Charla (12)
Pareció darse por convencido con aquella media "afirmación" y siguió caminando, imitó sus pasos para llegar a su nivel y caminar uno al lado del otro... Desearía quitarse el velo, estaba sudando y no ayudaba aquel sol de medio día.
- ¿Cuándo preferirías que nos casáramos?
Cuando te mueras.
- Ahm... No lo sé... Otoño o invierno...
- ¿Alguna razón en particular?
- Me gustan más las estaciones frías.
- Yo prefiero primavera, si va a ser una celebración colorida, merece que sea en dicha estación...
Él era extraño, normalmente los hombres no dan tanta importancia a las cosas, es decir... No había visto nunca un ejemplo de que un hombre le pusiera tanta importancia a la fecha de matrimonio o que se fijara en los detalles de dicha celebración. Dudaba mucho que incluso su padre recordase cuando se casó.
- ¿Te gusta esa estación?
- No principalmente.- Isaac abrió los ojos con sorpresa a partir de aquellas palabras.- Es meramente por conveniencia de los colores de nuestro matrimonio, de hecho, yo prefiero el verano, me gusta el calor, considero muy cómodo tumbarse en el suelo con el frescor de las racholas...
...
Acababa de... ¿Gesticular tal y como hacía su hermano?
...
- ¿Qué fue eso?- la expresión de Abraham se crispó y entrecerró los ojos como si no hubiera entendido la pregunta.
- ¿El que?
- Acabas de gesticular... algo como... así...- movió su muñeca y su mano imitando el gesto que había hecho.
No lo negó.
- ¿Pasa algo?
- ¿Eso no fue un poco... femenino?- ladeó la cabeza hacia un lado.
- ¿Qué insinuas?- frunció ligeramente el ceño.
- Nada extraño, lo aseguro.- dijo rápidamente al ver que no parecía contento por aquella "acusación".- Fue una pregunta inocente, completamente inocente y sin malas intenciones. Si te sientes más seguro, no mencionaré nada de esto a mi padre ni al tuyo. Solo preguntaba...
...
- Quiero decir... como dijiste que mi hermano te resultaba atractivo con ropa femenina...
Estaba completamente preparado para esquivar un golpe que sabía que era muy probable que le diera por estar cuestionando su masculinidad. Era muy obvio lo que iba a pasar.
- Tal vez lo dije, tal vez lo soy, ¿Acaso vas a ir corriendo a mencionarlo a los adultos?
- Para nada... Al contrario. Yo también tengo secretos que me conviene guardarme para mí.
- ¿Por ejemplo?
- ¿Por qué debería? Igual estoy yo en peligro si lo dices, que igual estás tú si yo lo digo...
- Precisamente... Así estamos a mano.- le tendió una mano para cerrar un pacto o similar.
Vaciló unos segundos antes de darle la mano.
- Soy un hombre.
- Me gusta tu hermano.
. . .
Los dos se quedaron mudos y con cara de póker.
- ¿Eres un hombre? / ¿Te gusta mi hermano?- preguntaron al mismo tiempo los dos respectivamente.
- Considero oportuno sentarnos en un banco a hablar...- musitó Isaac con una expresión bastante sorprendida.- ¿Eres consciente de que tiene cinco años más que tú y tiene novio, no?
- Pensar en un trío es lo que más me pone.
- Sip, Tenemos que hablar de eso...- tomó su muñeca y se lo llevó hacia un parque en el que se sentaron en un banco de acero inoxidable que había por allí, apartado de los niños.
Isaac se acomodó en el banco y esperó a que Abraham se sentase, él esperó unos segundos antes de hacerlo.
- ¿Qué significa lo que acabas de decir? Y ten en cuenta que no tengo piedad en golpearte y tirar tu cadáver a un arbusto para que los perros que sueltan a las cinco de la mañana te coman.
La expresión de Abraham se deformó con algo de pánico al escuchar aquella amenaza y el tono de voz que había dejado de sonar dulce y tranquilo y se había vuelto rancio y prácticamente agresivo. También le pilló como sorpresa que de la bolsa que llevaba sacase una sudadera que se puso por encima de su ropa y se quitó el hijab de la cabeza para meterlo en la bolsa con desagrado.
- Ah... ¿Cómo debería llamarte? Quiero decir... Dudo que te... ¿Qué demonios eres?
- Isaac, encantado; me considero un hombre aunque mi cuerpo biológicamente diga lo contrario, agradecería que me llamaras y trataras como tal. Y se lo dices a mis padres y no tendré piedad en. . .
- Matarme de una paliza, sí... Me quedó claro...- apartó su cuerpo ligeramente, quedó sentado en la otra punta del banco.- Igualmente tú también debes cerrar la boca sobre cierto aspecto...
- Eso es lo que quiero hablar. ¿Qué significa lo que acabas de decir de mi hermano y su novio?- preguntó alzando una ceja lentamente.
- Hmph... Cierto, me hablaste de ti...- giró la cabeza y movió los ojos de arriba a abajo, hizo una mueca con el labio, con un ligero desagrado, o al menos así lo interpretó Isaac.- Te queda verdaderamente horripilantes esos pantalones con esa sudadera...- movió su muñeca señalando las dos prendas con algo de incomodidad.- En todo caso...- rodó los ojos.- Si, tu hermano me resulta muy atractivo, pero odio cuando se viste como una mujer, agradezco más cuando se viste como un hombre y deja de afeitarse por una semana solo por la foto... Es... Hmph... Sumamente...
- Te gustan los hombres.- dijo con sarcasmo Isaac.
- Por supuesto que no, ¿Cómo osas decir que sucios hombres depravados me pueden resultar atractivos?- negó haciéndose el ofendido con una postura sumamente exagerada.- Me pone tu hermano, es totalmente diferente.- negó con la cabeza.
- Dios, mi padre me iba a casar con una pluma andante.- susurró en bajo y en español para sus adentros mientras se peinaba el cabello hacia su lado habitual con una expresión entre sorprendida y anonadada.
- ¿Con una qué? ¿Cómo te atreves?- sonrió con desafío.
- ¿Cómo diablos no han descubierto que eres terriblemente exagerado con todo lo que incluye seriedad?- giró sus ojos lentamente hacia el pelinegro volviendo a hablar en rumano al ver su terrible acento español, él hizo una expresión amarga y bufó.
- Tener que aguantar hasta la respiración es un modo de vida que no recomiendo, pero que tienes que aprender hasta incluso fingir enfado cuando algo supuestamente debería enfadarte por afectar a tu masculinidad, pero que en verdad me hace una gracia tremenda porque tiene toda la razón.
- Me he perdido...- confesó Isaac.
- Que tengo que vivir actuando y fingiendo ser lo que no soy.
- ¿Y por qué ahora estás actuando así?
- Porque tú también estás actuando como realmente eres... ¿No?
- Ah... Si...- asintió con la cabeza.
- Pues yo igual...- se encogió de hombros.
Isaac hizo una mueca con el labio.
- ¿Tienes teléfono?
- No, mi padre no me lo permite, pero mi hermano administra mi cuenta de instagram hasta que me vaya a vivir con ellos y tenga mi propio teléfono.
- ¿Puedo enviarte solicitud para ese entonces? Quiero decir... Casarnos... Ahm... Ñeh, solo lo hago por contentar a mis padres... Supongo que tu igual...- Isaac asintió con la cabeza.- Entonces lo dejamos en solo amistad, aunque nos obliguen a casarnos...
Los dos soltaron una risilla.
- ¿Desde cuándo te gusta mi hermano?- preguntó Isaac acomodándose en el banco abrazando su mochila, la cual ahora tenía apoyada en su regazo, miró hacia el cielo recostado en el banco.
Abraham hizo lo mismo.
- No nos hemos visto nunca físicamente, pero las fotografías que vi de ti y de tu hermano... Bueno... Me dejaron embobado... Tenía más interés en conocer a Arnold... ¿Se llama así, no?- Isaac asintió.- Pues eso... Tenía más ganas de conocerle a él... No te ofendas...
- No, no me importa...- negó con la cabeza.
- ¿Y lo tuyo siendo hombre?- preguntó ladeando la cabeza hacia él.
- Siendo sincero...- ufff... que bien se sentía...- Mi hermano ideó el plan cuando cumplí los doce años. Él está completamente en contra de que me casen por conveniencia, así que pensó que si me veía masculino, me cortaba el pelo y me ponía ropa ancha, mis pretendientes no querrían nada conmigo a no ser que fueran gay... Que parece ser el caso...- susurró eso último.
- Hey...- se quejó.
- Así que, para probar si me veía bien, me vestí masculinamente y tanto mi hermano como su novio aceptaron y con un poco tiempo y paciencia, logré ir cortándome el pelo lentamente hasta que me llegase a los hombros y pudiera hacerme este peinado...- sonrió socarrón, Abraham soltó una risilla también.- Y bueno, eso sería todo más o menos...
Abraham hizo una mueca y giró la cabeza y se encogió de hombros.
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A decir verdad no puedo explicar nada...
Simplemente gozad la conversación xd
Y por el arte de las cursivas y la pereza de meter relleno, sí, estan hablando en rumano cada vez que hablan en cursiva, básicamente porque me daba pereza buscarlo y traducirlo todo solo por rellenar palabras.
De hecho, eso lo hice una vez pero, buah, que pereza....
Esa historia se encuentra en la cuenta de fanfics, de hecho, es un fanfic con self insert, pero bueno, no importa...
uwu
Aquí las opiniones ------------>
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line
[1501 Palabras]
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