Aquello le estrujó el corazón y le creó un nudo en la garganta por la impotencia de no poder ir a por el padre y darle cinco bofetadas hasta quedarse a gusto.

- Isa...- musitó con un hilo de voz, la abrazó con fuerza.

Al cerrar la puerta, todavía tenía los ojos desorbitados. Ni siquiera recordaba cómo se respiraba, tuvo que pararse a pensar que tenía que respirar para seguir viviendo, así fue cómo se concentró para tomar una profunda inspiración y decirle que podía quitárselo, que le revolvía las tripas ver como el padre ejercía la influencia sobre ella y no se actualizaba de una vez.

- Lo iba a hacer de todas maneras.- bromeó ella sonriendo desganada quitándose el velo y guardándolo en una pequeña bolsa que llevaba como si fuera un bolso pequeño.

- Perdón por no contestar ayer, estaba trabajando, ¿Qué querías decirme?

- Me está buscando pretendiente ya sabes tú quien.- arrugó el labio con desagrado, ambos lo hicieron, ninguno de los dos estaba conforme con lo que estaba pasando y con lo que iba a pasarle a Isabella.- En verano hará un viaje a Rumania, creo que ya entabló contacto con un tipo que él decidió, seguramente un amigo de papá, de esos que ya sabes tú cómo son...- rodó los ojos y asintió con la cabeza.- irá directamente a entregarle mi mano aunque yo no quiera casarme como ese estúpido.

- En verano...- en seis meses aproximadamente.

Sintió unas terribles ganas de golpear a su padre hasta dejarlo inconsciente.

- ¿Crees que pueda llegar muy lejos si me escapo de casa?- Arnold negó con la cabeza.- ¿Qué puedo hacer? Papá insiste en que deje de estudiar y que me ponga a hacer las cosas del hogar. Nos obliga a mamá y a mí a hacer todo, fregar, cocinar, poner la mesa, tender la ropa, lavarla a mano, y él en el sofá rascándose las bolas y leyendo el periódico o viendo la televisión o bebiendo...- Arnold tomó sus manos para calmarla, estaba apretando los puños con rabia.- No tengo tiempo de hacer los deberes por la tarde, tengo que quedarme hasta las tantas de la madrugada para poder hacerlos y la mayoría de las veces están mal.- hizo un puchero, su expresión estaba llena de impotencia.- Los maestros me están pillando manía, creen que estoy dejando de esforzarme... Que no me lo tomo en serio. Que por ser rumana ya no tengo interés en aprender... Creen que soy una criminal...- Suspiró pesado y con frustración.

- Lo único que puedo decir es que te vengas con nosotros, pero papá te sacará del colegio, te llevará a Rumania y te casará aunque intentes escapar de tu propia boda.- ella hizo un puchero, sus ojos estaban cristalizados, se sentía totalmente impotente, no podía hacer nada por parar lo que se venía.

- ¿Sabes? Ahora mismo me gustaría ser un chico, tú tenías dieciocho y seguías estudiando...- hizo un puchero.

Arnold se la quedó mirando fijamente, se le había ocurrido una idea.

- Eso no es tan mala idea.

Los tres se quedaron mirando con cara de póker, Isabella alzó una ceja con extrañeza, Karan se cuestionaba severamente si la falta de horas de sueño de Arnold le estaban sentando realmente bien o no. La respuesta parecía ser un no rotundo.

- No me miréis como si fuese un lunático, tiene sentido. Si Isabella actúa, se comporta y se ve como un hombre, con quien sea que la vayan a casar, no la aceptará porque se ve masculina y no deseable para los hombres. A no ser que tu pretendiente sea gay de clóset... Por lo tanto no podrá casarse y podrá seguir estudiando.- Los dos seguían mirándolo con extrañeza, no les parecía buena idea.

- Arnold... ¿Qué tal si vas a dormir? ¿No crees que te sentaría mejor?

- Karan, no me trates como si estuviera enfermo. La idea podría funcionar.

- Tu padre la va a matar como haga eso.- le reprochó el griego mirándolo fijamente.- Puede venir aquí unos días, pero mis padres no aceptarán que se quede aquí a vivir.

- Precisamente, cuando pague la deuda, que ya me queda poco, más lo que estoy ahorrando por las horas extras y tú trabajo, podremos conseguirnos un piso para nosotros e Isa podrá venir a vivir con nosotros lejos del hijo de perra de nuestro padre, donde no la podrá obligar a casarse. Pero hasta que eso suceda tendremos que hacer que Isa se vea masculina para que los pretendientes la rechacen.

Karan inspiró profundamente.

- Vamos, que lo que estás diciendo, en resumen, es que tu hermana haga Drag King durante todo el día menos cuando llega a casa.

- No he dicho eso explícitamente.

- Es lo que parece que estás diciendo, Arnold. No es que me entusiasme la idea de que tu hermana vaya vestida con musculadas, con una venda en los pocos pechos que ya le empiezan a crecer, podría tener cáncer de mama si hace esto muy común, o incluso la idea de tener que cortarse el pelo.- hizo una breve pausa, su rostro se veía angustiado.- Esto no va a funcionar, no quiero que Isabella acabe mal por culpa de un plan disparatado, ya sabes como tu padre se tomó nuestra relación y que ahora su hija se vuelva un chico... ¿Qué quieres? ¿Qué la mate?

- Papá Karan...- El mencionado dio un sobresalto por la forma de llamarlo, ya prácticamente se le había olvidado aquel mote.- yo... No estoy diciendo que estoy de acuerdo con mi hermano, de hecho no, estoy de acuerdo contigo, es una completa locura, pero... ¿Podemos intentarlo al menos? Lo que menos quiero es casarme con conveniencia, no, de hecho, lo que menos quiero es casarme. Menos aún con esta edad.

Aun siendo una niña de doce años y no comprender bien las cosas, habló con completa seguridad en aquellas últimas afirmaciones. Ella estaba completamente segura de que quería seguir estudiando, que no quería trabajar ni morirse en casa, que no quería casarse...

- Exacto, considero que tiene que estudiar, aprender, conseguir un buen trabajo, tener una buena pareja, no esto. Esto que quiere hacer nuestro padre con ella es arruinarle la vida.

- No, lo que quiere tu padre es seguir las tradiciones.- dijo Karan.- pero el mundo ha cambiado, estamos en España, en el 2017 e Isabella no va a casarse a los doce años porque a su padre le salga de sus cojones.

- Te adoro cuando insultas a mi padre...- dijo con una sonrisa atontada en su rostro.

Isabella lo miró extrañada.

- Yo te adoro a ti.- le sonrió.

- Chicos, no se despisten, por favor.- dijo Isabella bufando exageradamente.

Adoraba la relación de Karan y Arnold, pero cuando se ponían empalagosos siempre se metía en medio o los cortaba porque sino tendría que irse corriendo de la habitación porque no quería verlos darse besos apasionados y cosas así.

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Bien hecho, Arnold, tu padre es extremadamente homófobo pero tu brillante idea que tu hermana se vista de hombre para que los pretendientes de su matrimonio la rechacen...

Por favor que alguien le dé una colleja a ese chico.

No. Mejor.

Que alguien mate al guionista.

¿¡A quién cojones se le ocurrió la idea!?

¡Tiren al guionista a la hoguera!

Alguien random: pero si lo escribiste tu...

yo: ... ah... pos... a la hoguera conmigo >:D *c tira a la hoguera*

De acuerdo, ya basta de matanzas y asesinatos...

Si, una vez escribes la historia te parece una idea genial, pero una vez que la lees...

Uhm...

No es lo mismo... Pero de todas maneras la idea no es mala, en verdad tiene su lógica, pero ¿Qué querían que hiciera? Apenas tengo presupuesto para las historias, no pueden pedirme un best seller cuando soy una escritora novata XD

jsjadjadhakd

Aquí las opiniones ---------------->

Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Silvia Line

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