Donde Jungkook deja de ser el mejor amigo de Jimin para ser algo más.

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🐰 CAPÍTULO UNICO🐰
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«El truco está en decirle adiós  a la persona, no al amor»

Jeon Jung-Kook

Estaba sentado tranquilo, pesando en lo que he tenido que pasar toda mi vida, y una voz me saca de mis pensamientos.

—Amor, ¿estás bien? —dijo preocupado.

—Sí, estoy bien. ¿Por qué? —pregunté confundido.

—Te estaba hablando pero no respondías. —frunció el ceño.

—Estaba pensando. —sonreí leve.

—Y que estabas pensando. —me miro esperando una respuesta.

—En que gracias a ti, pude superar todo lo que he pasado. —sonrío levemente y se acercó a mí para abrazarme.

Desde que había cambiado la relación de "solo amigos", y se había convertido en algo más, mi vida cambio completamente. Su amor era lo que me faltaba para completarme, gracias a él deje atrás los malos recuerdos y ahora solo pienso en lo bien que la paso a su lado.

—Y gracias a ti supe que es el amor, por ti pude cambiar, y pues cambié por ti Jungkook. Sabes que te amo, que nunca me separaría de ti. —dijo y me beso.

—Te amo Jimin, no sé qué haría sin ti en mi vida.

—TE AMO. —grito a los cuatro vientos haciendo eco en toda la casa.

Ya estaba acostumbrado a que me dijera que me amaba, lo hacía en cualquier momento y circunstancia, eso siempre me ha gustado de él; ya que me hace sentirme amado.

De un momento a otro Jimin se tornó serio, y pues me pareció muy raro ya que cuando estamos juntos no es para nada así.

—Jimin, ¿Por qué haces esto? —y se volteo serio a mirarme.

—Hacer que. —respondió bastante confundido.

—Por qué me gustas tanto, porque me tengo que morir todas las noches por estar contigo. —dije e hizo un puchero y yo solo reí a su comentario.

Me dirigí a donde se encontraba y me senté encima de él; haciendo movimientos lentos, y circulares a lo que este jadeo. Lo bese y le mordí el labio para que abriese un poco su boca, dándome la libertad de meter mi lengua en esta.

Jugamos con nuestras lenguas, yo probaba cada parte de su boca. Él se levantó y yo rodee mis piernas en su cintura; mientras este me llevaba hasta mi cuarto.

Entramos y allí me recostó delicadamente en mi cama sin dejar de besarnos y procedió a quitarme mi pulover. Acto seguido quite sus pantalones, y a simple vista pude notar un gran bulto en sus pantalones y sabía que estaba demasiado excitado.

Él me quito mi pantalón, dejándome en ropa interior. Luego prosiguió a quitarme el bóxer, y lo tiro en algún lugar de la habitación. Empezó a bajar sus besos a mis tetillas y los empezó a besar, lamer y chuparlas.

No me quede atrás y le quite su bóxer, dejando ver su gran erección.

—¿Quieres que te ayude con eso? —dije mientras le señalaba su erección.

Jadeó un poco mientras asentía con la cabeza. Sin más me arrodillé y agarré su miembro y lo empecé a masturbar, mientras él, gemía de placer.

—Jungkook, no pares. —decía mientras mi lengua recorría de arriba abajo toda su erecta polla. Gemía haciéndome saber que hacia un excelente trabajo.

Mientras se la chupaba sentía como un líquido caliente se hacía presente por toda mi boca, exparciéndose en esta y haciendo que me lo tragase.

Jimin me levanto y me tiro hacia la cama y se subió encima de mí. Estábamos demasiado excitados ya que en nuestras miradas se podía notar la lujuria y el deseo proveniente de ambos.

Metió uno de sus dedos en mi intimidad a lo que correspondí con un gemido, y acto seguido metió y saco rápidamente tres de sus dedos dentro dentro de mi para masturbándome con estos.

—No pares. —le grito muy complacido a Jimin.

Él se excito más y fue aún más rápido. Saco sus dedos de mi zona íntima y bajo a esta para chupárla, sintiendo humedad en sus labios.

Subió lentamente besándome desde el vientre hasta el cuello y los volvió a morder mi lóbulo, pero esta vez con más fuerza, mientras tocaba mi miembro.

Baje mis manos a su bulto y lo comencé a apretar a lo que este gimió, y no aguantaba más así, quería que me volteara; que quedara encima mío y que me hiciera suyo.

Agarre su miembro y con la punta lo frote en mi entrada, a lo cual los dos gemimos. Después lo metí en mi intimidad, me quede quieto un rato para que me acostumbrara nuevamente al tamaño, y empecé a dar saltitos para que Jimin se excitara más.

Fui un poco más rápido, pero él me agarro por la cintura para ayudarme y sentir todo su miembro dentro de mí.

En unos de sus movimientos me hizo ponerme en cuatro, metiéndome todo su paquete hasta lo más profundo de mí. Comenzó algo lento y luego fue incrementando velocidad y fue mucho más rápido. Lo hacía tan bien que era el único hombre que hacía que me sintiera en las nubes.

Comenzó a penetrarme en otra posición más placentera y sentía como su miembro palpitaba en mis paredes, por lo cual ya se iba a venir.