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Chap. Ten. "Una batalla injusta"

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Daire y sus amigos aún no tenían idea de qué diablos le pasó a Lydia.

Las chicas Argent lograron sacarla del hielo y llevarla al estacionamiento. El aire fresco de la noche pareció ayudarla a calmarse, la rubia fresa ahora actuaba como si no estuviera gritando a todo pulmón. Primero gritó como un alma en pena y ahora.... silencio absoluto.

Después de que el eco del grito se disipó, los adolescentes quedaron rodeados por un silencio insoportable. Lydia prácticamente se quedó muda y no decía ni una palabra. Ni siquiera miraría a Allison o a Daire a los ojos. El hecho de que no estuviera pronunciando un solo mundo asustó a Daire más que su grito.

Allison se ofreció a llevarla a casa, ya que el auto de Lydia todavía estaba estacionado en el camino de entrada de los Argent. Pensando que sería más probable que Lydia se sincerara si solo fuera Allison en el auto, Daire agarró su bolso y se despidió. Diez minutos después, todavía estaba en el estacionamiento con Scott y Stiles, tratando de averiguar qué había visto.

- No había nada debajo de ese hielo - repitió Scott, de nuevo.

- Y el título de Capitán Obvio es para Scott McCall - murmuró Daire con sarcasmo. - Sé que no hay nada debajo. Pero lo que sea que vio la asustó muchísimo. No es como si estuviera gritando solo por gritar. Vio algo y lo que fuera, bueno, debe haber sido aterrador. Solo mirarla fue aterrador.

- No había nada ahí abajo - repitió Scott.

- ¡Scott, Lydia estaba arañando el hielo! - gritó Daire. - El hecho de que no podamos verlo no significa que no esté allí. Por lo que sabemos, esto podría ser un efecto secundario de la mordedura infestada de gérmenes de Peter.

- ¿Qué pasa con la mordedura? ¿Pensé que Lydia estaba perfectamente bien? - preguntó Stiles. - Bueno, si nos basamos en el concepto de que la mordedura debería convertir a uno en un hombre lobo, entonces sí, ella está bien. Pero todo eso significa que mi familia no tiene motivos para dispararle balas de acónito.

- ¿Qué estás diciendo? - preguntaron los dos chicos.

- Míralo de esta manera, Peter me mordió, pero no encendí la luna llena. Lo que significa que no soy un hombre lobo, pero tengo sentidos mejorados y puedo sentir emociones. Para Lydia cuando ella inicialmente fue mordida, los médicos dijeron que estaba teniendo una reacción alérgica. Como si fuera inmune, es decir, como yo, no se convertirá en la loba que Peter planeaba crear - dijo Daire. - Y ahora, se está escapando desnuda de los hospitales, solo para correr por el bosque durante dos días sin recordar lo que hizo, y ahora está viendo cosas que nadie más puede ver, cosas que la hacen gritar como un asesino. Lydia podría no ser un hombre lobo, pero definitivamente es algo.

Daire caminaba hacia el almuerzo, lista para devorar su PB&J cuando su celular vibró en su bolsillo trasero. Ella lo sacó y automáticamente dejó escapar un gemido.

De: Scott

Erica no diría de quién, podrías hablar con Isaac en francés. Gracias

Daire sabía que el plan de Scott y Stiles de que Scott simplemente se acercara a Erica y le preguntara nunca funcionaría. Pero lo que la molestó fue el hecho de que Scott ni siquiera se dio cuenta de que Isaac era un fugitivo. Lo que significa que no está en la escuela. Lo que también significa que no tienen nada.

Sí, sus amigos son idiotas.

Daire dejó escapar un suspiro agravado, listo para golpear algo, o a Scott. Sí, tal vez le pegaría a Scott. Los tacones de sus botas de combate resonaron en el suelo de linóleo y empujó las puertas dobles de la cafetería. Al otro lado de la habitación, pudo ver a Stiles caer espasmódicamente en la silla junto a Scott, comenzando una conversación en voz baja.

Daire comenzó a tararear el nuevo tema de Fairy Tail mientras caminaba hacia su mesa. A mitad de la melodía, pasó junto a una mesa vacía. Daire levantó una ceja confundida y redujo la velocidad de la melodía mientras miraba la mesa vacía, tratando de averiguar por qué la molestaba tanto. Dejó de tararear el tema de Fairy Tail tratando de entenderlo.

Fairy Tail, Llaves de la Puerta Celestial, Llaves.

- Ah diablos - ella juró.

Daire no perdió el tiempo corriendo el resto del camino hacia sus amigos. Giró bruscamente alrededor de la esquina de la mesa, lanzando una mano sobre los hombros de ambos. Stiles saltó, visiblemente desprevenido para la aparición de Daire.

- Tenemos un gran problema - murmuró a ambos. - ¿Mira eso?

Ambos miraron hacia la mesa en cuestión.

- ¿Qué? Es una mesa vacía.

- Sí, pero ¿quién tiene la mesa vacía? - espetó Daire, deseando que sus mejores amigas lo resolvieran más rápido.

- Boyd...

Daire asintió con la cabeza.

- Y si el MO de Derek es del tipo solitario e incomprendido, Boyd ha sido un objetivo potencial desde el principio. Y ahora vamos a hacer algo al respecto.

Ella los levantó a ambos por el cuello de sus camisas y los arrastró fuera de la cafetería. Scott y Stiles comenzaron a murmurar planes, tratando de evitar ser escuchados. Finalmente, a los tres se les ocurrió un plan de acción que no funcionó.

- Iremos a la pista de hielo. Y si no está en su casa, llámanos.

- Bueno, tal vez deberíamos dejarlo - vaciló Stiles. Daire enarcó una ceja. - Es Boyd, ¿sabes? Mira, dijiste que Derek les está dando una opción, así que...

- ¿Eres un idiota? - Dijo Daire, arrastrándolos hacia la salida.

- Tienes que admitir que Erica se ve muy bien. La palabra sensacional me viene a la mente: ¡Ay! - gritó cuando Daire lo abofeteó.

- ¿Cómo crees que se va a ver con una bala de acónito en la cabeza, idiota? - espetó Daire.

- Está bien, solo digo que tal vez esto no sea responsabilidad de tus muchachos - dijo Stiles.

- Todos lo son. Esto se va a salir de control y eso me hace responsable - cedió Scott.

Stiles los miró fijamente durante unos minutos antes de suspirar.

- Está bien, estoy contigo. Y también tengo que decir que este nuevo heroísmo me está haciendo sentir muy atraído por ti en este momento.

Scott sonrió y se rió.

- Callarse la boca.

- No, estoy hablando en serio. ¿Solo quieres intentar besarte por un, pero? - preguntó Stiles con seriedad.

- ¡Oh! ¿Puedo filmarlo y ponerlo en mi historia instantánea? - preguntó Daire sonriendo.

- Solo vete - murmuró Scott, empujando a Stiles y Daire mientras se reían.

- Todavía no responde - le dijo Daire a Scott, levantando la vista de su celda. - ¿En qué carajo se metió ese idiota?

Scott y Daire se habían detenido en la pista hace unos momentos en su bicicleta. Ambos tratando de captar el olor de Boyd y ponerse en contacto con Stiles.

- Probablemente esté atrapado en el tráfico o algo así - respondió Scott. - Él responderá pronto.

Daire asintió con la cabeza y saltó de la bicicleta.

- ¿Estás listo?

Scott y Daire se aventuraron hacia la entrada y encontraron las puertas abiertas. Tan pronto como entraron al edificio, los oídos de Daire captaron el sonido al instante. El estruendo de la maquinaria pesada. Daire y Scott se dirigieron hacia la puerta de la pista y la abrieron. Al otro lado del hielo estaba Boyd, conduciendo el Zamboni.

Scott comenzó a avanzar, pisando el hielo. Daire esperó que se estrellara, pero solo caminó hacia adelante con facilidad. Ella lo siguió, sus botas crujiendo en el hielo.

- ¡Boyd! ¡Solo queremos hablar! - Scott gritó. Boyd acaba de seguir Zamboni. Bien entonces. - ¡Vamos, Boyd, por favor! ¿Derek te contó todo? ¡Y no me refiero solo a perder el control en la luna llena, me refiero a todo!

Boyd miró al frente, pero fue suficiente para que se detuviera.

- Me habló de los cazadores.

Scott frunció el ceño.

- ¿Y eso no es suficiente para que digas que no? Lo que quieras, hay otras formas de conseguirlo.

- Solo quiero no almorzar solo todos los días.

Daire no pudo evitar sentir la tristeza que Boyd mantenía encerrado en su interior. Era difícil no sentirlo, y ella lo entendía. No se trataba del poder, se trataba de ser parte de una manada. Al no estar solo, estaba cansado de estar solo, al igual que ella.

- Boyd - comenzó. - Me encantaría ser tu amigo. Puedes almorzar con nosotros, ser parte de nuestra manada. Puedes hacerlo mucho mejor que Derek.

- Sabes, eso realmente duele, Daire - resonó una voz en la pista. Ella gimió.

- ¿En realidad?

Daire se dio la vuelta y sonrió descaradamente.

- Lo siento, pero en este momento no estás mostrando ninguna cualidad de liderazgo destacada y despreciaste a 5 Seconds of Summer. Así que mi declaración se mantiene.

Todos los demás parecían confundidos acerca de por qué mencionó 5sos, pero Derek continuó.

- Bueno, si vas a revisarme, al menos toma un... consenso. ¡Erica! ¿Cómo ha sido la vida desde que nos conocimos?

Ella sonrió diabólicamente.

- ¿En una palabra? Transformadora - Sus colmillos se alargaron y dejó escapar un gruñido, luego dejó que sus caninos retrocedieran.

Derek sonrió.

- ¿Isaac?

Daire sintió que su corazón latía doki doki en su pecho cuando el chico de cabello rizado se encogió de hombros.

- Bueno, estoy un poco molesto por ser un fugitivo. Pero aparte de eso, estoy genial - sonrió, enviando una sonrisa arrogante en su dirección.

- Está bien, espera, esta no es exactamente una pelea justa - intervino Scott.

- Entonces ustedes dos deberían irse a casa - Scott y Daire compartieron una mirada antes de volverse hacia Derek y su manada de cachorros. Daire sacó algunos cuchillos de sus botas y los arrojó por la pista y en los hombros de Issac y Erica mientras Scott se agachaba y arañaba el hielo con sus garras. Los ojos ahora brillan con un brillante tono dorado, listos para la batalla.

Daire dejó escapar una sonrisa cuando Isaac y Erica sacaron sus cuchillos.

- Sí, no es justo para ellos.