Apartamento Yunji-Seúl /22:40 hrs

—Puedes dejar tus cosas en esta parte del mueble mientras, para que no se arruguen— dije abriendo el closet dejándole ver un apartado que permeancia vacío.

—Gracias— dijo y dejó su bolso a un costado en el piso.

Lucia algo pálido y perdido,  tenia todo el derecho a estarlo ya que su lugar seguro ya no parecía serlo.

—Creo que no debo explicarte donde esta todo ya que no es tu primera vez aquí— me quedé apoyada contra la puerta del baño mirándolo con una leve sonrisa.

—Cierto— sonrió y tomó asiento en la cama.—No conozco donde guardas la comida y el refrigerador— miró con esos ojos brillantes.

—Tendrás tiempo para conocerlo— me acerqué a él —¿Quieres algo de comer?—pregunté amable.

Él alzó la mirada algo triste y no contestó. Estaba sentado con sus codos sobre los muslos y la cabeza mirando el piso, nunca lo había visto así, excepto a esa vez que lloró porque creía que lo ignoraba.

Me arrodillé y alcé su rostro entre mis manos.

—¿Te parece si cocinamos juntos?—sonreí —Se que te gusta cocinar  y apuesto que comeremos rico hoy— acaricie su rostro.

Él sonrió de vuelta y me acarició las manos con ternura, sus ojos brillaban e tristeza, aquella sonrisa era lo mas triste que había visto a la fecha y he visto Kdramas muy tristes. Tanto fue aquello que unas lagrimas resbalaron por mis mejillas corrieron entre los dedos de JungKook quien las limpió con ternura.

—Creo que cocinar juntos me hará bien— se apartó y se colocó de pie ayudándome a mi de paso.

—Dime que quieres que compre y lo traigo— tomé mi billetera del bolso y las llaves del auto —hay un supermercado cerca y no tardaré—.

Él caminó a su bolso y sacó su billetera entregándome su tarjeta.

—Si me voy a quedar acá unos días creo que debería invitar yo— estiró su mano con la famosa black card.

—No, ¡como crees!— reí y caminé por el pasillo hasta la sala de estar.

—Realmente quiero ayudar, además yo como mucho— me detuvo jalando mi polera desde atrás.— Lo digo enserio, tómala— la volvió atender hacia mi.

No quise fastidiarlo más así que la tomé y la guardé en mi billetera con sumo cuidado porque ahí había un sueldo de idol exitoso.

—No tardo— dije antes de cerrar la puerta tras de mí.

Yunji había ido de compras bastante tarde y me quedé solo en el apartamento que tenia en un barrio un poco lejos del centro de Seúl,  estaba bastante lejos de mi apartamento pero  más tranquilo y fuera de acoso.

Me dispuse a colocar mi ropa en el apartado del closet que Yunji había dejado para mi y me sentí bastante extraño. La ultima vez que había estado aquí casi nos descubre a empresa y solo por no contestar el teléfono.

Revisé el refrigerador el cual tenia bastantes cosas para comer y unos cuantos productos de belleza que me trajeron recuerdos de J hope y sus mascarillas hidratantes entre los huevos de la nevera.

Dejé reposando una carne de res que encontré en unas cuantas especias para hacerla al wok y corté las ultimas verduras que permanecían frescas para luego ir a ducharme.

Mientras me duchaba pensaba en todo lo que había pasado y las múltiples razones por las cuales había vuelto acá, me pregunté si esta era una señal para seguir adelante con mi plan de enamorar a Yunji  y asumí que las posibilidades eran altísimas.

Salí de la ducha muy contento y dejé atrás todo los sentimientos malos, ahora me enfocaba en que esta noche debía ser divertida, esta y las que seguían. Cociné todo a la perfección, considero que podría ser un gran chef si me lo propongo. 

Cuando ella llegó me miró sorprendida. La ayudé con las bolsas como un caballero y organicé todo en su respectivo lugar, tenia todo listo para la cena y estaba seguro que le había dado una buena impresión.

—¿Qué tal— pregunté haciendo alusión a la comida.

—Delicioso, está perfecta— sonrió antes de comer nuevamente.

—Te cocinaré todos los días así que acostúmbrate— aclaré mi garganta con un poco de cerveza —En parte para devolverte el favor—.

—¿Serás como mi asistente?—rió  y bebió de su cerveza.—En ese caso, podrías darme un masaje—.

¿Era una invitación?, ¿Qué haces cuando una chica guapa te dice "dame un masaje"? 

Era obvio que para ese entones mi rostro estaba algo rojizo y me estaba riendo como un tonto mostrando mis dientes frontales y cerrando los ojos deseando no estar haciendo eso en ese mismo instante, pero me es imposible.

—Eres muy tierno cuando te pones nervioso— tocó mi nariz con su dedo indice.—Lindo—.

¿Lindo?  así le dicen a los bebés, a los animalitos bebés y a todo lo que sea pequeño y adorable y yo soy todo lo contrario , ¿o no?

—Lavaré los platos— se levantó y quitó mi plato.

—No, lo haré yo, tu descansa— me levanté tras de ella quitándole los platos de la mano.

—Bueno, si gustas— sonrió —Deberías venir más seguido— acarició mi espalda —Gracias—.

¿Venir más seguido? con gusto viviría aquí contigo todos los días. 

—Me iré a duchar, no tardo— dijo antes de desaparecer por el pasillo.

No pienses en nada JungKook , si ella dijo que se iría a bañar no era una invitación sino que te aviso que lo haría, además tu te bañaste y te perfumaste. Estas lavando los platos no puedes erectarte aquí porque seria muy raro, respira y piensa en perritos, en cachorritos lindos.

No tenia sueño y ahora que estaba con Yunji me preguntaba si debía dormirme a la hora que ella dormía o me quedaría despierto hasta que tuviera sueño.

Luego de un rato la sentí en el cuarto y me asomé. Ella estaba sentada junto a la cama con su camisa de dormir negra de seda muy bonita, "piensa en perritos lindos" pensé.

—¿Dónde debería dormir?— pregunté apoyándome en el  umbral de la puerta.

—Donde quieras— cepillaba su cabello ya seco muy liso y brillante.

—Ok— sonreí.

—¿Lo dices enserio?— se detuvo y me miró confundida.—La primera vez que viniste dormiste aquí, la segunda no creo que deba recordártelo—sonrió.— Supongo que te acomoda dormir hacia la derecha ¿no?— apuntó a su espalda.

Dormiría con ella esta noche, la podría abrazar en la noche cuando no pueda conciliar el sueño, no dormiría solo esta noche.

—Esta bien, me lavaré los dientes y vuelvo— dije sin ocultar mi felicidad y caminé al baño a cepillar mis dientes.

¿Acaso querría sexo? pensé.

Esto es nuevo para mi y no es que no haya dormido con él antes pero es que ahora es totalmente diferente. Él no estaba aquí porque me había insinuado hace un rato que quería estar entre mis piernas, estaba aquí porque una tipa loquísima sobrepasó los limites de la obsesión y considero que no es el momento indicado como para sentarme sobre él a darle sentones ¿ o si?.

Había cocinado una carne deliciosa de forma imprevista, me pasó su tarjeta para comprar cosas y compré sus favoritas le aparté un lugar en mi armario y no saben lo extraña que me sentí cuando vi su cepillo de dientes junto al mio en el mueble del baño.

Se acomodó en la cama junto a mi mientras me disponía a leer mi libro de todas las noches. No sabia si debía hacerlo pero es que si no lo hacia quizás podría pensar que soy rara ya que solo me tiendo boca arriba a mirar el techo hasta que me da sueño.

—¿Lees por las noches?— miró mi libro.—Yo siempre he querido leer pero siempre dejo los libro a medias, requiere mucha concentración y estar quieto por mucho rato— rió.

—No es que sea aficionada pero me gusta leer— quise parecer interesante.

Me acomodé en la cama y comencé a leer pero no podía concentrarme con él mirándome a ratos.

—¿De que trata?—alzó su voz.

— Creo que de amor— respondí sin levantar la mirada del libro.

—¿ Y es interesante?—volvió a hablar.

— Sí— realmente me desconcentraba.

— Y los personajes ya se besaron o no se besan aún— Jk podría ser intenso cuando quería y no se daba cuenta.

—No, solo se están conociendo— estaba mirando las hojas del libro viendo las letras pero no podía leerlas ya que Jk se había acercado a mi para mirar el libro.

— "...los pétalos de las flores de cerezos danzaron en el viento quedando algunos atrapados en su cabello, lucia muy guapo con su abrigo largo negro..."— leyó .—Creo que tengo un abrigo negro en casa, pero soy más de chaquetas— pensó en voz alta.

—Creó que no leeré más hoy—dejé el marca paginas entre las hojas y cerré el libro.

—Disculpa, te molesté— dijo apenado.— Lo siento que es que no puedo callarme—rió .—De verdad lo siento, si quieres me voy al sillón—.

—Esta bien, quédate quizás me quede dormida pronto—dejé el libro en la mesita de noche y pensé en apagar la luz.

¿Debería insinuarme? pensé nuevamente, no quería parecer intensa pero su brazo tatuado tenia que estar acariciando mi cintura.

Me levanté y fui por agua.

—¿Quieres agua?—pregunté desde la cocina.

—No, gracias— dijo.

Tenia que pensar en algo, algo que le dejara claro que quería que pasaran cosas pero que no sea tan obvio. Vi unos bombones de masmallows en la jarra de dulces que tenia y me llevé unos en la mano.

Entré al cuarto ya hidratada, me hice la torpe y tiré los bombones al piso.

—Que tonta—dije y me hinqué a recogerlos dejando mi cola levantada hacia él, me sentía una cualquiera.

—¡Bup!— la mano de Jk apretó una de mis nalgas.—¿Qué haces ahí?—sonrió.

—Se me cayeron unos bombones— se levanté con los masmallows en las manos.

—¿Ya pasaron los 5 segundos?—preguntó.

—No creo— me senté en la cama y el retrocedió entre las sabanas.

—Entonces dame—abrió la boca.

Y me pendió el foco, tuve una idea.

—Tómalo con tus dientes— me coloqué entre los labios.

JungKook sonrió tierno y se acercó a quitarme un pedazo pasando a llevar mis labios.

—Me toca—me quitó uno de la mano y se los colocó en los labios , hizo un movimiento coqueto con las cejas y dejó que me acercara.

A medida que yo me acercaba el se hacia mas atrás, un poco más atrás así hasta recostarse en la cama. Con una mano tomó mi muslo haciéndome señas para que me subiera sobre él y me sentara en su pelvis, yo no me negaría.

Me acerqué y le quité la parte del bombón de los labios.

—Wow, como llegaste ahí, ¿crees que soy un hombre fácil?— bromeó en su acento de Busan.

—Si quieres me bajo—hice levanté mi cadera para salir pero me sujetó.

—Quédate ahí— me sentó sobre su pelvis, colocó sus manos sobre mis nalgas y comenzó a moverme sobre su pelvis.

Entendía lo que quería así que lo hice por mi cuenta mientras el colocaba sus manos en mis muslos y subía por ellos bajo mi camisa buscando mi ropa interior.

—Me gusta el encaje—jugó con sus dedos sobre el elástico de esta —¿puedo verla?—dijo.

Yo solo me levanté y me subí la camisa sin dejar de míralo hasta el punto en el que mi ropa interior lucia ante sus ojos.

—¿Quieres ver los míos?— sugirió. Yo asentí.

Se bajó los pantalones de su pijama dejando ver sus boxers de Spiderman. Muy tiernos pero su erección le quitaba la inocencia.

—Creo que es muy poco sexy esto— sonrió.

—Creo que es muy sexy— me quité la camisa quedando solo en mis pantaletas de encaje.

—Eso si es sexy—se inclinó hacia mi para abrazarme.

Su cuerpo cubría el mio, él sobre mi era mi posición favorita, mis piernas a sus constados obedeciendo al vaivén de su pelvis la cual iba lento, era algo agradable. Me besaba con dulzura, esto era diferente, sentía que lo disfrutábamos sin ser muy intensos.

—Se siente tan bien—suspiró al entrar otra vez en mi.

Sonreí, quería sorprenderlo así que a la siguiente vez que entro me contraje lo mas que podía estimulándolo aún más. Sus ojos se abrieron sorprendidos y me miró deteniéndose.

—¡Que fue eso!— realmente esta asombrado.

—¿Qué cosa?—me hice la desentendida .

—¿Cómo te volviste tan estrecha de pronto?—llevó su pelo hacia atrás.

—¿Quieres que lo haga otra vez?— sonreí.

—Por favor— jugó con su miembro sobre mi clitoris.—Pero quiero que acabes primero—sus ojos me vieron directamente.

Asentí y lo llamé hacia mi  pero no lo hizo sino que se detuvo en mi sensibilidad logrando hacer que gimiera de placer al sentir mi cuerpo tensarse y mis piernas temblar. Él solo estaba ahí acariciando mi cuerpo post orgasmo esperando el momento para entrar en mi.

—¿Estas lista?— besó bajo mi ombligo, un beso húmedo que me estremeció nuevamente.

—Si— dije entre suspiros.

Él se incorporó sobre mi y entró con lentitud disfrutando cada centímetro del recorrido y yo disfrutada como su rostro no podía ocultar lo excitado que lo ponía sentir como mis paredes se ajustaban tanto a su miembro. Fueron unas tres veces antes de que perdiera la paciencia y me embistiera con más ritmo acabando en mi.

Su rostro, su cuerpo, su todo estaba iluminado por la lucecita  que tenia en mi mesita de noche, lo miré mientras volvía en si, su expresión era de concentración, estaba muy quieto aún dentro de mi a pesar de haber acabado.

—Jk—le toqué el brazo.

—Shhh— me calló, tenia los ojos cerrados y susurraba algo que no podía entender.

—¿Qué haces?— le acaricié la cara, lucia muy tierno.

—Estoy dando las gracias— susurró.

—¿Cómo cuando uno da gracias por la comida?— reí.

—Si— rió.—Iré por papel— susurró.—No te muevas— salió de mi con cuidado.

Camino sin ropa interior al baño y luego volvió por ella cuando me trajo papel, volvió en sus boxers de Spiderman y se lanzó de panza a la cama apoyándose en una almohada muy cómodo.

Fui al baño a refrescarme, mis mejillas estaban rojas como era de esperarse, me cepillé el cabello, quité el sudor y volví en mi camisa a la cama donde Jk ya estaba dormido profundamente en sus boxers de Spiderman. Ahí supe que estos días serian muy interesantes de sobrellevar.

NewHope right here!

Un poco tarde mi actualización pero es mas larga, o se si había escrito algo mas largo que este cap pero estoy satisfecha, espero que ustedes también.

xoxo.