--Baja los pies de la mesa.- gruño la mujer mientras se quitaba el delantal y se dirigía a la puerta, hice lo que dije y seguí mirando el televisor

--Bienvenidos, pasen.- escuche decir a mi mama para recibir a sus invitados

Acto seguido sentí unos pasos dentro de la casa

--Pues ya conocen a Minho.- me levante y salude tratando de fingir educación.

--Aún recuerdo cuando era niño, ahora está todo un hombre.- dijo la mamá de Taemin, mientras que él se encontraba observando los objetos del lugar-. Él es Taemin.- añadió-.De seguro ya se conocen ya que van en el mismo instituto, ¿No es así Taemin?

--¿Ah? ah, si, si, si.-Respondí un poco fuera de sí, aun se encontraba observando los adornos de mi casa.

~ Pov Taemin ~

Sep, ya estábamos en la casa de Minho, estaba nervioso, solo su presencia me ponía así, por suerte pude controlarme y fingir tranquilidad, al llegar al lugar me fije en los adornos que se hallaban en aquella casa, eran demasiados, eran extraños pero hermosos, así, evitaba chocar su mirada.

--Bien, pasemos a cenar.- dijo la madre de Minho con un sonrisa cálida te le llenaba por completo

Nos sentamos a la mesa, y para mi mala suerte, quede frente a Minho, solo pasaron unos minutos y la Omma de Minho hablo.

--Bueno creo que ya es hora de que hablemos con ustedes.-eso sonó espeluznante -Como sabrán la madre de Tae y yo trabajamos en el mismo lugar

Minho y yo solo asentimos al relato de la mujer
--Dentro de 2 días...Nosotras tenemos que viajar a EE.UU

--¿¡¿Qué?!?.- dijimos al unísono con Minho

--¿Por qué no me lo dijiste antes?.- interrogue a mi omma

--Hijo, ahora no.- me dedico una mirada pidiendo comprensión

--El punto es que...Como aun no cumple la mayoría de edad...tienen que vivir juntos

--¿¡Qué?!? .- nuevamente el monosílabo se repetía

--Pero mamá, yo se cuidarme solo.- Replico Minho un tanto enojado

--¿Sabes si quiera como cocinar un plato de arroz?.- le respondió con una ceja alzada, sabía que había dado en la blanco

--Pu-u-es, es fácil, puedo aprender, pe-pero yo ni siquiera conozco bien a Taemin.- dijo sin importarlo mi presencia. ..Eso...¿dolió?

--Bueno que mejor oportunidad que esta.- la mujer trataba a toda costa convencer a su hijo

--¿Y por cuanto tiempo será?.- dije sin importarme la mirada fulminante que me dedicaba Minho

--10 meses.-dijo mi omma

--¿10 meses?.- repetí-.Pero...Llegarían en....-calcule los meses-. Febrero del próximo año

--Así es.- asintió.

--Omma tú me conoces, sabes perfectamente que soy capaz de cuidarme solo por ese tiempo...

--Lo se.-fui interrumpido-. Pero me da miedo dejarte solo, apenas tienes 16 años

--¿Qué? ¿No tienes 18?, ¿Entonces que haces en mi clase?.- me recrimino Minho

--Hijo, tu tampoco los tienes, aun te falta para cumplirlo.-regaño a madre de Minho a su hijo.

--Por notas se le adelanto una clase.- explico mi mama

--Bueno no nos vayamos por las ramas, hijo esto es como un favor pero a la vez una obligación.-

Puff lógica simple-. Así que lo tomas por las buenas o por las malas

--Omma si Minho no quiere...no hay ningún problema de mi parte.- le dije a mama

--No, no, no, no Taemin.- respondió la madre de Minho-. Minho ya sabes, por la buenas o por las malas.- Añadió la mujer esperando una respuesta por parte del moreno

~Pov Minho~

--Está bien, acepto.-dije, después de todo mi mama tenía razón, no sabía ni siquiera cocinar un plato de arroz -.-, necesitaba a alguien que me ayudara a sobrevivir, y no me alimentaria de

comida chatarra, por muy tentador que sonara, tengo que mantenerme en forma...además, para que negarlo, me causaba cierta curiosidad convivir con aquel pequeño.

--Bien.- dijo mi mama con un rostro sonriente, a veces ella era muy bipolar-. Esta dicho, en 2 días te iras a la casa de Taemin.-dicho esto se levantó para servir el postre.

2 días después....

Las dos mujeres corrían de un lado a otro, con sus cosas respectivas y las maletas ya en el auto que las llevaría al Aeropuerto, la hora de la despedida había llegado

--Ya sabes Minho, compórtate como un hombre y por favor no hagas ninguna estupidez.- rogo

--Tsk!, ¿Tan poco confías en tu único hijo?.- ya sabía la respuesta

--Sin comentarios, cuida a Tae, por lo menos has eso ¿Puedes?.- me suplico con la mirada

--Mamá.-replique-. Él no es nada mío, no tengo por qué hacerlo

--Minho te lo pido por favor,¿Quieres?

--Está bien.-suspire-.

--Gracias.- sonrió, se giró para entrar al auto que la esperaba pero algo la detuve-. Ah! casi se me olvida.- se volteó para verme-. Tus llaves

--¿Qué? .- ....

--Dame tus llave Minho.- estiro las mano en señal de que se las entregase

--¿Para qué? .-saque las llaves de mi bolsillo sin entender aun el por qué me las pedía y se las pase.

--Por seguridad.- las guardo en su cartera-. Contigo nunca se sabe.

--Tsk!.- eso dolió, pero en el fondo tenía razón, ella si me conoce

--Aun así, sabes que te quiero hijo.-me abrazo

--Yo igual mamá.- que le iba a hacer, después de todo es la mujer que me dio la vida, correspondí a su abrazo, tratando de guardarme su última imagen, ya que no la vería dentro de

mucho tiempo-. Llama ¿Si?.-le roge
--Claro.- sonrió y entro al auto, mire a mi lado y ahí estaba el pequeño junto a su mamá.

--Te me cuidas ¿Si?, llamare seguido, no descuides tus notas y los papeles de admisión para fin de año están en tu pieza, asele caso a Minho, ahora él está a cargo de ti .-le acaricio el cabello a

su hijo.

--Mamá.- se quejó el pequeño mientras se acomodaba el pelo.

--¿Cumplirás con lo que te dije?

--si, lo tendré en mente

--Adiós mi pequeño.- abrazo a su hijo un poco fuerte...por un momento creí que Tae se estaba asfixiando.

--Te quiero mamá- Dijo el cuándo su madre lo soltó

--Yo también mi bebe...cuídate.-le beso en la frente y subió al auto junto con mi mama.

Poco a poco el auto se alejó del lugar con destino al Aeropuerto, desde nuestros lugares las despedimos agitando las manos. Finalmente el auto se había perdido de nuestra vista. Entramos a la casa y si se pudiera describir el ambiente en una sola palabra seria...incomodo. La casa era

enorme, mucho más de lo que se veía por fuera, era bonita y espaciosa, muy a mi estilo, era... agradable, pero el hecho de que nunca había hablado con el pequeño...lo hacía...extraño

--Am...-me gire a verlo-. Ahí está el baño.-lo señalo-. Arriba esta tu pieza, al lado de la mía, esa.-señalo una puerta blanca con ventana en la parte superior-. Es la salida al patio trasero,

cualquier cosa me avisas y...siéntete como en tu casa.

--Gracias.- dije después de su... ¿bienvenida?-. Tú... ¿Sabes cocinar?.- me atreví a preguntar, era una de las cosas que más me preocupaba.

--Si.-respondió un tanto sonriente-. No te preocupes, yo me encargo de eso.

--Está bien.- dije y me senté a ver televisión, desde hoy, comenzaba a vivir con mi pequeño vecino.~
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