12° La espera.
Por Qui.
De repente se abre la puerta de la sala y veo al hermano de Cheng esta lleno de vendas parece un tigre enjaulado, se a escapado de la enfermería, unas enfermeras vienen tras él asustadas por si se lastima de nuevo.
Tian para en seco su carrera desesperada al ver a ese chico pelirrojo, parece algo aliviado al verle ahí delante y es cuando se echa a llorar mirándole angustiado.
El muchacho asombrado por verle así se va acercando a él despacio como si temiese asustarle, cuando está cerca de él tímidamente le rodea con sus brazos, en un abrazo inseguro e inesperto.
Tian se deja consolar por él y le aprieta con sus brazos llorando de nuevo en su hombro, las enfermeras le dejan estar aquí ya que al de un rato ese chico le consigue calmar.
Nos sentamos en la sala, Tian no se aparta de ese chico, que solo se deja coger de la mano por el moreno, mi primo me mira interrogante por saber que ha pasado, porque estamos todos tan ansiosos, llenos de sangre y heridas.
Pero yo no puedo hablar todavía no... o me quebrare, tengo que ser el fuerte...
Mi hermano todavía sigue mirando sus manos aturdido, las manos ya están limpias alguna enfermera se las ha limpiado no se ni cuando, él solo se ha dejado hacer, repitiendo una y otra vez que le debía haber perdonado.
Yo solo miro la puerta esperando que se vuelva a abrir y nos den alguna maldita noticia de una buena vez, la que sea... no se si tendremos derecho a ello, yo no soy familiar de ningún herido.
Menos mal que Tian esta aquí así de alguna forma me puedo enterar de su estado...
Noto como Tian que ya está más calmado me mira intensamente, así que yo le miro también de igual forma.
Tian - sin dejar de mirarme - ¿estas saliendo con mi hermano?
Mierda yo no puedo responder eso, no soy quien para decir nada, creo que eso es cosa de Cheng, a demás no se si es prudente hablar de esas cosas aquí.
Qui - me pongo serio - solo soy su mano derecha...
Tian solo chasquea la lengua disconforme con mi respuesta levantando ambas cejas, mi primo me mira rascándose el mentón sopesando algunas cosas.
En ese momento mi hermano sale brevemente de su ensimismamiento, como si se le hubiese encendido un interruptor, sorprendiéndonos a todos.
Tatzuki - serio - no digas mentiras... - levantándose enfadado - eres su novio... - aprietas los puños - no más mentiras...
Se vuelve a sentar de golpe repitiendo eso como si fuese un mantra, yo solo me pongo rojo hasta las orejas por lo que has dicho, porque me has delatado idiota... es cuando oigo a Tian reírse de mi reacción.
Tian - yo te miro enfadado - no me importa...
¿Que? ¿no importa? así que no te importa que esté con tú hermano... vaya...
Tian - sonríes de lado - mi hermano se merece que le pasen cosas buenas.
Yo te miro sorprendido, una lagrima rebelde amenaza con salir de mis ojos ante tal declaración, la reprimió como puedo no puedo dejar que me vean vulnerable.
Es entonces cuando entra mi tía en la sala, mira a todos sorprendida de vernos ahí reunidos, tras ella viene un oficial de policia parece que la ha estado preguntado por Andrés y Li.
Ángela - invitándole a sentarse - acabo de operar a Andrés, todo a marchado bien ya esta en la sala de recuperación - mira al oficial - la bala salió limpia y no toco nada importante ahora solo hay que esperar que se despierte.
Bueno parece que este por lo menos saldrá bien de esto, miro a Tatzuki que suelta un suspiro aliviado, es cuando entra una enfermera alterada.
Enfermera - cogiendo el brazo de mi tía - doctora Ángela la precisan en el quirofano 5 - tirando de ella - el agente que cayó herido de bala en el pecho, está muy grave.
Mi tía mira a mi primo preocupada y sale corriendo a ayudar, mierda ese era el novio de mi primo.
Oficial - hablando por teléfono - si el agente Andrés ya está operado en recuperación, el agente Li... parece que esta grave... - levantándose - voy a ver que averiguo...
Yo le miro mal no le habíamos dicho nada a Saung, este me mira angustiado sus ojos se llenan de lágrimas, viene corriendo donde mi.
Saung - lanzandose a mis brazos - ¿le han herido? ¿se va a morir?
Qui - intentando calmarte - tú madre, esta con él... confía en que ella va a salvarle...
Saung se separa de mi aún esta angustiado lo noto, pero solo podemos esperar noticias de ese chico.
El oficial abre la puerta para ver si consigue alguna información más, es cuando se oyen las alarmas de códigos de emergencia, parece que hay problemas en otro quirofano.
Cuando dicen el número Tian se levanta muy asustado parece que sabe quien está en ese quirofano.
Tian - yendo corriendo a la puerta - es mi hermano...
Me quedo parado en el sitio no puedo ni moverme como si estuviese congelado, es ese chico quien impide que Tian vaya a ver que pasa yo solo miro esa puerta rezando para que todo salga bien.
Cheng.... tú no puedes morirte... tú no, no me puedes dejar solo... tú no, no puedo volver a pasar por esto... tú no, si no estás yo... tú no...
El tiempo parece que se ha parado, la aguja del reloj parece que no se mueve, parece que se ríe de mi...
Las lágrimas rebeldes salen de mis ojos, ya no las puedo reprimir... bajo mi cabeza angustiado, aprieto los puños con rabia esa sensación de pérdida vuelve de nuevo a mi...
Flashback
Tengo 16 años y estoy en un hospital del centro, estoy en una de las salas de espera, estoy sentado al lado de Tatzuki que intenta consolarme.
Mamá a desarrollado una extraña enfermedad, lleva muchos años luchando contra ella, después de numerosas pruebas nadie sabe que le pasa, ni que es lo que le provoca este mal.
Han detectado algo extraño en su estómago, creen que podría ser el origen del mal, la están operando... nadie quiere decirme nada.
El padre de Tatzuki, David, mira la puerta ansioso esperando noticias de los médicos, era una operación muy sencilla, sin complicaciomes un par de horas según el médico.
Pero maldita sea llevamos cuatro malditas horas sin saber nada de ella, nadie viene a decirnos nada, es cuando suenan las alarmas de emergencia se oyen por todo el hospital, hay un código rojo...
Los médicos corren al quirofano y el padre de Tatzuki se quiebra, se cae de rodillas al suelo llorando...
Es la primera vez desde que mamá se puso enferma que le veo llorar, se lleva una mano al pecho y suelta un grito desgarrador.
Yo me temo lo peor... Tatzuki no sabe a quien consolar o a mi o a su padre, para él también es nuevo verle así de destrozado por alguien.
Unos malditos 15 segundos interminable después, es cuando por fin se abren las puertas de los quirofanos los médicos debastados salen quitándose los gorros.
Doctor - bajando la cabeza - hemos echo todo lo posible...
David - desconsolado - no, no, no - zarandeando al médico - volved dentro devolvermela...
Tatzuki - yendo donde el sorprendido - papá... calmate...
Yo solo aprieto mis manos, mis peores miedos se han echo realidad, mi mamá... mi mamá.. ha... muerto...
Un par de días después hacemos su funeral, David se ve tan hundido y devastado por su perdida, Tatzuki tan asustado por ver a su padre así y yo... yo... ya no tengo más lágrimas.
Me despido de ella, ya no va a sufrir más... después fue mi tía quien me llevó a vivir con ella, fue lo mejor porque así no vi el declive de David, se dejó llevar por la depresión, solo y abandonado ya que su hijo se marcho no sabemos donde.
Un día fui a visitarle, no podía dejarle solo y lo vi... se había cortado las venas, dejó una nota.
"Lo siento, sin ella... yo no soy nada, perdóname hijo, te quiero"
¿Solo eso? ¿nada más vas a decirle a tu hijo? llevaba dos días muerto, Tatzuki ni siquiera lloro en su funeral después de eso se volvió a marchar.
Vuelta el presente.
Mis lágrimas salen de mis ojos y manchan mi pantalón, noto una mano en mi espalda, miró de reojo por curiosidad es mi hermano.
Tatzuki - palmeandome la espalda - él es fuerte... va a estar bien...
Me lo esperaba, me dice lo mismo de vuelta, pero maldita sea voy a creer, es verdad es jodidamente fuerte...
Vuelvo a mirar esa maldita puerta, como odio los hospitales...
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