Capítulo cuarenta y nueve.
Progreso
Si mi creatividad ya estaba mala, con aquello que me envió Nayeon terminó por ser nula, y ya vendría siendo hora, después de producir y escribir hits a diestra y siniestra.
Dejé pasar las pocas horas que faltaban del día y dormí, yendo a la compañía viendo a mis candidatos a manager.
Me llevaron a una sala tipo conferencia donde estaban ocho personas, mitad hombres y la otra mujeres.
Empecé a leer currículums de cada uno, pero ya tenía un poco claro a quienes descartar, a la mayoría de hombres.
¿Por qué? Antes de pedir candidatos, investigué un poco sobre managers coreanos y me di cuenta que muchos estafan a sus propios artistas, no es común, pero no quería arriesgar, además soy demasiado nuevo en el ojo de la tormenta pública.
Solo me dejaba a cuatro posiblidades, una mujer de mediana edad, en sus treintas, una en los cuarentas y dos en los veintes.
—Bien, señores, pero pueden irse— Dije cuando empecé a pensar en ciertas preguntas a las mujeres.
Todos los hombres de la sala menos yo salieron.
—Bien, ¿En qué creen que puedan ayudarme como mi manager? — Pregunté al aire, dejando cierto trecho para que lo pensaran.
Un minuto después señalé a la que estaba más cerca de mi, la de los treintas.
—Estoy segura que puedo ayudarlo dándole toda la información relevante para usted y cuidarlo de estafas— Respondió.
Señalé a la segunda, que estaba del otro lado pero seguía estando más cerca, y era una de las más jóvenes.
—Bien… Aunque soy joven y un poco inexperta, se manejar números y soy buena bajo presión— Respondió con timidez.
Señalé a la tercera más cercana, la más joven de todas.
—Estudié contabilidad y gestión de negocios, aunque esta sería mi primera vez siendo manager— Respondió más segura que la anterior.
—Vaya, pero para estar aquí se necesitan muy buenos contactos, en un día hago más dinero que un negocio entero sin hacer nada— Respondí esperando una respuesta inteligente.
—Según cálculos que hice antes de venir, estarías ganando al día, casi cuatrocientos mil dólares, por lo que ganas el doble que un negocio en Gangnam diariamente— Respondió dejándome sorprendido por la casi exactitud de sus datos.
Señalé a la última y la más grande de entre todos.
—Por lo visto soy quien más experiencia tiene entre todas, trabajé con grupos de la compañía antes, además que manejé las carreras solistas de algunos de mis representados— Respondió.
—Bien, voy a hacer elección en este momento pero denme un momento para pensar— Expresé poniéndome a pensar luego.
Deliveré un largo rato, a lo que no me decidí por una, si no por dos.
—A las que voy a contratar serán a— Señalé a la más joven. —También a— Señalé a última.
—Hago está decisión porque planeo invertir mucho dinero en negocios y la experiencia y cualidades de ambas me servirán en mi carrera— Expliqué después.
Luego de que las dos no seleccionadas salieran de la sala, las otras dos empezaron a hablarne un rato sobre sugerencias, luego de eso fuí a rutina diaria de la compañía.
Se sentía muy solo una vez que ya ni podía hablar con TWICE.
Y se sentía solo porque mis dos managers estaban recopilando datos apenas.
El resto del día restante me la pasé ensayando y intentando arreglar la canción que estaba creando, pero sin mucho éxito, no sabía a donde quería llevarla.
Podré ser el señor don perfecto haciendo canciones en una o dos tomas, pero si no tengo la más mínima idea de que plantear el ritmo o la letra, no me sirve esa musicalidad.
En la noche ya a punto de dormir recibí dos mensajes, y muy distintos.
—Buenas noches, mañana cuando lo recoja y lleguemos a la compañía le daré la lista de programas, colaboraciones y ofertas nuevas y le daré instrucciones sobre cuáles aceptar y cuáles no— Ese era el de manager experimentada.
—Buenas noches, espero que duerma muy bien y mañana espero que podamos hablar más sobre sus intereses— Y ese era el de la más joven.
Al menos le estaba dando uso a mi aplicación de mensajería una vez más.
Caí dormido, a lo que empecé a soñar con aquella chica alta que tantas cosas había inspirado, aunque era el sueño más abstracto y ambiguo que hubiera podido tener, más que todo porque su cara estaba en el medio de un girasol.
Desperté de golpe y sintiéndome raro por soñar cosas así.
Solo por si acaso me metí al estudio antes de siquiera lavarme los dientes y rostro.
~No hay necesidad de decir que no tengo todo bajo control~
~Ella es muy mala-mala sin necesidad~
~Pensando raro, perdiendo mis estribos~
~Soy un gran perdedor, se cómo se siente eso~
~Algunas cosas simplemente no puedes negar~
Rapee parte de lo primero.
~Y me dejas en el polvo~
~Aunque estoy atascado contigo~
~Eres el girasol, eres el girasol~
Dije sin tener mucho sentido a la primera o en ese orden, mi mente aún estaba en forma de rompecabezas.
~Creo que tú amor sería demasiado~ Dije siguiendo lo anterior.
~Cada vez que dejó de estar contigo, se hace menos fácil~
~Desearía siempre estar allí para ti~
~Se que tienes miedo de lo desconocido, no quieres estar sola~
Luego de eso mi mente empezó a reacomodarse a lo que empecé a hacer uniones entre todo lo que rapee y luego de arreglar partes, reacomodar, cambiar ritmos, cambiar mi forma de articular y dividir la canción en dos con voces agudas y graves, tenía casi todo… pero algo faltaba.
A lo que volteé a ver las perillas de mi mezclador.
Seleccioné la pista entera, empecé a girar las perillas buscando algún buen resultado, a lo que lo logré, increíblemente solo tenía que hacerla distorsionar y bajarle un poco las frecuencias.
Amé tantísimo la canción que aunque iba a ser coreana, la deja en inglés y luego la traduje, sería una canción en ambos idiomas.
La canción es "Sunflower" de Post Malone y Swae Lee
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