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N° 5: Stan x Kyle x Cartman x Kenny


Pedido por: KDZH-WW

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Las luces neón le provocaban un intenso dolor de cabeza, se sentía bastante desorientado y no recordaba absolutamente nada después de haber tomado la bebida. Su boca tenía un sabor extraño, estaba pastosa y el sabor era totalmente desagradable, era como... Férreo..., sintió náuseas por un momento. Su cuerpo estaba tan entumecido que no sabía si es que había tenido una orgía o le habían apalizado tanto que estaba en el límite de la conciencia y la muerte.

Los neones a su alrededor eran tan escandalosos que su vista no era capaz de acostumbrarse a ellos, su cuerpo se tambaleaba de lado a lado y repentinamente cayó por un tropiezo, el golpe en su cabeza fue suficiente para dejar de escuchar la música tan estruendosa a su alrededor y por un momento los neones desaparecieron y se enterró entre una gran bola de gente que no reconocía porque sus ojos estaban totalmente desorbitados y borrosos, mareado y aturdido.

De un momento a otro se encontró respirando erráticamente y con cientos de ojos blancos y llenos de crítica que se cernían sobre él como si fuera lo más interesante del mundo o fuera un bicho raro desagradable… Confundido movió la boca para preguntar qué mierda estaban mirando, pero las palabras no salieron como quiso, sino que fue una lucha por su propio entendimiento, pues de su boca solo salieron palabras arrastradas y mal entendibles. Notaba su cabeza dar vueltas y como dos figuras se acercaron entre la muchedumbre. Por un momento supuso que lo ayudarían pero de un momento a otro su cara se encontró helada contra la fría y blanca nieve que empezó a llenarse de un erótico color rojo.

Solo se asustó cuando supo que ese rojo era de la sangre que salía de su boca y nariz. Su percepción se alteró y sus ojos volvieron a ver nublado, su cabeza cayó contra la nieve y allí perdió el conocimiento.

Sin recordar qué había pasado, cómo había llegado hasta ahí o incluso si las heridas que tenía estaban bien o no…

...

...

...

Sus ojos se abrieron lentamente e impactaron contra una luz blanca en un hospital, pero para él se sintió como una abrumadora luz de un interrogatorio. Entrecerró los ojos. Meditó unos segundos y revisó todo a su alrededor, estaba definitivamente en un hospital… Tenía un tubo inyectado en el brazo a través de una vena, un líquido transparente se adentraba en su cuerpo, otra de las venas adentraba un líquido rojo, parecían estarle haciendo una transfusión de sangre.

Su boca se seguía sintiendo pastosa, en su mano derecha, la contraria a donde tenía todas las venas con líquidos adentrándose en su cuerpo, tenía una especie de vendaje en su muñeca que cubría toda la mano, como si se hubiera roto algún hueso o algo por el estilo.

Las imágenes empezaron a retomar su mente lentamente. Empezó a tener pequeños flashes y recuerdos fugaces de lo que había pasado el día anterior, pero era tan doloroso (no el recuerdo per se, sino el dolor de cabeza literal que tenía) que no quería recordar nada y solo quería descansar en esos momentos.

- Buenos días…- movió sus ojos lentamente hacia la puerta.- ¿Cómo te encuentras? Llevas dos días inconsciente.

- Desorientado…- admitió.

- Te encontraron unos civiles que no te conocían de nada inconsciente en la nieve al pie de una discoteca del barrio gay. Te hemos hecho chequeos de VIH, gonorrea, y otras enfermedades de ese tipo, estás limpio; también hemos inmovilizado tu muñeca, tenías fracturado uno de los nudillos y había evidencias de que habías estado en una pelea por todas las contusiones que tienes en el cuerpo, también te quedaste inconsciente por el alcohol en tu cuerpo, cuando te trajeron no nos podíamos explicar cómo estabas vivo y no te había dado un shock de tanto alcohol y sin consumir nada previamente…- hubo un momento de silencio ausente en el que el médico parecía escanear las reacciones del paciente.- ¿Recuerdas algo de eso?

- Mi novio me dio un puñetazo.- las palabras surgieron por sí solas, dejándose llevar por los recuerdos en los que se había empezado a sumergir conforme el hombre le explicaba todo lo que le habían hecho.

- ¿Por qué motivo?- interrogó.

- …- hubo un breve silencio en el que volvió a sumergirse en los recuerdos borrosos y llenos de niebla.- Estaba enfadado conmigo…

- ¿Recuerdas el motivo?- volvió a quedarse ausente recordando.

- No.- respondió después de unos segundos.

- ¿Recuerdas haber hecho algo que pudiera hacerlo enfadar?

- No.- negó.

- ¿Sueles tomar habitualmente?

- Cada viernes.- miró a su alrededor, parecía buscar algo.- ¿Dónde puedo tener un teléfono?

- ¿Para qué?

- Preguntarle a mi novio. Tal vez me ayude a recordar algo.

El doctor vaciló unos segundos. La mirada confundida de su paciente evidenciaba la falta de recuerdos y el sentimiento de desorientación que había en su interior, y entendía que tuviera ese sentimiento, pero después de decirle que su pareja sentimental le había golpeado, tal vez no sería el mejor momento la mejor idea avisar a esa misma persona en esas circunstancias.

- Recomendaría que llamas a tus familiares en vez de a tu pareja sentimental.

- No tengo padres.- respondió abruptamente.

- Lo siento mucho.- se disculpó- ¿Tienes algún familiar que pueda hacerse cargo de ti?

- Tengo veintidós…- respondió.

- Oh…- emitió.- Pareces más joven…- no se sintió como un halago, más bien como una forma cordial de proceder con los códigos de educación.- Puede usar el teléfono del hospital… Pero primero necesito hacerle una revisión de su estado actual.

- Está bien.- aceptó.

...

...

Un teléfono empezó a vibrar sobre un mueble de madera decorado con un centro de mesa decorado con piezas de oro o simulación de oro… Una mano blanca por su palidez salió de la cama en la que se encontraba el cuerpo tranquilamente recostado y agarró el dispositivo para contestar sin siquiera revisar quien llamaba.

- Kyle Kroflovsky al habla, ¿Quién llama?

- Hola, Kyley…

Los ojos del pelirrojo se abrieron como si acabaran de darle una bofetada o le hubieran arrojado un balde de agua helada sobre la cabeza. Se enderezó en el colchón y la furia llenó su cuerpo por completo con una indescriptible expresión.

- ¿¡Cómo tienes los santos huevos de llamarme después de morrearte con otro delante de mis narices, maldita zorra de mierda!?

Al otro lado de la línea la mirada del paciente se arrugó con una extrañeza inédita, intentando rebuscar en todos los recuerdos difusos de su cabeza algo que pudiera tener una cierta similitud con lo que acababa de escuchar. Recordaba que el propio Kyle le había dado un puñetazo… Pero no conseguía recordar el motivo… ¿Era porque besó a otro? Si no era por eso, ¿Por qué otro motivo sería?

- Estoy en el hospital. No recuerdo nada…

Al otro lado de la línea hubo un silencio abrupto.

- No juegues conmigo, Kenny.

- No juego.- respondió de inmediato.

Hubo un breve silencio, Kyle se había levantado de la cama, por ello se había quedado en silencio, aunque se había sentado en el borde y estaba buscando las zapatillas con los pies.

- ¿No recuerdas nada de nada?

- Pocas cosas. Me pegaste un puñetazo. Poco más.

- Te lo tenías merecido.

- No entiendo…- notó un chasquido de lengua rabioso y sintió una confusión repentina que le empujaba a pensar que realmente ese beso mencionado previamente había sido el desencadenante.- Bebí demasiado… Sé que es típico achacarlo al alcohol… Pero de verdad, no recuerdo absolutamente nada.

- Voy a vestirme y voy al hospital.

- Gracias…- sonrió gentilmente, pero sintió por dentro que no debería hacerlo, porque el tono de voz del pelirrojo no era precisamente algo para agradecer sonriendo.

...

...

Kenneth McCormick colgó el teléfono y se dirigió a su habitación nuevamente, acompañado por el doctor que lo había recibido al despertar.

- ¿Te ayudó en algo?

- Vendrá a verme. Creo que se enfadó conmigo porque estaba borracho… No recuerdo lo que hice y espero que él me ayude a solucionar las cosas…

El médico no dijo nada en un primer momento. Pero podía estar seguro de que aquel tono de voz había sonado demasiado infantil para un adulto joven de veintidós años.

Ante la llegada del novio, el doctor se sintió intimidado, considerablemente intimidado. No sólo la prominente altura del chico, sino su estilo que mezclaba el estilo boxeador por sus nudillos y brazos marcados, con un estilo alternativo que no sabía calificar bien, pero aquellas botas tenían una plataforma negra de al menos diez centímetros y cadenas por todo su vestuario, eran realmente intimidantes. El chico llevaba su cabello rojo peinado hacia atrás con gomina, su afro estaba sujeto por tantos litros de laca que seguramente había contaminado medio planeta por ese prominente cabello. Sus ojos tenían una capa de maquillaje, resaltaba sus ojos verdes y la palidez de su piel. Sus brazos y piernas indicaban las horas de gimnasio y su vestuario indicaba que tal vez fuese un criminal barriobajero…

Pero por algún casual, no se sorprendió que fuese novio de ese problemático chico rubio que estaba en la habitación esperando y reposando sus heridas. Y tampoco le sorprendía nada el guantazo que le metieron, pues ese pelirrojo no parecía tener mucha paciencia y mucho menos ser capaz de aguantar el insufrible temperamento de un borracho.

"Bueno, al menos ya sé quién es el hombre de la relación"

Tuvo el mal pensamiento de hacer esa clase de asunciones que no tenía permitido decir en voz alta, pero que no solo él, sino la gran mayoría lo pensaban cuando veían una relación de ese tipo…

Lo cual estaba siendo mucho más común que veinte años atrás…

Y no sabía si era por toda la peña que se dejaba llevar por el libertinaje o era el Sida el que estaba convirtiendo a todos los hombres en homosexuales.

- ¿Cómo se encuentra?- le preguntó al médico con un inesperado tono de voz lleno de calma y serenidad.

- Descansando, pero consciente. Adelante.- indicó con la mano la puerta.

El pelirrojo se adentró a la habitación en silencio, seguido por el médico. Los dos se encontraron con el rubio jugando con el vendaje que tenía en la mano derecha.

- No deberías despegar el vendaje, joven.

El rubio levantó la mirada hacia ellos y observó al pelirrojo fijamente, su mirada brilló y una sonrisa creció en sus labios.

- Kyley…

- ¿Estuvo usted presente cuando lo dejaron inconsciente?

- No.- negó el pelirrojo.- Estaba en la discoteca porque Kenny y yo habíamos quedado. Cuando conseguí identificarlo entre todo el mogollón de gente, estaba entre dos tíos, comiéndose la boca con uno de ellos mientras el otro le manoseaba.

- ¿Eso hice?- murmuró el rubio confundido.

- Cuando te reclamé me miraste confundido como si estuviera mal que me hubiera enfadado cuando te estabas manoseando tranquilamente con dos personas ajenas a mi conocimiento.- se cruzó de brazos.- Y encima tuviste el descaro de sonreírme para que me uniera…

Hubo un breve silencio.

- ¿Ahí fue cuando me pegaste el puñetazo?- preguntó el rubio confundido.

- No. Primero te peleaste con el novio del que te estaba besando. Ahí presumo que te rompiste la muñeca. Después te golpeé por morreártelo otra vez para molestar al novio.

Kenny abrió mucho los ojos, su mente buscaba esos recuerdos de verdad, no recordaba absolutamente nada... ¿Cómo era posible?

Se sentía impotente...

- ¿Hice eso?- volvió a preguntar confundido, se rascó detrás de la oreja, cerca de la sien.

- Me fui de la discoteca después de eso.- giró los ojos hacia el médico.- Lamento no haber tomado mi responsabilidad de traerlo hasta aquí para hacerle los chequeos médicos correspondientes, estaba furioso con él.

- No sé preocupe…- negó con la cabeza.- No tiene que disculparse conmigo…

Kyle puso sus ojos sobre el rubio oro una vez más.

- ¿Recuerdas algo?

Kenneth se veía muy frustrado.

- No.- negó con la cabeza. Bastante extrañado.- Creo que es por las lagunas mentales… No consigo recordar nada antes o después del puñetazo…- murmuró jugando con el borde del vendaje.

- Osea… ¿Qué pudiste habértelos follado o podrían haberte follado y ahora mismo podr. . .?

- Está limpio.- interrumpió el doctor antes de que el pelirrojo terminase sus palabras.

Kyle suspiró con exagerado alivio.

- Creo que exageras un poco…- murmuró Kenny.

- ¿¡Exagerar!? ¿¡Yo!?

El médico y el rubio se quedaron mirando al pelirrojo de la misma manera: una afirmación silenciosa.

Kyle se los quedó mirando a los dos y entrecerró los ojos como si les maldijera al mismo tiempo, pero prefirió quedarse en silencio y emitir un largo suspiro.

- Bien, puede que exagere un poco a veces… ¡Pero es por tu bien!- Kenneth rodó los ojos.

- Como digas, Kyley…

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Tengo que admitir que hubo tres problemas en esta historia.

Uno: Entendí mal el pedido, pensaba que era un Stan x Kenny x Cartman, osea un (stennyman).

Dos: Intenté arreglarlo y acabó siendo un K2; osea, que lo estropeé más todavía.

Tres: Al intentar incorporar a Cartman y Stan (con diálogos) simplemente no me salió porque los diálogos eran HIPER forzados (los tuve que eliminar, lo siento) QwQ

...

Originalmente (Stan x Kenny x Cartman) el papel de Kyle iba a ser Stan... Y a su vez, Cartman iba a estar presente en el hospital cuando despertase.

¿Por qué no hice absolutamente nada de eso?

No tengo ni idea.

Salió mal, todo mal. Y lo siento muchísimo, bestie, te juro que lo intenté QwQ (sí, el pedido es de mi bestie y me sabe MUY mal que no haya salido o tenido un resultado esperable y fluffy).

En serio, entendí muy mal el pedido y cuando lo intenté arreglarlo, lo acabé estropeando más.

QwQ

Aquí las opiniones -------->

Aquí peticiones para los siguientes Fanfics --------->

Espero que os haya gustado aunque haya sido una completa cagada, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo one-short

Bye~

By Silvia Line/ Ecchisforlife

[2302 Palabras]

P.d.: prometo que el siguiente sí estará mejor QwQ

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