Bufó derrotado y se bajó del autobús mirándose en un cristal de una tienda que había por allí de camino a su institución. La cicatriz era idéntica a la que ya tenía, pero en el otro ojo, suspiró profundamente y caminó a paso ligero.

Aquel día al salir, acomodó la mochila, estaba algo retrasado al tiempo que solía tardar en salir, tal vez tomarse un chocolate en el cambio de clase no fue buena idea, no le sentó bien y tuvo que ir al baño. Por culpa de eso ahora tal vez no pillase el autobús a tiempo. Maldijo su suerte y después suspiró profundamente de nuevo. Revisó su reloj en la muñeca y aceleró el paso hasta la parada.

- Eiver... ¿Eres tú?

Se quedó completamente estático en el suelo, abrió los ojos en shock, a punto estuvo de atragantarse con el chicle, no lo hizo porque se enderezó a tiempo llevándose una mano a la boca, lo malo es que acabó escupiendo el chicle después de casi ahogarse con él. Se giró sobre sus talones para ver de quién se trataba, bien podría ser cualquier estúpido imbécil de la secundaria o el bachillerato, aunque no hizo enemigos en esos lugares.

A lo mejor alguien que quería ligars. . . Hasta que vio de quién se trataba y rechazó su pensamiento, abrió los ojos en shock. ¿¡Por qué era todo tan idéntico a la primera vez que se reencontró con él!?

- ¿A-Axel?- se acercó a paso ligero y lo abrazó con tanta fuerza que parecía que iba a romperlo en dos.- ¿E-Eres tú?- emitió sin creerse lo que estaba pasando.

Igual que la primera vez...

Axel estaba delante de él...

Axel lo miró fijamente y sonrió ampliamente... es el mismo Axel de ojos heterocromáticos verdes que tantas ganas tenía de ver desde que apareció en aquella estúpida línea temporal que lo había obligado a no estar amargado...

... De hecho, no había estado amargado porque no quiso y porque sabía que volvería a ver a Axel...

- Si, soy yo...- sonrió de nuevo.

Aquella sonrisa se sentía tan nostálgica... tan hermosa, tan increíblemente radiante... incluso brillaba más que en su momento, contuvo sus ganas de sonreír como un estúpido, pero lo hubiera hecho si fuese tan dramático que mandase la vergüenza a tomar por culo... Se separó del abrazo.

Tenía el cabello un poco más largo de lo que recordaba, estaba atado en una coleta suelta, ¿Esos eran los cambios de ese universo? Su cicatriz estaba en el otro ojo y ahora Axel tenía un gusto de ropa algo más brillante, camisetas con palabras motivadoras, en este caso: "vive" en inglés y "feliz" en francés, curioso diseño, llevaba menos negro, en este caso no llevaba absolutamente nada de negro, porque los pantalones eran blancos y la camiseta azul y verde; además tenía el cabello más largo...

- Volvemos a vernos...- sonrió ampliamente otra vez.

- Si... Otra vez...- musitó el de rizos negros.

- ¿Qué tal la vida después de separarnos?

- Supongo que igual que siempre, no me gusta mucho socializar, lo sabes perfectamente.

- Pensaba que eso cambiaría en la universidad...- se rió un poco.- ¿En qué facultad estás?

- Ah, no, estoy en un ciclo formativo que está adjunto en la universidad...- Axel se mostró sorprendido por aquello.

- ¿En uno privado?

- No, el de seguridad es público...

- ¿Seguridad?- alzó una ceja.

- Policía...- dijo Eiver.

- ¿¡Policía!?- exclamó abriendo los ojos en shock- ¡Eso es genial!- le dió otro achuchón.

Que diferente la conversación a la de la primera vez que apenas duró cinco minutos... Tenía pinta de que Axel iba a perder el tren si seguían hablando tan animadamente.

- ¿Hiciste bachillerato social?- preguntó con una sonrisa radiante.

Asintió con la cabeza.

- ¡Yei! Y que rabia al mismo tiempo, podríamos haber hecho el bachi en el mismo insti...- se rió un poco y se separó del abrazo, después se acomodó la mochila.- Tengo que pillar el tren...

- ¿Te acompaño a la estación y me vas contando qué tal te fue a ti?- preguntó el de rizos negros ladeando la cabeza hacia un lado.

Axel asintió con la cabeza.

- Hmph... Bueno... La secundaria no fue mal, no hice muchos amigos, pero descubrí muchas cosas sobre mí mismo...- dijo con una sonrisa tranquila al mismo tiempo que empezaban a caminar hacia la estación- Tuve una novia...- Eiver abrió los ojos en shock.

- ¿Disculpa?- El Axel del universo que él vivió jamás tuvo pareja hasta el imbécil de su violador... Así que esos eran los cambios de ese universo...

- Si...- sonrió de lado.- Pero lo dejamos porque a ella no le gustó que me dejara el pelo largo...

- ¿Qué estupidez es esa?- se encogió de hombros en respuesta.

- Y bueno, en bachillerato tuve novio durante dos o tres meses, pero lo dejamos porque él no estaba conforme con que me pudiera fijar en mujeres, osea, era una excusa estúpida de que me dejaba porque le ponía cachondo otro... No me molesté, de hecho él era bastante lindo, pero si prefería acostarse con otro, no me importa... Tampoco llegamos a acostarnos...- se encogió de hombros.

- Eso es bifobia...

- Creo que usó la bifobia para justificar que le ponía otro chico.

Eiver hizo una mueca, Axel sacó la tarjeta del tren, estaban llegando al lector para separarse hasta el día siguiente.

- ¿Qué estás estudiando ahora?- preguntó metiendo las manos en la sudadera.

- Económicas... Bueno, economía y empresa...- musitó con una ligera sonrisa vergonzosa.

Eiver se mostró sorprendido y sonrió ligeramente, sorprendiéndose a sí mismo por esa acción, pero realmente le hacía feliz que sus padres no lo forzaran a estudiar derecho como ocurrió en su antigua vida, que esa vez estudiara lo que él quisiera realmente. Se sentía satisfecho con los cambios que estaba habiendo en ese mundo, por el momento todos eran para bien, al menos Axel estaba completamente feliz y ahora que volvía a estar con él lo veía radiante, radiante como siempre...

- Genial... ¿Si no consigo trabajo en una estación de policía me contratarías en tu negocio?- Axel soltó una risilla entre dientes.

- Claro...- musitó con seguridad en su tono de voz. Giró los ojos al escuchar que el megáfono de la estación anunciaba que el tren estaba por llegar, es decir, que solo tardaría medio minuto o como mucho un minuto más, miró a Eiver.- Nos vemos mañana al salir de clase...- asintió con la cabeza y alzó una mano para despedirse con un ademán, Axel hizo lo mismo y pasó la tarjeta por el lector, accedió a la estación y se despidió de nuevo cuando el tren llegó y cuando se fue.

...

Había vuelto a ver a Axel, y todo había sido igual que el primer reencuentro, cuando menos se lo esperaba... Rió internamente por eso, le parecía curioso...

Eiver sacó la caja de chicles del bolsillo y se llevó uno a la boca, cuando el tren acabó de irse, él giró sus talones hacia la estación de autobuses, tal vez llegaría algo más tarde a casa, pero valía la pena después de haber visto a Axel.

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AJDLKAJDKLEWWJEFWJ

LOS AMO

Son tan binitos fkslfhwkflek

Es que... AAAAAAAA :')

Aquí las opiniones ------------->

Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Silvia Line

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