**Ojo, sigue siendo Karaichi :'v

Karamatsu nunca había sido la clase de persona que diría las cosas que le desagradan de alguien a la cara, para nada. Pero realmente había ocasiones en que se quedaba molesto con ciertas personas y prefería evitarlas durante un tiempo.

Si, eso era lo que pasaba. Ese día estaba particularmente molesto con Ichimatsu pues el menor había tirado a la basura la colección de revistas de Karamatsu, y aunque el mayor nunca se enojaba por las constantes molestias que le causaba el otro, esta vez se sintió un poco harto.

En fin, le mantenía "la ley del hielo" e Ichimatsu no toleraba eso, no cuando hace unos meses habían acordado ser pareja y ahora el mayor le interesaba tanto. Tenía que hacer algo pero su orgullo no lo dejaba disculparse con palabras, lo jura, lo había intentado.

Bueno, se encontraba en ese momento llevando a cabo su plan. Le pidió a Osomatsu que le ofrecería a Karamatsu una bebida con afrodisíaco y que se llevará a sus hermanos por un rato a alguna parte, a lo que el mayor de todos accedió (conocía la relación de Karamatsu e Ichimatsu por lo que no le vio nada de raro). Karamatsu le agradeció por la bebida, y la tomo como si fuera agua, suspirando después.

Todo estaba normal, Ichimatsu estaba en su rincón habitual, y Karamatsu lo ignoraba mientras se miraba al espejo. Osomatsu aviso que iba a salir y con él se fueron los demás... Nada parecía sospechoso.

Hasta que 15 minutos después Karamatsu estaba sumamente caliente y excitado. Mantenía sus piernas cruzadas para esconder esa incomoda erección de Ichimatsu, pero el menor solo sonreía, ya conocía ese dato, pensó.

-Karamatsu -se levanta de donde estaba sentado y se sienta en el sofá z viendo a Karamatsu a los ojos y poniendo su mano sobre la del mayor.

El mayor guarda silencio y voltea a otra parte, pero no se espera que el menor empiece a tocar su pierna, y con su dedo haciendo un camino hasta su entrepierna.

-¿Vas a ignorarme? -pregunta con tono retador, y el otro guarda silencio, aún sin mirarlo, pero con un claro sonrojo en sus mejillas.

Ichimatsu se avienta sobre Karamatsu, le arrebata la revista y la tira por alguna parte. Estaba acorralándolo contra el sillón. Mientras rozaba un poco su pierna contra la erección del mayor.

-¿Podrías disculparme? -pregunta con un tono suave y baja los pantalones de Karamatsu, junto con su ropa interior. Toma el pene ajeno con sus dedos y lo mira atentamente.

-Kitty -solamente alcanza a decir eso, pues el menor le saca un gemido al meterse el pene en su boca.

Después de estar chupando y dando algunas mordidas, se separa un poco y lo mira. Le sonríe mostrándole los dientes, toca el abdomen del mayor y sintiendo como estaba marcado. Le saca de alguna manera la camisa y Karamatsu se deja. Le gusta esa iniciativa.

-¿Y bien? -pregunta apretando de la base el pene. Karamatsu solamente le sonríe, estaba muy excitado y desesperado por el afrodisíaco que le había sentado muy bien.

-No te preocupes Kitty, solo prosigue -indica, y mueve sus caderas un poco. Estaba realmente muy excitado.

Con una corbata que había ahí tirada le amarra las manos a Karamatsu, y se sube en sus piernas. Saca de su pantalón su miembro y lo junta con el de Karamatsu.

Empieza a mover sus caderas suavemente, y a masturbar ambos penes con su mano, era realmente bueno todo. Soltaba gemidos agudos que no podía contener mientras observaba a Karamatsu gruñir.

Empezó a besar el cuello de Karamatsu, y algo insatisfecho se levantó un poco para introducir el miembro en su propio interior, realmente amaba la sensación de tener a Karamatsu en su entrada.

El resto de la tarde estuvieron haciendo toda clase de cosas no aptas para niños...