Capítulo único
༊ ⌬ ꨄ ೨ ᵕ̈ 𖣦 ✎ ஜ ಌ ࿐ ִֶָ ⅋ ⎓ ૪ ⌑ ␥ ■ ♧ ۣۜ ᪥ ᬁ ᯼ ༻ ❑ ⌗ ✿ ⊹ (:̲̅:̲̅:̲̅[̲̅:♡:]̲̅:̲̅:̲̅:̲̅) ⊹ ·˚ ༘♡🌿 ཻུ۪۪₊˚ ━☆*:₀. ℘·˚
"21 DE SEPTIEMBRE FLORES AMARILLAS"
Inicio Historia: 21-09-2024
Termino Historia: 23-09-2024
Solo pensando en él, en mi amado esposo y amigo, Layne, miré el cielo celeste y sonreí con suspiros e ilusiones.
Estábamos a 21 de septiembre y el sol tiraba con entusiasmo sus rayos. Ya quedaba menos de un día, para que al fin la encantadora primavera llegara, lo que me tenía toda contenta y radiante, solo quería que arribara para decirle adiós, al fin, al condenado invierno.
Pensé en él con amor y sonreí sin razón.
<< Layne, cuanto te amo. >>
De pronto, pensé en su hombro vendado y no tardé en preocuparme.
Layne se había dislocado el hombro en uno de sus conciertos al mover de forma desenfrenada la cabeza.
<< Solo espero que estés bien, amado mío. >>
Con una tierna sonrisa conducía por el centro de Seattle bajo los rayos del sol y solo pensando en mí, no le importó el vendaje negro que llevaba en su hombro y siguió conduciendo en su auto. Le urgía llegar a aquel sitio.
Tenía listo y ordenado nuestro departamento y solo quise verlo, que pronto llegará y vi la hora en el reloj de la pared, el que marcaba las 16:45 hrs.
<< Layne. >>
<< ¿Dónde te has metido, cariño mío? >>
Nerviosa y preocupada por él, lo llamé a su celular.
Él sonrió tierno al ver que se trataba de mí y me contestó.
—Hola, mi ternura.
—Layne, cariño ¿Dónde estás? Ya son casi las cinco. Me tienes preocupada.
El corazón se le aceleró de alegría y de amor al saber que yo estaba preocupada por él.
—Estaba terminando unos asuntos con la discográfica. Ahora voy para el departamento — sentí un alivio.
—Que bueno. No te esfuerces tanto con tu hombro. Ten cuidado — él volvió a sonreír con ternura.
—Ok, tendré cuidado. Te lo prometo, hermosa.
Sonreí.
—Te amo — me derretí.
—Yo también te amo. Aquí te estaré esperando — sus ojos brillaron.
—Ahí estaré...
Colgué la llamada ilusionada, con risitas locas y solo pensé en él.
Layne sonrió perdidamente al cabo de aquella llamada y con más anhelos deseó llegar hasta el sitio.
Al ver lo que ansiaba, se estacionó frente a la florería y con cuidado de no lastimarse, tal como me lo había prometido, se bajó del auto y entró a aquella florería.
Había gente al igual que él comprando flores amarillas y pensó en mí con amor. Había muchos ramos de flores amarillas por ser esa fecha especial; vio unos frescos ramos en un tarro con agua y se acercó a mirarlos. Los observó atento, e indeciso, no le convencían del todo y ojeo otros en otro puesto.
No les perdió de vista. Aquellas flores amarillas estaban mucho más bonitas y delicadas que las demás, y con cuidado, tomó un ramo. Las miró con detenimiento y solo pensó en mí y en mi tierna sonrisa.
—Estás son las indicadas para ella. Para ti, mi hermosa Margarita.
El corazón se le disparó de ilusiones, alegría y esbozó su tierna sonrisa angelical.
Aquellas flores amarillas tenían mucho valor sentimental para él y después lo serían para mí.
El vendedor se le acercó y le sonrió.
—¿Escoge esas, muchacho?
—Si. Son las más hermosas y delicadas para mi esposa.
El vendedor volvió a sonreírle, Layne le pagó y él le envolvió las flores en un delicado papel transparente.
—Ya joven. Que las disfruten mucho — Layne le sonrió agradecido.
—Gracias a usted, adiós...
Se subió otra vez con cuidado al auto por su hombro y para no marchitar las flores y con ansias condujo hasta nuestro departamento, solo con la intención de verme y entregarme el ramo de flores amarillas.
Con el propósito de que descansara, porque llegaría agotado, después de una larga reunión con los de la discográfica, quise prepararle una rica cena, junto a un excelente vino.
Los rayos del sol aún iluminaban y se dejaron caer sobre la mesa puesta con los platos y cubiertos, que había colocado, y sin percatarme, olvidé cambiarme el overol de Layne, el que me encantaba.
Layne dejó el auto en el estacionamiento y subió al departamento con el ramo de flores.
En cuanto escuché las llaves en la puerta, me acerqué al living y él entró con un hermoso ramo de flores amarillas.
Yo lo miré sorprendida, con la boca medio abierta y Layne me sonrió perdidamente enamorado. Vio que yo tenía puesto su overol y sonrió con más destellos y se me acercó.
—Hola, mi ternura.
—Hola...
Él seguía viéndome de la misma manera, y yo sin habla, lo encontré tan tierno y guapo precisamente en aquel instante. Tenía su cabello corto, con sus risos dorados y me derretí por completo.
Layne rio todo tierno y me entregó el ramo de flores amarillas.
—Ten, las compré para ti, para la mujer más hermosa de este mundo.
Yo se las recibí con cariño y emoción. Realmente me había sorprendido; las tomé y las aprecié de inmediato.
Layne miró mi sonrisa de emoción y vibró por dentro.
—Oh, amor mío. Están demasiado hermosas. En verdad me has sorprendido.
—De eso se trataba. Quería sorprenderte.
—Pero ¿Qué hay con la junta que tenías? — me sonrió con ternura y acarició mi rostro.
—Necesitaba que creyeras en eso para poder salir a comprártelas — lo miré toda enamorada y el corazón me estalló de dicha y emoción.
—Oh, amor mío. Eres tan lindo y tierno.
—Jejeje. Hoy es 21 de septiembre. Leí en el periódico que por ser hoy esta fecha, las parejas, amigos, bueno, todos acostumbran a regalar flores amarillas para dar la bienvenida a la primavera.
—Y me encanta. La verdad, no conocía la celebración y tú me la has enseñado. Gracias por esto, por este bonito ramo de flores. Me encantan — se me quedó viendo con ojos de amor.
—Amo verte sonreír y que estés feliz.
—Mi Layne.
—Te amo.
—Y yo a ti, Layne mío, mucho.
Sin apartar su mano de mi rostro, se aproximó más a mí y se agachó para besarme.
Yo lo abrasé fuerte, con todo mi amor y los dos nos besamos perdidamente enamorados.
Besándonos sin parar, sentíamos que nos necesitábamos con urgencia y sin dejar de abrazarnos, hicimos tronar nuestros labios y acabamos lento de besarnos.
Nos sonreímos con cariño y complicidad y yo toqué su hombro con cuidado.
—¿Cómo has estado del hombro? ¿Te ha dolido?
—No, ya no como los primeros días.
—Menos mal. Por eso me tenías preocupada — me miró locamente y volvió a acariciar mi rostro. Amaba sentir su enorme mano acariciar mi rostro, y con cariño y mimo, moví la mejilla junto a ella.
—Tranquila. Estoy bien. Te prometí que lo estaría — le sonreí.
—Lo sé.
Nos sonreímos complementados, con cariño por unos instantes.
Coloqué con aprecio las dulces flores amarillas, que él me había regalado, en un jarrón de vidrio, lleno de agua. Layne me miró hacerlo con su tierna sonrisa y me amó con locura.
—Aquí quedarán. Se ven hermosas y vivirán por mucho tiempo.
—Lo sé. Vivirán todo lo que tengan que vivir por tus cuidados y cariño — me giré a verle y le sonreí con destellos. Layne me atrapó con su intensa e iluminante mirada.
Ambos volvimos a sonreírnos complementados y llenos de sueños e ilusiones.
—Te tengo la cena lista y con tu vino favorito.
—Oh, mi amor — sus ojos brillaron con destellos y amor en mí.
—Ven, vamos.
Le dije y lo tomé con cariño de su mano y lo llevé a la mesa. Layne más que contento y tierno, se dejó llevar de mi mano hasta la mesa.
Sentados frente a frente, cenando lo que yo le había preparado, bebimos un poco de vino, y él sin soltar su copa, me miró y me sonrió con ternura. Yo lo vi y contemplé su sonrisa y me derretí por completo.
Después, los dos con cariño miramos las flores amarillas en el jarrón y volvimos a sonreírnos.
—Ven aquí, ternura.
Me dijo, y yo feliz y con mimo, me le acerqué y me senté en sus piernas. Layne me observó con detenimiento.
—Te amo — más me derretí.
—Y yo te amo a ti.
Aproximamos nuestros labios y empezamos a besarnos con muchos deseos. Nuestros labios tronaban y Layne me tomó por la cintura.
—¿No te lastimo el hombro al sentarme aquí en tus piernas? — me sonrió.
—No, tranquila. Estoy bien y ahora solo quiero seguirte besando y que tú me vuelvas a besar.
—Mi Layne. Layne mío.
—Tuyo siempre.
Me susurró y nos besamos largamente e hicimos el amor, ahí sentados, en su silla.
༊ ⌬ ꨄ ೨ ᵕ̈ 𖣦 ✎ ஜ ಌ ࿐ ִֶָ ⅋ ⎓ ૪ ⌑ ␥ ■ ♧ ۣۜ ᪥ ᬁ ᯼ ༻ ❑ ⌗ ✿ ⊹ (:̲̅:̲̅:̲̅[̲̅:♡:]̲̅:̲̅:̲̅:̲̅) ⊹ ·˚ ༘♡🌿 ཻུ۪۪₊˚ ━☆*:₀. ℘·˚
Fin.
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