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Capítulo Cuatro


Hace unos meses.

Hyunjin se encontraba nervioso, claro que si, pues estaba en la sala de esperas del hospital.

—Soy un imbécil.—paso una de sus manos por su cabello desesperado.

¿Que había sucedió?.

Fácil, estaba teniendo sexo con Jisung y fue demasiado brusco, pues Han no podía caminar, le dolia demasiado, tanto que hasta sangro un poco, Hyunjin al ver aquello no lo dudo y salió directo al hospital con su casi novio en brazos.

Ningún doctor salía a atendarlo, estaba demasiado nervioso, ¿Cuanto se tardaban de verdad?.

Cansado de esperar Hwang se levanto para preguntar por Jisung, pero el doctor que lo estaba atendiendo fue más rápido.

—Familiares de Han Jisung.—llamó.

—Yo—y rápidamente Hyunjin se acerco al doctor.

—¿Usted que es del paciente?.

—Soy su novio—respondió con orgullo.

—¿Así que tu eres quien lo dejo así?—el doctor soltó una pequeña risita mientras que Hwang se sonrojaba—El ésta bien, no fue nada grave, lo único es que no pueden tener sexo por un par de semanas y si lo tendrán no sean bruscos por favor, aquí hay una crema la cual se le aplicará todas las noches más unos medicamentos, esto le va a livianar el dolor.—y con aquellas palabras el doctor extendio una hoja donde estaba anotado todo.

—No se preocupe, yo mismo me encargaré de que el tome todos los medicamentos y de que use la crema—asintió Hwang mientras tomaba en sus manos aquel papel—¿Puedo pasar a verlo?.

—Claro, habitación 301.

****

—Perdóname Jisung—se disculpó Hwang mientras tomaba asiento al lado de la camilla de Han.

—¿Por qué te disculpas?—Jisung estaba confundido.

—Fui muy brusco contigo al grado de terminar aquín en el hospital, discúlpame.

Jisung solamente se rió—¿Cuando me queje? Si, me dolio lo admito, pero me encantó, te pedí que me partieras en dos y solo cumpliste mi fantasía, no te sientas mal Hyun, me ha encantado todo—sonrió Han mientras miraba a Hyunjin.

—Eres todo un caso, pequeño masoquista—Hwang se acerco mientras soltaba una pequeña risa y besaba castamente los labios de Jisung.

Han se sonrojo mientras tomaba aire, iba a soltar todo.

—Yo, tengo algo que decir.—Rompió Jisung el silencio que se había formado luego de aquel pequeño beso.

—Dime...

—E-esto...—Jisung comenzó a jugar con sus manos—se que lo nuestro es solo sexo y quedamos en eso el primer día que nos encontramos y todo eso. Todo fue maravilloso, grandes sesiones de sexo duro la mayoría de los días. Pero estas semanas que comenzamos a solo tener citas y dejamos el sexo de lado hasta hoy que no pudimos aguantar la abstinencia—río—he descubierto que me gustas mucho, mi corazón se acelera cada que estoy a tu lado, cuando me sonríes y me tratas bonito me siento tan afortunado de ser el único de tener este privilegio. Yo, me gustaría ser tu novio, tu, ¿Quieres ser mi novio?.

Hyunjin solo soltó una carcajada.

—Se suponía que yo era el que se tenia que declarar primero, soy el top.

—¿Entonces...

—Es un si, claro que quiero ser tu novio.—Y con aquellas palabras Hwang se acerco a Jisung para darle un beso, no era un beso lleno de lujuria, era uno sincero lleno de amor.

Pero así como todo, el beso se acabó y ambos simplemente se miraron con una pequeña sonrisa.

—Te amo—dijo Hyunjin.

—Yo también te amo Hyun...

Ambos se sonrieron un poco más y quedaron en silencio, un silencio demasiado cómodo, con su mirada se decían todo.

—¿Y si me follas?—soltó Jisung con una sonrisa de lado.

—Eres bueno acabando los momentos románticos, ¿Sabias eso?—Hyunjin soltó una risita—Y para tu mala suerte, el doctor prohibió el sexo,  así que no podremos tener sexo durante un largo largo tiempo.

Jisung se iba a quejar de aquello, pero entró una enfermera con una silla de ruedas.

—Lamento molestarlos pero y el joven Han puede irse, no se les olvide que tienen que pagar la factura—habló esta mientras acercaba la silla de ruedas a la camilla de Jisung.

****

Hyunjin se encontraba pagando la factura del hospital  mientras que Jisung se encontraba recibiendo unas indicaciones del doctor.

—¿Tienes alguna duda?—pregunto el doctor.

—No señor.

—Bueno, con todo esto espero te recuperes y no tengas  algún otro problema.—asintió el doctor.

—No se preocupe doctor, pronto nos volveremos a ver—Jisung comenzó a reír mientras miraba como Hwang se acercaba.

—Bueno entonces, gracias por todo doctor, adiós.—se despidió Hyunjin mientras comenzaba a caminar mientras llevaba a Jisung en la silla de ruedas.

****

—Y por eso fue que yo falte por dos semanas hace tiempo—termino de contar Jisung mientras veía como Felix y Ryujin se morían de risa.

—Y querías que te follara apesar de que estabas inválido, tremendo huevos tienes Sung—río Felix mientras tenía sus manos en su estómago.

—¿Por cuanto tiempo no follaron?—preguntó Ryujin.

—Ese mismo día le hice una mamada, a los dos días volvimos a follar y pues esa vez Hyunjin si fue suave porque yo todavía me encontraba sensible.

—Que masoquista eres.

—No lo voy a negar— respondió como si nada Jisung.

—Mira, allá viene tu novio—señaló Felix.

—Cierto, hoy voy a ir a conocer a sus padres—asintió Han mientras se levantaba para esperar a su novio con una gran sonrisa.

—Uy, vamos por eso campeón, esta claro que les vas a agradar, yo se que si.—ánimo Felix.

—Hola chicos—saludó Hwang a los amigos de su novio.

—Hola—respondieron al mismo tiempo.

—¿Vamos bebé?.—preguntó Hyunjin mientras pasaba su mano por la pequeña cintura de Jisung.

—Si, adiós, nos vemos pronto.—y con aquellas palabras la pareja se fue.

****

Hyunjin y Jisung se encontraba en el auto de Hwang rumbo a la Casa de este, habían decidido llevar un par de ropas ya que según Hyunjin sus padres podrían obligarlos a que se queden a dormir y pues quería estar preparado por si eso llegaba a pasar.

Había silencio en aquel auto ya que Hyunjin estaba concentrado mientras conducía y Jisung iba escuchando música mientras miraba por la ventana.

Pero una grandiosa idea pasó por la cabeza de Han que sonrió de lado y procedió a quitarse sus audífonos.

—Sabes algo Hyun—llamó Han.

—¿Que cosa?.

—Nunca hemos follado en el auto.

Hyunjin se atragantó con su propia saliva, ¿Había escuchado bien?.

—¿Q-que?.

—Si Hyun, siempre he tenido la fantasía de follar en el auto.—respondió inocentemente.

—Entonces deja encuentro un lugar para estacionar.—dijo mientras miraba por todos lados donde estacionar.

¿Quién era el para negar una follada a su novio?.

—No, no, quiero follar mientras conduces.

Y ahí Hyunjin sintió como su corazón se detenía.

—¡Jisung! ¡Nos podemos estrellar!.

—Eso es lo que hace excitante.

****

Luego de una no muy larga preparación Jisung se encontraba saltando sobre el pene de Hyunjin, Han se sostenía de los hombros de Hwang mientras aumentaba sus saltos.

Mientras que Hyunjin hacia lo posible por no cerrar los ojos y agarrar de la cintura de su novio y dar duras embestidas, pero debido a que se encontraba conduciendo no podía hacer tal cosa, hacia lo posible por contenerse y no terminar al lado de satanás.

—H-hyun...S-se siente tan bien—Jisung mordió su labio mientras varias gotas de sudor caían por su rostro y buscaba su punto con el pene de su novio.

Han coloco su rostro entre el cuello de Hyunjin mientras lo mordía, queriendo así dejar un chupon.

—S-sung...—gimió Hwang.

Jisung sonrió de lado mientras continuaba con su trabajo.

—E-estamls cerca...m-mis padres...—Hwang no podía formular bien sus palabras.

—No te preocupes, ya casi llego.

Y como si la vida de Han dependiera de ello comenzó a saltar un poco más brusco, necesitaba correrse pronto.

Dos, cuatro, seis, embestidas fueron suficientes para que Hyunjin se corrieran en el interior de Jisung y este se corriera en el pecho de ambos.

Han se recostó en el pecho de Hyunjin cansado mientras se regulaba su respiración.

—M-me gusto...

—Ahora dime, ¿Podrías caminar?—preguntó burlon Hwang.

Y el rostro de Jisung se puso pálido, ¡Mierda! No había pensando en eso, quería morirse en ese mismo momento.

Lo había cargado en grande, claro que si.

Pero eso no le importaba, había disfrutado de un gran sexo, ya vería que se inventaba con sus suegros.

  Durante ellos se dieran cuenta que amaba demasiado a su hijo, lo demás no importaba.

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