Los meses posteriores fueron duros. La tripa de Lily empezó a crecer en el sexto mes, justo cuando se enteraron de que tendrían una niña. Por supuesto Sirius reclamó ser el padrino y entonces James le dijo que habían decidido que iba a decidir el bebé cuando naciera. Todos cogerían a la pequeña y, si no lloraba en sus brazos, sería el elegido para ser el padrino. Sirius se quejó todo lo que no estaba escrito y James, esa misma noche, le prometió que si no era con ella sería con el segundo. Y, aparentemente, Sirius se calmó. Hasta que a la mañana siguiente llegó con un montón de papeles sobre posibles nombres para el bebé. Y Lily se encargó de embrujarle para que saliera de la habitación y la dejase dormir. El primer trimestre había sido bueno, sí, no había tenido náuseas ni nada, pero ahora... estaba siempre cansada. Demasiado cansada. Y quería comer a todas horas, cualquier cosa. Aunque las plumas de azúcar solían ser lo que más pedía.

Se casaron en junio, cuando Lily estaba embarazada de seis meses y parecía que todo iba bien. Petunia no fue a la boda, por supuesto, le había pedido ser su dama de honor, pero ella se negó y la llamó de todo, además de añadir que no quería volver a verla en la vida. Sus padres, por supuesto, estaban enfadados con la actitud de su hija, pero no hubo forma de convencerla de que fuera a la boda. Sin embargo, estaban encantados con la idea de una nieta, al igual que los señores Potter, que pensaban que no vivirían para tener uno, y ya solo tenían que esperar tres meses más para ver a su pequeña nieta. Fue en la boda cuando James y Lily anunciaron el nombre de su hija, Atria. Por supuesto Sirius se echó a llorar ya que había sido uno de los que eligió él, concretamente era de sus favoritos, al igual que lo era Harry; aunque de broma les había propuesto como primer nombre Elvendork porque era unisex y tenía una historia muy divertida con James, su motocicleta y unos policías. Les había rogado durante meses que le pusieran ese nombre e incluso había empezado a acariciar la tripa de Lily llamando así a la niña, que le respondía con patadas que demostraban lo poco que le gustaba el nombre —según Lily— o lo mucho que le gustaba —según James y Sirius—. Peter, por supuesto, apoyaba a los dos con el nombre y Lily amenazó un día con echarles de casa.

Aunque todo parecía que iba mejor, no fue a mejor. A finales de agosto Dorcas Meadowes fue asesinada a manos del mismísimo Voldemort y fue cuando Atria decidió llegar al mundo, un mes antes de lo planteado. En cuando Remus trajo la noticia a la casa, Lily empezó a sufrir las contracturas y, corriendo, los cuatro se fueron al hospital. Sirius fue quien se encargó de ir a buscar a los señores Potter y Remus a los señores Evans y a Peter no tardaron en mandarle un patronus para que fuera al hospital muggle, al mismo donde Lily había tenido todas sus revisiones. Cada día había sido más y más peligroso ir a San Mungo, por lo que no se habían arriesgado a ir hasta allí. Eran miembros reconocidos de la Orden del Fénix y no podían arriesgarse.

Las contracturas empezaron el treinta de agosto, pero Atria no nació hasta el día treinta y uno. Lily amenazó de muerte a James tantas veces durante ese día que incluso los médicos tenían miedo por el chico. Y, por fin, la pequeña nació. Era exactamente igual que su padre, pero parecía que sus ojos los había heredado de su madre. Miraba todo con curiosidad, ni siquiera lloraba, pero sus padres sí que lo hicieron, al igual que sus abuelos.

— Este es Sirius —le dijo James a la pequeña Atria cuando fue a presentarle a sus amigos, y en cuanto la cogió la niña empezó a llorar sin parar. Sirius no sabía que hacer, así que James volvió a cogerla y ella se calmó. "Puñetera niña" pensó Sirius—. ¿Quieres cogerla, Peter?

— Sí —dijo el pequeño, pero la niña volvió a empezar a llorar y solo se calmó en los brazos de su padre, de nuevo. Sirius estaba molesto, realmente molesto. La mocosa lloraba con él, ¡había elegido su nombre! Era una desagradecida. Iba a esconder la pequeña chaqueta de cuero negra que le había comprado y sería para el siguiente Potter.

— ¿Dónde está Remus? —pregunta James, intentando buscar al merodeador restante y Sirius suspira.

— No quiere cogerla, dice que le hará daño, quedan solo seis días para la luna llena.

Durante los últimos meses de embarazo de Lily, Remus se había alejado bastante de ellas, diciendo locuras como que las podría hacer daño. Y ahora, cuando la niña había nacido, no estaba por ninguna parte. Solo podían coger a Atria porque, a pesar de haber nacido con ocho meses, estaba perfectamente sana y los médicos no podían explicarse como podía tener la apariencia de una niña nacida con nueve meses. Todos sabían que era fruto de la magia, claro, pero no podían explicárselo a los muggles.

— Ve a buscar a tu novio para que podamos acabar ya con las presentaciones —dice James, y a Sirius le falta tiempo para ir a por él.

— Es tan pequeña, James —murmura Peter, mirando a la niña. ¿Cómo podía ser tan pequeña? Peter le dio el dedo índice a la pequeña, que lo agarró con fuerza. James se empezó a reír al ver como Peter levantaba la mano derecha y su pequeña Atria seguía agarrando su dedo sin ningún problema.

— Le encontré, estaba dando vueltas en el aparcamiento como loco —dice Sirius, volviendo con Remus de la mano, que está incómodo, realmente incómodo. Es aún más pequeña de lo que pensaba, ¿cómo iba a cogerla sin hacerla daño? —. No te preocupes, Moony, en cuanto la cojas se echará a llorar y James te la quitará de encima. ¿Cómo vais a decidir quien es su padrino si llora cuando la coge alguien que no sea alguno de vosotros dos?

— Supongo que podemos echarlo a suertes —dice James, sonriendo y le pasa a la pequeña Atria a Remus.

Ella no llora, si no que abre los ojos y le mira fijamente. Y James empieza a reírse.

— Enhorabuena, Lunático —le dice, sonriendo de oreja a oreja—. Sujétala un rato, me duelen los brazos, voy a ver a Lily para contárselo.

— ¡No me dejes a la niña, Potter! —dice Remus, pero es demasiado tarde porque James ya se ha metido a la habitación de Lily, donde empieza a contarle como su hija ha llorado con todos menos con Remus.

— ¿Por qué no me has elegido a mí, mocosa? ¡Te he comprado hasta una chaqueta de cuero! Ahora tendremos que buscar una cazadora con parches en los codos para que vayas igual que tu padrino —dice Sirius, mirando a Atria y, juraría, que la niña sonríe, pero sabe que es imposible porque los bebés tan pequeños no saben sonreír, solo saben llorar, comer y cagar. Al menos es lo que siempre ha oído.

— Sirius, cógela, tengo que hacer entrar en razón a James y a Lily.

— ¡No, no me la des, va a empezar a...! —pero no termina la frase ya que Remus le pone a la niña en brazos y ella se queda completamente callada y tranquila en sus brazos. Así que entra también en la habitación, con Peter detrás que no deja de reírse—. ¡Estaba esperando a que la cogiera Remus, mira!

— Tiene buen gusto —dice Lily desde la cama, sonriendo y cuando ve como Remus va a hablar niega—. Atria te ha elegido a ti, debió de oír la conversación que tuvimos sobre quien iba a ser su padrino y esta ha sido su forma de elegir.

— Entonces... ¿ya podemos cogerla todos? —pregunta Peter y Sirius le da a la niña en respuesta, que sigue sin llorar. Peter vuelve a poner su dedo en la mano de Atria y, como antes, la pequeña lo agarra con fuerza—. Creo que va a ser tan lista como tú, Lily.

— Gracias, Peter —dice ella, sonriendo. Está cansada, pero ha merecido la pena. Al menos hasta que Atria empieza a llorar y Peter se la pasa rápidamente a Lily, pero la niña no deja de llorar—. Creo que eso es que tiene hambre, ¿no?

Tienen mucho que aprender, por eso rápidamente van a buscar a los señores Evans y a los señores Potter a la cafetería del hospital, donde habían estado hablando tranquilamente. Por supuesto, cuando llegan a la habitación de Lily se deshacen cuando ven a la pequeña niña, su nieta. Y se deshacen aún más cuando, cuatro meses más tarde, Lily vuelve a anunciar que está embarazada. Otra locura más para su lista. Atria solo tiene cuatro meses cuando se enteran de que van a tener otro bebé y, ya que tienen a una recién nacida, ¿por qué no tener otro? Total, Lily solo había ido a un par de misiones mientras que Atria se quedaba con Remus y Sirius en la casa, protegidos.

A la semana siguiente de saber que estaba embarazada de nuevo, también se enteró de que los Longbottom también esperaban un bebé y justamente para las mismas fechas que ella, en julio. Y, además, Molly Weasley estaba a tan solo tres meses de dar a luz a su sexto hijo. Ella no solía ir a las reuniones de la Orden del Fénix, Lily solo la conocía de oídas, pero los gemelos Prewett se encargaban de decirle a todo el mundo que iban a volver a ser tíos en nada. Estaban tan orgullosos de todos sus sobrinos.

Todo parecía volver a ir bien, la tripa de Alice Longbottom y la de Lily empezaban a crecer, aunque seguían luchando, protegiendo el cuartel general de la Orden del Fénix. Atria ya chillaba para llamar a todo el mundo y, cuando se acercaban a verla les sonreía. Le gustaba mucho llenar de babas un peluche que le habían regalado Sirius y Remus de un pequeño lobo —que causó las risas de James, Lily y Peter cuando lo vieron— y solía ser realmente simpática con todo el mundo. Tenía un pelo imposible de controlar, tal y como era el de James, por lo que habían dejado de intentar peinarla.

Fue, después de una de las primeras reuniones de la Orden del Fénix al principio de 1980, cuando Lily y James Potter se enfrentaron a Voldemort por primera vez. Volvían a casa de una reunión, preocupados por la cantidad de ataques que estaba habiendo —Frank y Alice habían sufrido una emboscada tan solo tres días atrás, también enfrentándose al mismísimo Lord Voldemort por primera vez y saliendo bastante ilesos para lo que les podría haber pasado— se habían reunido para intentar averiguar cómo podrían estar siempre donde ellos estaban. James llevaba a Atria en brazos cuando se cruzaron con ellos en la vuelta a casa. Por suerte, Lily no había parado de crear hechizos mientras que estaba embarazada —no pudo evitar agradecer a Snape por haberla enseñado ese arte, aunque se arrepintió en seguida de hacerlo al ver que estaba con los mortifagos, intentando matar a James y a Atria— y ellos no supieron defenderse de los ataques de James y Lily, que luchaban con todas sus fuerzas para proteger a Atria y al pequeño Harry. Las palabras exactas de los Potter cuando Lord Voldemort les propuso unirse a sus filas fueron "antes muertos que a tu lado" y entonces Lily hechizó el suelo para que se tragara a Voldemort.

Los siguientes meses no fueron fáciles para los Potter. Los señores Evans fallecieron en un accidente de coche cuando Lily estaba embarazada de siete meses y, al mes siguiente, fueron los señores Potter quieren fallecieron, a causa de la viruela de dragón. Tenían que seguir luchando, la guerra empeoraba y ni siquiera podían llorar a sus seres queridos. En el mismo mes Harold Minchum, el Ministro de Magia, fue brutalmente asesinado por los mortifagos, iniciando una guerra aún más sangrienta que la que estaban viviendo hasta el momento. Y no tenía pinta de que fuera a acabar pronto.

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Mi niña ha nacido 😭😭😭😭😭😭😭😭😭

Y estos Potter... no tienen bastante con una recién nacida que van a por el segundo, si es que son... Por cierto, Atria no va al curso de Harry por dos días :) Iba a hacer que naciera el uno de septiembre, pero... ¿qué pasa si naces el uno de septiembre? ¿Si naces antes de las once, que es cuando parte el tren vas y si naces después no? Así que en mi canon si naces el uno de septiembre eres un squib (ya tenemos cumpleaños para Filch, solucionado todo)

También siempre me he imaginado a los bebés mágicos un poco más avispados, principalmente porque son bebés y la magia está en sus venas jajajajajaja

Por cierto, el dedo que agarra Atria es importante para la trama jejejejejejejejejejejeejejejejejejeje vale ya si, es el que se cortará Peter más adelante porque me ha parecido muy simbólico jajajajaja

Lo dije por Primavera, pero aquí no así que a ello vamos, ¡podéis encontrarme en Twitter! Hago lo mismo que aquí pero elevado a la enésima potencia (vamos, que me quejo lo que no está escrito, sin ir más lejos, antes de ayer estuve quejándome de lo que me parece el lenguaje de programación para iOS y también estuve poniendo verde a Snape porque si no no me quedo agusto). Soy @_Ogaira porque sin la _ estaba cogido (por mi, me la tienen bloqueada y no me dejan eliminarla, en fin xd).

Y bueno, nada más, mil gracias por leerme y nos vemos la semana que viene (y el domingo en Primavera) ♥♥♥