- Ah, y, recomiendo no beber o comer nada por algunas horas, podría infectarse en caso de que hubiera alguna herida que no haya llegado a sangrar.

Yxo lo miraba fijamente y le sonrió, casi como un niño pequeño emocionado el día de navidad... No pudo evitar recordar su expresión en el espejo mientras miraba como le quedaba el piercing de la ceja nada más se lo hizo, como su padre Aaron lo acompañaba y los dos exhibían sus piercings ante el espejo, los dos riéndose por las muecas que hacían ante él. Un bonito recuerdo que jamás perdería. Recordaba perfectamente la reacción de su madre cuando lo vió con las perforaciones, y como Jacob riñó por mala influencia a Aaron, seguido de Keera. Aaron, relajado, les dijo que estuvieran tranquilos, que mirasen lo feliz que era Yael con las perforaciones.

- Gracias, Yael...- le agradeció levantándose de la cama.

- No es nada...- negó encogiéndose de hombros para restarle importancia.

...

Después de varios días, es decir, cuando fue lunes por la mañana, volvió a ver a Yxo al subir al carruaje, se sentó relajado al cerrar la puerta y despedirse con un ademán rápido a través de la ventana dirigido a sus padres que cerraban lentamente la puerta, antes de ponerse en marcha hacia la sede.

- Esta semana iremos al banco para una inspección. Mañana concretamente, hoy mis padres tienen reuniones y cuando se acerque la noche, una celebración con las diferentes casas del país, celebraremos la reunión en nuestra sede, somos los anfitriones esta vez.- Yael-Ajax se alarmó al escuchar que el resto de casas de vampiras vendrían.- No te pongas nervioso, será como una celebración normal y corriente.- sonrió al notar como su corazón vio un pequeño vuelco y progresivamente se aceleró, al decírselo, notó y escuchó el intento de controlar los nervios sin decir nada.- La única excepción es que hay élites más poderosas que de costumbre, y no habrá tanta gente, solo ocuparemos una sala, no como habitualmente, que ocupamos dos o tres y están abarrotadas de chismosas y risas arrogantes.

- Precisamente, élites más poderosas... Eso es lo que me pone nervioso.

- No tiene porqué, son vampiros de mi clase, del nivel de mis padres, son legítimos herederos y dueños de compañías como la nuestra. Generalmente las celebraciones de este tipo son meras alianzas estratégicas.

- ¿Algo así como matrimonios arreglados?

- Podría decirse.- se encogió de hombros y asintió con la cabeza.- No sé qué decisiones tomarán mis padres respecto a nosotros, mis padres no fueron una alianza política, de hecho, Troy Troynnie se interesó en Fonxy Funrose a pesar de ser de mayor rango y fue una verdadera decepción para la familia, no solo por tener los ojos Hazel, sino por centrarse en una figura de más alto poder e inalcanzable para él...

- ¿What?- expresó con sorpresa, había pasado mucho tiempo allí y jamás se había enterado del nombre del otro padre de ambos hermanos, escuchar el nombre fue como una explosión que le abría los ojos como si nunca los hubiera abierto.

Desde que estaba en la sede había tenido acceso a millares de libros en la biblioteca y cuando no tenía nada que hacer o Yxo le decía que se quedara en su cuarto; él iba a la biblioteca a por entretenimiento para su tiempo libre. Había leído muchos libros, lo cual implicaba tener un amplio conocimiento sobre los rangos de las élites. Más del que ya tenía al trabajar en el banco.

Las élites y los vampiros se dividían en tres tipos diferentes de vampiros... Vampiros de ojos rojos, nacidos bajo la luz de la luna llena en días de sangre o alimentación, noches de luna roja... Los vampiros de ojos verdes, los que nacían durante un eclipse, aquellos que auguraban una vida propicia, notable, fuerte, pero no lo suficientemente propicia para ser élites extremadamente poderosas... Finalmente, los vampiros de ojos azules, los cuales Troy Toynnie pertenecía, vampiros que nacieron bajo la luz de una luna llena virgen y pura, blanca, que brillaba y reflejaba el cielo hasta teñir la luna de azul por el reflejo del suelo y el mar. Los vampiros de ojos azules eran los más poderosos, seleccionados, selectivos, aquellos que tenían más economía, suerte y riqueza, aquellos que todos deseaban tener alianzas, casarse o incluso tener descendencia con ellos a través de la luna. A raíz de aquellas tres lunas, nacían vampiros cuyos ojos podían combinarse por la genética, los problemas de la luna, o agentes externos...

Troy Tonnie nació con los ojos Hazel, una mezcla de luna roja y un eclipse: un eclipse de luna roja, lo cual destrozó la herencia de ojos azules, perdiendo parte de prestigio... Pero aún así demostrando que era poderoso, fuerte y merecía el título que heredó de sus padres. Por otro lado, su mano derecha, ahora sabía que se llamaba Fonxy Funrose, sus ojos eran intimidantes, amarillos verdosos: un eclipse fallido. No era un mal augurio, o un rechazo, era nacer al finalizar el eclipse, algo común, nacer a través de la luna no era simplemente entregarse y bañarse por la luz de la luna... A veces tomaba tiempo, Janneth también tenía los ojos verdosos y amarillos...

- Fonxy Funrose...- repitió su nombre y sonrió por su estupefacción.- Cierto, es la primera vez que escuchas su nombre...

- Sí... Me tomó por sorpresa... ¿Me permites preguntar y satisfacer mi curiosidad al cuestionar cómo es posible que tu padre, siendo más poderoso que Troy Toynnie se redujo a la posición de mano derecha? No quiero decir que sea malo, solo tengo curiosidad, tengo entendido que no os gusta rebajaros, por eso me extraña... Me siento peor cada vez que digo algo...

Escuchó la risa que fue acompañada por carcajadas más sonoras que intentó detener al tapar su boca, con una mano, pero aún haciéndolo, no pudo detenerlas; Yael-Ajax se lo quedó mirando y una sonrisa inconsciente creció en sus labios al ver que no se lo había tomado a malas.

También porque su risa, aunque era estridente, era bonita.

- Amor...- respondió después de reírse tanto, se había acomodado pasando una pierna para cruzarse de piernas.- Mi padre aceptó el puesto por amor. El amor que sentía. Yo haría lo mismo sin dudarlo, aunque sea criticado y abandonado por mi familia... Ambos llegaron a formar parte de las élites más sofisticadas y alzaron su poder para llegar a estar al nivel de las grandes casas a través de su buena gestión del banco de sangre.

- ¿El poder del amor es tan poderoso?

- No es solo el poder del amor... Simplemente es una buena gestión, buena convivencia y una alianza fuerte. Sinceramente, siento envidia por como mis padres vivieron su bonita historia.- se apoyó y acomodó en el marco de la ventana con el codo, mirando al exterior con cierta paz y tranquilidad.

- Seguro que tendrás una bonita historia. Por como eres... Quien sea que se enamore de ti y decida pasar toda su vida a tu lado, habrá tenido la mejor suerte del mundo.- captó su atención, Yxo lo miró de reojo, notó como sus mejillas tenían un tono rojizo, se notaba mucho por el contraste de su pálida piel.

- No hace falta que me pintes el lienzo con tantos tonos rosados, sé que mi romance será arreglado o influenciado; las élites no tienen mucho margen de movimiento, solo podemos relacionarnos con gente de nuestro mismo grado, al ser el legítimo heredero del banco de sangre, solo puedo relacionarme con vampiros y vampiresas de mi mismo nivel y solo me quedan cuatro opciones, porque somos siete casas y dos ya están unidas, además de que el legítimo heredero no es mi tipo.

- Si tus padres rompieron los esquemas que habían impuesto al mezclar dos clases sociales, tú también tienes esa posibilidad.

- Yael... No estoy enamorado, mis padres sí lo estaban... Nunca he encontrado a un vampiro que calce mis expectativas, en cambio, Camil sí parece haber encontrado lo que busca, aunque no tenga el derecho de poder tenerlo al ser simplemente un híbrido y no pueda aspirar a nada más que recibir lo que sea que sienta cuando lo abrazo...

- ¿También tenéis expectativas amorosas, los vampiros?- comentó con sarcasmo molestando un poco al pelirrojo. Se ganó una mala mirada, pero no una fulminante o amenazante, una de complejidad, aquella misma mirada que Camil se ganó la primera vez que le vio.- Increíble...- comentó rodando los ojos sin ánimos de expresar esa palabra, más bien era todo sarcasmo.

- Estás ganando mucha confianza.

- Lo sé... Me disculpo por ello si me excedí.

Yxo sonrió.

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Será una sorpresa para muchos si confieso que Camil no está enamorado de un vampiro, pero, como sería spoiler, no puedo avanzar por ese camino haciendo la explicación. Por ahora, solo puedo decir que, puede que parezca contradictorio, pero lo único que Camil puede aspirar es por el amor de Yxo, y por ello en los primeros capítulos se les mostraba tan cariñosos.

Habiendo pasado un año desde que Yael está allí, se ha dado cuenta de que Camil solo puede tener lo que sea que se le permita tener con Yxo, o, con los invitados, y la verdad, me hubiera gustado mucho explorar más los detalles de Camil con su romance, pero, desgraciadamente, los protagonistas con Yxo y Yael, y no hay tiempo para dedicárselo a Camil, aunque me hubiera gustado, la verdad... (siempre se le puede dedicar un extra a ese detalle, siempre que ustedes estén de acuerdo y tengan curiosidad al acabar la historia)

Aquí las opiniones ----------->

Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Silvia Line

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