Hacía más de 5 años que Bill Cipher había vuelto a Gravity Falls, un pueblo muy raro e interesante con criaturas tan extrañas como él, un lugar agradable para su gusto y pensaba en este entonces que aquellos seres necesitaban urgentemente un rey, un líder, alguien que los gobernara y que fuera su amo y señor por toda la eternidad.
Dejó su hogar y partió hacía el pueblo con la idea de causar un poco de caos y volver a casa a ser un demonio más, cosa que no le gustaba ya que ser el centro de atención era lo suyo y podía recibir esa atención en el mundo humano.

De hecho, hace miles de años atrás había llegado por primera vez a ese pueblo, antes de que recibiera el nombre de Gravity Falls y en realidad llegó por accidente pero afortunado accidente, se topó con humanos que lo creyeron más un dios y lo alababan, cosa que le había gustado pero por más ofrendas y rezos que estos le proporcionaban la idea de quedarse ahí no era una opción, seguía siendo algo aburrido. Por lo que se fué y jamás volvió. Pasaron años y años hasta que Bill decidió regresar al pueblo, solo de visita pues através de los sueños conoció a un hombre llamado Stanford Pines con quién tuvo una gran amistad y vivía en Gravity Falls así que decidió volver para ver a su viejo amigo y al pueblo que lo había recibido tan bien años atrás, pero había algo que no estaba en sus planes de viaje: Amor.

                               * * *

Bill abría lentamente los ojos al oír pájaros cantando fuera de la ventana, ya había amanecido y el sol empezaba a colarse en la habitación. Se llevó sus manos a su rostro y talló con fuerza sus ojos para poder despertar bien. Se giró en la cama para poder encontrar a un chico castaño que seguía durmiendo profundamente.
Ese chico era Dipper Pines, el chico que conquistó su corazón y le dió felicidad a su vida entera.

Conoció a Dipper ese verano que decidió volver para visitar a Ford, y vaya que habían pasado años, su amigo tenía el pelo gris y con unas arrugas en su rostro. Hablaron de todo de lo que había pasado en sus vidas desde la última vez que se vieron y fué cuando su amigo le dijo que incluso tenía dos sobrinos que venían todos los veranos a visitarlo a él y a su hermano Stanley y que podría al fin conocerlos y cuando Bill conoció a Dipper supo que él era con quién quería compartir su vida.
Hubo un montón de cosas que salieron mal por parte de Bill tratando de demostrar interés en Dipper llegando al punto de llegar a asustarlo pero afortunadamente todo se acomodó y ahora la persona que ama está ahí, durmiendo a su lado y haciéndolo feliz.

Suave y cariñosamente acariciaba la mejilla de su amado, Bill se sentía tan afortunado de haber tenido la oportunidad de amar y que ese amor le fuera correspondido, no todos los demonios corrían con esa suerte. Se acercó suavemente y besó la nariz del castaño quien involuntariamente reaccionó arrugandola, al rubio eso siempre le había parecido adorable.

—Pareces un gatito... —sonrió Bill mientras susurraba. Se levantó de la cama para ponerse unos pantalones y unas pantuflas amarillas que su cuñada había hecho especialmente para él.

Tapó nuevamente a Dipper quien tenía las cobijas echas un lío, besó su frente y dejó la habitación. Dipper solía despertar mucho después que él y Bill se levantaba temprano para preparar el desayuno, había veces en las que él y Dipper lo hacían juntos pero esas veces se podían contar con los dedos ya que el castaño podía dormir horas.

Llevaban al menos 3 años de relación y 1 año viviendo juntos en Gravity Falls. Toda la familia de Dipper había aceptado a Bill, aunque algunos no sabían de su verdadera naturaleza le bastaba con el hecho de que lo recibieran tan cálidamente, los rezos y alabanzas no eran nada a comparación de la sensación más linda que pudo tener: sentirse parte de una familia. Estar con Dipper lo hacía sentirse bien, feliz, seguro y un montón de sensaciones que nunca pensó que experimentaría. Había oído rumores sobre demonios que se habían enamorado de humanos y que todos ellos habían terminado mal. Bill no sabía mucho del tema pero había leído que los demonios pueden amar a la misma persona toda la vida, lo cuál le parecía algo bastante cruel sobre todo si ese amor no era correspondido pero cuando Dipper llegó a su vida comprendió que su corazón no habría elegido a mejor humano del cual enamorarse.

Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando oyó un bostezo detrás de él. Se giró y se encontró con su novio con el cabello revuelto y con su cara de que recién se había despertado.

—Buenos días, pino. ¿Dormiste bien? —Bill se acercó a Dipper para darle un beso en la mejilla.

—Si... —Dipper bostezó—. Desperté y no te sentí al lado así que bajé a ver si querías ayuda con el desayuno.

—Tienes suerte, Pines. Aún no lo hago, ¿Quieres comer algo en especial?

—No lo sé, lo que sea está bien... Oye, ¿por qué siempre cocinas como una persona normal? Digo, eres un demonio podrías solo aparecer la comida y ya está.

Bill río, desde que estaba con Dipper no había usado sus poderes, no lo encontraba necesario.

—Es mejor hacerlo con mis propias manos, así no tengo que depender tanto de mis habilidades demoníacas.

—Lo dices como si fuera algo malo —Dipper se acercó a abrazar a Bill.

Bill amaba eso, Dipper tal vez lo hacía inconscientemente pero cuando le daba abrazos de la nada él se sentía realmente feliz. Bill lo abrazó de vuelta y dió un pequeño beso en la cabeza de Dipper.

—Hey. —Dipper lo miró —. Tengo una idea, ¿Por qué no vamos a desayunar a fuera? Hoy es un buen día y podemos pasear por el bosque después.

—Me parece bien, iré a bañarme entonces. —Dipper se separó de Bill—. ¿O quieres bañarte primero?

—Nos podemos bañar juntos, ya sabes para ahorrar agua.

—Conozco tus trucos Cipher, eso de bañarse juntos para ahorrar agua son puras mentiras. —comentó Dipper divertido—. Ya será en otra ocasión, por ahora iré primero.

Bill río, era agradable ver cómo Dipper lo conocía y él  a Dipper, tenían un vínculo especial, uno mágico y poderoso. 

—Bien, bien. Ve tú, pero a la próxima no escaparás, Pines. — Dipper subió escaleras arriba hacía la ducha—. Definitivamente es el amor de mi vida.

Bill subió a la habitación para sacar la ropa que él y el castaño se pondrían hoy, le gustaba que él y Dipper combinaran. Aunque a su novio la idea de combinar ropas era irrelevante y agarraba lo primero que se encontraba. Pero Bill era más meticuloso, quería que la gente supiera que Dipper Pines era su novio, todo el pueblo lo sabía de hecho, no había necesidad de palabras o acciones para que todos supieran lo que había en sus corazones, ellos se amaban.

—Listo. —dijo Bill luego de terminar de sacar su playera—. Todo se ve perfecto.

Y en ese momento la habitación entera cambió a un color gris, Bill inmediatamente se puso en estado de alerta pues sabía que eso solo pasaba cuando los demonios del sueño hacían presencia. Solo había 2 en todo el mundo de los demonios, él y su hermano. Un destello azulado se hizo presente para seguirle una figura de un hombre con la ropa y cabello de tonos diferentes de azul.

—Will... ¿Que estás haciendo aquí?

Will era el menor, un demonio extremadamente sensible, tímido y llorón. Bill siempre lo molestaba pero aún así él le tenía algo de cariño, después de todo Will era su única familia fuera de este mundo.

—Vine a entregarte una cosa... —murmuró el peli-azul—. Una carta.

—¿Una carta? —Bill lo miró confundido —. ¿Desde cuándo haces mandados así?

—Me la dieron a mi porque soy tu hermano...y bueno, eh, aquí... —rebuscó nervioso entre sus ropas—. Aquí está —Will le extendió una carta de sobre negro a su hermano, Bill la agarró dudoso. El papel era liso y el sello oficial del mundo de los demonios estaba ahí. Volteó la carta y tenía su nombre escrito con tinta dorada.

Bill no entendía nada, era la primera vez que le daban una carta así del mundo de los demonios, es decir nadie allá recibía correos.

—¿Que anuncias con está cosa? —Bill le mostraba la carta a su hermano—. ¿Quién te la dió?

—N-No sé. —Will tartamudeó—. Estaba en la puerta de la casa, con un mensaje pequeño que decía que tenía que entregartela lo más pronto posible... Hermano, creo que estás en un problema.

Sin decir más, Will desapareció y la habitación volvió a como estaba antes, Bill se sentó en la cama y abrió el sobre. Dentro había una carta cuidadosamente doblada, con un papel dorado y brillante, sacó la hoja y la desdobló encontrándose así aquel mensaje que cambiaría su vida para siempre.

"Bill Cipher, demonio del sueño número 618000.

Hemos estado observando sus movimientos desde que decidió volver al mundo humano y hemos visto con horror cómo ha roto una de las reglas más sagradas de nuestro mundo: Tener un vínculo con un humano.
Sabrás que eso está prohibido y el castigo a esta falta será severo.

Lo esperamos para darle el veredicto final de que es lo que haremos con usted, y si se rehúsa a venir él humano que vive con usted saldrá herido.

Hasta entonces.

Atte: La Élite."

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Aclaraciones:

🌸 En el mundo de los demonios no hay un Rey ni nadie que los dirija. Pero si que hay una "Élite" que se encarga de mantener el orden en lo más posible.

🌸 Will y Bill no tienen padres, esto es porque según se dice que Bill asesinó a su familia.

🌸 Will no es un personaje en el canon de Gravity Falls, es un personaje de un AU llamado Reverse Falls creado por fans.

🌸 Pensaba hacer que cada capítulo fuera un día distinto para que fueran exactamente 40 capítulos,pero también era combinar algunos días en un solo capítulo para no hacerlo tan tedioso, pero como ustedes vean 👀

🌸 Los capítulos van a ser largos por lo mismo que no quiero llenar de mas capitulos con pocas palabras, normalmente los suelo cortar cuando se queda en algo más interesante.