Yo realmente no quiero asustarlos, solo quiero mostrar mi vida y como es mi familia adoptiva, si bien podría empezar contando detalles clave en mi vida, los suficientes detalles para poder empezar con esta novela, no recuerdo nada mi vida desde hace unos dos años, si bien no recuerdo absolutamente nada de mí infancia más que era una chica solitaria, solo eso, ¿Pero debo estar triste por eso? No! Soy feliz! Tan feliz que podría estallar entre felicidad! Realmente quiero contarles varios secretos (No llamen a la CCG, soy humana) algunos que nadie conoce y otros que gran parte de mi familia conoce.

Mi familia, es especial y yo la quiero así, siendo adoptada por los Mc. Cormick que me prometieron que a pesar de la poca comida humana que podían proporcionarme, harían lo imposible para ayudarme, realmente con el mediano y la menor de los tres hermanos son con los que mejor me llevo (el mayor de los tres está deseando pillarme sola en casa o en un callejón para matarme y comerme) y a pesar de que prácticamente somos como gemelos el mediano y yo, porque ambos tenemos dieciséis, se puede ver las diferencias, soy una chica un poco baja para su edad, a pesar de tener dieciséis aparento trece o doce.

Empezando también por el fuerte impacto que puede causar las siguientes palabras: "mi familia es Ghoul" (No llamen a la CCG, por favor, por piedad) pero ellos no quieren dañar a nadie, son gente "selecta" que pasa la mayor parte del tiempo en casa por el miedo a que los maten, y que no quieren nada malo para el mundo y es por eso que me permiten vivir con ellos y, bueno, en verdad soy su responsabilidad por culpa de unos problemas que pasaron por aquel trágico accidente de mis padres biológicos, digamos que fue culpa mía que ahora yo sea una carga para ellos, no debí meter las narices en el asunto, pero lo hice. A pesar de que tanto el hermano mediano como la hermana pequeña tratan de convencerme para decir que yo no tuve culpa de nada, que simplemente estaba preocupada por mis padres me sube el ánimo y más cuando dicen que ellos dos hubieran hecho lo mismo, sean Ghouls o no, realmente se puede ver que aman a su familia, por rara que sea.

Recuerdo bien como fue esa noche:

«Salí de mi casa aun aventurandome a las frias y peligrosas noches de la ciudad, siendo el viernes el día más amenazado por el anochecer según decían las noticias y sin darle cuenta a las creencias salí de casa sin pudor y sin miedo, simplemente buscando a mis padres por su tardanza en llegar a casa, si, se que no es bueno hacer eso, pero tenia mucho miedo a que algún asesino los hubiese atacado.

Ignorando el barrio de Pubs (locales para mayores de dieciocho) lo rodeé por una de las calles para escaparme por algunas de las calles traseras mucho mas iluminadas desde luego. La música festejaba un encuentro en el que las zorras calentaban a los tíos y luego estos hacían lo suyo, para que las mujeres luego a la mañana siguiente dijesen que fueron violadas por esas personas. Como sea, personalmente esa gente me daba asco.

Al salir del callejón (que por cierto estuve a punto de vomitar por el olor a vómito y defecación) me dirigí allí donde teóricamente fueron a comprar, encontrandome con una escena poco agradable realmente, viendo con shock y sorpresa como una mujer de cabellos rubios devoraba a mi padre, esa tía me pareció verla en el Pub que hace un rato pasé... Tras ella, más adentro del callejón, se encontraba el cuerpo de mi madre, y allí otra mujer, está vez pelinegra, chica que también vi en el Pub de hace un rato y ahora eran, ¿Ghouls? Oh mierda! Y tras mirarme detenidamente se acercaron a mi con ferocidad y sin ir a detenerse, "yo era la próxima" y eso no me hace falta que me lo repitieran dos veces, porque salí corriendo como alma que lleva el diablo de ese lugar y busqué un lugar con gente, porque obviamente encerrarme en casa sería una gilipollecez, así que simplemente me dirigí al centro policiaco de South park para rezar su ayuda, cosa que obviamente no me iban a dar, yo lo sé bien. Era un largo pasillo iluminado pobremente con farolas parpadeantes con fallos en ciertos puntos y una vez girase a la derecha podría llegar al cuartel de policía.

Pero lamentablemente con uno de sus Kagunes me atraparon, identifiqué uno como Bikaku verde fuerte como los cactus del desierto, traté de chillar pero no me salía la voz, como si me hubieran desgarrado las cuerdas vocales. Y me tiraron cruelmente contra una pared, contra la que os puedo jurar que me partí varias costillas y con debilidad sostenía mi costado mientras me levantaba, dolía un infierno y me costaba respirar, así que tomé aire cuando un Ukaku rosa muy oscuro con algunas partes que brillaban en diferentes tonalidades se lanzó a por mí, pude al parecer, inhumanamente, esquivarlo mientras me agachaba, reprimiendo un grito de dolor y después, aprovechando la cercanía tiré del Kagune rosado, como pude en realidad, para acercarla y después le di una patada lo suficientemente fuerte para tirarla al suelo y después a la otra pude empujarla y salir corriendo. ¿Hacia donde? Ni puta idea porque la estación de policía no era objetivo viable, además de que salí corriendo por el lugar equivocado, de hecho por el contrario, tratando de sostener el costado dañado mientras de vez en cuando tosía sangre por el golpe, creo que en serio si me fracturaron algo y cuando pensé que podría estar a salvo otra vez las dos zorras pesadas me capturaron con el Bikaku de la rubia y fui lanzada contra una de las paredes, costandome levantar esta vez.

Hasta que cuando me tomaron del cuello entre las dos y ya predije mi destino una de las dos acabó en el suelo con una especie de marca de latigazo, como si una garra la hubiese atravesado, la otra miró arriba y me soltó con brusquedad, seguidamente huyó, salvo por a los varios metros un Chico se interpuso dándole un golpe de plancha y seguidamente con el Kagune, otro Bikaku, era como dos colas de zorro de color naranja y puntas amarillas, la mató totalmente y así, ya no iban a volver ninguna de las dos, después se acercó a mí. Tras de mí noté una presencia y al girarme débilmente me encontré con una niña con un Rinkaku color crema con parte rojiza... Vais a matarme, ¿verdad? El chico se acabó por acercarme y palpó el costado que me sostenía con la mano, recibiendo una mueca de dolor de mi parte, la otra niña se agachó a cuclillas con las manos en las rodillas mirándome detenidamente

- es muy bonita, ¿Que vamos ha hacer con ella?- no sabía si sentirme alagada por el "bonita" o sentirme inquieta por saber que eran dos Ghouls que podían matarme sin esfuerzo alguno. Ella ya había escondido su Kagune, él suspiró y también lo escondió.

- simplemente llevemosla a casa, allí podremos curarla- ella ladeó la mirada a un lado con confusión- avisa a mamá y papá, que lo contengan.

Esta asintió con la cabeza y con un salto llegó a lo alto del edificio. Me llamó, moví mi cabeza inquieta por el miedo, simplemente me dijo: "chica" y no me sentí ofendida, simplemente tenía miedo, tanto que no me importó eso. Me tomó en brazos al estilo nupcial y cosa que aumentó mi pánico.

- vale, ahora ya estás a salvo, no hay porque temer nada ahora, te hayan o no tocado ahora ya no podrán hacerte nada nunca más, ¿Eras la chica nueva del pueblo, verdad?

- s-si...

- ¿Porque estabas fuera a estas horas?- sin más empezó a moverse casi provocando un grito en mi cuerpo pro la sorpresa de verme casi en el punto de la muerte por el salto que dio, que llegó a la cima del edificio.

Le conté todo con voz temblorosa, no sabía si podía confiar en ese "ahora ya estás a salvo" pero contarle lo que me pasó con esas dos chicas no lo veía malo. Y en si no me esperaba que incluso en un pueblo remoto haya Ghouls, de hecho escapé del otro por eso mismo, porque estuvieron a punto de matarme a mi, por eso aprendí a defenderme con golpes y patadas, pero ahora perdí a mis padres y casi muero yo también.

Al llegar a unas ruinas llegó al suelo de nuevo, y suspiró mirando alrededor de reojo.

- ¿Puedes caminar?- me preguntó.

- si, creo, solo me duele el costado, estoy bien- dije.

Con cuidado me dejó en el suelo y me guió con cierta cercanía como si algo fuese a lanzarse a por mí.

- vaya, la cena!- escuché a un lado mientras avanzábamos entre todos aquellos deshechos de la ciudad y habiendo dejado atrás las vías de tren se me acercó un chico rellenito amenazándome con los dos ojos activados, obviamente.

- vete a la mierda, culón, está herida y estás en el territorio Mc.Cormick

- ¿¡Eso significa que vas a dejar a la poca excacez humana que llega a la ciudad con vida!?- gritó amenazando con un Kagune de Mazo en un brazo, creo que esos se llamaban Kokaku, no estoy segura.

- ¿No he sido suficientemente claro? Estás en mi territorio y lo que esté en mi territorio es de mi propiedad, así como todos los humanos que hayan aquí- habló calmado sin darle importancia a las amenazas del otro. Inclusive me acercó un poco más a él para defenderme.

-...

Se marchó enfurecido. Me giré una vez más hacia él, tan solo me dio un ademán para continuar con el camino hacia donde se supone que me estaba guiando. Y poco después se vio una casa maltratada por el tiempo, vieja y casi derrumbada por el techo. Me dio paso por la puerta.

- Mamá, ¿Donde esta el Kit de primeros auxilios?- fue lo primero que dijo una vez entró en casa.

- liberadme hijos de puta!!- fue lo que me hizo temblar de miedo cuando me adentré un poco en la casa- Tengo hambre joder!

- cállate de una puta vez!- se escuchó una voz fuerte de mujer desde el pasillo y seguidamente la misma que hacía gritado nos acercó una caja blanca, me miró de arriba a abajo y después miró a su hijo.- Kenny, cielo, ¿Lo que tu hermana me dijo va en serio?

- ¿Que te dijo?

- por favor Kenny!- la pequeña le saltó encima en un abrazo- por favor! Dile a mamá que se quede con nosotros! Por favor!- la castaña menor que antes estaba allí y que acabó con una de las que querían matarme ahora le rogaba a su hermano mayor que yo, me quedase con ellos.

- Karen por favor, no le ves el sentido a las cosas, Kevin no soportará la estancia humana en la casa- dijo la madre.

- por favor!- esa carita tierna... ¿Quién le iba a decir que no?

Y claro, el rubio de capucha naranja enterneció.

- Mamá, la chica es ahora huérfana por culpa de "las zorras"- dato curioso, recordadme que me ría bien feo de ella cuando las vea de nuevo-, siguen con vida, no podemos arriesgarnos a que viva sola...- eso calló a su madre y quedó muda, totalmente muda, seguidamente dejó a su hermana en el suelo y suspiró.

- LIBERADME!!!- se escuchó el grito desde la habitación.

La peli-roja, la madre, bufó rodando los ojos por ese gritó de parte del hijo mayor o menor y chilló que se callase de una puta vez. Acto seguido nos miró a nosotros.

- está bien, supongo que tendré que hablar con vuestro padre- lo llamó con un grito y entró por el pasillo.

- ¿Eso que significa?- dije yo temiéndome lo peor.

- eso es un si...- sonrió la menor dando pequeños saltos en el suelo- Yei! Tenemos una nueva hermana! Ahora ya somos tres mujeres y tres hombres! Bien!!- alcé una ceja y reí un poco por la ternura.

A los pocos minutos llegaron dos adultos y me miró dubitativo, seguidamente miró a su mujer y asintió con la cabeza.

- podremos vivir con una humana, no será peor que vivir con un Ghoul salvaje...

- Te escuché!!!!- se oyó desde el pasillo

- Oh! Cállate Kevin!- gritó la madre.- Bienvenida a la familia, emm...

- Silvia...- asintieron a la vez que escucharon el nombre

Y así fue básicamente como me adoptó la familia Mc.Cormick.»

Descubrí con esos dos años que ser humano en South Park significa peligro, porque yo pensaba que el pueblo no tendría ni un solo Ghoul, pero por lo contrario, todos son Ghouls y tuve suerte de no morir allí, al parecer los Mc.Cormick son el único grupo vegetariano de South park y en él (a excepción de Kevin que cuando tiene hambre se descontrola), además de que en la familia también hay un chico más, el novio del mediano de los hermanos, un chico rubio de ojos azules más claros que Kenny, inocente, su nombre verdadero era Leopold Stoch, pero todos lo llamaban Butters, pero en clave se llamaba "humano" porque era un chico que todavía no había liberado su kagune y sus ojos cambiaban a ratos sin que él pudiera controlarlos, nadie sabía cuál era o que hacía, ni siquiera él, así que su apodo siempre fue "Humano" y todo el pueblo lo conoce así.

Además de estar a salvo en el grupo Mc.Cormick descubrí que todo aquel entrenamiento de paradas o puñetazos a una tabla de madera para romperla, que tuve cuando era un poco más pequeña, no sirvió para nada y que debo ser elástica, fuerte, etc... Debo reforzar mi cuerpo para huir en caso necesario, flexible para esquivar los kagunes en caso de tener que luchar y la puntería en caso de tener que disparar algo como piedras o en algún caso expecional balas. Y la mayoría de veces, un tal "Glotón", ósea, Eric Cartman, era el único que me hacía tener que huir cuando iba sola, pero era complicado, porque realmente era veloz, eh?

Mayoritariamente iba con Kenny a todas partes, no solo me acompañaba a clases y no se separaba ni un segundo de mi, sino que las clases trataban básicamente de educación Ghoul, cosa que me servía mucho para saber los puntos débiles y más de una pelea amistosa en el patio me reforzaron en entrenamiento, incluso alguna que otra vez pude acabar con los más ágiles o fuertes del lugar, menos con Cartman, ese capullo siempre me acababa venciendo. Tratándome de la única humana en una ciudad de Ghouls sorprendía cuando algún humano que venía sobrevivía más dos minutos. Pero no duraban mucho más tiempo.

Luego había otro grupo que era mucho más grande que el nuestro, en él, entraban todas las chicas y el grupo era conocido como el de "las zorras" si, sin motivo aparente al parecer, simplemente porque todas las mujeres se pasan las noches enteras en el Pub de la ciudad. Yo me tengo la estricta norma de no salir en la noche, es peligroso para mi vida, porque no veo bien y no puedo huir con normalidad.

Se podría decir que sobrevivir dos años en un pueblo así te refuerza la mente y te hace sin sentimientos hacia los humanos inocentes y sabes perfectamente cuando uno va a sobrevivir o no. Pero no es todo, sino que de vez en cuando llegan varias hordas humanas en las que más del noventa por ciento muere, hasta que establecieron la norma de no acabar con todos los que se establecen en el pueblo más o menos, con solo una parte ya valía, que no huyeran, pero siempre había uno que se saltaba esa parte, Eric Cartman, el único que no cumplía el trato y que a pesar de que los Ghoul comieran una vez casi 3-5 meses, el lo hacía cada semana, por eso su nombre, era egoísta y no quería que le arrebatasen lo que él decía que era suyo.

Ignoremos al pesado del glotón ahora mismo solo necesito una cosa...

Dormir, por favor, solo pido una hora de sueño, pero los gritos y quejas de Kevin pidiendo que lo suelten para matarme me atormentaban durante la noche, y eso era cada pocos meses, dos o tres quizás, así que simplemente me tapé con la almohada los oídos y me giré, hasta que de golpe deje de oírle, supuse que se durmió de una vez, gracias a Jesús.

Así que me acomodé en el colchón y empecé a dormir hasta que sentir una puntada en el hombro. Abrí los ojos de golpe y allí él sonrió con las comisuras chorreando en rojo.

- Kenny!!!- chillé despertandolo un poco malhumorado, no por nada, pero eran las cuatro de la mañana.

- Que!? Jod!... er....- y al ver entendió lo que pasaba- me cago en la puta! Kevin quien coño te liberó!?

- no lo sé- dijo indiferente- pero ya se me calmó el quemazón- se separó de mi, bufé rodando los ojos, como si fuese a creerme eso y me llevé una mano al hombro dañado- vale, vale, fue ese tío... "El Glotón"...- contestó sin darle importancia y salió da la habitación limpiándose las comisuras con la manga.

Era la primera vez que me llegaba a morder, pero al parecer me hacía cogido cariño al escucharme a través de las paredes de la habitación de Kenny o de Karen y por eso no me había matado, él siempre estaba encerrado en su habitación por el peligro a que me matase, pero ahora que podía haber aprovechado tan solo dio un mordisco y se separó, quizás solo era el alivio, o algo...

Varias semanas después, al llegar a clases noté más ajetreo del normal, literalmente, había caras nuevas y chicos que por el olor (porque si, después de dos años de entrenamiento con Ghouls acabas mejorando el rendimiento de tu nariz y sabes identificar humanos y Ghouls) me di cuenta de que eran humanos, desde cuándo habían humanos nuevos en la ciudad y lo más importante, como es que no los han matado todavía, quizás esta noche ya no salgan vivos ni la mitad, Kenny me rodeó por los hombros y me acercó a él al verte tan ensimismada.

- ¿Que tanto piensas?- alzó una ceja confuso por mi rostro extrañado.

- ¿Soy la única o veo demasiadas caras nuevas en este lugar?

- carne fresca para los que si comen humanos, supongo- se encogió de hombros cuando entramos en clase y en el momento de llegada, me sentaba en mi sitio y él en el suyo, obviamente uno al lado del otro y atrás de nosotros Butters. Mi protección era lo más importante para ellos dos desde que me acogieron en la familia y verme el hombro curado calmó la mirada del rubio menor en un instante.

- bien clase, antes que nada... Gran parte de las ganas de moverse a nuestro tranquilo pueblo diurnero (de día) nos ha dejado nuevas caras, un total de seis hum... Digo compañeros nuevos.

¿Seis humanos nuevos? Que sarcástico, claro que todo el mundo era Ghoul, pero valía exagerarlo tanto? Bueno, ahora somos treinta en clase, en donde siete éramos humanos y solo una de ellos tenía la protección de los propios Ghoul para no morir, ósea, yo.

Ellos eran inocentes y seguramente esperan lo mismo que yo al principio, que nadie o sólo uno o dos sean Ghouls, espero que no les de miedo cuando se enteren de que tienen una casa en un lugar en donde todo el puto pueblo son Ghouls, bueno, no voy a ser a yo la que los mate, así que los advertiré.

A la hora del patio estos seis chicos trataron de encontrar con amistad con otros grupos y no con el nuestro, cosa que si preferían irse con ellos no se los iba a negar, pero si morían (seguro) habrían elegido ellos su camino. Así que simplemente me apoyé en el poste del patio, un poste de hierro que era para entrenarse los Ghouls, pero nadie quería usarlo jamás, era algo inútil, alguna vez habían hecho competición de conseguir llegar arriba (porque para eso era, para usar los Kagunes y escalar) como los humanos, ósea yo, y siempre ganaba yo sospechosamente, sin darle mucha importancia a que siendo humana era la única con la fuerza suficiente en los brazos como para poder subir, quizás ellos tengan las piernas listas y reforzadas para los saltos o los Kagunes listos para las batallas, pero para mi los brazos eran mi punto de vida. Se nos acercó el Glotón y me retó a una pelea amistosa con el Kagune pero si yo perdía podría morderme, cosa que negocié en un momento, el tenía Kokaku de una forma de mazo de piedra después de todo, eso era difícil de combatir y al final quedamos con un si yo perdía recibiría un mordisco en el brazo y si él perdía no podría volver a acercarse a mi para retarme en un año entero, literalmente.

Vamos que a ese glotón no le importaba que los nuevos viesen que era un Ghoul, sino que simplemente le daba igual, quería mostrar autoridad al parecer.

Crují nudillos, vaya, me jamás había peleado con tanto público, incluyendo los nuevos que retrocedieron al ver al castaño desenfundar su Kagune de mazo en el brazo derecho, tomé aire y cuando me aplacó me agaché y le di un entrebanco para tirarlo al suelo, aprovechando con un codazo para el golpe. Tenía miedo incluso, porque de todos los enfrentamientos que tuvimos él y yo, siempre había perdido.

- ¿Ella es Ghoul también?- preguntó uno de los nuevos a, creo que vi de reojo que se lo preguntó a Kyle.

- es la humana más ágil del pueblo, y nos ha vencido a todos menos a ese culón y por eso la ha retado, para aprovecharse de la apuesta y para comer.

Crují nudillos una vez más al estilo Kaneki y aprovechando un intento de placaje con el mazo salté encima y me aferré al borde para que lo alzase para solarme, salté antes de eso y cuando bajé le di una patada lateral que no pudo defender en el hombro, tumbandolo al suelo. Derrotado. Vaya, ahora sí me sentía genial conmigo misma.

- todo el colegio sección masculina derrotada- entrecrucé los brazos tras la cabeza reposandola entre ellos y las manos.- ya saber Eric, nada de retos en un año...♪♪- canturreé bajando los brazos y meterlos en los bolsillos de la chaqueta regresando en donde estaba antes.

Pero claro, Eric Cartman el tramposo nunca se quedaba quieto...

Así que aun habiendo sido derrotado se lanzó a morderme por la espalda, cosa que me hizo morderme el labio por el dolor y después le di un golpe con el codo y lo empujé liberándome.

- Silvia!- estalló Mc.Cormick sorprendido por mi expresión, no me mordieron desde hace bastante tiempo y el dolor se olvida cuando pasa tanto tiempo- gordo tramposo hijo de puta!- y le dio una patada tirandolo de espaldas al suelo, seguidamente me rodeó y lo amenazó con su Kagunan (ojo :v) activado.

Gran parte de los chicos de allí que tenían poca resistencia ante la sangre humana cercana se taparon la nariz con el cuello de la chaqueta o con la camiseta, sorprendiendo a gran aporte de los humanos, viéndose prácticamente rodeado, el rubio me rodeó por los hombros alejándome de ellos para no hacerles sufrir tanto y con un paño que siempre tenía por si el caso de que eso pasará me rodeó el hombro cortando el olor de la sangre un poco.

- Salgan del patio, algunos de los chicos empiezan a descontrolarse y marearse por el olor, Eric Cartman tendrá su castigo, pero ahora vayan a los baños para curarla- nos dijo el director PC entrando en el patio mientras que algunos profesores ayudaban a los que tenían dificultades para controlarse, al igual que los compañeros.

- estúpido tramposo...- le oí murmurar furioso.

- déjalo, ya sabes que él es así...

- pero eso no justifica que pueda morderte por el simple hecho de que eres humana.- dijo severo- además, acaba de meterse en un buen lío, si hubiese sido contra algún otro humano no hubiera importado tanto, pero contigo en especial si...

- porque estoy protegida por el grupo Mc.Cormick, si, ya lo has dicho muchas veces- reí con cariño para hacerle rodar los ojos y subirle un poco el animo, al menos ya no tenía su ojo activo como hace un rato- venga, quédate aquí y avisa a tus padres mientras me curo...- asintió.

Y él se apoyó al lado de la puerta del baño de las chicas tecleando en su teléfono en su lista de contactos y después se lo llevó a la oreja.

Yo no lo veía tan grave un mordisco en el hombro, pero si lo vemos desde su punto de vista, él obró mal y merece castigo, pero tampoco exageremos tanto, por dios...

- Igualmente si nos ponemos en el lugar neutro se trata de una crisis de ataque entre clanes de Ghouls, porque teóricamente yo pertenezco a los Mc.Cormick aunque no sea un Ghoul, igualmente tengo habilidades de Ghoul tanto como Carol me dijo las veces que me vio pelear como entrenamiento, y con cada pelea que tenía en el colegio me dicen que tengo muy buenas habilidades...- y ahí mi di cuenta de que estaba hablando con el espejo, así que suspiré y tras ver qué ya había cortado el riego de sangre limpié el paño y lo volví a poner, yo no me curaban tan rápido como un Ghoul pero algo así.

Salí y lo vi discutiendo a través del teléfono y después soltó un: "poco me importan esas pequeñeces, el Glotón mordió a Silvia aún haciendo perdido la apuesta". Con eso se cortaron los gritos y con un "bien" se acabó la conversación. Así que después me miró.

- cómo eliminaste el olor totalmente, no te noté salir- soltó sorprendido, me reí un poco.

- estarás de broma...

Negó con la cabeza y se rió un poco.

- venga enana, vamos clase.

- A quien le has dicho enana!?

- *glups* Run!- y tras eso hizo amago de salir corriendo, pero después frenó y me rodeó por los hombros para acompañarme a clases, como siempre hacía.

Cuando acabaron las clases el director nos llamó a nosotros dos y a Eric a la oficina del director, cosa que me hizo tragar saliva nerviosa, al llegar nos mandaron a los tres a sentar, en donde a mí me mantuvo todo lo lejos posible del Ghoul castaño. Y allí él director habló:

- señores, les reuní aquí por el accidente de esta mañana en la hora del patio. Es normal las peleas entre Ghouls en nuestra academia a esta hora, y claro, Silvia, la alumna humana se acostumbró a esta tradición sorprendiéndonos a todos por el simple motivo de que a derrotado a todos los Ghouls con los que se ha enfrentado, menos a Eric, quien, aprovechandose de esto trató de hacer una apuesta justa, ya que Silvia la aceptó, en la que si ganaba, la mordida, si perdía, no podría retarla hasta el año que viene y aquí es donde viene el motivo de la reunión... Perdió y nuestra joven humana recibió un mordisco aún así, violando así el tratado de no atacar a otro de otra tribu...

- es humana!- se levantó tirando la silla al suelo con un sonido escandaloso y molesto- no es un puto Ghoul, es una puta humana! Además ellos no se la comen! ¿¡Estamos hablando de que vamos a defender a un humano cuando siempre nos los hemos comido!?

- Silvia es de nuestro clan sea o no un Ghoul!- le gritó Kenny levantándose también de la silla, pero sin tirarla. Ambos activaron el Kagunan (ojos :v) enfureciendo cada vez más, seguro que eran capaces que liarse a golpes en la oficina del director.

- niños...- ambos se sentaron de nuevo amenazándose con la mirada, al menos desactivaron los ojos.- señores Mc.Cormick, ustedes son los responsables de decidir que castigo reciba Eric Cartman por sus acciones.

- queremos dejarle esa responsabilidad a Silvia, después de todo ella fue la que recibió el mordisco.

Todos me miraron y yo solo me quedé en silencio, ¿Porque me habían dejado esa responsabilidad a mi? Yo no quería decidir su destino, si bien me había mordido, ¿Pero a mí que me importaba eso? Era Eric Cartman el tramposo, pero no me importaba que me hubiese mordido, así que no lo veo necesario que lo castiguen.

- impugno el castigo- respondí finalmente.

- ¿¡QUE!?- gritaron al mismo tiempo Kenny y Cartman, uno por la injusticia de lo que acababa de oír y el otro por la sorpresa, no se esperaba eso en absoluto.

- lo que han oído... Me niego a decidir un castigo para Eric Cartman.

- pues así será...- dijo el Director PC.- te libraste está vez, Eric, pero la próxima no tendrás tanta suerte...

- como sea...

•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

Varios meses habían pasado después del incidente contra Eric Cartman y me di cuenta de que necesitaba más entrenamiento y claro, me negaba a tener alguna debilidad, así que yo misma lo empeoré con un saco de arena mayor (el cual ya rompí varias veces por la brutalidad de los golpes) y en cierta parte pelear contra Kenny, cosa que pocas veces hacía, no se, no le gustaba pelearse conmigo y en todo el tiempo que llevaba con él solo había visto su Kagune en una ocasión, cuando me salvaron, por alguna razón no mostraba mucho su Kagune, no como su hermana pequeña. Parecía reservado en ese aspecto y por más que lo intentase cuando peleábamos siempre podía conmigo de laanera más imprevista, inclusive en el patio, en alguna ocasión tuvo oportunidad pero siempre se negaba, era extraño... No entendía el porque de ese detelle de esconder su Kagune.

- con rabia no se pelea- me advirtió desde la espalda sorprendiendome considerablemente, me giré aún empuñando las manos con una mirada confusa. Se acercó un poco y palpó el saco en las partes que hacía golpeado por última vez- los golpes deben ser calmados y sinceros, ni se debe pelear o golpear cuando estás cargando en rabia- hizo una breve pausa pensativo- cuando golpeas un saco o te defiendes de un Kagune debes ser consciente de varias cosas, fuerza, dirección y reacción que pueda tener el objetivo, nunca lo olvides.

- no estaba cegada en rabia...- dije confundida.

- si no lo estuvieras, podrías parar esto...- y tras un segundo entero tan solo lo miraba con cara de: "el que?" Y antes de acabar esa expresión ya me había tirado al suelo con una patada baja, vale, eso no me lo esperaba- ves?- me extendió la mano para levantarme con un leve tirón.- siempre hay que estar concentrado en todo lo que pueda pasar, ignorar los insultos que puedan darte para cegarte en rabia, no debes actuar como quieren que actúes, nunca borres eso de tu cabeza...

- está bien.../?- dijo confundida.

Rió un poco y me rodeó por los hombros como siempre hace, después me guió hacia dentro con una conversación trivial, olvidando ese tema totalmente. Quizás el tuviera razón y la culpa de que los entrenamientos anti-Ghouls sean cada vez menos efectivos es porque pienso en la paliza que debí darle a Cartman cuando tuve oportunidad en vez de nergarme a ellos. Que estúpida. Por lo menos sabía que estaba a salvo con ellos.

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Y ahora ustedes eligen el destino de este one-short, el cual puede ser convertido en una historia corta o quedarse hasta aquí, tengan en cuenta de que el "Au" que corre por internet y el que yo he utilizado es diferente para clasificar está historia, por ejemplo, la imagen que corre por internet es esta:

Seguro la conocen. Pues bueno, en tal caso yo no he utilizado está base, yo lo único que hice fue simplemente hacer una historia con South parking y Tokyo Ghoul.

Además de que Kenny tenía un aspecto más como este:

Pero sin tapar la boca, no se, me gusta más así :3 lo de la boca es la máscara y en la historia no se utilizaron ya que todo el pueblo es Ghoul :v

XD

De todas maneras espero que os haya gustado y nos vemos en un próximo capítulo de historia o one-short.

Bye~

By Ecchisforlife

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