Reino Atxa (16)
- Definitivamente serás una reina excelente, pequeña...- besó su frente.
Ella sonrió.
Aquella noche, y no solo aquella noche, muchas noches durante casi una semana en la que se llevaba a cabo el conflicto entre los dos reinos, fueron especialmente intranquilas para ti, no pudiste conciliar el sueño hasta que tus párpados ya no podían más.
Las razones que te mantenían alerta eran, en cierta parte, la razón de que estabas presenciando una guerra con tus propios ojos... Definitivamente aquello podría dejarte traumas, no porque ibas a pelear, que no lo harías, sino porque no querías quedarte con crisis existenciales, no querías ver a nadie morir, gente inocente que seguramente no quería matar sino que estaban obligados a ello y no querías que nadie resultara herido.
Tal y como estaban las cosas en ambos reinos... Tal vez el reino del norte dejaría a los dos hermanos a salvo en el palacio, pero... el reino del noroeste... El Reino Atxa mandaría a William a la guerra para que muriera "patrioticamente" luchando por su reino cuando en realidad querían que muriera, pero manteniendo al primo recluido en el palacio.
Tal vez William ya hubiera peleado en alguna batalla y, en ese preciso momento... Este. . .
Aquello te retorcía las tripas.
Pero no podías hacer nada por impedir que muriera a manos de cualquier soldado o mago del reino del norte... Tus párpados empezaron a pesar, como cada noche desde hacía una semana y acabaste perdiendo la consciencia lentamente mientras te mecían en los brazos de morfeo, te acurrucaste entre las sábanas, sonreíste con tranquilidad al imaginar que el pelinegro estaba a salvo en el palacio, durmiendo cómodo en su cama igual que tú, después de comenzar a conciliar el sueño después de todas las preocupaciones que adornaban tu mente y no te dejaban en paz.
Un suspiro se dejó escapar de entre tus labios.
El frescor de una ventana abierta (que ya hacía una semana que la dejabas cada noche), con el objetivo de que corriera aire en la habitación y no se quedaran tus pensamientos negativos acumulados allí te hicieron bien. Te permitió dormir con tranquilidad, la brisa acariciaba tu rostro suavemente, era un frío templado relajante, no era una brisa molesta, al contrario, era sumamente agradable, aquello permitió que tu sueño, después de aquellas horas y aquellos días que te mantuvieron en vilo, te dejaran descansar en paz.
Aunque, había algo que no entendías, y es que en realidad, cuando empezaste a tomar consciencia después de un sueño reparador, sentiste un pesado y abrumador calor recorrer cada centímetro de tu piel estuviera o no cubierta por la tela del camisón que llevabas por pijama (típico de la época). Sentías cosquilleos por todo el cuerpo, de vez en cuando sentías las ganas de estornudar como si tuvieras una capa de polvo en tu nariz o hubieras olido pimienta molida. Arrugaste la nariz de forma desagradable para evitar estornudar, después entre abriste los ojos lentamente frunciendo el ceño ligeramente.
Finalmente el terror inundó tu ser por completo.
¿Dónde estabas? ¿Por qué había tantas arañas e insectos en ese sitio? Sentiste una gran repulsión recorrer tu cuerpo, te levantaste rápidamente y sacudirse tus brazos y piernas bruscamente para quitarte los insectos que recorrían tu cuerpo, tu piel empezaba a picar por alguna razón que no comprendidas, tus pies descalzos eran víctimas de mordidas, picadas y de cosquilleos de los insectos, esto hacía que no te quedarás en el mismo sitio, moverte todo el tiempo e intentando que los insectos se alejaran de ti.
Siendo sinceros, aquella era la sensación más asquerosa que habías vivido nunca.
- Hmph, la perra lame-nabos de los Ceniza despertó...
Te estremeciste por el tono morboso y lleno de malicia que había en el tono de voz ajeno. Giraste la cabeza lentamente frunciendo el ceño, un impulso de valentía e impotencia por no poder golpearlo llenó tu cuerpo.
- Me resultas alguien tan odiable y asqueroso...
Querías golpearlo.
- ¿Oh? ¿En esta época no se han inventado los espejos? ¿Te has visto la cara zorra malfollada que tienes últimamente?- sonreíste con sorna.
Chasqueó la lengua contra el paladar con el ceño fruncido, después se acercó intimidante a la celda y agarró el borde de tu prenda, del camisón fino que usabas para dormir, te acercó con brusquedad a la verja de la celda, golpeando tu barbilla con los barrotes, te quejaste, pero tus réplicas no pudieron compararse a sus amenazas.
Amenazas que no te iban a dejar con las palabras en la boca.
- Oh, lo siento, perdón por no haber besado sus reales y apestosos pies, su majesperra. . .- te burlaste después de sus amenazas.
Sabiendo muy bien las consecuencias que podían haber...
Aquel carácter te sorprendía hasta a ti, la verdad. No ibas a dejarte achicar por aquella persona que tenía a William como un mero esclavo en el reino, simplemente no lo veías justo, no lo era, simplemente no era justo que lo tratase así.
Aunque... no habías visto la versión de la historia desde la perspectiva de Gilbert, tal vez tuviera sus moti. . .
No, no te hacía falta, una persona así de arrogante y creída no merecía tener un remitente o una audiencia que escuchase o recibiera su mensaje de odio, no merecía que lo escucharas, que escucharas sus motivos y el por qué odiaba a William. Simplemente no lo merecía.
- Te vas a enterar, maldita perra.
- William sería mejor rey que tú, imbécil.
- ¡Guardias!- exclamó con el ceño fruncido.
Tragaste saliva lentamente y te arrepentiste de tus palabras, olvidando por completo que era un heredero arrogante y creído que tenía al ejército detrás de él que le era fiel o que al menos le tenían tanto miedo que debían hacer lo que él dijera o podrían ser aniquilados por el gobernante de las tierras.
Tres hombres aparecieron tras él, tres guardias con armaduras, los tres eran hombres fuertes, musculados, feroces y sus rostros cubiertos por los cascos. Alzaron sus armas con amenaza: sus espadas, sus lanzas.
- Haced que desaparezca.
Asintieron con la cabeza firmes.
- Rápido. No quiero que me decepcioneis con vuestra ineptitud.- habló amenazante.
Lo miraste con odio, igual que a los guardias, él te miró igual, la situación se volvió muy tensa, los guardias abrieron la celda y se acercaron a ti.
Francamente, todo hubiera acabado para ti en ese punto si recién hubieras llegado a ese mundo, aunque claro, no le hubieras contestado de esa forma porque no conocías a los Atxa y tal vez, si hubieras estado allí en vez de en Ceniza, hubieras aprendido a odiar a William, o al menos te hubieran pintado a William como un ser horrible que no merecía ningún tipo de compasión o empatía, hasta que lo hubieras conocido, hubieras hablado con él y hubieras pensado lo mismo que hasta ese momento; ah, no, espera; hubieras acabado en la misma situación, cielos, la vida da muchas vueltas; pero qué buena suerte que no era cierto que eras alguien sin experiencia y que habías pasado mucho tiempo con la familia del este y estos mismos te habían enseñado muchas cosas, entre ellas...
Cerraste tus puños y estos se recubrieron de una capa robusta y dura de piedra, una textura áspera y rugosa, sus brazos se tiñeron de colores grisáceos y marrones que se degradan con tu piel al llegar a la zona del codo aproximadamente, todos te miraron en shock, incluido el heredero del reino, aquel que debía ser tan valiente y enfrentarlo todo él solo, pues no, él fue el primero que retrocedió al ver que derribadas a los guardias de un solo golpe a cada uno; Silver tenía razón, podrías derrotar fácilmente a todos los guardias experimentados de Atxa y casi sin esfuerzo, pues total, solo eran puñetazos. Saliste de la celda y te acercaste a él.
Tus brazos regresaron a la normalidad y caminaste hacia el castaño, este huyó como si su vida dependiera de ello, ah no, espera, su vida si dependía de ello.
Que suerte la tuya que el entrenamiento que habías estado siguiendo durante dos largos meses dió sus frutos de forma efectiva y, también agradeciste que el heredero del reino del noroeste fuese alguien con una salud y un estado físico deplorable, pues su velocidad se redujo a los pocos minutos, tal vez tres o cuatro, de estar corriendo por el palacio. Sus gritos de auxilio para captar la atención de alguien y que lo rescatara fueron música para tus oídos, principalmente porque la buena suerte estaba de tu lado y no acudió nadie.
Menos William.
Apareció por el pasillo por los gritos y el ruido de los pasos corriendo, algo poco habitual, desde que era pequeño no había escuchado el sonido de los pasos chirriantes, los gritos, desde que era pequeño y jugaba en el castillo como un niño más hasta que todo acabó en una capa de odio sobre él sin ninguna razón. En sus ojos solo había confusión, no comprendía porque había tales gritos.
Cuando lo viste sentiste un gran alivio llenar tu pecho.
Estaba vivo...
Eso te hacía sentir alivio, un gran alivio... no sabías porque.
William solo se mostró sorprendido cuando vio al castaño corriendo y escapando de ti. Tragó saliva y se quedó estático sin hacer nada, simplemente viendo las escena y mirando a su primo sin comprender el por qué de su huída, pero algo podía intuir. Más aún cuando llegó hasta su nivel y empujó al moreno hacia ti para que os chocaseis y os tropezaseis, así él darle tiempo para escapar.
- ¿Qué está pasando?- preguntó el pelinegro tomando tus brazos para evitar tu caída al tropezar por el empujón de Gilbert.
- ¿Dónde estoy?
- En el Reino Atxa... ¿Qué estás haciendo aquí?
- Eso quería preguntarle a ese idiota.- dijiste con tono de queja.- Estaba en la habitación del palacio de Ceniza durmiendo y me desperté en un calabozo aquí. Gilbert me mandó matar pero como salió mal, salió corriendo el muy cobarde.- te separaste y te soltaste del agarre para seguir avanzando hasta el pasillo por el que giró Gilbert en su escape, pero no viste a nadie en el pasillo.
Había escapado.
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Rayis: VUELVE AQUÍ COBARDE JOEPUTAAAAAAAAAA >:DDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
En esta parte todavía tenía pensado que William y tú tuvierais ese "romance", típico tonteo mental XDDDD
Francamente, cuando escribo sobre Gil siempre pienso en dismorfofobia...
Osea... Gil cree que es alguien increíble, perfecto, sexy, etc...
Pero es que luego... Cuando te das cuenta de como es... tipo... está obsesionado con la perfección, robó dinero de sus padres para operarse el pecho y los brazos para tener pectoral marcado y bola sin hacer fuerza; tiene problemas de visión, es asmático, xenófobo, racista y... dude... Que literalmente violó a Axel por peruano y porque no pudo separar a Will y Bert... ._.
Osea... dude...
Gil es muy hijo de perra...
Pero... irónicamente es uno de los personajes que más amo a parte de William y Bert.
Aquí las opiniones ---------------->
Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo
Bye~
By Silvia Line
[1879 Palabras]
P.D.: Literalmente siempre me pongo a hablar de Dismorfofobia ._.
P.D.2.: tengo una obsesión muy bestia con esa historia JSJSJSJ
P.D.3.: A decir verdad, las historias en las que aparece Axel... Las amo <3
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