Ugh... Cerebro... por favor... No empeores la situación más de lo que ya lo está de por sí.

El pelinegro, sin mencionar o decir nada conforme a que estabas literalmente asfixiándolo al agarrarlo tan fuerte por tal de no caerte, solo continuó con su camino por varias horas que se te hicieron tremendamente largas. A lo lejos podías ver la guerra, pudiste ver a la gente peleando, hechizos y sangre que saltaban por todas partes... Tu corazón se estrujó, apartaste los ojos y los desviaste hacia el frente, un gran bosque denso y frondoso se podía ver justo delante de vosotros. Al acceder a él, el semental saltaba por encima de los troncos, corría como si no tuviera obstáculos, hasta llegar a un camino de tierra y arena donde resopló y dejó escapar un gran sonido. El camino siguió por unos minutos hasta llegar a la entrada de un pueblo al atardecer, cuando el sol empezaba a ocultarse entre las montañas y los árboles.

- ¡William!- exclamó un chico más o menos de vuestra edad, era bajo, más o menos como William, parecía un mercader por su vestimenta vieja, larga, reciclada y sucia que impedía ver sus piernas por la largaría, cargaba con un gran canasto a la espalda casi tan grande como él y una...

¿Por qué diablos llevaba una alpaca?

Bueno, el caso, que llevaba una alpaca atada por el hocico con una rienda de cuerda, esta misma cargaba con cuatro alforjas llenas de verduras, frutas y trigo. La última cargaba con mucho pan, barras de pan, pan de pueblo, chapata, todo tipo de pan. El campesino tenía la piel morena, un sombrero de lana típico peruano, lo cual volvió la imagen del chico terriblemente tierna al escuchar su tono de voz tan dulce y adorable. Tenía el cabello castaño oscuro, largo, por los hombros, liso, pero sucio y el único ojos que se le veía porque tenía uno tapado por vendas alrededor de la frente y el pómulo y el otro era verde. Tenía cicatrices y heridas antiguas por todo el cuerpo, por lo que no te extrañaba nada que tuviera el ojo tapado porque lo hubiera perdido en algún conflicto.

Esperabas y deseabas que no en la guerra que se estaba llevando a cabo.

- ¿Qué haces por aquí? ¿No se supone que estás en guerra contra los Solberg? Si te ven podría irte mal...

- Soy aliado clandestino de los Solberg, de todas maneras vengo a hacer una entrega urgente...- lo miraste mal al tratarte como una mera mercancía.

El ojo del chico te miró atentamente, se llevó un mechón tras la oreja, donde pudiste ver que eran afiladas, pero no como las de un elfo, eran más pequeñas, según las historias que habías leído se trataba de las orejas de un duende, te enternecía que se descoloriese en un tono verdoso... Ya a esas alturas no te sorprendía, después de haber visto elfos, magia, y caballeros con espadas y armaduras brillantes ya nada te sorprendía.

- ¿Cómo tengo el honor de llamar a su encantadora acompañante?

- _____...- respondiste, él asintió y sonrió de forma tranquila.

- Encantador nombre tanto como vos...- sonrió de forma educada.

- Axel, no empieces.- comentó con sarcasmo el pelinegro.- Y cuida mejor de tu mercancía.

Giraste los ojos hacia el cabello que se estaba comiendo las mazorcas de maíz del gran canasto que cargaba el duende a su espalda, este se quejó y se apartó del caballo.

- Controla a tu yegua.

- Es un semental de pura raza, lo único bueno que tengo del palacio.- le sacó la lengua de forma burlona.- Pasaremos la noche en este pueblo antes de seguir el camino hacia Solberg.

- Si, buena decisión, las montañas son duras de noche, y más cuando están nevadas...

La alpaca empujó la cabeza del duende con impaciencia.

- Ya voy, ya voy, no te impacientes...- acarició el pelaje esponjoso del cuello.- Buena suerte con el resto del camino, no tomes rutas alternativas peligrosas...- dicho esto siguió su camino desviándose hacia la zona de mercado del pueblo donde había muchos puestos vendiendo diferentes productos que ya empezaban a recogerse y cerrar los puestos.

- ¿Nos quedaremos en este pueblo?

- Pasaremos la noche aquí, sí.

- ¿Tienes oro?

- No lo necesitamos, en Solberg los hostales son gratuitos para los que no son residentes del pueblo, es decir, para todos los que no son del norte.- asentiste con la cabeza.- Solo algo de monedas de plata para que protejan al caballo durante la noche...- asentiste de nuevo.

Llegasteis a un establo, ambos os bajasteis del caballo. Sentiste un dolor en tus lumbares y tus ingles por pasar tanto tiempo en el caballo y el retumbar cuando corría a galope. Suspiraste pesadamente. Miraste el establo caminando al lado del pelinegro, no tenía ni punto de comparación con el establo que había en Atxa... Estaba impecable, limpio, los caballos estaban sanos, felices, se movían libremente en los puestos en los que pasaban la noche o el tiempo.

El encargado de los caballos era un chico de cabello rizado de color negro, piel pálida como un fantasma, una cicatriz atravesando su ojo derecho, los cuales eran morados oscuros. Aparentemente era humano, hasta que salió de entre los animales... Era un tengu... Un ser aéreo... Era un ser humano, pero con alas de pájaro negras y de gran tamaño, hasta el suelo. Sus prendas eran de tonos oscuros, grises, negros y morados; llevaba un pantalón ancho tipo hippie con un patrón de naturaleza en la mitad del mismo, en la parte superior llevaba una camiseta apretada de cuello alto, manga larga, de color negro con algunos detalles morados. Encima de estas dos prendas llevaba una especie de chaleco con borrego de color gris.

- ¿En qué puedo ayudarlos?- habló con seriedad.

- No sabía que alguien de Göttin estaría por estos lares...- te estremeciste y tragaste saliva lentamente.

Göttin era peligroso.

- La situación de Göttin y mi situación no influyen en nada en mis acciones, déjame decirte que yo no soy de la capital, mi familia vive en una de las aldeas cercanas a Göttin.- musitó con un tono serio, en sus ojos había mucha amenaza.- ¿Pasarán la noche en el hostal?- asintió con la cabeza.- ¿Debo hacerme cargo de su semental durante la noche o durante más tiempo?

- Solo durante la noche, pasaré a recogerlo por la mañana a primera hora.- viste como sacaba una bolsa marrón atada con una cuerda desteñida de entre sus prendas, era como un saco...- ¿Tres monedas de plata?- preguntó alzando una ceja.

- Diez de bronce.- musitó seriamente.

Asintió con la cabeza.

Diez monedas de bronce eran lo mismo que una de plata. Por lo tanto nadie se extrañó cuando le entregó una moneda de plata y volvió a guardar el saco de monedas. Desde luego que pasar aquellos meses en Ceniza te enseñaron muchísimas cosas... Agradecías mil veces que aquellas personas fueran tan amables y que tuvieras la suerte de encontrarte con gente buena en el mundo. Dabas gracias a que, igual que en tu época, en aquella también había personas por las que realmente valía jugarse la vida...

- Por cierto... ¿Dónde está Karan?- preguntó William alzando una ceja, esto captó tu atención pues pensabas que ya os ibais a ir hacia el hostal.- ¿Acaso eres tú quien se encarga de los caballos al anochecer?

- Así es... Soy un ser nocturno, vigilo durante toda la noche que nadie hiera o robe ningún caballo...- explicó de forma breve.- Karan estará aquí al amanecer.

El otro asintió con la cabeza. Suspiraste al salir del establo.

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Yo: *escribiendo esta parte de la historia*

*Axel duende con una alpaca*: *existe*.

yo: AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

Also yo: ES LA COSITA MÁS ADORABLE QUE EXISTE EN ESTE MUNDOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Also yo x2: GIL, COMO TOQUES UNO SOLO DE SUS CABELLOS TE ESPERA LA MUERTE MÁS DOLOROSA Y SANGUINARIA DEL MUNDO >:CCCCCCCCCCC

Gil: .-.

Aquí los que estén a favor ------------------>

Aquí los que le vale mierda todo ---------------->

okay, no JAJSDJAD

pero siempre doy las dos opciones a elegir jeje

Solo espero que nadie comenté en "me vale verga todo"...

Bueno, solo los que no entienden porque dije eso...

XD

Aquí las opiniones ----------------->

Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Silvia Line

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