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- Ya lo sé.
- Por eso, tú no eres culpable de nada.
- Pero tengo ese sentimiento de responsabilidad... Me siento mal por el centauro azabache. Me siento mal porque perdiera a su pareja... Me siento mal porque algún día pueda verme y tener falsas esperanzas en mí...- Yorg encarnó las cejas y suspiró pesadamente...- Y si ese vampiro era mi mejor amigo...
- ¿Vampiro?
- El chico con colmillos...
- ...- Yorg encarnó las cejas, pero ahora más preocupado que no extrañado.
- Si ese vampiro era mi mejor amigo, lo más seguro es que al verme haya ido con el centauro, si es que no ha muerto, y le habrá dicho que estoy vida...
- ¿Qué posibilidades hay de que siga vivo?
- No tengo ni idea...- negó con la cabeza.- Pero a lo mejor puedo relacionarlo con la persona que me ayudó con el tema de los flores...
- Si es que fue una persona...
- Si... porque sabiendo que los vampiros existen... Y posiblemente los centauros también... Puede que el resto de cosas también existan... Y miedo me da...- susurró en bajo y carraspeó.- Eso me quita todavía más las ganas de ir al bosque...- Confesó.
- ¿Entonces no quieres que te acompañe a buscar a esa cosa...?
- Centauro.
- Centauro y vampiro...- rodó los ojos y dibujó una sonrisa.- Aunque no sé qué tan buena idea es, sobre todo sabiendo que técnicamente las criaturas del bosque son difíciles de encontrar...
- Pues las dos veces que me he quedado a solas...
- Tú sabes a qué me refería...- Tyrkelige dibujó una sonrisa.- Vamos a por leña y ya de paso, les buscamos yendo un poco más profundo... ¿Bien?
Tyrkelige asintió con la cabeza y el rubio buscó la mochila de madera para poder cargar con la madera, los troncos y las ramas. Cuando salieron de casa, su madre los vio cargando con la mochila y el hacha y sonrió un poco porque ambos estuvieran bien, después de todo, ella había notado varias veces como su hijo mayor estaba entristecido o puede que incluso asustado de ir al bosque, pero daba gracias a que su hermano pequeño (irónicamente más alto que él) lo ayudara a calmarse y le diera confianza para ir los dos a aquel lugar que tanto miedo le daba a Tyrkelige.
Se adentraron a las zonas profundas siguiendo la línea del río hasta la cascada, momento en el que se detuvieron para descansar un rato después de la larga y extenuante caminata.
- Se supone que si hay algo viviendo aquí, debería venir al río a beber... ¿No?- Tyrkelige asintió con la cabeza.
- A no ser que estén más allá de la cascada, en las montañas...- murmuró.- Pero no lo creo. Los centauros, aunque sean mitad humanos, siguen siendo caballos, y los caballos se enferman rápido si están en climas inestables... Si viven en alguna zona, tiene que ser aquí...
- A no ser que al tener esa parte humana les permita adaptarse...- murmuró haciendo una mueca con el labio.- Puede que sí tenga cierta lógica que vivan en las montañas... Que yo sepa, nadie de la aldea ha ido hasta allí arriba, ni siquiera los chamanes... Lo más profundo del bosque se ha llegado hasta aquí...
- También puede que sea cierto...- suspiró pesadamente.- Pues nada. Hasta aquí hemos llegado... ¿Volvemos?
- Será lo mejor... El sol se acerca a su punto más alto...- Tyrkelige subió los ojos hacia el cielo y después los dos iniciaron el camino siguiendo la línea del río, pero adentrándose en el bosque para que el sol no les diera de forma tan directa, después de todo, Tyrkelige seguía teniendo albinismo y las quemaduras producidas por el sol le dañarían bastante la piel y no podría salir de casa, ni del agua, hasta que se calmase y aquello podría conllevar un resfriado por pasar tanto tiempo en agua que eventualmente se quedaría helada, sobre todo por las noches.
Caminaron siguiendo el sonido del río, recogiendo algunas ramas y troncos caídos, el hermano menor iba con el hacha en sus hombros, igual que la mochila, relajado y casi burlón, fanfarroneando de que podía llevar toda la mochila llena de troncos sin siquiera quejarse, y aunque eso lo hacía para hacer reír un poco a su hermano, la verdad era que Yorg sí tenía algo más de fuerza que él para aquellas cosas físicas. Tyrkelige prefería las actividades manuales más bien estáticas, pero si tenía que usar un hacha, podía hacerlo perfectamente.
- ¡Berty!
El de cabellos blancos se estremeció al escuchar aquello y poco después sentir un impacto certero contra su cuerpo, dejó escapar un chillido, que ya de por sí, si el grito había captado su atención, el chillido de su hermano hizo que Yorg se girara de inmediato, usando el hacha como defensa personal, porque no sabía lo que era o de dónde había salido.
- Tienes un hermano violento...- mencionó el azabache de ojos verdes apartándose inmediatamente un par de pasos del peliblanco.
- ¿Quién eres?- exigió el rubio, casi poniendo a su hermano detrás de él, apretó el mango del hacha para sentirse seguro.
Aquella enorme hacha apuntaba directamente a la cabeza del vampiro, quien parecía mirarla entretenido y puede que incluso divertido.
- ¿Es de plata?- el azabache de ojos verdes tocó el filo sin miedo.- Nope, hierro...- sonrió de lado.- Pues siento mucho que no vas a hacerme gran cosa con esto...- se rio entre dientes mostrando sus enormes y afilados colmillos.- De todas maneras... Solo vine para saludar a Bert...
- Dije que me llamaba Tyrkelige.- murmuró el de cabellos blancos.
- Lo siento, es que ese nombre es demasiado impronunciable para que mi cerebro lo recuerde...- se encogió de hombros.- Además, lo primero que pienso al verte es en Bert.
- ¿Puedes dejar de hablar de un muerto para referirte a mi hermano?- pidió el rubio.
- Hmmm...- Richard se quedó mirando a Tyrkelige.- ¿Cuánto sabes de él?
- Desde que nací he estado soñando casi todas las noches cómo fallezco... Hasta hace poco descubrí que era un centauro, y esta hace todavía menos tiempo descubrí que tenía una buena relación contigo... No sé mucho...
- ...- Richard asintió con la cabeza lentamente.- En ese caso...- movió la cabeza hacia un lado, hacia lo más profundo del bosque, se giró hacia los dos hermanos.- ¿Te importaría dejar de apuntarme con el hacha...?- le pidió al rubio notando que este seguía sin bajar el arma.
- No hasta que no hagas desaparecer esos colmillos.
- No puedo hacer desaparecer los colmillos. Solo hacerlos chiquititos...- movió su labio torciendo su rostro en una mueca.- No puedo hacerlos más pequeños que esto...- Yorg siguió sin bajar el hacha.- Estás demasiado a la defensa, no voy a haceros daño a ninguno de los dos.- Hubo un breve silencio.- Os parecéis bastante, tenéis un color de ojos bastante parecido, por cierto...- se rio entre dientes.
Los dos hermanos se echaron un vistazo. Richard apartó la vista hacia el bosque.- Will, ven tú a explicarles.
Tyrkelige reaccionó de inmediato al escuchar aquel nombre, y ese gesto no pasó desapercibido para el azabache de ojos verdes, quien sonrió de lado al ver que el peliblanco se estremeció cuando mencionó el nombre del centauro moreno. Este movió un par de matorrales altos y otros bajos y se acercó serio a ambos. Yorg bajó el hacha de inmediato y se giró hacia su hermano mayor, este tenía los ojos muy abiertos.
- ¿Lo reconoces? Aunque sea de tus sueños...- Tyrkelige asintió lentamente con la cabeza.- Bueno, algo que tienes ganado...- el centauro rodó los ojos por el sarcasmo.
- No tengo nada ganado, no es él... Bert falleció hace dos siglos...- Tyrkelige y Yorg abrieron los ojos en shock.
Uno por el tiempo que ambos tenían, el otro por el tono de voz. La voz en sus sueños tenía cierta dulzura, aunque era grave, pero tenía un trasfondo aniñado, un tono algo más inocente y gentil, la voz del centauro que tenía en aquellos momentos delante y que no era más que una versión algo más adulta y varonil a la de sus sueños, tenía una voz grave y potente, una figura majestuosa e imponente y podía apostarse muchas cosas a que era incluso más alto que en sus sueños, pero tal vez era por la perspectiva en la que se encontraba que lo hacía verse más grande.
- Aun así, me hace feliz saber que reencarnaste...- Tyrkelige se estremeció hasta los huesos.
- ¿Q-Qué significa eso?
- Las criaturas unidas al bosque tienen... ciertas ventajas que los humanos no... La naturaleza nos entregó una ventaja, por llamarlo de algún modo...- se acercó a los dos hermanos, inclinándose y apoyándose sobre lo que técnicamente eran sus rodillas.- Y poder volver a verte me da unas ganas insanas de abrazarte con fuerza...- la forma de tomar su mano era tan comprometida y formal.
Se levantó nuevamente, tenerlo en frente producía un sentimiento de intimidación muy abrumador.
- Los seres del bosque, por decisión de la madre naturaleza fueron dotados de la ventaja de poder reencarnar... Nunca estuvo escrito que se reencarnaría en la misma especie y todos lo asumieron, pero ya veo que no se sigue en todas las circunstancias...
- ¿Por qué doscientos años después?
- Caprichos de la madre naturaleza...- perdió su vista en el bosque.- Perdí esperanzas después de cincuenta años...- susurró con tristeza en su voz.- Pero verte en el bosque dormido me... Sorprendió demasiado...- hizo una breve pausa, después suspiró pesadamente.
- ¿Fuiste tú el que me dejó en el borde del bosque y llenó la bolsa de las flores que estaba buscando?
- Sí...- asintió con la cabeza sonriendo un poco.- Fui yo...
- Tengo que decir que hace doscientos años te orientabas mejor en este sitio...- mencionó Richard apoyándose en el hombro de Tyrkelige.
- Odia el bosque por culpa de las pesadillas. Solo viene acompañado...- Yorg tomó un tono algo posesivo y protector.
- Las pesadillas... ¿Muestran la muerte de Bert... no?
- Presuntamente.- hizo un breve silencio.- Soy incapaz de acercarme al bosque en invierno...- negó con la cabeza.- Sobre todo los inviernos que nieva tan intenso que todos los caminos están sumidos en un manto blanco.
- Invierno...- la expresión del centauro se mostró repentinamente nostálgica.- Aquel frío invierno no volverá a repetirse...- sus pasos majestuosos se dirigieron hacia las profundidades del bosque.- Y en caso de repetirse... Impediré que el resultado sea el mismo... Tengan un buen día... Fue bueno volver a ver tus ojos... aunque no sea en el mismo contexto de antaño...
Se perdió entre la maleza, los troncos y las copas de los árboles. Richard movió su cabeza hacia un lado y se acercó al de cabellos blancos.
- Se iba a poner romántico, por eso se fue... No quería incomodarte.- Tyrkelige encarnó las cejas, giró la cabeza hacia Yorg, este estaba confundido.
- ¿Con alguien que acababa de conocer?- preguntó el rubio.
- No... Por Bert...- negó con la cabeza.- Robert fue demasiado especial para William...
- No entiendo bien el término de "pareja predestinada"
Richard se lo quedó mirando fijamente, abrió los ojos poco a poco, hasta que sus ojos quedaron tan abiertos como naranjas.
- ¿Soñaste con... eso?
- ¿Con qué?
- Will entregándose a ti como pareja para toda la eternidad...
- No... Tú lo mencionabas... Decías que era mi pareja predestinada y que solo por eso no tenía derecho a acapararme todo el tiempo. Tú también querías pasar tiempo conmigo...
Richard sonrió un poco.
- Ya veo...- asintió con la cabeza varias veces.- Tus sueños poco a poco se van completando con tu vida anterior...
- No sé si eso es bueno...
- Descuida, es bueno... Tienes la suerte de poder ver pequeños fragmentos de tu vida anterior...- Tyrkelige se quedó pensativo.- Yo no tuve oportunidad.- los dos hermanos se quedaron mirando al vampiro.
Richard se rio entre dientes.
- No muchos tienen esa suerte... Pero luego no le reproches a Will por ser tan empalagoso y tierno...
- ¿Empalagoso? No lo parece.
- Créeme... He sido testigo de muchas cosas...- sonrió.- Os dejo marchar... pero no será la última vez que nos veamos...- ronroneó.- Espero que nos volvamos a ver, Yorg...
- No comparto el sentimiento...
Richard se llevó una mano al pecho de forma exagerada y dramática.
- Mucho menos después de decir que reencarnaste... No quiero saber cuántos años tienes...
- Nací hace cinco mil años, pero mi reencarnación más reciente es de hace unos quinientos años, así que solo tengo quinientos...- sonrió ladino.- Pero no te quejes de mí, tu hermano en realidad tiene tres mil años...- Yorg giró la cabeza hacia su hermano, Tyrkelige había encarnado las cejas con sorpresa.- Has vivido muchas vidas... Por si lo dudabas... Los seres humanos no toleran bien a los inmortales provenientes de la madre naturaleza...
Yorg giró los ojos hacia su hermano mayor.
- Ahora mismo no sé que me da más miedo, tener un vampiro delante o tenerte a ti como hermano.
Tyrkelige miró mal a su hermano y le dio un pequeño golpecito en la cabeza.
- Tenemos que volver a la aldea...
- De acuerdo...- Richard sonrió de lado.
Richard se despidió de los dos hermanos. Su sonrisa se esfumó por completo de sus labios y giró la cabeza hacia el bosque.
- Se le parece...- murmuró de repente.- No del todo, y puede que sean imaginaciones mías... Pero se le parece...
William se acercó a él, apoyado en uno de los troncos gruesos.
- Yo no le he visto ningún parecido...
- Por eso digo que creo que se le parece... No estoy seguro... No todavía...
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¿A qué creen que se refiere Richard con lo de "se le parece"?
Quiero leer vuestras teorías al respecto... ewe
Aquí las teorías conspiranoicas -------->
Intenté que toda la historia fuese coherente, eran unas 11.000 palabras en su totalidad, tampoco era mucho, pero intenté que no hubiera vacíos o lagunas entre los personajes o la propia trama.
Si notan algo incoherente, no duden en avisar UwU
Aquí las opiniones ------------->
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line
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