Camino sería como de costumbre directo donde su jefe la llamaba, ella en realidad no había mencionado nada acerca del encuentro que tuvo con su jefa.

Trataba de evitarla porque su pecho se comprimia lleno de emociones desconocidas.

Lisa sabía que a su jefa no le emocionaba la idea de ser ignorada, pero ella también tenía que trabajar.

- Mandaremos un infiltrado -avisó su jefe mostrándole la foto de un tipo extraño- El es Jackson Wang -

Si su jefe quería perder una guerra a manos enemigas no era su problema, al menos ella no le tenía demasiada estima al viejo.

(...)
- El ave está sobre el nido -dijo procurando guardar silencio- lo ubicarán tan pronto lo veas y sabrás que hacer -

- El águila sigue en su sitio -respondió del otro lado- nadie sospecha del vigilante -

- Sobre lo otro...

- No te preocupes por eso, era necesario -aseguró la voz que se escuchaba distorsionada- ¿hay alguien ahí? -

- Negativo, solo yo -

- Entonces has bien tu trabajo para que tengas lo que mereces -

- Cumple tu parte -

- Hasta luego cariño -

Guardando el teléfono que había conseguido a duras penas camino los pasillos vacíos del lugar, era de noche.

A esa hora todos salían o cogían por ahí, con las putas de la esquina o entre ellos.

Podía ver las sombras de las habitaciones mientras se dirigía a la zona de entrenamiento.

- ¿Con quien hablabas? -pregunto una voz a sus espaldas-

- Me parece que no es tu asunto -respondió dándose la vuelta antes de mirar a Jennie-

- Me pareció oír un cariño -dijo mirándose las uñas-

- Si -

- ¿Entonces? -inquirió alzando una ceja-

- Sigue sin importarle, pero le recomiendo irse de aquí -dijo sonriendo lo más amable posible, detestaba a esa mujer- a esta hora lo que usted conoce de día se torna un nido de buitres, no se -respondió haciendo un puchero y desviando la mirada- pueden intentar comérsela viva -

Esto está confuso pero es importante, ya verán por qué.