Como una más de la familia y no como algo especial, ni siquiera me daban más trato que a los otros, si me hacía una herida simplemente trataba de taparla y curarme sola para no hacer sufrir a Kevin y a los cercanos, si tenía hambre me conseguía yo misma las armas o el dinero para recorrer las rutas y carreteras de tiendas cercanas para conseguirme comida humana y si en algún caso excepcional se daba en el que intentaban matarme no me ponía a gritar como una desesperada pidiendo ayuda a Kenny. No. Nunca fui partidaria de eso, si Kenny me defiende es porque no quiere que resulte herida, en cambio, yo misma le pateaba el trasero al Ghoul que quería comerme hasta que se rindiera y se largarse para dejarme en paz de una puñetera vez, si, un mordisco o un araño siempre tenía tras un enfrentamiento así, si, era normal, pero claro, yo era humana y estaba enfrentándome a un Ghoul, tiene sentido... Sentido y lógica aplastante.

Dejando de lado ese caso, ahora soy mitad Ghoul, la regeneración y curación es más rápida que nunca y ahora con mi Kagune, ni un solo Ghoul debería atreverse a tratar de morderme, solo los Kakujan y ya digo yo que es un poco imposible, nunca hubo el caso en la ciudad a decir verdad. Si tratan de comerme se convertirían en Kakujan, pero un mordisco o dos si son aceptados, dado a que sigo siendo humana en una parte de mi...

- KENNY!-  joder, que pesaditos con el nombre, al final iban a gastarselo, ¿Quien lo llama ahora? Nos giramos para ver al hermano mayor del rubio, Kevin, vale, mejor me callo yo, y también mis pensamientos gilipollas.- ¿Estan bien? ¿Los hirieron?

- ya se curaron las heridas, pero si, estamos bien, ¿Y vosotros? ¿Donde estan los demás? ¿Y Karen?- fue el nombrado a gritos el que contestó.

- Ven! Estamos todos en un refugio de una cabaña del bosque, allí están curando a los heridos y tratado de ayudar a los hambrientos que se encuentran débiles hasta el punto de no poder caminar...- sin decir una sola palabra más empezó a caminar sin un rumbo determinado para nosotros, tan solo perdiéndose en el bosque.- chicos, últimamente la CCG nos están casi acosando, ya quisiera saber yo quien le dio la voz de alarma para atacarnos, llevamos tanto tiempo viviendo aquí que ya nos tendrían que dar el territorio a nosotros, no entiendo porque luchan para matarnos, ¿Acaso quieren repoblar este pueblo con humanos? ¡Que idiotas!

- lo peor es que a parte de romper familias, han dejado heridas incurables en los que siguen vivos, puede que algunos tengan la familia completa, ¿Pero ustedes vieron a los Marsh? Solo quedaba Randy, ¡Solo Randy! ¿¡Ustedes ven normal romper una familia hasta ese punto!?- dijo Kyle con un tono de voz roto, quebrado, se notaba que amaba a los Marsh como si fueran de su propia familia. Ike puso una mano en su hombro.

- No estaremos solos, ¿Vale hermanito? Nunca más...- tras eso sonreí enternecida, ahora mismo sentía una añoranza muy profunda hacia mis padres, los hechaba de menos, pero de eso ya habían pasado varios años, ya estaba grande para pensar en pequeñeces insignificantes para mi en este momento, debía plantar cara al destino, ahora yo no iba a morir y nadie iba a detenerme...

- Gracias Ike...- sonrió este.

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Llegamos caminando hacia una vieja casa de madera, era una choza vieja, con las maderas carcomidas por las termitas y gran parte de la madera podrida, dentro debían estar todos, picó como si fuese una contraseña y nos recibió Craig con el ceño entre fruncido, ¿Desde cuándo estaba él allí? Fue lo que vi en la expresión de Kevin por la sorpresa de verlo allí.

- ¿Se quedarán ahí como mirándome idiotas o pasarán antes de que la CCG nos vea?- si, era Craig.

Pasamos, allí Tweek estaba sentado en un rincón con una manta alrededor y la taza de café en sus manos y el azabache de gorro azul peruano se sentó a su lado a consolarlo para calmar las lágrimas de la posible pérdida de sus padres. Al echar la vista por la estancia se podía ver a los padres de Kenny ayudando a uno de los adultos, el cual estaba con grandes dolores y mareos por la falta de comida y el exceso de hambre.

- vamos, tío, puedes aguantar esto y todo lo que se te ponga por delante, hazlo por tus hijos- habló Stuart, y por como lo dijo debía ser un amigo.

- lo sé, lo sé...

- ¿¡Papá!?- exclamaron el pelirrojo rizado y el azabache medio rapado sorprendidos de oír esa voz.

- ¿Niños?- se le escuchó decir a este y lo próximo que vi fue a los dos chicos abrazando al padre como si les fuese la vida en ello.

Karen estaba sentada sobre una mesa de madera viendo la escena y sonriendo un poco, después miró a sus hermanos. Los padres de estos nos vieron después y nos vinieron a saludar con gran alegría de vernos de una pieza.

- menos mal que estamos todos bien- dijo la madre, Carol- lo malo de esto es que podemos encontrarnos a un buen amigo hoy y mañana este mismo ya no está... Recemos porque eso nunca llegue y siempre estemos... Unidos...

- no estaría aquí si Silvia no hubiese desarrollado su Kagune para salvarme...

- ¿¡Silvia y Kagune en la misma oración!? ¿¡Desde cuándo Silvia es ghoul!?- no estaba enfadado, de hecho estaba en shock y sorprendido, cierto, Craig y Tweek no lo sabían.

- es una larga historia, algún día se lo explicaremos a toda la clase, primero sobrevivid si queréis saberlo- dijo Kenny con un tono lleno de sarcasmo ganándose la señal Tucker- es un Bikaku de punta de escorpión de entre cinco y ocho metros... Pero eso no es todo, una velocidad anormalmente alta en comparación con el peso y la lentitud que tendría que darle ese Kagune- explicó mientras yo alzaba una ceja en shock por sus palabras.- ¿Alguna otra observación a parte?- miró alrededor.

- el brillo de la fuerza y poder en los escudos del Kagune se asimila al brillo de fuerza de Stuart, pero brilla todavía  más, como si tuviese más  fuerza guardada dentro- añadió el rubio sin Kagune, Butters.- la velocidad es típica del Kagune "Ukaku", no entiendo porque, pero así lo vi yo...

- velocidad de Ukaku y Kagune Bikaku...- murmuró Kevin llevándose una mano a la barbilla- no será una kimera, no?- preguntó confundido.

- ¿Kimera y cíclope? Eso ya sería demasiada suerte- habló ahora el padre.- por lo que tengo entendido puede que solo sea por qué fue la primera vez que desarrolló el Kagune y quizás por la rabia y la ira haya sido más rápido de lo normal, quizás no tenga nada que ver con ser una kimera...

Mi cara de "¿Que coño estáis hablando?" era épica en ese momento, seguro tenía la cara hecha un mapa, o a lo mejor la cara de póker, también es posible... Vale, cíclope se lo que es, es lo que soy de hecho, pero ¿Que es kimera? ¿Un Ghoul que tiene dos kagunes, no? No lo sé realmente, estoy hecha un lío en estos momentos.

- alguien se acerca... Y no huele a Ghoul precisamente...- escuché murmurar a Craig en bajo, olfateaba en silencio con inspiraciones largas y profundas, pero silenciosas. Tomé una yo, vaya, ahora detectaba el olor humano a distancia, antes casi no lo percibía al ser humana, solamente detectaba el olor del perfume, era diferente, además de las hormonas de los Ghouls eran más fuertes que los humanos, pero ahora sí lo distinguía, alto y claro de hecho.

- Kenny, quédate dentro, Kyle y Ike, con vuestro padre, Tweek y Craig, también dentro, papá y mamá, no quiero que salgais heridos, por favor, quedaos dentro también... Los demás, si quieren venir a una misión suicida, no soy nadie para negarlo- y sin más este salió por la ventana trasera desarrollando su Kagune de Koukaku azul, espadas dobles brillantes y profundas que parecía desgarrar a todo aquello que se moviese solo con verlo subió al tejado de la casa escondido- vale... Son veinte...- estos que giraron por alrededor y al verlo sobre de dejado y viejo tejado de la casa empezaron a disparar, este saltó esquivando todas las balas con varios giros de campana y espiral y empezó a acuchillar los cuerpos por las mitad y simplemente en heridas mortales- quince...- murmuró seguidamente.

No podía quedarme allí, debía ayudarlo, así que con disimulo y aprovechando el bug (igual que la otra vez) salí por la misma ventana que él y salté sobre la casa parecía divertirse esquivando las balas y las quinques y matando a todos, así que yo también quería un poco de diversión. Fruncí el ceño al ver que se habían fijado en mi también y saqué con fuerza el Kagune alzandolo varios metros por encima de mi cabeza, captando la atención de varios más de ellos. Así que con un segundo salto desde el tejado, está vez por mí y un latigazo acabé con varios con una herida de Kagune profunda e incurable por el veneno del mismo aguijón de escorpión.

- nueve!- gritó animado Kevin al ver a cuantos derrumbé- sigue así!

Y como si fuese un juego seguimos con la pelea de la que no paraban de venir más y más, pero cuántos más venían, más caían y más rápido parecía que yo iba, hasta el punto de notar una chispa en mi espalda, como algo que estuviese a punto de salir, algo extraño a mi parecer.

Esquivé una quinque lanzada con una voltereta bastante cool y salté varios metros para volver a aterrizar sobre el tejado de la casa. Aprovecharon la largaría del kagune para tirar de él y evitar eso y, tal y como a un escorpión se le hace para evitar que inyecte veneno, cortaron el aguijón con una quinque de cuchillo, ganándose un fuerte grito de dolor de mi parte y que después Kevin insertase en sus espadas alquiler de sujetó mi Kagune y al que lo cortó, quedándose sorprendido por el grito que lancé.

Miré la punta agachada desde el suelo, se retorcía como la cola arrancada de una lagartija, incontrolable. Miré a los que venía con gran rabia y de mi espalda salió esa chispa de nuevo, pero ahora con una fuerte presión. Mi ojo activó marcó las venas alrededor con más rabia que antes, como cuando estuvieron a punto de matar a Kenny y bajo la espectación y sorpresa de Kevin di un salto que ocultó la luna por unos segundos y después miles de lanzas afiladas salieron disparadas hacia todos ellos, acabando con todo el ejército de inmediato y los vivos (ayudando a los heridos) huyeron. Tan solo con un grito de rabia fue lo que se escuchó mientras mataba uno tras otro y al aterrizar en el suelo se podía ver un hermoso Kagune verde y morado que iba parpadeando y cambiando de color como un camaleón con el entorno, las agujas afiladas que disparé también se alternaban de color repetidamente y por un momento, sentí una gran fuerza de bienestar cuando el silencio había llenado el claro.

Las nuevas alas de Ukaku que tenía desaparecieron lentamente igual que el Kagune de Bikaku, perdiéndose como tinta entre las rendijas de madera por lo envío que estaba y seguidamente lo último que recuerdo antes de caer inconsciente es un abrazo de Kevin cómo agradecimiento y después, cargandome al estilo nupcial hacia la cabaña de nuevo. Después de eso, todo quedó totalmente negro.

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Al entrar en la cabaña la sorpresa y el silencio llenó la casa hasta el punto de que tan solo curaron las heridas sin decir nada, por una parte el shock de ver que yo era una kimera.

Por otra parte el shock de casi morir por salvar y proteger a los que amaba de todo corazón, a los que eran como mi familia.

Y por la obvia parte y el simple y PUTO HECHO DE QUE ERA UNA PUTA KIMERA Y UN CÍCLOPE.

¿Como se traga eso? No se podía así a la ligera, ciertamente todos ellos le daban vueltas y más vueltas al asunto, era demasiada casualidad y suerte que yo tuviese dos kagunes y encima fuese cíclope, quizás el entrenamiento anti-Ghouls que tenía antes tuvo algo que ver, entrenar para defender para todo los tipo de temáticas de Kagune a lo mejor... A lo mejor era por eso que ahora tenía dos kagunes.

- Cíclope y kimera...- todavía no lo pasaba, era difícil de asimilar en verdad.- puta suertuda...- murmuró Kevin desplomandose sobre una de las sillas vacías.

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Abrí los ojos de sorpresa y sobresalto, como si fuese una pesadilla o algo así, era incapaz de moverme, al intentarlo no pude, estaba en el mismo lugar de la otra vez, suelo de ajedrez y espacio negro infinito, está vez estaba sentada en una silla de metal, amarrada con cadenas de hierro apretadas en mis dos tobillos y las manos libres. Pero demasiado pesadas las como para moverlas, como si estuviesen dormidas. Miré alrededor nerviosa, Takatsuki sen debería estar...

- ¿Así que kimera y cíclope, eh?

(Si en algún momento ven alguna falta lamento las molestias, es que el auto-corrector me lo traduce todo automáticamente, es posible que algo que yo haya escrito lo traduzca como otra palabra, lamento las molestias una vez más).

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Dios! Mío!

Ahora sí!

Ahora sí!

Silvia es kimera y cíclope!!!

*Explota*

Perdón, es que me gusta mucho el Kagune Ukaku y el Bikaku y no me decidí así que le puse los dos :v

Por ciertos el Ukaku de Silvia está basado en el de "Ayato" de Tokyo Ghoul, solo en la forma de atacar y la forma del Kagune en sí. :3

Bueno en verdad varios kagunes de la historia están basados en la serie/ anime/ manga de Tokyo Ghoul...aquí dejo una lista :3

Silvia: Ukaku "Ayato" (forma)

Karen: Rinkaku "Hinami" (forma y color)

Carol: Koukaku "Shu Tsukiyama" (forma del Kagune)

Wendy: Ukaku "Touka" (forma)

Token: Rinkaku "Kaneki" (solo porque son cuatro como él pero el resto no se parece en nada :v)

Tricia/ Ruby: Koukaku "Urie" (forma)

Aunque algunos todavía no hayan aparecido aún así os los he dejado :v

Bueno, ahora que ya tienen aclarado todo eso, quiero decir una última cosa:

"Silvia no es más especial por ser kimera y cíclope, es solo que tiene dos kagunes, no es más fuerte que otros, es solo que les pilla por sorpresa y los vence con facilidad".

En fin, espero que os haya gustado y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Ecchisforlife

[2483 Palabras]

P.d.: cuando acabé el capítulo de historia tenía 2275 palabras, ahora que lo he corregido tiene un aproximado de 2470 palabras, empezó a creer que corregir va mejor que escribir xd