Capítulo Cuarenta y Cuatro: Te presento a Reik.

Mérida.

Diciembre, 2016.

—¿Esto es raro?

—No, raro no, pero sí inesperado —Sonrío.

Alaska sonríe y se pasa mechones de cabello detrás de la oreja.

Me llevo bastante bien con ella, siento que tenemos mucha química pese a que solo nos vemos cuando los gemelos están juntos o en las citas dobles, ocasionalmente cuando voy a casa de Dawson y ella está ahí. Por eso me ha tomado por absoluta sorpresa cuando me llamó anoche y de manera tímida me preguntó si podíamos almorzar juntas, había aceptado.

Puede que en confianza tengamos personalidades que destacan y bastante peculiares, pero ambas tenemos nuestro toque de timidez, sobre todo de mi parte, he avanzado un montón, pero aún me queda camino de confianza por recorrer.

En un principio habíamos pedido nuestra comida, después habíamos hablado sobre los gemelos, las clases de escritura creativa de Alaska en la universidad —está en su primer año— y sobre cómo me está yendo en mis clases.

Sé que Alaska escribe, no porque Dawson me lo haya dicho, pero siguiéndola en redes vi hace un par de semanas el anuncio de su publicación de un libro llamado "caída apasionada" algo que causó mucho furor y felicidad en internet (bueno, también leí uno que otro mal comentario, pero los buenos predominaban). Así que había ido a esa aplicación de JoinApp y había leído la historia que me tuvo impresionada y acalorada desde que el protagonista le pidió a Harper (protagonista femenina) que le chupara la polla.

Debo decir que me encantó, tal vez no fue mi historia favorita de ella incluso diré que no es la que explota su mayor potencial, pero eso pasa con las primeras historias, sin embargo, me volví adicta a la penúltima que escribió, me pareció que la madurez de su escritura y el cómo tocó ciertos temas guiándolos de la mano del romance, fue espectacular. No le he comentado que la leí, no sé si es reservada cómo yo (pese a que ya poco a poco me ido soltando hasta el punto de subir en mi cuenta de Instagram un par de dibujos románticos inocentes), sin embargo, Dawson sí sabe que la leí del mismo modo en el que Drake sabe que a veces mis dibujos son +21.

—Bueno, Drake me dijo que no diera tantas vueltas y que no debería de tener vergüenza de pedirte esto, tampoco te enojes con él por haberme dicho, aunque igual te sigo en redes y vi el par de dibujos que subiste...

—De acuerdo —digo con lentitud.

—Supe que aparte de los lindos dibujos que has subido también haces dibujos muy, pero muy romántico +18 y a veces incluso +21.

Me sonrojo, pero asiento sin ningún deseo de negarlo, eso la hace sonreír, sus propias mejillas tienen color.

—Y ya debes de saber que escribo y que algunas de mis historias son más picantes, Dawson me dijo que me leíste —Ríe por lo bajo—, leíste mi borrador de Caída Apasionada.

—Me gustó, tienes mucha creatividad para lo picante.

—Me dijeron que tú también —Se ríe—. Así que publicaré dos libros, el primero es Caída Apasionada.

—Felicidades por eso, quería tanto felicitarte ¡Eso es algo grande! Y es una gran editorial, siendo tan joven, es admirable, Alaska.

—Gracias —Se cubre las mejillas con las manos—, aun no me lo creo, estoy asustada, nerviosa y emocionada.

—Te va a ir genial.

—El punto es que quiero que todo sea increíble y hablando con mi editora, pese a que aún no pasamos a la maquetación ¡Apenas edito el manuscrito! Acordamos incluir ilustraciones a la historia y...Me han dado luz verde para ilustraciones sexis ¡Sin penes o vaginas! Preferiblemente tampoco penetración o succiones de pechos.

—Entiendo de lo que hablas, ilustraciones apasionadas, pero con elegancia y el coqueteo de la sensualidad sin llegar a ser obscenamente explícito.

—¡Exacto! ¡Jesús de las concuñadas! Te amo.

Eso me hace reír mientras le pido que siga porque estoy muy intrigada.

—Quiero que seas la ilustradora, no he visto concretamente todo tu trabajo y menos el sexi, pero confío en el criterio de Dawson e incluso Irina me dijo que le enseñaste un dibujo de una pareja abrazada besándose que era increíble.

Lo hice, porque ella no olvidó que lo había prometido. Ciertamente tengo que admitir que me llevo muy bien con la mamá de Dawson o con su familia en general incluso con Hayley las cosas son muchísimo mejor actualmente (amo su repostería).

—Tu nombre lógicamente saldrías en el libro, te pagarían, se mencionaría en la publicidad y siempre, siempre lo diré.

Guau, simplemente guau. Parpadeo un montón y ella ríe de manera nerviosa.

—¿Me odias? ¡Jesús nervioso en short! ¿Te ofendí?

—No, no me ofendiste, solo estoy...Procesándolo.

»¿Quieres que dibuje las ilustraciones de tu libro?

—¡Sí! Y no son solo las sexis, también quiero dulces y divertidas, siento que te explotaré, pero te prometo que será increíble.

—Te creo —digo aun anonadada—. Alaska ni siquiera has visto mis dibujos.

—Vi dos en tu cuenta de Instagram y confío en Dawson y siempre puedes enseñármelos, te aseguro que los disfrutaré, ya leíste mi historia y sabes que pienso sucio.

Eso me hace sonreír.

—Nunca he hecho nada cómo esto.

—Nunca he publicado un libro, Mérida.

—¿Y si lo arruino?

—No te dejaré arruinarlo, seremos un equipo. Un dúo espectacular.

—¡Qué miedo me da! Pero siento algo...Como un cosquilleo en el estómago.

—Es la emoción, yo también lo siento.

Sería la primera vez que mis dibujos serían así de públicos, que me pagaran por algo que amo. Es una gran editorial y es con mi amiga Alaska. Tengo miedo, pero me doy cuenta de que quiero hacerlo.

—Muy bien, acepto —Ella grita emocionada —, pero debes saber que podría arruinarlo o tal vez no precisar a la primera lo que desees, pero me voy a esforzar y gracias por esta oportunidad.

—Gracias, gracias, gracias. Esto será el principio, apuesto que se nos vienen cosas grandiosa —Los ojos grises le brillan.

—Diría Wisin y Yandel: el dúo de la victoria.

—No sé qué es eso, pero sí, sí, somos eso.

Eso me hace reír y en serio me siento tan feliz, siento que Alaska tiene razón y este es nuestro comienzo.

***

Abro la puerta y lo primero que consigo es un cachorro de pelaje negro en manos de mi sonriente novio.

—Feliz cumpleaños, cielo.

Hoy, veintidós de diciembre es mi cumpleaños número veinte y este ya es un gran comienzo.

Dawson se inclina dándome un dulce beso en los labios y luego siento las lamidas del cachorro en mi cuello, lo que inmediatamente me hace reír.

—¿Es mi regalo? —cuestiono emocionada, tomándolo de sus manos.

He estado asustada de tener otro perrito luego de la dura pérdida de Leona, pero sosteniendo a este cachorro todo se siente bien y perfecto.

—Algo así.

—¿Qué quieres decir con algo así? —pregunto, enfocada en el cachorro, pero escuchando cómo Dawson cierra la puerta.

—Este pequeño es un pastor alemán mezclado con alguna raza no definida. Fue rescatado hace tres semanas por Micah y Wanda, ha sido desparasitado y cuidado, era una camada de tres, pero conecté con este pequeño, así que pensé que podríamos adoptarlo, solo si quieres, de no ser así lo llevaré conmigo, igual planeo mudarme pronto...

—Calla, no te lo llevarás —Lo interrumpo—, ya estoy enamorada de este pequeño.

—Nuestro pequeño —Me corrige haciéndome sonreír y alzarme sobre las puntas de mis pies para besarlo.

—Qué bonita manera de empezar mi cumpleaños, te amo.

—También te amo, cielo —Me da otro beso antes de seguirme cuando me muevo hacia el sofá.

En el camino Boo nos ve como si la hubiésemos traicionado, pero lo dejo pasar enfocada en mi nuevo hijo, fruto de mi amor con Dawson Harris.

—¿Podemos llamarlo Reik? En honor a que te he enseñado muchas canciones de ellos y nos gustan.

—Reik parece un buen nombre.

»Míranos, hace poco más de un año nos conocimos por un mal entendido y ahora tenemos un hijo perruno juntos.

—Aw, qué bonita relación —Dejo al cachorro jugar con mis dedos—. Eres de lo más bonito que me ha pasado, Dawson Harris.

—Lo mismo digo de ti, Mérida del Valle.

Esta mañana al despertar por primera vez en muchos años, mamá estaba para felicitarme, me había preguntado si cenaríamos juntas y la había invitado al cumpleaños que Dawson me organizó en su casa, pero solo sonrío y me dio un abrazo antes de decirme que la pasara lindo, me decepcionó un poco, pero he decidido no tener expectativas demasiado altas a lo que ella concierne.

Estoy emocionada por la celebración más tarde con mis amigos porque es algo que ahora tengo, amigos que me aprecian y me quieren.

Dawson está libre, bueno, tanto cómo lo permite el refugio en el que ahora hace únicamente voluntariado. La semana pasada fue su graduación y puede que haya llorado un poco, pero prometo que no más que su gemelo. Fue grandioso verlo recibir su medalla junto al título que con tantas ganas esperaba. Tiene tres entrevistas en enero en clínicas veterinarias en las que cree encajar y que representan sus principios y también ya está empezando en aplicar para su postgrado, mi novio es súper inteligente y yo estoy muy orgullosa de él.

—Leah me deseó feliz cumpleaños en su horario australiano —Me rio.

No es que Leah y yo seamos mejores amigas, pero ella es divertida y amable, y en vista de que es novia de mi mejor amiga y que hemos interactuado más por internet, las cosas comienzan a sentirse normales, además mañana estará aterrizando en el país y tenemos pendiente una cita doble.

—Aún sigo procesando que es la novia de Sarah —confiesa Dawson.

Cuando Dawson lo supo pensó que se trataba de una broma, más allá del hecho de que fuese una relación de chicas (cosa que no lo inmuto) su incredulidad estaba en que fuese precisamente con mi mejor amiga.

—Es una pena que no llegara hoy para la fiesta —digo y él asiente en acuerdo antes de sonreírle al cachorro que ahora quiere tirar de su cinturón.

—Así que estuve pensando... —comienza y le doy toda mi atención—. Quieres mudarte...

—Mucho.

—Voy a mudarme el próximo año.

—Aparentemente.

—Entonces... Si ya somos padres al adoptar a Reik ¿Por qué no mudarnos juntos?

Fanart hermoso hecho por luxenriver (así la encuentran en Instagram).