Era 31 de diciembre por la noche,toda la orden dorada de Athena estaba reunida para festejar el año nuevo menos 2 que se habian escapado a la casa de cancer para pasar la velada a su manera.
En la casa de cancer estaban su dueño y el caballero de piscis recostados en el suelo jugando a las cartas cuando derrepente a Manigoldo se le ocurrio una idea.

-Olle alba-chan tengo una idea.

-¿Qué idea?

-Si yo gano a la media noche haremos un brindis especial a mi manera.

-¿Y qué manera seria esa?

-Ya te lo dire.

El juego continuo,Albafica perdio y Manigoldo estaba saboreando su victoria pensando en lo que haria por la noche.

-Y bien ¿qué quieres hacer?

-Quiero que brindemos pero tú con mi copa y yo con la tuya y despues tendras que aceptar que te sostenga la copa mientras bebes y tú tendras que hacer lo mismo. Y despues del brindis tienes que dejar que te bese.

-¡¿¡Qué estas loco!?! No te dejare besarme.

-No puedes negarte. Tú perdiste.

-Pero... ¡¡¡Maldición!!!

Llego la media noche y Albafica se estaba haciendo el tonto para no cumplir la apuesta pero el picaro peliazul no se la dejaria pasar.

-Alba-chan vamos tienes una apuesta que cumplir.

El caballero de piscis tube que aceptar que no tenia escapatoria e hizo el brindis que queria su amigo y luego llego el momento del beso. Albafica creyo que no toleraria ese contacto con el de cancer pero lejos de disgustarle se volvio una sensación agradable e involuntariamente le tiro los brazos al cuello para seguir el beso.

-Jejeje crei que no querias que te besara.

-*Se sonroja*

-Jajaja,alba-chan.

-Callate.

-Albafica yo te amo.

-*Abre los ojos como platos*

-*Se acerca para volver a besarlo*

-Yo tambien te amo.

-Feliz año nuevo.

-Feliz año nuevo.