satélite se había vuelto mucho más segura. Aun era peligrosa en cierto modo y nunca faltaba el delincuente local, pero las personas normales ya no tenían que tener miedo de enfrentarse a pandillas de duelistas y las luchas de territorios se acabaron.

Pero Kiryu llevo las cosas demasiado lejos.

Todo su deseo de hacer más segura a Satélite, fue reemplazado por una enfermiza pasión de tener duelos, al punto de forzar a chicos inocentes a tener duelos, hasta atacar a la misma sede de Security, que en ese momento, había aprovechado el esfuerzo que todos ellos hicieron de derribar a las pandillas para meter a tantos criminales, limpiando las calles. Tal parece que ellos habían esperado a que las pandillas se acabaran entre si para encargarse de los restos.

Luego de que Kiryu fuera arrestado, y de suerte, ninguno de ellos lo acompañara, Los Ejecutores se separaron. La muerte de Pearson, el único adulto que había intentado hacer algo por las personas de Satélite, enseñándoles a los niños a ser independientes, enseñándoles de duelos y a reparar Discos de Duelo, fue el último clavo para hundir la moral de todos.

Yusei, Kazuto y Crow se mantuvieron en contacto tanto como pudieron, pero Jack se alejo de ellos. Tomo uno de los territorios que habían liberado como su hogar por los siguientes años, hasta que Yaegar llego con una oferta que le fue imposible rechazar.

Si le preguntaran ahora si se arrepiente de haber dejado Satélite, la respuesta sería la misma: no.

La verdad es que no había futuro quedándose en Satélite. Ese basurero era un lugar olvidado por Dios y por todo el mundo donde todos sus habitantes eran usados como mano de obra para los ricos y poderosos de la ciudad. Era una prisión que no necesitaba barrotes al estar en el océano. Tan cerca y tan lejos de Neo Domino, proyectando una falsa esperanza para sus habitantes.

Pero tras perder su puesto como Rey y que la gente de la ciudad, sus autoproclamados fans, le dieran la espalda tan pronto como cayo de su trono, le había quedado claro que había estado viviendo una farsa. Que el trono en donde tan arrogantemente se había sentado, era un trono de cristal, puesto cuidadosamente para él por las manipulaciones de Goodwin para sus propósito.

Lo peor no fue que no hubiera visto la ilusión que era su vida de lujos, porque lo había notado desde que Yaegar le puso como condición traer al Dragón de Polvo de Estrellas. No. Lo peor fue, que aun sabiendo que su vida en los últimos dos años y su puesto de Rey era una ilusión orquestada, decidió apartar la mirada de esa verdad para vivir en la dulce mentira.

Por que, al ver por primera vez los lujos que se le ofrecía, el posible futuro que tendría, el olor de la comida preparada y lo blanco de las paredes y piso, considero que una dulce mentira era mejor que la asquerosa realidad que había vivido hasta ese momento.

Pero aunque disfruto de esa ilusión lo más que pudo, la realidad lo golpeo para hacer que volviera a poner los pies en la tierra. Y con fuerza.

Lo que más le dolió al perder con Yusei no fueron las heridas causadas por el daño del duelo, o su orgullo roto al perder contra a quien había considerado inferior a él. Le dolió que, mientras a él le ofrecieron los mejores lujos y las mejores cartas en bandeja de plata, Yusei gano usando cartas de la basura, escalando desde lo más bajo hasta la cima, en donde, originalmente pertenecía.

Enterarse un día antes del Final de la Copa de la Fortuna por parte de Rex que el padre de Yusei fue quien creo el primer Reactor del Momentum, y que además, Yusei era de Neo Domino, nacido en una familia de prestigiosos científicos, fue un impacto más grande que cualquier golpe de monstruos que había recibido en cualquier duelo. La rata de Satélite, como lo llamaba Ushio, en realidad no era una rata de Satélite. Todos los lujos con los que convivió, Yusei debió tenerlos desde la infancia, pero se le fue arrebatado eso por aquel accidente.

No pudo dormir bien esa noche. Una parte egoísta de él quería culpar a su falta de sueño su derrota, pero era la excusa de un perdedor, sobre todo porque paso noches sin dormir en Satélite y tuvo duelos tan feroces como siempre.

Los periodistas aun lo buscaban para entrevistarlo, pero ya no por ser el Rey, sino porque querían ver al Rey caído en desgracia, humillado al perder su puesto por un chico del basurero. Viéndolo como la caída de la leyenda invicta que podría hacerles ganar un aumento en sus pobres empleos.

Tras todo lo vivido en cuestión de tres días, casi cae en una depresión que lo hubiera hundido definitivamente. Ya había empezado a caer en ese abismo al sentirse perdido tras todo lo que perdió y tuvo que renunciar.

Pero como es dicen: de la derrota, uno aprende.

Aunque perder contra Yusei pudo ser lo peor que le paso, a su vez, también pudo ser lo mejor que le paso. Se creía un gigante, pero igual que David derribando a Goliat, Yusei lo bajo de las nubes y por primera vez en dos años, pudo entender el verdadero valor de las cosas.

Los amigos que abandono en Satélite, la gravedad de su traición hacía ellos. La calidez que sentía al verlos saludarlo con una sonrisa... el simple gesto de chocar puños con Yusei.

Uno solo entiende el verdadero valor de las cosas cuando las pierdes. Es muy cierto en su caso. Pero no era el fin. Podía aprender de esta derrota, de sus acciones egoístas y usarlas para reparar el daño que hizo, para volver a recuperar los lazos que él mismo corto.

El viejo Jack, el Rey, perdió ante Yusei. Pero un nuevo Jack a renacido.

No espera que sea fácil. Tal vez las cosas con Yusei se arreglaron con su duelo, pero aun tiene mucho que arreglar con las otras personas que lastimo. No sabe si lo perdonaran, pero al menos debe hacer el intento.

Pero nada de esto lo hubiera aprendido por su cuenta. Si pudo evitar caer en la depresión para volver alzarse, fue gracias a una persona.

-Bueno, y si ahora me excusan, ¡tengo que llamar a mi editor!-.

Carly Nagisa, una reportera que se hizo pasar por enfermera para entrevistarlo cuando él intentaba escapar del hospital en el que se encontraba después del duelo con Yusei. Terminaron uniéndose cuando Ushio, controlado por alguien, lo hizo batirse a un duelo. Debido a que no podía usar uno de sus brazos, ella tuvo que mover las cartas con sus instrucciones.

Juntos pudieron ganar, pero él quedo herido y la chica lo llevo a su apartamento a recuperarse. Después, al despertar, intento irse. No sabía a donde, pero solo que necesitaba estar lejos de todos. Se fijo en la torre que siempre veía y que daba vista a Satélite, por lo que en un golpe de nostalgia quiso ir allá, solo para ver su viejo hogar.

Después de que Carly le comprara ropa nueva para pasar desapercibido del resto de periodistas y hacerlo participe en una serie de juegos en donde, reconoció que ella lo hizo para ayudar, finalmente fueron aquella torre, donde por primera vez, se dejo mostrar vulnerable y débil ante alguien.

Y en vez de sacar provecho para hacer una historia o burlarse, Carly lo ayudo. Sus palabras le hicieron darse cuenta que aun podía recuperar lo que abandono. Sin saberlo, esa chica torpe y enérgica lo salvo con sus palabras y apoyo.

-Adelante. Seguro que iré a visitarte a la Instalación cuando te encierren y arrojen la llave- comento Jack indiferente.

Él había terminado de contar toda la verdad del Reverso Zero, del padre de Yusei y del propio origen de Yusei. Era normal que Carly, como reportera, tuviera por primer instinto publicar la historia, pero él no lo recomendaría.

Carly lo miro con gesto confundido por sus palabras.

-La gente que quiere mantener todo esto en secreto tiene más poder del que puedas imaginar, Carly- explico Mina. -Sería una tragedia que te enviaran lejos. Me sentiría tan mal, créeme- dijo con sarcasmo.

Carly ríe nerviosamente. -Esta bien, ninguna historia-.

Jack no termina de entender la aparente hostilidad de Mina a Carly, algo que surgió desde que ella intento llevarlo de vuelta con Goodwin esta mañana. Al final no le importa. Nunca entendió la mente de las mujeres.

-¿Me estas diciendo que ese rechazado de Satélite no es un rechazado de Satélite?- Exclamo Ushio, quien era el que estaba más en shock de todos, incapaz de creer que el sujeto al que le tenía jurada era en realidad, el hijo de un hombre tan importante de la ciudad.

-¡Yo nací en Satélite! ¿Algún problema con eso, Ushio?- Le espeto Jack al oficial.

-¡Ninguno, señor!- Respondió de inmediato el hombre mayor, apartando su mirada de la de él, prefiriendo ver afuera.

Los ojos morados de Jack se posaron en la última persona que estaba en este viaje.

-Estas inusualmente callado, Kazuto-.

Kazuto Ryu, un amigo de la infancia de Jack, y una de las personas con las que Jack debe disculparse. El pelirrojo estaba, como señalo, demasiado callado tras las revelaciones de su amigo mutuo.

Aunque Kazuto no tiene la mismas marcas que Yusei y él, por aquellas visiones de los Dracounidad que vio cuando Goodwin le explico lo de la guerra de 5000 años, Jack sabe que su viejo amigo tiene un papel que jugar en este conflicto.

-Yo ya sabía parte de esto- revelo Kazuto.

Jack levanto una ceja. -¿En serio?-.

-Goodwin lo revelo a Yusei y a mi cuando nos explico sobre los Signos Oscuros. No dio muchos detalles, pero todo lo que dijiste sirvió para llenar los huecos- explico y suspiro. -No imagine que Yusei y yo fuéramos tan parecidos-.

Jack podía ver lo que decía: dos jóvenes de padres importantes que por fuerzas externas, o por el destino, como le gusta llamarlo Goodwin, terminaron en Satélite y luchando desde abajo para recuperar lo que legítimamente era suyo.

-¿Pero desde cuando sabes todo eso, Jack?- Pregunto Kazuto, mirándolo acusadoramente.

-No me veas así. No es como si lo supiera durante todo este tiempo. Me entere un día antes de mi duelo con Yusei- respondió Jack. -Para mi también fue una sorpresa, pero explica algunas cosas; como el porque Yusei es tan bueno en mecánica y ciencias-.

-Es cierto- volvió a suspirar. -¿Y ahora que?-.

-Ahora nos dirigimos a la fuente de la figura de luz que ilumina el cielo en Satélite a ver lo que sucede- Mina fue quien respondió. -Debemos aprender todo lo posible de nuestros enemigos y prepararnos para la lucha que se avecina-.

En el transcurso de lo que hablaron, el helicóptero se había acercado bastante hasta estar en cielo Satelital. Desde donde estaban, Jack y Kazuto podían distinguir que la luz surge de la parte vieja de la isla.

-¡Oye! ¡¿Qué están haciendo?!- Exclamo Carly.

Jack se levanto del asiento y abrió la puerta del helicóptero, sujetándose desde los apoyos en el costado y encima de la puerta. El viento sacudía su cabello y ropa, pero a él no le importaba, más concentrado en el fuego purpura que formaba la figura en el cielo.

-Apártate- dijo Kazuto, haciendo un poco de lado a Jack para tener espacio y ver.

Al acercarse más el helicóptero, pudieron distinguir a lo lejos entre el espacio del fuego, habían dos figuras que por la distancia se veían diminutas.

-¡Acércate a esas figuras que se ven!- Le ordeno Mina al piloto, quien obedeció.

Al avanzar y bajar para acercarse, el helicóptero paso al lado de una colina, desde donde se podría ver la isla y la figura de fuego.

Pero al pasar por ella, Jack y Kazuto vieron a alguien que estaba en el lugar con su D-Wheel. Alguien que ambos conocían bien.

-¿Crow?- Pensaron ambos al unísono al ver al usuario de Alas Negras, quien también les devolvió la mirada con sorpresa.

-¿Jack? ¿Kazuto?- Pensó sorprendido el pelinaranja de verlos a ambos, aun más, estando los dos juntos.

El intercambio de miradas duro solo un segundo hasta que el helicóptero siguió avanzando. Mirando un momento la imagen de Crow que se quedo detrás pasmado, Jack recupero los sentidos y miro hacía abajo.

Ahí abajo, en medio de las líneas de fuego, estaba Yusei en su D-Wheel, pero no estaba solo. Alguien más estaba con él, también en su D-Wheel.

-¿Quién esta allá abajo con Yusei?- Pregunto Jack.

El helicóptero se detuvo en el aire.

-¿Por que nos detenemos aquí? Sigamos bajando- ordeno.

-Hay una extraño campo de energía allá abajo. Mis instrumentos están como locos- dijo el piloto.

-¡¿Campo de energía?! ¡¿Y que lo causa?!- Pregunto Mina.

-¡Dije que lo colocara más bajo!- Repitió con voz alta Jack.

-Jack... um... no creo que sea seguro- comento Carly.

-Estoy de acuerdo con la periodista en esto- apoyo Ushio.

-¡Tú cállate!- Le grito Kazuto.

Sin otra opción, el piloto hizo descender el helicóptero, pero al acercarse más, el vehículo aéreo comenzó a temblar fuertemente, los controles del helicóptero se volvieron locos y parecía que estaba cayendo. Ushio, Mina y Carly se sujetaron como pudieron de sus asientos mientras Jack y Kazuto se aferraran a los lados de la puerta.

Antes de chocar con el muro de fuego purpura, el piloto recupero el control del helicóptero, elevándolo y manteniéndolo justo encima del muro de llamas, encima de Yusei y del otro Turbo Duelista.

-¿Jack? ¿Kazuto? ¿Qué están haciendo aquí?-.

Desde la distancia en donde estaban, el rubio y el pelirrojo alcanzaron a escuchar la voz de Yusei, quien estaba sorprendido por verlos en esta situación.

Pero la atención de ambos no estaba en el cabello de cangrejo por una vez. Estaba, en esta ocasión, con quien estaba con él.

Se veía más pálido de lo que recordaban, sus ropas eran oscuras y el casco cubría un poco sus facciones, pero lo conocían tan bien que aun así ambos eran capaces de reconocerlos.

Ushio, desde su asiento, pudo ver la expresión de ambos con más claridad que las chicas. Ambos parecían haber visto a un fantasma.

-¿Ese es... quien creo que es?- Jack lo veía, pero no lo creía.

-¡Kiryu!- Grito Kazuto el nombre de su viejo amigo. Un amigo al que todos consideraban muerto.

El piloto no tuvo de otra que ascender el helicóptero por lo peligroso que era. Justo a tiempo, ya que las llamas purpuras se elevaron.
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-¿Ese era Jack Atlas? Y sin duda, ese grito le pertenece a Kazuto Ryu- dijo Kiryu, riéndose lunáticamente. -¡Esto es grandioso! Con Jack, Kazuto y Crow aquí, ¡los Ejecutores volvemos a reunirnos!- Dirigió su mirada a Yusei. -Me alegra verte, Yusei-.

Estaba decidido. Esta era la noche más extraña en la vida de Yusei.

Al llegar a Satélite, se había reencontrado de inmediato con Crow, quien le informo de los últimos acontecimientos de la ciudad.

Durante el transcurso de la Copa de la Fortuna, aparecieron unos sujetos de túnicas negras que comenzaron a predicar en las plazas sobre sus dioses y que se unieran. Por extraños que fueran, la gente los siguió y no se volvieron a ver.

Después, lo acompaño hasta su escondite, donde se reunió con Saiga y el resto de sus amigos que estaban a salvo. La reunión no duro mucho, ya que una patrulla de Security, siguiendo a Crow, los encontró y persiguió.

Yusei decidió ayudar a su viejo amigo y los enfrentaron en un Turbo Duelo Tag, donde salieron ganando.

De camino a reunirse en la base de Crow, ubicada cerca del Puente Daedalo, Crow le pregunto si aun estaba resentido con Jack.

Yusei fue honesto: ya no odiaba a Jack por lo que hizo. En la final, pudieron resolver esa disputa y dejarla atrás. Ahora se tiene que enfocar en su misión de salvar al mundo.

Cuando llegó la noche, mientras todos dormían, él se dispuso a buscar a los Signos Oscuros, pero Crow, sabiendo lo que haría su amigo, decidió acompañarlo, sin permitir margen de rechazo de su parte.

Así, los dos comenzaron a rodar, pero no paso mucho antes que una carta que voló cerca de ellos los detuviera.

La persona que lanzo esa carta fue alguien a quien nunca esperaron volver a ver: Kiryu.

Su viejo amigo y líder, quien había muerto en las Instalaciones, ahora era un Signo Oscuro. Goodwin le había advertido de esto a Yusei, pero verlo era totalmente diferente.

Apenas se revelo, muros de llamas purpuras los rodearon y los separaron de Crow. El fuego era el mismo que había visto en su visión de Satélite, pero al ver la cielo, la figura que se mostrara no era la de una araña, sino la de algún tipo de persona.

Pero a pesar de su sorpresa de ver a Kiryu vivo, y el dolor que era verlo como enemigo, Yusei tuvo que dejar de lado esos sentimientos, teniendo que poner su cara estoica. No era el momento para dejarse llevar por la melancolía.

Si no podía hacer reaccionar a Kiryu, no le quedaba de otra que enfrentarlo.

-Kiryu... ¿qué te sucedió?-.

-Apuesto a que nunca pensaste en volver a verme- dijo Kiryu. -Pensar que solíamos ser tan cercanos...- río entre dientes de forma lunática. -En fin. Si te lo has estado preguntando todos estos años... por supuesto que no. No te he perdonado por traicionar nuestra amistad-.

-Kiryu, tu nos traicionaste al llevar las cosas demasiado lejos-.

-¡Yo no lleve las cosas lejos!- Grito. -Fue por tu culpa y por tu debilidad-.

Esas palabras perforaron el corazón de Yusei como una aguja, pero no se permitió demostrarlo.

-...No tuve elección-.

-¿Cuántas veces te has repetido eso para dormir tranquilo? Muchas, ¿no?- Soltó una pequeña risa psicótica.

-¿Qué es tan gracioso?-.

-Nos divertimos muchos en aquellos días, amigos- le hablo Kiryu no solo a Yusei, sino al resto del equipo que sabía que podían escucharlo. -¿No es así? ¿No fue así, Crow? ¿No lo recuerdas, Kazuto? Dime, Jack, ¿no la pasamos bien? ¡Pero ahora todo debe terminar! Aunque... supongo que tu lo terminaste todo, Yusei-.

-Atacabas a todo el que llevara un Disco de Duelos. Debías detenerte- respondió Yusei a la defensiva.

-Solo trate de hacer que Satélite fuera un mejor lugar. ¿Realmente creíste que al Sector de Seguridad se preocupaba de nuestro bienestar?- Sus ojos se enfocaron en la marca de preso que tiene Yusei. -Supongo que ya no-.

-No lo hacían, pero lo que tu hiciste fue demasiado lejos-.

-Ellos tenían que caer, como los Duelistas que se interponían ante nosotros. Satélite debía ser nuestro. Pero el pasado es historia. Mejor empecemos. Esta batalle entre un Signo y un Signo Oscuro- la D-Wheel de Kiryu se encendió. Las ruedas giraron y se movió en dirección a Yusei. -No... ¡esta es una batalla entre dos antiguos compañeros!

La D-Wheel de Kiryu paso de lado a Yusei y se detuvo unos metros de distancia, solo para dar media vuelta.

-¡Vamos, Yusei!- Volvió acelerar su maquina hacía adelante, acercándose a Yusei.

-¡Kiryu! ¡¿Por que?! ¡¿Por que eres un Signo Oscuro?!- Pregunto Yusei. A pesar de lo mal que se volvió Kiryu, no podía creer que accediera unirse a fuerzas que querían destruir el mundo.

Kiryu solo río de manera psicópata.

-Kiryu ...- entendiendo que no obtendría una respuesta, y teniendo una obligación de salvar al mundo, Yusei tomo una decisión.

La D-Wheel de Kiryu lo paso de largo. Endureciendo su determinación, Yusei hizo sonar los motores de su D-Wheel y lo siguió, alcanzándolo casi enseguida.

-¡Magia de Campo, Mundo de Velocidad, activado!- Activo Kiryu el hechizo.

El entorno cambio de tonalidad y las D-Wheel se ajustaron para el Turbo Duelo.

-¡Vamos a disfrutar de nuestro Turbo Duelo!-.

-Basándome en el duelo con aquel sujeto controlado, el daño de los golpes se produce de verdad- repaso Yusei en su mente. -Será como el duelo contra Akiza. No. Puede que el dolor sea mayor-.

-¡Voy a hacerte sufrir Yusei! ¡Sufrirás algunos sentimientos mortales!- Dijo Kiryu, para que no digan que no aviso.

-¡AL DUELO!- Gritaron al unísono.
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-¡¿Hay alguna manera de seguir su duelo?!- Pregunto Kazuto.

-¡El monitor!- Jack respondió. -¡Conéctalo al duelo de Yusei y Kiryu!- Le ordeno a Mina.

-¡Si, Atlas-sama!-.

Mina presiono unos botones, y en el monitor pegado al techo del helicóptero se mostró las imágenes de Yusei y Kiryu con sus puntos de vida y Contadores de Velocidad. Una imagen holográfica apareció debajo del monitor frente a todos, mostrando en vivo a los dos en el Turbo Duelo.

Normalmente, un helicóptero no tendría tanto equipo para visualizar un duelo, pero Goodwin quería toda la información posible, así que mejoro este helicóptero para grabar los duelos de los Signos Oscuros.

Todos prestaron su atención al duelo.

-¿Inférnico?- Pregunto Kazuto, tras ver a Kiryu invocar a Bestia Inférnica. -El Deck de Kiryu estaba hecho principalmente de cartas de Tipo Demonio, pero nunca había escuchado de esas cartas antes-.

-Al volverse Signo Oscuro, debió recibir nuevas cartas- dijo Mina.

Vieron el duelo en silencio. Tras que el ataque del Guerrero de la Velocidad de Yusei fuera bloqueado por la Carta Trampa de Kiryu, él comenzó su segundo turno, donde ataco con fuerza. Su Deck cambio, pero no su estrategia. Siempre le gusto atacar con todo para acabar con su enemigo de manera rápida y aplastante, pero parece que esta vez, quiere hacerle todo el daño posible a Yusei.

Otra cosa que notaron es que el daño de los duelos era real, tanto que tras un ataque, sacudió la D-Wheel de Yusei que hizo que se acercara peligrosamente al muro de fuego, siendo evitado por la reacción rápida de Yusei.

Incluso pocos puntos de vida perdidos, significaba mucho daño para quien los perdía.

Para siguiente turno de Yusei, logro invocar al Guerrero de la Basura, pero su ataque no sirvió, ya que fue bloqueado por la Trampa de Kiryu. Jack y Kazuto notaron como Kiryu parecía interesado en enviar sus cartas al cementerio.

Fue en el tercer turno del Signo Oscuro donde todo se volvió complicado para Yusei.

Kiryu invoco a un Cantante Oscuro e hizo una Sincronía Oscura, invocando al Dragón de los Cien Ojos. Un monstruo horripilante de cuerpo negro con una gran cantidad de ojos en todo su cuerpo. Si ya era fuerte teniendo 3000 de ataque, su efecto de copiar las habilidades de los monstruos en el cementerio lo hizo aun peor.

Ni siquiera usando su Espantapájaros de Hierro, Yusei pudo evitar la destrucción de su monstruo y todo el daño real. Kiryu estaba usando los conocimientos que tenía de la baraja a su favor, igual que Kazuto y Jack lo hicieron en sus respectivos duelos contra Yusei.

-Kiryu quería deshacerse de sus cartas. Por eso envío tantas de su mano al cementerio- comento Kazuto.

-Su estrategia evoluciono- comento Jack.

Los dos no quitaban sus ojos del duelo. Ambos se aseguraban de memorizar cada carta que Kiryu usaba, en el caso de que Yusei perdiera y uno de ellos le tocara tomar el relevo.

Con un monstruo que podía aprovechar los efectos de sus monstruos en el cementerio y que tenía un gran ataque, Yusei no tuvo de otra que pasar a la defensiva.

Al comienzo de su turno, Yusei y Kiryu volvieron a tener una conversación de cuanto cambio el amigo que Yusei conocía.

Cada palabra de Kiryu, recordando el pasado que todos compartieron, como se unieron para derrotar a las pandillas que gobernaban Satélite para hacer de la isla un lugar mejor. Ellos cinco libraban una guerra en la que solo se tenían a ellos y a sus cartas. No necesitaban más.

Cuando llegaron a la parte en que enfrentaron a la pandilla del Sector Centro de Satélite, la pandilla más grande y fuerte de todas, el sentimiento de nostalgia ya estaba en el pecho de todos los Ejecutores. Habían sido tiempos difíciles, pero también muy buenos en donde estuvieron unidos. Donde todos fueron hermanos de todo menos la sangre.

Esos momentos eran aun más especiales, porque fueron los últimos antes de que el grupo se quebrara.

-"Y pensar que te salve ese día y lo que quiero ahora es eliminarte. Las ironías de la vida"- escucharon decir a Kiryu, tras que recordara cuando salvo a Yusei de caer de un edificio aquella vez. -"Yo era tan tonto. ¡Pero ahora soy más sabio!"-.

Con esas palabras, robo su carta y el duelo se reanudo.

Kiryu ataco y destruyo al monstruo de Yusei, y este no recibió daño gracias al efecto de su monstruo.

Pero Kiryu aun así logro arreglárselas para quitarle puntos de vida a Yusei, quien fue lanzado hacía las llamas purpuras, siendo aparentemente consumido.

-¡YUSEI!- Gritaron Kazuto y Jack con pánico.

Como si respondiera a su voz, Yusei atravesó las llamas con su D-Wheel, conduciendo por el muro de fuego. Esa acción que parecía de fantasía fue tan sorprendente que hizo que Kiryu dejara de reír, justo antes de que Yusei impulsara su D-Wheel para volver a estar en la carrera, detrás de Kiryu.

-Ese idiota...- suspiro aliviado Kazuto, casi colapsando de puro alivio. -Conducir en un muro de llamas... realmente esta loco-.

Jack asintió. Yusei era el más razonable y lógico, y a la vez, el más loco de todos.

El duelo siguió durante unos turnos más, donde Yusei tuvo que defenderse del Dragón de los Cien Ojos mientras esperaba la carta correcta e intercambiaba palabras del pasado y como Kiryu, según su visión, fue "traicionado" por Yusei.

El momento de la remontada llegó cuando Yusei logro invocar al Dragón de Polvo de Estrellas. Gracias a Hyper Sincrón, su ataque era superior al dragón de Kiryu, pero no pudo destruirlo al atacarlo. Pero con un combo de una Carta Trampa, más la suerte al robar, pudo destruir al dragón de Kiryu con un segundo ataque.

-Algo no esta bien...- murmuro Jack.

-¿De que hablas?- Pregunto Carly.

-Kiryu esta demasiado calmado- respondió Kazuto.

Todos vieron como Kiryu, con el efecto secundario del Dragón de los Cien Ojos, sacaba una carta de su mazo y la ponía en su mano.

Yusei siguió con su ataque, activando una Trampa que le causaría a Kiryu el daño suficiente para ganar el duelo. Pero Kiryu, demostrando estar un paso adelante de Yusei, no solo redujo el daño para no perder, sino que lo uso a su favor para tener dos Tokens en su campo.

-A primera vista, parece que Yusei lo tiene todo para ganar- hablo Jack.

-Pero esa carta que agrego Kiryu a su mano puede ser un problema- siguió Kazuto.

-¿Por que puede ser un problema?- Pregunto Carly, no entendiendo la preocupación de esos dos.

-Esa carta la agrego a su mano por le efecto del Dragón de Cien Ojos cuando fue destruido. Si aprovecho la destrucción de su monstruo para agregarse esa carta a la mano y seguir calmado con su campo actual, es porque trama algo- explico Kazuto.

Cuando Kiryu iba a comenzar su turno, algo raro sucedió.

Adentro de las llamas purpuras que forman el símbolo en el cielo, aparecieron personas encapuchadas como por arte de magia. Todos usaban las mismas capuchas que cubrían sus rostros.

-¿Quiénes son esas personas? ¿De donde salieron?- Pregunto Jack al verlas.

-Tengo un mal presentimiento...- murmuro Kazuto.

Los tokens de Kiryu se desvanecieron, reemplazados por una especie de esfera o mecanismo de piedra que parecía una parte de motor.

Lo siguiente que vieron y escucharon fue a los encapuchados que están dentro de las llamas, gritar en agonía y temor, para consecuente, todos y cada uno se convirtieron en energía purpura que comenzaron a entrar al mecanismo. La cantidad era de decenas, y se elevaban tan alto que pasaban debajo del helicóptero.

-¡¿Qué esta pasando?!- Exclamo Jack sin entender.

-¡Sacrifico las almas de toda esta gente!- La voz de Kiryu se escucho tan fuerte como si estuviera hablando por un megáfono, siendo lo suficiente como para ser escuchada desde el helicóptero. -¡Desciende con fuerza! ¡Dios Terrestre, Ccapac Apu!-.

Un fuego purpura salió de la carta que Kiryu sostenía en alto hasta el mecanismo, cubriéndolo y aparentemente ingresando en él. El mecanismo comenzó a bombear como un corazón, para posterior consumirse al liberar un gran pilar de luz purpura al cielo.

El pilar hizo temblar la tierra, creo nubes oscuras en el cielo del Turbo Duelo y libero ráfagas de aire que sacudieron el helicóptero en el que estaban, pero el piloto pudo recuperarse a tiempo.

Se escucho un temblor, para súbitamente ver emerger un brazo gigante de la tierra que se estrello en el suelo como apoyo, surgiendo todo un cuerpo gigante.

El monstruo que se invoco era el más grande que cualquiera de los presentes haya visto, teniendo una altura equiparable a los edificios más altos de Neo Domino. Tenía marcas azules en brazos, hombros y pecho, así como en la zona de la cara que estaban formadas de tal modo para formar una especie de rostro.

El gigante levanto uno de sus brazos y el piloto tuvo que ascender en el cielo, o el brazo los hubiera golpeado.

Mina y Ushio veían con miedo a tal criatura. Carly derramaba lágrimas de cocodrilo por el susto y Jack y Kazuto no podían creer lo que veían.

-¡¿Qué es esa cosa?!- Grito Kazuto, aferrándose al marco de la puerta del helicóptero. -¡¿Eso es un monstruo?!

Jack no respondió. En cambio, fijo su vista en monitor para ver los datos de esa cosa.

Dios Terrestre, Ccapac Apu

Tipo: Divinidad.

3000 ATK y 2500 DEF.

Nivel 10.

-¡¿Tipo Divinidad?! ¡Eso es imposible!- Exclamo Jack.

Los únicos monstruos registrados con el Tipo Divinidad en toda la historia eran los Tres Dioses Egipcios. Existían rumores del trio de los Dioses del Norte que eran tipo Divinidad, pero como nunca se han visto en duelos oficiales, son solo eso, rumores.

-Acaso...- hablo Kazuto, sin quitar su vista del monstruo de Kiryu. -¿Acaso este monstruo es uno de esos dioses sellados de los que hablo Goodwin?-.

-¡¿Qué?!- Jack se giro hacía Kazuto. -Pero están sellados, ¿no? ¿Cómo se liberaron? Y además, ¿cómo pueden ser cartas si fueron sellados hace miles de años?-.

-"Por que también son espíritus del duelo"- respondió Dux, materializándose en el aire. Jack y Kazuto lo podían ver, pero no los demás. -"Cada Dios, monstruo, criatura mitológica de cualquier folclor proviene del mundo de los Monstruos de Duelo, del tiempo de cuando el nexo entre nuestros mundos era fuerte. Estos Dioses son iguales. Si son cartas es porque tuvieron el poder suficiente para materializar una carta suya a sus elegidos; pero no es tan fácil invocar a un Dios. Se necesita de mucha energía de duelo. Ningún mortal común, elegido o no, podría hacerlo. Si lo intentará, sufriría un castigo divino que lo mataría"-.

-Las personas en el fuego...-.

-"Sus almas fueron el sacrificio para invocarlo"- confirmo Dux el pensamiento de Kazuto.

-Pero en ningún registro dice que los Dioses Egipcios sacrificaron a personas para invocarlos-.

-"Es porque el Faraón sin nombre no era un mortal ordinario. Tenía la suficiente energía de duelo para invocar a los tres dioses sin problema, y los Dioses no exigían sacrificios al ser usados por quien consideraban dignos"-.

Vieron como Kiryu declaraba ataque con su monstruo y Yusei le ordenaba a su dragón contraatacar, pero Polvo de Estrellas atravesó la mano gigante que se dirigía a Yusei como si fuera humo. Al ver que eso no funciono, Yusei intento defenderse con su Espantapájaros, pero también fallo.

Ni su mejor monstruo ni su más confiable trampa pudieron defenderlo.

No podía detener a la mano gigante que se aproximaba a aplastarlo que estaba más cerca cada segundo.

No podía defenderse.

Yusei era un insecto ante la presencia del dios.

-¡YUSEI!- Gritaron Jack y Kazuto.

Como si hubiera algún ángel guardián protegiéndolo, el motor de la D-Wheel de Yusei exploto, probablemente al no poder soportar más la intensidad del Turbo Duelo y por todo el daño al que la maquina se ha sometido.

La D-Wheel perdió velocidad y descarillo, justo fuera del alcance de la mano del gigante que impacto con la tierra y dejaría una marca.

Por el descarrilamiento, Yusei cayo y giro, rebotando contra el suelo. Debido a la velocidad que iba, cada impacto debía ser fuerte y doloroso. Reboto y giro por el suelo pedrada hasta detenerse de costado, temblando de dolor y su maquina dañada y tirada a un lado.

La marca en el brazo de Jack dejo de brillar.

Yusei debía tener varias lesiones y hasta algunos huesos rotos a la velocidad en que cayo. Pero estaba vivo. Yusei estaba vivo, que era lo importante.

-¡Debemos bajar!- Les grito Kazuto a Mina y al piloto.

Kiryu freno su D-Wheel y se devolvió hasta detenerse justo frente a Yusei. ¿Iba a rematarlo? El miedo se instalo en los huesos de Kazuto ante la posibilidad.

Kiryu le dijo algo a Yusei que no pudieron escuchar, y se le vio levantar la carta del Dios Terrestre. Un segundo después, Ccapac Apu volvió de nuevo al interior de la tierra. Las llamas purpuras se apagaron y el símbolo que hacían en el cielo se esfumo.

El Signo Oscuro le dijo algo más a Yusei antes de alejarse en su D-Wheel, perdiéndose en el interior de una neblina a la lejanía.

Kazuto se permitió un pequeño suspiro al ver que Kiryu no remato a Yusei. Si tenía que encontrar una explicación, tal vez sea porque quiere que Yusei sufra.

-Kiryu... ¿en que te convertiste?-.

Vieron a Rally, Nevin y Tank llegar hacía Yusei (¿en que momento llegaron?) y girarlo para verlo. Poco después, llegó Crow y montaron al pelinegro en su D-Wheel para partir. Seguramente lo llevara a donde Martha.

-¡Tenemos que ir con él!-.

-No. Tenemos que ir a donde esta el Director y contarle de lo visto- dijo Mina, de manera estoica.

-¡¿Qué?!-

Jack tomo el hombro del piloto con rudeza y lo sacudió. -¡Hey, piloto! ¡Aterriza el helicóptero ahora mismo! ¡Deprisa!-.

-No. Continúe hasta el ASAP- le ordeno Mina al piloto.

-¡¿Te estas burlando de mi, Mina?! ¡¿Pretendes que deje abandonado a Yusei de esa forma?!- Le grito furioso Jack a su asistente.

Aunque Kazuto estaba sorprendido de las palabras y la disposición de Jack de no querer abandonar a Yusei, estando claramente herido, se encontró apoyándolo. No era momento de ponerse antagonistas.

Jack miraba a Mina como un león apunto de atacar, pero por primera vez desde que se conocían, Mina no retrocedió; en cambio, le devolvió la mirada sin miedo y con gran determinación.

-Atlas-sama, ¿qué puede hacer sin una D-Wheel?-.

Esa simple pregunta le cerró la boca a Jack.

Nada. No podía hacer nada sin una D-Wheel. Kiryu a este punto ya habrá huido y no puede alcanzar a Crow en un helicóptero.

-¡No podemos abandonar a Yusei!- Grito Kazuto en protesta. -Necesita un hospital-.

-Nuestra prioridad ahora es ir con el Director Goodwin. Él nos dirá que hacer- le contesto Mina con la mirada al frente, mientras el piloto giraba el helicóptero de vuelta a la ciudad. -Por lo que parece, Yusei estará bien. Nosotros tenemos que ayudarlos prepararse para la lucha contra los Signos Oscuros, ahora que hemos visto de lo que es capaz uno de ellos-.

-¡Pero...!-.

-¡Entiende!- Grito Mina, ya cansada de la irracionalidad del pelirrojo. -¡¿Qué crees que puedes hacer?! ¡El Signo Oscuro ya escapo! Y dudo mucho que sepas algo de medicina para curar a tu amigo. ¿Quieres ayudarlos? ¡Entonces enfócate en estar listo cuando la verdadera lucha llegue!-.

Las palabras de Mina resonaron en Kazuto como verdad. Martha le enseño primeros auxilios que él ha puesto en marcha durante los últimos diez años, pero las heridas de Yusei debían ser demasiado graves como para atenderlo, sobre todo si no tenía equipo. Tampoco podía perseguir a Kiryu, no solo porque ya escapo, sino porque sería una insensatez seguirlo a su guarida, donde estarían el resto de Signos Oscuros.

Ninguno de los caminos a seguir le gustaba a Kazuto, pero Mina tenía razón: tenía que prepararse. Había visto el poder de un Signo Oscuro y de lo que eran capaces al ver como sacrificaban a las personas para invocar a sus dioses.

Tenían que ser detenidos.

Solo otro incentivo más para terminar el asunto que debía terminar esta noche.

-Necesito que me dejen en un lugar-.
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Kiryu llegó a la zona del viejo Momentum, frenando suavemente su D-Wheel hasta detenerse por completo.

En la soledad y seguridad del lugar, se permitió soltar un suspiro, mostrando un lado vulnerable de su ser.

El duelo había sido más difícil de lo que pensó. No creyó que Yusei pasaría de su Dragón de los Cien Ojos, pero su viejo amigo ha mejorado estos años que no se vieron, aun cuando sigue usando las mismas cartas.

Pero lo que lo dejo más agotado fue el Dios Terrestre. Aun con las almas de los Satelitales que secuestraron y controlaron, la energía de duelo que tuvo que dar fue demasiada, sin contar la presión que el dios ejerció en él era pesada.

Ahora tenía sentido porque Rudger dijo que debían invocar a los Dioses Terrestres como último recurso en un duelo. La presión era demasiado. No podría soportar tenerlo en el campo por más d turnos como máximo en un duelo.

Al sentir la presencia de uno de sus "compañeros", esfumo cualquier rasgo de cansancio en sus facciones y levanto la cabeza para ver quien se aparecía.

-¿Noche productiva?- Pregunto Rodrigo, cruzado de brazos.

-Se podría decir que si- respondió Kiryu con una sonrisa. -Deberías haber visto su cara. Nunca desee haber tenido una mascara tanto como en ese momento-.

-Y sin embargo, el Signo vive-.

-Tiene que sufrir por todo lo que yo sufrí por su traición. Que viva con miedo hasta nuestro siguiente encuentro, donde bajaré sus puntos de vida lenta y dolorosamente hasta que no quede nada de él-.

-Más te vale que no nos juegue eso en contra para cuando el momento llegue-.

-Te preocupas demasiado- antes que vuelva a molestarlo con el asunto, Kiryu decidió cambiar de tema. -¿Y como esta el chico que trajo Tsubaki?-.

-Se esta adaptando a las energías oscuras del lugar. Estará listo a tiempo para la lucha- respondió Rodrigo.

Sect era interesante. Era un amigo cercano de Kazuto, aunque Kiryu no lo conocía de nada, lo que le decía que Kazuto lo conoció después de que él terminara en la Instalación de Satélite. No sabe porque ese dragón lo termino por escoger a él de todos, pero no le importa. Mientras el enano no sea un estorbo, no tendrá problemas.

Soltó una pequeña risa aguda al recordar el emotivo reencuentro de grupo que todos tuvieron. La cara de sorpresa de Crow no se le borrara de su mente, y deseo haber podido ver las caras de Jack y Kazuto. Tal vez, con algo de suerte, pueda luchar contra ellos en la guerra que se avecina. Después de que matara a Yusei, claro.

Ya casi no podía esperar a que todo verdaderamente comenzara. Ojala el destino se diera prisa.
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N/A: Hasta aquí el capitulo.

Aquí comenzamos con un recuerdo de como Kazuto y los demás se unieron y formaron a los Ejecutores, hasta dando el nombre del grupo. Creo que esta temática de contar cosas del pasado en Flashback a inicios del capítulo me esta gustando, ¿que opinan?

Después, en el presente arranca con una narración interna de Jack de los sucesos pasados con el equipo y lo que sintió tras perder el título de Rey, afianzando el vínculo que formo con Carly y como tiene planeado disculparse.

Claro que, siendo Jack, no se disculpara de frente, tiene su orgullo. Lo hará a las cartas, y deje entrever quien será su siguiente oponente.

En el siguiente capítulo seguiremos con la trama de Kazuto, que esta casi terminando. ¿Qué les ha parecido hasta ahora?

Espero que les llegue la actualización. Fanfiction anda muy perra con las notificaciones. Ya van como cinco veces que sigo las instrucciones y aun así nada. Espero que se arregle pronto.

Sin nada más que decir me despido. CHAO.