Reto 77 - Cambio de vida
77.Escribe un relato sobre un personaje que en su infancia fuera pobre y ahora rico, o viceversa.
03-05-2018
¿Sabes lo raro que es que descubras, después de 14 años, que eres la heredera de un reino?, de seguro que no, ahora trata de imaginarte ser la princesa de un reino al que las personas comunes no pueden ir. Pero eso me pasó a mí, descubrí que era la princesa del reino de Dexna, un lugar al que casi ningún humano sin magia puede ir. Dejan que les cuente la locura de pasar de ser una chica pobre a ser una princesa rica heredera del trono.
Bien ya había salido por cinco meses con un chico, Leo, con quien acepté salir sin siquiera conocerlo realmente, pero a pesar de eso nuestra relación iba muy bien, cada cosa que conocía de él solo hacía que yo me sintiera más enamorada de él y Leo no parecía que me estuviera mintiendo, por lo menos no en el hecho de que yo le gustase, nunca me ha tratado de otra forma.
—Alicia, hay algo que deberías saber —me dijo mi novio un día mientras salíamos del cine.
—¿Qué es lo que pasa?, ¿es otra de esas preguntas filosóficas? —le pregunte un poco emocionada, realmente me gusta la forma en la que él estimulaba mi mente, haciendo preguntas sin respuestas correctas.
—No exactamente —se quedo pensando por unos segundos, después bajo la mirada el piso y susurro— pero podría ser así
—¿Qué dices?, oye sabes que no soy alguien que juzgue tan rápido y puedes contarme lo que quieras.
—Lo sé, bien mira me gustaría que usaras algo, se que te gustan los collares, ¿así que porque no usas este? —me dijo quitándose el collar de su cuello, ese que siempre traía y tenia forma de luna creciente de color azul zafiro. Se detuvo frente a mí y me lo uso en mi cuello.
En esos momentos no sabía en lo que me había metido, pero cosas raras comenzaron a pasar después de eso. Todo lo que quería a parecía, todo lo que deseaba lo obtenía de una u otra forma, quería un helado, un carro de helados aparecía en la esquina de la siguiente calle, quería no tener clases y sin razón aparente no las tenía, quería comprarme y no tenía dinero y me encontraba justo donde estuviera el dinero necesario.
Tal vez no sea nada raro, simplemente suerte, sí, eso creía yo. Hasta que Leo me dijo que era magia, que era algún tipo de hechicera o bruja, no lo creí, pero al ver su cara tan seria fue que lo reconsidere, él nunca estaba tan serio. Me dijo que el collar me ayudaba a controlar mis poderes y que si las cosas no aparecían de la nada era porque yo no creía que eso fuera posible, mi mente lo hacía parecer de una forma más normal, por así decirlo.
La revelación más sorprendente fue cuando, Leo me llevo a su casa, era la casa más grande que había visitado. Me relevo que era rico, dueño de una gran fortuna gracias a que sus padres lo adoptaron, cuando tenía 12 años. Nada cambio en mi actitud, pues el decía amarme a pesar de ser mucho más pobre que él, además no era el típico niño mimado. Yo lo amaba antes de saber que rico así, nada cambiaba en realidad entre nosotros.
—Yo siempre he considerado que los dos somos el uno para el otro —me dijo cuando estábamos en la azotea de su casa viendo el atardecer. Lo observe pensando que era muy dulce lo que decía— la verdad es que alguien decidió que nosotros debíamos casarnos
—¿alguien?, ¿Quién?, ¿Dios? —pregunte divertida
—No, no exactamente. Dime Ali, tu también fuiste adoptada por tus padres, ¿cierto? —yo asentí sintiendo que algo fuerte se venía— ¿no quieres saber quiénes son tus padres verdaderos?, la verdad es que yo los conozco o más bien mis padres
Lo observe pensando que estaba volviéndose loco, ¿Cómo podría conocer a mis padres verdaderos?, ¿Cómo podía afirmar que ellos habían decidido que debíamos casarnos?, de nuevo su cara estaba seria, no bromeaba, estaba hablando enserio. ¿Eso quería decir que estaba conmigo solo por eso?
—Lo nuestro... ¿solo estas aquí porque según tú estamos obligados a casarnos?
—No seas tontita, Ali, yo no estuve de acuerdo con casarme con una desconocida, pero te conocí, eras la chica más linda que había visto, ni siquiera sabía que eras tú esa chica de la que mis padres hablaban. Fue sorprendente que al final de todo nosotros sin saber nada termináramos enamorándonos... sé que hay mucha información que procesar, así que iras a casa y si quieres conocer a tus padres solo tienes que decirme, son casi igual de agradables que mis padres.
Yo pensé en muchas cosas ese día, pero nada de lo que se vino después de que le dije a Leo que quería conocer a mi familia verdadera, no es que no quisiera a mis padres adoptivos o mis dos hermanos mayores, pero no me gustaba no saber nada sobre mi verdadera familia, que de seguro tenían sus razones para separarme de su lado y quererme casar con un extraño.
Eran personas muy amables y no pareciese que no me quisieran, me emocione al verlos y de seguro ellos también, ¿Que me dijeron cuando los vi? Que era una de los herederos al trono del reino, que tenia magia poderosa que nadie más poseía, un hermano gemelo, un prometido (mi novio) y una edad límite para irme a vivir con ellos y dejar mi vida que conozco, que no viví von ellos en el castillo porque no querían que fuera una chica que no valorara a los demás. Dieciocho años, a los dieciocho años tendré que hacer todas mis responsabilidades como heredera al igual que mi hermano gemelo.
Ahora aquí estoy usando un vestido azul zafiro perlado con detalles color plata. Con una corona en la cabeza y personas a las que gobernar. No voy a negar que adoro la vida con un poco más de dinero y con la magia, pues es más cómoda, pero extraño a mi demás familia, el castillo es demasiado grande y las personas me tratan como si fuera lo más valioso del mundo, no me gusta en lo absoluto, no me gusta ser tratada tan diferente a los demás; mis padres querían que aprendiera eso, no es como que no lo haya entendido ya. Lo bueno es que mi hermano también entiende eso, y tengo a Leo para apoyarme en los momentos difíciles.
Escribo esto para no olvidarme de lo que mis padres querían que fuera, de cómo conocí al mejor novio del mundo y como un poco de cómo era mi vida antes de todo esto.
|/'|/
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro