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A las seis y media de la mañana Ikki llegó a la estación de policías a pesar de no tener pensado asistir para ir a hablar con Aldebaran sin embargo el descubrimiento de la USB era algo que no podía ser relegado a segundo plano, a pesar de llegar temprano la mayoría de su equipo no estaba completo, él único que se encontraba en la oficina intentando trabajar por su cuenta era Hyoga.

Que su amigo fuera él y no hubiera nadie más dentro era una perfecta oportunidad para poder hablar con el y ponerse al día conforme a información. Colocando su maleta sobre su escritorio se acercó hasta donde Hyoga se encontraba siendo este su escritorio, Ikki jaló una silla para colocarla a su lado, se sentó ahí y observó el documento que Hyoga leía en la computadora.

—¿El anillo tenía la marca, de hecho no solo el anillo, también los brazaletes, collares, pendientes... Etc. —dijo sin despegar la vista de su computadora— Hilda y Geki fueron a la joyería de la feria, el resultado fue el mismo sin embargo en ninguno de los negocios se vio al dueño, solo estaban los empleados.

—Hyoga... —mencionó en voz baja temiendo que alguien lo escuchará, cuando obtuvo la vista del fiscal sobre él sacó de su saco la USB— Observa lo que hay aquí.

Hyoga miró fijamente el objeto que Ikki le estaba entregando, lo tomó con delicadeza para colocarlo en el puerto en la computadora y ver lo que la USB escondía. Tal cual a Ikki le había ocurrido, en la pantalla se abrieron los documentos donde se mostraban las diferentes carpetas, sin embargo revisar en ese momento cada una de ellas no era conveniente debido al corto e inexacto tiempo que tenían antes de que alguien más llegará, de todos modos el detective tenía la intención de compartir dicha información pero necesitaba que su amigo la viera primero y aunque todo lo que contenían las carpetas era de suma importancia y agregaba un gran peso a la información que estaban llevando lo más importante y lo que precisaba más en ese momento era aquel documento con el mapa del lugar.

Seguido por las órdenes de Ikki, Hyoga abrió el documento donde se mostraban la información de las presas por capturar, el fiscal conocía de antemano dichas pruebas por lo que verlas no significó un gran impacto en él que dejó en claro a su amigo informándole que el mismo Titán había compartido dicha información pero aunque Ikki en el fondo se arrepintió de no haber estado presente dijo a Hyoga que ignorara de momento esos documentos para que se centrará en la última hoja al final de todo el documento.

La dirección de Sodoma, lo que tanto habían andado estaba ahora frente a sus ojos; Hyoga copio la dirección e ingreso al navegador en internet para poner las coordenadas y poder tener una mejor idea de dónde era el sitio y cómo se podía llegar ahí pero de reojo observó al detective negar la acción que él estaba haciendo, ante la negativa giró a verlo confundido pero este suspiró.

—Lo intenté también pero en internet no se muestra como tal la ubicación... Solo se ve un terreno baldío— informó señalando con la mirada la computadora con los resultados listos mostrando tal cual lo que él había mencionado.

Al momento en que Hyoga volteó para ver el resultado en la computadora, en simultáneo la puerta se abrió dejando pasar a Hilda quien se disculpo por la demora pero inmediatamente Ikki y Hyoga notaron su presencia, el fiscal cambió de página ocultando el resultado de la búsqueda de la dirección adjuntada al documento pero Hilda no era tonta, no hacía falta tener una maestría en psicología para saber que ellos algo ocultaban.

La chica dejó sus cosas sobre su escritorio, ambos amigos dejaron de hablar por un momento debido a la presencia de la joven pero todo sería llevado al máximo al presentarse el resto del equipo conformado por Geki, Shiryu y sus compañeros. El detective se puso de pie, aclaró su garganta mientras observaba a Hyoga aún permaneciendo en su asiento, tomó un poco de aire y se acercó a sus compañeros con la intención de informar de la USB.

—¿Shion y Docko no vendrán?— cuestionó antes de empezar concentrando su mirada en la puesta esperando ver entrar a su jefe y al amigo de su jefe

—Al parecer Shion tenía una situación que cumplir, Docko se ofreció a acompañarlo —aclaró Hilda al ser solicitada su presencia por el mismo Shion minutos antes ya que se planeaba regresar a Marín nuevamente a Tokio lo que conllevaba tener una sesión psicológica con la chica tan rápido como está llegara— Me dijo que si se necesitaba algo se lo informaramos a Mu...

—¿Voy a buscarlo?— preguntó Geki esperando la afirmación de alguien pero Hyoga negó

—También está ocupado solucionando algo, no quiso dar detalles pero me pidió que no se le molestará por el momento— aclaró, al ser él el primero en llegar aún pudo observar a Mu conversando con Shaka y Artemisa.

—Bien, entonces debido a la ausencia de estás personas seguiré con esto —dijo pidiéndole a su amigo que mostrará la infinidad de carpetas que había dentro de la USB— La USB me fue entregada ayer por la noche por un muchacho quien trabaja directamente con la organización que estamos buscando, dentro del dispositivo hay carpetas que muestran tanto videos como imágenes de los actos que se cometen dentro de Sodoma principalmente sin embargo hay un documento donde aclara y expone la dirección de Sodoma.

—¿La dirección?— cuestionó incrédula Hilda al no creer que habían conseguido algo como eso

—Pero existe un problema, al buscar la dirección en internet... No se muestra como tal una edificación o edificio sino que solo es un terreno vacío lo que se ve— dijo mostrando ahora el resultado arrojado por la web minutos atrás

—Tendríamos que ir a revisar, o en su defecto, mandar a alguien— mencionó Shiryu pero al instante vió el descontento en Hilda

—Sería un acto suicida ir ahí solo, es demasiado peligroso teniendo en cuenta que esas personas son capaces de todo— refutó mientras se acercaba a la computadora para ver más de cerca dicho terreno

—En todo caso, ¿Cómo sabemos que eso no es una trampa?, Que tal si ese "muchacho" te engañó?— preguntó Geki notandose en él una desconfianza y preocupación que no estaba de más ya que ese sentimiento Shiryu e Hilda lo sentían

—No creo que me halla engañado, estoy seguro— respondió confiado y aunque entendía la desconfianza en sus compañeros le sorprendió ver a Hyoga dudar al no haber considerado esa posibilidad.

—Ikki a lo mejor el documento es falso, tiene razón lo que Geki menciona —dijo Hyoga pareciendo un poco más preocupado— El documento que me entregó Titán, al principio... Venía la información de tu hermano.... Y en este no.

Ikki talló el puente de su nariz en forma de mostrar su descontento con lo que acababa de escuchar, obvio estaba que no le había agradado para nada saber que existía una hoja donde se aclaraba que día su hermano sería secuestrado y que él hasta hacía apenas unos segundos había sabido de su existencia; había planeado una mentira para esconder la verdad tras el origen de todo lo que la USB escondía sin embargo la pregunta "¿Cómo confías en la veracidad del documento?" hecha por uno de sus compañeros lo hizo retractarse de su postura.

—Por qué fue mi hermano quien lo escribió y yo creo en su palabra—

Dijo con un claro tono de enojo al tener que decir tan abiertamente al autor de dicha información; vió el rostro de todos luego de decir su repuesta, algunos parecían molestos. La mayoría se quedó en silencio, observándolo directamente esperando una respuesta a lo que iba a decir ya que según la mentalidad de los demás, si Shun había escrito dicho documento entonces había o existe la posibilidad de que Ikki ya supiera desde antes está información.

El detective respiro profundo tomando asiento en la silla más cercana observando a Hilda regresar a su silla para escuchar ahora su testimonio aunque esté no se encontraba del todo conforme con lo que iba a decir.
Volvió a tomar aire cruzandosé luego de brazos para aclarar el mal entendido tratando en todo momento de defender las acciones cometidas por su hermano que aunque realmente no había revelado información "al enemigo" había cooperado para ellos de distintas formas siendo que el menor sabía cuándo y cómo atacarían tanto a civiles como a personal de la policía (siendo Ban y Nachi) los principales afectados; aclaró además que la información de la USB apenas se la habían entregado dejando en claro que antes de esa noche él desconocía todo lo que contenía dicho artefacto incluido el documento donde estaba anotada la dirección de la gran casa.

Y es que aunque no lo mencionó nunca, Ikki se había intrigado por como su hermano había conseguido la fuerza y convicción como oara hacerle frente a estos tipos, intentando lucir aparentemente normal en cada encuentro se tenían donde se involucraban gente ajena "a ellos"; creer su hermano de quince  años había tenido que cargar solo con ese dolor y miedo era un tormento para su persona que sabía que ninguno de sus compañeros de trabajo podrían entender... Y ese era su miedo más reciente, claro que deseaba encontrar con vida a su hermano, ansiaba el momento de volver a abrazarlo calmando finalmente su angustia después de casi un mes desde su desaparición pero tener que enfrentarlo al interrogatorio preparado por Hyoga, a las múltiples preguntas y cuestionamientos por parte de sus compañeros o amigos, al constante martirio que podría significar ahora su convivencia junto a él luego de tales sucesos era algo que no le dejaban dormir adecuadamente... Deseaba con su ser y su alma volver a ver a Shun pero solo rogaba por qué la ley no aplicará contra él por espionaje.
 
A pesar de aclarar todas las interrogantes de sus compañeros notó como ellos seguían teniendo diferentes opiniones que ya no hicieron saber sin embargo se había pasado por alto un dato de suma importancia, probablemente la mayoría ya sabía quién o más bien quienes eran los culpables de todo el asunto pero había muy pocos que aún desconocían está información por lo que el detective lo hizo saber mencionando el nombre de los gemelos y el de Katya donde culpó a ellos tres de los principales culpables y mentes maestras detrás de todo.

Hyoga y Geki compartieron miradas al escuchar los nombres y relacionarlos de inmediato con las joyerías, Hilda por otro lado solo asintió colocando una sonrisa de lado afirmando la hipótesis que había tenido al haber pasado tiempo con Palas y aunque en un principio, por respeto a la niña había querido solo mencionar los datos que había considerado de utilidad la verdad era que tenía dudas sobre la veracidad de los hechos narrados por la menor.

Hilda específico que aquella noche en la que tuvo la oportunidad de pasar rato con Palas, la niña a pesar de no querer hablar al principio pudo al final confiar lo necesario para decir algunas cosas que aunque en su momento considero innecesarias puede que ahora tengan un poco de más peso. Asombrosamente en la terapia de juego pudo descubrir una de las torturas ocupadas por alguien con máscara como indirectamente decía a través de sus dibujos, uno que más le asombró fue la privación de sentidos como la vista, la audición y el habla (método que se había ocupado con Shun en el vídeo), y aunque dibujó más cosas, en el papel siempre ponía a dos hombres enmascarados vistiendo largas túnicas una de color blanco pero otra roja sin embargo ambos sujetos  tenían cierto parecido.

Una sola cosa que hasta el momento no había podido descifrar era las muñecas de trapo que dibujaba siempre como espectadoras a los actos que esos hombres cometían contra ella.

(...)

A las doce del medió día, luego de una larga charla con los miembros del departamento de policías del otro condado se pudo finalmente transportar a través de helicóptero para acelerar el tiempo a la joven pelirroja que quería entregarse a la policía. Esta información sobre que aparentemente Marín había sido encontrada fue compartida para Shion y Docko, ambos preocupados por la salud e integridad de la chica al considerar que había tomado medidas desesperadas como el asesinato para poder ser libre fueron inmediatamente por ella para traerla de vuelta a Tokio donde estaban sus amigos y familiares esperando su regreso.

La llamada telefónica realizada no mencionaba nada más que esa pobre información al tener ellos la misma preocupación por la chica, al llega finalmente después de unas horas de vuelo pudieron verla finalmente luego de meses desde que había sido reportada como desaparecida. Shion se mostró fuerte al igual que Docko cuando tuvieron que hablarle a la joven para  explicarle que su proceso sería tratado en Tokio sin embargo ella no mencionó nada, su mirada perdida en la nada y su palidez extrema no reflejaba nada bueno a ojos de ambos oficiales pero no podían dejarla ahí por lo que pidiendo perdón tuvieron que ayudarle a caminar dentro del helicóptero para trasladarla... Ella ni siquiera de inmutó al sentir como Shion y Docko la tomaban de ambos brazos para hacerla caminar.

Cuando finalmente estuvieron de regreso la ayudaron a bajar e ingresar al edificio dónde la llevaron a una sala para que estuviera cómoda en lo que llamaban a Hilda para que Marín pudiera ser tratada lo más rápido posible. Cuando el equipo de Ikki se enteró que Marín estaba de vuelta se vieron sorprendidos pero a la vez felices ya que con ella eran dos personas que habían "regresado de la muerte" (Ella y Palas respectivamente) sin embargo cualquier índice de felicidad desapareció para volverse consternación y cierto grado de terror al ver en qué condiciones había regresado.

Hilda fue la única que pudo entrar a la sala pero los demás podían ver lo que ocurría a través de las cámaras viendo a Marín sentada en el sillón de la esquina de color carmesí en la misma posición que Shion la había dejado, los ojos de la joven al igual que su cabello rojizo carecían de vida, estaba totalmente ausente de la situación y el entorno, miraba solo a un punto fijo, sin mover algún músculo de su cuerpo, sin siquiera mirar a Hilda quien hacía lo posible para que por lo menos le dirigiera la mirada.

Estaba muerta en vida.

Las palabras de Tenma sonaron de inmediato y de golpe con gran volumen al recordar lo que le había dicho, las personas que pasan por Kanon quedan irreconocibles a tal grado que es mejor la muerte que vivir una vida así... ¿Qué tanto mal puede hacer una persona para provocar eso en alguien más?... Si corazón pálpito con fuerza y su respiración de pronto falló al igual que su presión disminuyó de golpe y sus nervios y angustias por el contrario incrementaron de imaginar que su hermano se encontraba en el mismo estado, que por mucho que le hablara no contestara.... Que no reaccionara... Que tuviera esa actitud ausente... Que pareciera una muñeca de trapo, carente de vida o alma.

Ikki retrocedió un poco para tomar aire, Shion y los demás solo veían atentos a Hilda conviviendo con Marín perl Docko notó el malestar de Ikki en el instante en el que esté se alejo para tomar aire e intentar controlarse de un posible ataque de ansiedad. Docko giró nuevamente la mirada hacía la pantalla para luego sacar su celulares y de él proyectar en el cuarto un audio que probablemente trajera de vuelta a la chica aunque esto era contraproducente.

La música del camión de helados sonó por todo lo ancho del cuarto, Hilda inmediatamente giró a ver las bocinas ocultas en la habitación mientras que Marín obtenía el efecto que Docko quería presenciar, dicha canción provocó en la joven un enorme malestar a tal grado de que la melodía fue callada por sus gritos de agonía y sus intentos desesperados por hacer callar la canción llegando al grado de querer tirar la puerta con tal de poder salir...

Todos detrás de las cámaras miraron atónitos siendo el más consternado el detective quien no pudo tolerar la escena al recordar lo que su hermano había vivido de manera similar estando en la recepción junto con Esmeralda.

Marín no estaba en condiciones de responder a ninguna pregunta, necesita mucha terapia para poder "volver a la normalida", se informaría a sus familiares de su regreso pero su caso solo hizo desmoronar las esperanzas que quedaban en los miembros de la policía ya que ¿Todas las personas rescatadas estarían muertas metafóricamente?, Shion intentó como siempre reanimar a sus trabajadores pero después de ese pequeño espectáculo reconsideró todo pero si se rendían ahora que tenían ya el nombre de los criminales y aparentemente de la dirección de Sodoma nada habría valido la pena.

Ikki suspiro guardando compostura luego de también el sufrir un pequeño ataque de pánico que lo había desorientado, informó que esa podría ser como su último intento, su última oportunidad para tratar de solucionar el caso dando a entender en qué si la dirección proporcionada estaba incorrecta y al final terminaban en un terreno baldío, dejarían en paz a la organización aceptandola ahora como un nuevo grupo de yakuzas y dejando el caso y a las víctimas (incluido ahí Shun) en el archivo muerto sabiendo que la muerte, tal como Tenma había mencionado tanto a Titán, como a ellos y a cintos más era mejor que vivir una vida de esa forma.

Aunque muy poco convencidos la mayoría aceptó los términos incluido Shion quienes darían un último esfuerzo por descubrir todo después de al rededor dos años desde que todo había ocurrido. Docko no parecía convencido con la decisión pero se mantenía de cierto modo tranquilo sabiendo que si fallaban podía insistir en que se volviera a retomar la investigación a pesar de conocer lo obstinado que podía llegar a ser su amigo.

Lo que restó del día se intentó tranquilizar a Marín para que mínimamente aceptará recibir atención médica y pudiera a su vez descansar, no fue hasta ya las tres de la tarde cuando la pelirroja finalmente se encontró más tranquila aunque seguía en completo silencio luciendo tan inexpresiva como en un principio fue encontrada.
Uno de sus familiares la acompañó al hospital cuando se le notificó que la chica había sido localizada, lo que sirvió para que por el momento el personal de la policía no tuviera que acompañarla haciendo que de tal modo se concentrarán ahora en esta nueva investigación sobre la dirección de Sodoma.

Todos incluyendo a Shion y Docko se reunieron en la hora de la comida para discutir este asunto y poder estructurar un plan adecuado el cuál pudieran llevar a cabo lo más pronto posible para dar fin de una vez por todas con esta organización.

Todo sería planificado tan meticulosamente, sería su golpe final, ocuparían refuerzos para rodear la gran casa que por momentos llegaron a ver a través de videos dándose cuenta de que Sodoma contaba con cuatro pisos, un sótano, un ático, un enorme patio que rodeaba la casa, una entrada trasera que daba al patio y a su vez a una de las carretera más solitarias y una única entrada principal rodeaba de una gran barda de concreto que resguardaba el interior y prohibía el paso del gente del exterior. Algunos policías se mantendrían ocultos mientras otros se quedaban vigilando cada una de las entradas, Docko al contar con un poco de más experiencia definiría las experiencias del grupo de Ikki...

Hyoga iría adelante en compañía de personal armado para entrar directamente en la casa por la entrada principal mientras que Geki ingresaría con el mismo número de personal por la puerta trasera sin embargo si no se pudiera acceder por ahí se mantendría en guardia por si alguien quería escapar.

Hilda permanecería junto a Shion socorriendo al final a todos aquellos individuos que hubieran sido violentados sin embargo inmediatamente se diera captura de los criminales ella junto a los gemelos, Katya y todo involucrado serían trasladados de inmediato a la penitenciaria para llevar a cabo el interrogatorio por lo que su presencia sería requerida en todo momento.

Y ambos detectives, Shiryu e Ikki investigarían el lugar una vez que toda persona halla sido evacuada de Sodoma, el trabajo de recolección de información sería delegado a ellos y a unos cuantos más, su trabajo no sería interrumpido o fastidiado dando la oportunidad de registrar todo aquello que consideraran más importante sin embargo mientras se de el ataque a Sodoma ellos permanecerían en las camionetas de policías esperando el momento para acceder a la casa.

Una ves que todas las personas encontradas con vida fueran liberadas se llamarían a las ambulancias para tratar posibles heridas, luego serían llevados a un albergue en lo que se contactaba a sus familiares.

Este acto sería llevado a cabo durante la noche para no perturbar la paz de los civiles y no generar tanto alboroto en la comunidad, se trataría con total discreción entendiendo que estaban arriesgando todo en este acto ya que de no haber nada tendrían que dar por finalizado el caso. Todo el plan se realizaría el día 20 de Septiembre dando la oportunidad de poder prepararse adecuadamente para atacar Sodoma, preparando las armas, autos, cámaras y demás que se llegará a utilizar durante el altercado además de perfeccionar movimientos y estrategias son embargo la fecha era demasiado tiempo para Ikki, esperar diez días más para poder atacar.... Era casi frustrante, sabía que debían estar lo suficientemente preparados pero tener que esperar otros diez días más...

Shun no tenía diez días más.

Su hermano había desaparecido el día 15 de Agosto, a ese momento ya llevaba 27 días ausente, no sabía cómo se encontraba y en qué condiciones o tan siquiera sabía si aún se encontraba con vida ya que en cada oportunidad que tenía para preguntar sobre ese tema nadie podía darle una respuesta clara sin embargo mentiría si dijera que no se había quedado intranquilo con la respuesta de Tenma y lo que acababa de ver con Marín además de recordar el como Palas había pasado por la misma situación que la pelirroja cuando fue encontrada... ¿Qué sería lo mejor?, ¿Encontrar a Shun con vida o no? Y en caso de poder verlo aún vivo pero en ese estado ausente ¿Sería conveniente dejarlo vivir aunque fuera en ese estado o siguiendo las palabras del castaño la muerte daría la calma a su pequeño hermano?

¿Sería capaz de matarlo?

El trabajo dio por terminado a las seis de la tarde como de costumbre pero Ikki permaneció aún en la oficina con el pretexto de revisar ahí lo que restaba de la USB excusandose de que no podía hacerlo en su casa debido a la presencia de Pandora. Ninguno tuvo problema alguno en que él se quedara, solo se despidieron y se marcharon dejándolo en la oficina tal y como él había querido.

Aunque había sido un pretexto eso de la USB terminó por volverse realidad cuando la introdujo en una de las computadoras, revisó las fotos agradeciendo de encontrar solo unas pocas de su hermano sin embargo había mas videos de él, intentó ver algunos pero su estómago se lo impidió, no podía simplemente ver algo así sin causar un efecto en él, contemplar como cada vez su hermano cedía a las peticiones, donde sus lágrimas poco a poco desaparecían para solo ceder a lo que le ordenaban sin oponer resistencia, se notaba en lo poco que se había capturado el rostro inexpresivo de Shun como si estuviera ya acostumbrado sin embargo ese hecho le provocó un enorme malestar en Ikki ya que con lo que veía entendía de cierta forma que su hermano realmente había muerto el día 16 de Abril, ya no quedaba nada de el que pudiera rescatar, por supuesto que quería encontrarlo con vida pero si iba a encontrarlo en el mismo estado que Marín o Palas quizá lo mejor sería...

La puerta se abrió interrumpiendo al detective, Mu se sorprendió de verlo aún dentro de la oficina pero aún más fue verlo apagar de inmediato la computadora y levantarse de la silla para ir por sus cosas. Mu suspiro mientras avanzaba dentro de la oficina y apagaba las luces, arrimo una silla cerca de donde el detective se encontraba para sentarse a su lado, luego sacó de su saco un pañuelo que le entregó al detective.

Ikki lo miró por un momento con su mochila ya sobre su hombro sin embargo suspiro rendido aceptando el pañuelo limpiando sus ojos mientras a su vez volvía a tomar asiento dejando sus cosas en el suelo por un momento.

—Creí que te habías marchado, normalmente cuando me falta papel para la impresora vengo aquí —dijo con una pequeña risa al tener que revelar su secreto— ¿Todo en orden?

Ikki suspiro cruzandosé de brazos mientras se recargaba de la silla —¿Te lo comentó Shion?, En 10 días iremos a Sodoma— dijo con gran pesar en sus palabras

—Normalmente no me dice mucho a menos que yo investigue —respondió con gran calma— Tu hermano se encuentra ahí, ¿No?

—Es probable —contestó— ¿Lograste ver a Marín? Se sentía extraño verla, no parecía humana sino una marioneta

—Debe ser por el trauma... ¿Te preocupa Marín?—

—No, en absoluto, lamento su caso pero no me preocupa en sí... Sino que... Es mi hermano quien lo hace —dijo tomando aire para tener fuerza para seguir hablando— Vi crecer a ese niño, recuerdo tener que jugar con él cuando me lo pedía, o las veces que tenía pesadillas y venía a mi habitación a buscarme... Incluso de mayor él seguía recurriendo a mi cuando tenía problemas con su tarea pero ahora siento una gran pena similar al luto, se que está vivo pero mi mente ya lo considera muerto.

—¿No te alegras de verlo de nuevo?—

—Claro que sí, ansío poder verlo pero... No de ese modo... —dijo refiriéndose a Marín— Me dolería velo así de hecho me dolería verlo de por sí; no puedo simplemente acercarme a abrazarlo o algo así porque podría ser traumante para él... Quizá lo que más me lástima es saber que el niño con el que estuviera tratando ya no es mi hermano.

—No lo tomes de ese modo, claro que no será el mismo pero seguirá siendo tu familia. Si tu hermano aún vive creo que necesitará un poco de apoyo para sobrellevar la situación, ¿No lo crees?—

—Es algo que aún no quiero pensar, Shun a veces se guardaba dentro de él muchas cosas, me contaba sus problemas pero solo cuando ya los había solucionado pero ahora... Será difícil para ambos— dijo poniéndose de pie volviendo a cargar su mochila que había dejado en el suelo hacía ya unos minutos

—Cualquier cosa que decidas será lo correcto, solo no te arrepientas después —refuto levantándose de la silla— Piensa bien tus decisiones, considera cada variable, ¿Bien?

Mu habló dedicando una sonrisa al final, Ikki agradeció el apoyo mientras ambos caminaban a la salida de la oficina para cada quien seguir su rumbo, Mu regresaría a trabajar e Ikki visitaría a su amigo quizá por última ocasión antes de ir a Sodoma. El detective se mostró un poco más tranquilo luego de hablar con Mu sin embargo sus dudas parecían no acabar ya que cuando una ya estaba resuelta, una nueva surgía, mientras conducía su auto solo pensaba y analizaba la situación donde él explotaría Sodoma pero únicamente cuando todos la hallan deshabitado dejando la incertidumbre en él sobre el paradero de su hermano ya que el no iba a esperar a que alguien más se le acercara a decirle que estaba muerto, que ya no encontraba en Sodoma o tener que verlo salir junto a alguien más sin embargo su conducta impulsiva pudo haber sido un determinante que tomó Docko a la hora de delegar posiciones.

A las siete y media de la noche llegó con Aldebaran, tenía días de no verlo  pero ahora era importante tener que recurrir a el. No contaba con mucho dinero en efectivo pero a lo mejor Aldebaran aceptaba transferencias, suspiró con cierta pesadez mientras avanzaba dentro del lugar contemplando como poco a poco se acercaba a aquel hombre.

Al llegar se sentó frente a él en la pequeña mesa en el suelo, inmediatamente los sirvientes trajeron té para cada uno mientras Aldebaran no despegaba la vista del detective.

—Necesito que me des algo— dijo con determinación sacando su billetera sintiendo la mirada pesada de Aldebaran juzgandolo con la mirada

—¿Qué quieres y para qué?—

—Una de tus armas exportadas de América —informó dejando el efectivo en el centro de la mesa— consígueme un arma con este presupuesto

Aldebaran miró el dinero un momento para luego soltar una pequeña risa —Creí que te daban una en tu trabajo— respondió agarrando el dinero

—No son tan efectivas, además no soy como tal un policía, me dan una para protección pero tengo prohibido dispararla sin autorización—

—¿Y qué diferencia habrá con la que te dé?, Será lo mismo, ¿No es así?—

—Las armas de la policía no son de un alto de calibre... Pero las tuyas sí, necesito una para antes del 20 de Septiembre—

—Hecho —dijo sin más chasqueando sus dedos al instante informando a su sirviente de traer lo solicitado, tardó un poco en regresar pero al volver el sirviente le entregó el arma solicitada— Por el dinero que trajiste esta es la única que te puedo ofrecer

Menciono el hombre dejando el arma en la mesa, Ikki la observó un momento pero después la tomó para examinarla más a detalle, no era nueva pero le serviría —No importa, está sirve— respondió sin quitar su vista del arma en sus manos

—¿Un evento importante?, ¿A dónde vas a infiltrarte ahora?— preguntó con una pequeña sonrisa burlona

—Luego te lo diré, necesitaré otro favor tuyo pero está vez para específicamente el 20 de este mes, ¿Podrías hacerlo?—

—Depende, ¿De qué trata?—

El detective suspiro un poco indeciso de sus acciones sin embargo se mostró decidido luego de un momento, de su mochila sacó un papel y un lapicero para anotar lo que quería en la hoja, la deslizó boca abajo por la mesa hasta que Aldebaran la tomó y leyó causando una expresión de sorpresa al leerla.

—Si alguien se entera perderás tu trabajo... ¿Seguro de esto?— dijo rompiendo el papel para deshacerse de cualquier evidencia

—Se que no me traicionarías, pienso pagarte si es que eso te preocupa —respondió poniéndose de pie— Lo haría yo mismo pero se me dificultará ya que posiblemente a esa hora estaré en el hospital, confío en ti para el trabajo... Nos vemos entonces.

Ikki salió confiando demasiado en Aldebaran a pesar de que este no había dado una respuesta positiva o negativa como tal; Luego de su encuentro con su socio y amigo regreso a su hogar al rededor de las ocho y media de la noche, Pandora se encontraba ya cenando cuando él llegó, a pesar de la pequeña discusión del día anterior ahora ambos se sentía indiferentes sin embargo Ikki sentía la necesidad de hablar con Pandora informándole que ya sabía parcialmente la dirección donde probablemente estaba Shun.

Dejando sus cosas en la entrada de acercó a la cocina para sentarse en una de las sillas del comedor, tomó aire y expuso lo que sabía a Pandora pidiéndole una disculpa al final de su conversación pero Pandora asombrada y de cierto modo consternada por la información aceptó la disculpa pero cuestionó sobre la veracidad de la dirección argumentado lo mismo que los compañeros de su prometido creyendo que se trataba de una posible trampa. Ikki negó dedicándose un tiempo para aclarar las dudas que Pandora tenía con gran calma a comparación de como estaba alterado al hablar de lo mismo con sus compañeros.

De tal modo, a partir de esa noche, Ikki no durmió ni un segundo pero ahora bajo el pretexto y argumento de planificar todo por su cuenta para cuándo el día 20 llegará, anotó todo lo que consideraba importante en la pizarra de su habitación tomando en cuenta los videos de la USB y aquellos que ya tenía en posesión en donde se apreciaba la casa todo con tal de crear un posible plano con una que otra habitación que sirviera para guiarse.

Planifico los ataques considerando las salidas y la presencia de sus compañeros del caso y de otros departamentos... Además de conseguir con tiempo las balas necesarias para la pistola que había comprado con Aldebaran para que el día diecinueve de septiembre durante la mañana fuera a la última sesión en la oficina para tratar el caso, haciendo un repaso sobre lo que ya se había especificado, los roles y las acciones de cada quien con el objetivo de que todo saliera perfecto, esa noche luego del trabajo preparó una mochila con lo necesario y con lo conveniente (vendas, pastillas, alcohol, gasas, la pistola y las balas).

Pandora había notado como en esos diez días transcurridos su prometido se había dedicado enteramente a trabajar sin poder tener tan siquiera un descanso para dormir pero la diferencia recaía en qué a comparación de antes, ahora Ikki lucía demasiado confiado, seguía reflejando su malestar pero era menos notorio... Ella no quería pensar de más pero verlo de tal modo no le generaba una sensación agradable.

El día esperado llegó finalmente al pasar los diez días estipulados, tal como se había dicho llevarían la operación durante la noche por lo que la mejor hora para salir era a las siete de la noche. Ikki revisó que todo estuviera en orden, al recibir el mensaje de Hyoga de que ya estaban fuera de su casa bajó las escaleras para salir e irse de una vez  la camioneta pero no sin antes despedirse de Pandora que ante todo seguía con dudas.

—No hagas nada estúpido, ¿Crees que no me dí cuenta del arma?— reclamó molesta cuando Ikki se dirigió a ella sin embargo su enojo solo era preocupación

—Solo es por protección, te aseguro que todo estará bien —dijo en voz baja casi murmurando inconciente de no estar dirigiendo su mirada a Pandora al momento de hablar, para tranquilizarla la tomó de las manos con suavidad y se acercó un poco a ella— Regresaré pronto, lo prometo

Pandora no se vio tan convencida pero no podía simplemente impedirle el paso así que por medio de un beso de despedida Ikki se marchó fuera de la casa para dirigirse ahora sí a la camioneta que esperaba por él; ingresó a la parte trasera junto con Hyoga y Geki mientras Hilda conducía y Shiryu estaba en el asiento del copiloto, se le informó que las demás camionetas ya se encontraban en camino pero no atacarían hasta que no estuvieran todos reunidos cosa que de cierto modo intranquilizó a Ikki ya que en su mente se sembraba la idea de cómo poder entrar a la casa sin ser visto por alguno de sus compañeros o superiores.

Aunque durante en el trayecto se iba  comentando a modo de repaso el plan a seguir, Ikki solo memorizaba el plano de la casa con tal de que todo saliera tal como había planeado, tenía una pequeña visión de las dimensiones de la casa, los pasillos y habitaciones haciéndose además una idea aquellas zonas que no conocía como tal como ciertos cuartos o salas que esperaba no fueran para él un contratiempo al momento de entrar.

Al rededor de dos horas fueron necesarias para poder llegar a Sodoma aunque cerca de llegar la mayoría había empezado a preocuparse ya que no se lograba ver nada más que árboles y terrenos vacíos sin embargo conforme más se acercaban se podía ver con mejor claridad la gran casa por fin descubierta donde vivían Saga, Kanon y Katya. La imponente presencia de la gran casa de tres pisos donde no se veía algún tipo de iluminación proveniente del interior, la casa que seguramente estaba custodiada las 24 horas del día y que se encontraba rodeada por una barda de concreto que la protegía de cualquier amenaza y que a su vez funcionaba para que nadie dentro escapara debido a la gran altura de la barda.

Al momento de llegar a la gran casa que era mejor conocida como Sodoma pero al no haber tenido una referencia anteriormente de la fachada del lugar desconocían de la posible seguridad con la que se contaba por lo que en un acto rápido ideado por Shion en un momento de estrés al sentir que podían ser observados se cambió el plan drásticamente asignando la mayor cantidad de policías para irrumpir en el hogar y de entre tantos oficiales que habían sido elegidos para está labor... Ikki por voluntad propia se integró a ellos aunque sus razones diferían de las de los demás.

Shion y Docko junto al resto seguirían esperando fuera, contemplando desde cierto punto lo que pudiera ocurrir en el patio de la casa ya que de ser necesario enviarían apoyo como refuerzos. Hyoga y compañía se acercaron al portón principal cuando se les dio la señal de empezar a atacar, mientas el fiscal intentaba quitar la seguridad del portón los demás empuñaban ya sus armas listos para atacar.

El portón fue abierto pero inmediatamente las puertas se desplegaron dejándolos ingresar, en el patio la guardia privada que vigilaba el patio empezó a disparar en contra de los policías y personal. Los ataques de bala venían de todas direcciones, Hyoga y compañía solo se dispersaron mientras devolvían los disparos intentando esquivar en su mayoría las balas  que eran disparadas por aquellos hombres con armas de gran calibre que no dudaban en disparar ni por un segundo.

Geki quien había tenido que acompañar por fuerza mayor a sus compañeros en lugar de mantenerse en la puerta trasera como había sido el plan, desde su posición escondido detrás de un arbusto dispuesto a disparar en caso de ser necesario indicó con la mirada a Hyoga seguir adelante dejando que él se encargará del patio mientras ellos seguían su búsqueda dentro.

Hyoga a pesar de ser amigo de Geki por deber y por compromiso tuvo que tomar su palabra confiandole a su amigo "limpiar el patio" en lo que ellos se dedicaban exclusivamente a buscar a los gemelos y a aquella mujer. Entre patadas y golpes mientras Geki ordenaba impedir que aquellos tipos dispararán en dirección a la puerta principal que era donde se encontraba Ikki y el resto se logró abrir la puerta forzando el cerrojo para entrar de una vez al lugar.

Tan rápido como ingresaron, portando sus armas frente a ellos sin despegar el dedo del gatillo avanzaron con cautela por el salón vacío contemplando la arquitecta del lugar, la iluminación y las grandes escaleras a ambos costados que daban al segundo piso. Ikki y Hyoga determinaron caminar por separado en las escaleras, mientras el fiscal subía por la derecha, el detective lo hacía por la izquierda y aunque esté en pocas ocasiones había participado en un ataque directo tenía una leve noción de que hacer así que recurriendo a su ingenio.

Ikki buscó a Hyoga con la mirada para indicarle el camino a seguir, este asintió al tener una idea del plan mediático creado en ese momento por su amigo. El detective respiró profundo antes de continuar, se armó de valor al estar más de lo que creía de esos hombres, avanzó con cierto miedo que no dejo que nadie notara por los últimos escalones que le faltaban para llegar al segundo piso para cuándo finalmente pudo llegar miró a todos lados encontrando habitaciones separadas de otras más a varios metros entre sí, suspiro para sus adentros mientras avanzaba teniendo la seguridad de que su equipo lo seguía por detrás.

Realmente no tenía idea de en cuál habitación pudiera estar alguno de esos hombres pero no fue necesario sobrepensar demasiado, a mitad de pasillo y con la iluminación suficiente como para poder ver con claridad el inicio y final del lugar vió al fondo la puerta de la última habitación entre abrirse... El detective giró un momento para ver a los demás solo para indicarles que ya los estaban esperando.

Con su seguridad y confianza en su máximo esplendor entendiendo que si se encontraba nervioso o ansioso no podría hacer nada ante ellos avanzó a paso normal viendo de momento aquellas habitaciones dejadas intencionalmente abiertas mostrando el interior de estás donde a duras penas se podía ver cómo estaban adornadas, todas listas para cumplir con la fantasía más retorcida de algún rico o millonario que estuviera dispuesto a pagar lo suficiente como para estar solo un momento ahí. A pesar de que todos avanzaban a la par, con quizá algunos centímetros de diferencia entre ellos se sentía como si estuvieran jugando al gato y el ratón siendo ellos las presas en esta ocasión siendo rodeados por los gatos ocultos que aún no hacían su aparición pero que atacarían cuando su amo se los ordenará.

Hyoga e Ikki intercambiaron miradas cuando llegaron a la puerta que había sido abierta justo frente a ellos, a pesar de las dudas e incertidumbres generadas por ambos abrieron de una patada la puerta sin quitar en ningún momento su ahora posición de ataque estirando y apuntando directamente sus armas a Kanon sentado detrás del escritorio leyendo algunos documentos mientras una taza de té estaba intacta justo frente al hombre.

Kanon dejó sus papeles en el escritorio, alzó un poco la mirada y recargandose un momento de su asiento observó a los policías amenazando con disparar en cualquier momento sin embargo él sabía que ellos no tenían permitido disparar.

—Tardaron en venir —dijo con gran calma— El té ya se enfrió

—Manos arriba ahora mismo— ordenó Hyoga avanzando dentro de la oficina llevando por delante la pistola ligeramente inclinada para darle más facilidad de ocuparla en caso de ser necesario aunque trataría de no hacerlo por órdenes de Shion y Docko de dejarlos con vida para poder interrogarlos posteriormente

—¿Así está bien? —cuestionó burlándose del policía alzando un poco sus manos hasta la altura de sus hombros— ¿O prefieren más arriba?

—¡Manos arriba!— volvió a gritar viendo en Kanon una sonrisa de burla que no disimulaba además de contemplar en aquel hombre una cierta confianza que a él intranquilizaba

Kanon sonrió alzando las manos hacía arriba tal como Hyoga le había dicho sin embargo al alzar las manos caminó también fuera de detrás de su escritorio para ponerse frente a ellos desapareciendo finalmente aquella sonrisa que había permanecido en él desde el principio. Al momento de estar frente a todos, con sus manos en alto y siendo apuntando por el arma de todos los policías desvío su vista directamente hacía el detective.

Hyoga indicó solo con un leve gesto a los demás para que se acercarán y actuarán conforme a lo que conocían, su equipo a excepción de Ikki y unos cuantos más no avanzaron dejando que los otros se encargarán de colocarle las esposas pero la situación se vió alterada cuando Kanon exclamó con un "Ahora" dando la señal a su equipo y trabajadores de salir y atacar. 

De la habitación de enfrente salieron varios hombres armados que dispararon en el momento en que vieron a Hyoga y compañía en la oficina de Kanon; no fue necesario una orden como tal para que todos al oír y ver la reciente amenaza intentaran refugiarse en cualquier lugar intentando evitar a toda costa las balas que eras disparadas por aquellos hombres.

Ikki solo se alejó a una esquina permaneciendo arrodillado en el suelo de dónde observó con mejor precisión el panorama que se estaba viviendo, los hombres trabajadores de los gemelos habían ingresado a la oficina donde ellos estaban y sin escrúpulos empezaron a dispararle, él sin protección alguna intentaba devolver las balas pero era peligroso hacerlo por el motivo de que tenía que ponerse de pie para atacar. Frustrado y de cierto modo con cierta angustia contempló el como Kanon tan despreocupadamente salía de la oficina dejándolos a ellos ahí, desconocía a dónde iba pero seguramente informaría a Saga y Katya sobre el ataque aunque quizá ellos ya conocían la situación y se habían adelantado.

El aturdido sonar de las balas ser disparadas, junto con algunas expresiones y gritos ante el dolor de algunos a quienes las balas fueron alcanzadas le impedían pensar con claridad, el recluido en una esquina con su corazón latiendo con fuerza y con su vista centrada solo en la entrada de la oficina no le generaba ningún tipo de confianza... Miró un momento al suelo maldiciendo su posición actual pero no podía quedarse ahí mientras los demás trabajaban por lo que sin miedo se levantó captando la atención de los empleados de los gemelos quienes dispararon contra su persona pero él fue un poco más rápido al disparar llegando a herir a la mayoría gracias tambien al apoyo de su equipo.

Una bala, una única bala llegó a impactar contra su brazo derecho dañando su mano dominante, se quejó ante el dolor soltando el arma de inmediato, arrodillandose de momento y llevando su mano izquierda a su brazo lastimado que brotaba la sangre de la bala que había quedado incrustada en él. Inmediatamente Hyoga se acercó a intentar ayudarlo pero entre quejas Ikki se negó ordenando a él seguir atacando mientras él intentaba ir tras Kanon y aunque en un principio Hyoga se rehusó no le quedó más que aceptarlo cuando el detective agarró nuevamente su arma, se puso de pie y aún con el dolor salió corriendo de la oficina. Hyoga se quedó en el cuarto continuando atacando aquellos hombres que intentaban matarlos pero no podía dejar que Ikki fuera solo por lo que con una simple mirada llena de desesperación ante el reciente ataque y la impotencia que sentía al no poder ir él mando a unos cuantos a seguir al detective.

Ikki entre jadeos y maldiciones corrió por el segundo piso intentando localizar a Kanon, evitaba a toda costa encontrase con los empleados de aquellos tipos ya que por el momento ellos llevaban ventaja. Su brazo sangrante y entumido dolía conforme seguía corriendo, lo único que momentáneamente aliviaba de cierto modo su dolor era cuando lo presionaba con fuerza con su otra mano, llegó a un punto en qué tal dolor no le impidió continuar, se detuvo cerca de una esquina de las intersecciones del piso en el que se encontraba, entre respiros agitados e hiperventilando rompió una de las mangas de su saco para hacer con ella un torniquete en su brazo impidiendo de momento seguir drenando su sangre. Con su brazo parcialmente bien continúo su búsqueda cambiando de arma a la comprada con Aldebaran ahora que finalmente podía estar solo con Kanon y aunque no sabía dónde se encontraba tenía un presentimiento de que lo encontraría muy pronto...

Avanzó ahora con lentitud por uno de los interminables pasillos, pateando todas las puertas que se encontraban en el camino para ver en su interior hasta que finalmente lo encontró, lejos de donde en un principio estaba, fuera de cualquier habitación como en un principio imaginó... Kanon estaba frente a él, apenas queriendo subir las escaleras para llegar al tercer piso pero que su cometido fue interrumpido cuando Ikki sin temor disparó a la pierna del hombre.

Kanon cayó al suelo de rodillas, girando con furia su mirada dirigida primero a su pierna para contemplar el daño ante el dolor entumecedor y abrumador de la bala impactar contra su músculo, dirigió su vista hacía atrás contemplando a Ikki acercarse en igual de condiciones con la única diferencia de que el detective tenía dañado un brazo y no la pierna.

—Volvemos a vernos... —entre jadeos e intentos por recuperar el aire dijo Kanon con una clara dificultad al no poder canalizar el dolor como él quería— Por un momento creí... Que jamás... Vendrías...

Ikki se reservó sus comentarios, no intenciones de hablar... No quería dialogar ya que a diferencia de cualquiera de sus conocidos, él sabía que el diálogo en ese momento no servía para nada más que una distracción. Se acercó a él con paso veloz para cuándo estuvo lo suficientemente cerca agarrar impulso con su mano izquierda que a pesar de no tener total control sobre ella al ser diestro hizo su mejor esfuerzo para almacenar fuerza en ella para poder golpear en el cráneo a Kanon con la empuñadura de su pistola al estar cerca de él.

Ikki cegado por el odio y resentimiento cosechado desde días contempló con cierta satisfacción el gesto de dolor articulado por Kanon al sentir el impacto del golpe en su cráneo, lentamente la sangre fluyó por su rostro debido al fuerte impacto pero un golpe no era lo suficiente como para calmar al detective quien arremetió nuevamente en contra de él con el mismo golpe de hacía un momento.

Los quejidos y maldiciones de Kanon resonaron en toda el área facilitando a los policías de apoyo y a Geki junto a su equipo que no había recibido algún tipo de daño encontrar fácilmente a Ikki. El detective cautivo de su dolor y enojo solo golpeaba insaciablemente al hombre que había causado el temor y malestar en su hermano, él no podía ver más allá de ese pensamiento de querer cobrarse con Kanon todo el sufrimiento que Shun tuvo que callar y el mejor modo para demostrar su descontento y su tipo de venganza era a través de golpes ahora con su puño limpio a aquel tipo tirado sobre las escaleras sin embargo la situación escaló a mayores cuánto tomó el arma que había dejado tirada, cargó las balas y apuntó a la frente de Kanon justamente entre los ojos de ese tipo pero le fue imposible disparar cuando solo sintió como varios lo tomaban por detrás y lo apartaban bruscamente de Kanon mientras que esté era esposado por los policías de apoyo.

—¿¡Qué demonios!?, ¡Recuerda que no podemos matarlos!— gritó enojado Geki sin querer soltar a Ikki por inseguridad a que esté disparará valiendole la orden de Shion

—¿¡Crees que me importan sus malditas reglas!? —gritó desesperado intentando soltarse, ver a Kanon ser levantado con cierta gentileza para ser llevado con Shion, Docko y el resto para llevarlo posiblemente al hospital primero antes que la cárcel le enfadaba tanto que juraba sentir su sangre arder— ¡Ese desgraciado tomó a mi hermano!

Volvió a gritar queriendo que por lo menos alguien se pusiera en su lugar pero ni así fue posible por los demás entenderlo por completo ya que reglas eran reglas; Kanon casi inconsciente fue llevado de inmediato al primer piso donde Docko y Shiryu ingresaban apenas queriendo apoyar a buscar a las víctimas secuestradas... Ikki tuvo que bajar tambien muy en contra de su voluntad para rendir cuentas a Shion sobre lo que había hecho sin embargo, cuando Kanon fue evacuado de la casa y cuando él ya se encontraba cerca de la salida siendo aún escoltado por sus compañeros algo sucedió que le hizo recobrar fuerza y energía para liberarse de sus compañeros y correr hacía un lugar que no había visitado en el primer piso y que sabía que nadie de su equipo general de la policía había estado ahí en ese momento...

(...)

Minutos atrás, cuando los primeros disparos de bala dados por Geki y compañía en el patio principal habían sido escuchados por todos aquellos dentro de Sodoma inmediatamente se llevó a cabo el plan que tenían estructurado desde hacía tiempo en caso de emergencia, Kanon permanecería como señuelo en la oficina principal mientras Katya se encargaba junto con Saga que evacuar a la mayoría de presas a su disposición con tal de que su negocio no se encontrará del todo arruinado.

Katya se encargó de asesinar a sangre fría a aquellos que consideraba no eran aptos para seguir, aquellos con alguna condición física, incapacidad mental o que su salud fuera deficiente eran asesinados por su mano dejando con vida a aquellos que consideraba competentes todavía. Mientras Kanon se encargaba de cazar a Ikki y los demás ella avanzó junto a su esposo evadiendo su presencia de la vista de los policías hacía el pasillo en el primer piso donde tenían la mayor cantidad de personas ahí recluidas, bajó amenaza y golpes Katya desalojó a cada uno obligándolos a avanzar por el pasillo hasta llegar a la puerta de emergencia que llevaba al patio trasero, mientras Saga en lo particular se encargaba de aquellos recluidos socialmente y que estaban pasando por la "etapa de disciplina y sumisión" que se esperaba tuvieran sus mercancías sin embargo en esta ocasión solo tenía a una persona encerrada en una habitación...

Shun permanecía sentado en una esquina del cuarto totalmente blanco e insonorizado, su mente en ese momento estaba tan atrofiada que a ese punto de su vida no podía reconocer que era realidad y que no; Había pasado un poco más de un mes recluido en ese cuarto estando completamente solo, sin escuchar nada ni siquiera su propia voz, no recordaba incluso como lucía pero había un recuerdo que lo atormentaba día y noche... Aquel recuerdo del día 16 del mes 04.

El recuerdo era tan vivo que podía sentir las manos de todos posicionarse sobre su cuerpo, sentía la calidez y el sudor de los otros juntarse con él, sentía vividamente cada golpe... Cada palabra dicha durante el acto y el dolor que conllevaba tener ese tipo de "juegos". Esa noche era una de ellas, estaba sentado totalmente solo pero su atención fue desviada de inmediato al ver entrar a alguien... A Saga, él único hombre que era capaz de recordar con la suficiente claridad como para que su corazón se acelerara lo suficiente como para transmitirle a su cuerpo que debía de huir de inmediato.

Intentó ponerse de pie rápidamente pero al estar atado las primeras semanas siendo incapaz en aquellos días de caminar su cuerpo se acostumbro a no hacerlo por lo que cuando intentó ponerse de pie inmediatamente calló, poco a poco observaba como Saga se acercaba y eso le provocaba un terrible temor capaz de inmovilizarlo. Saga se acercó hasta él para arrodillarse a su lado llevando luego su mano hacía su rostro para acariciarlo tal cual siempre lo hacía.

Una única lágrima bajó por su rostro al sentir el tacto, no podía ver nada más que los ojos penetrantes de Saga sobre de él mientras peligrosamente se acercaba a su cuerpo colocandose por sobre de él... Volvería a pasar, volvería a ocurrir... Nuevamente se encontraba recostado en el suelo frío, temblando de miedo dejando que sus lágrimas fueran las únicas que representarán su dolor al no poder expresarlo con palabras al saber que no serían escuchadas, inmovilizó su cuerpo cuando sintió la mano de Saga tomar el cuello de su larga bata blanca para quitarle esa prenda y dejar al descubierto su cuerpo desnudo.

Su cuerpo no se movía, ya estaba acostumbrado a eso pero seguía teniendo miedo, no quería seguir así pero no podía hacer nada por temor a recibir un castigo por parte de Kanon quien esté siempre le castigaba privandolo de sus sentidos para experimentar con su cuerpo cualquier acto o fetiche que en el momento se le pudiera ocurrir. Cerró sus ojos fuertemente y apretó sus labios y puños al sentir la mano izquierda de aquel hombre recorrer su pierna para llegar hasta su pelvis donde se detuvo solo por un momento.

Su pecho subía y bajaba con fuerza ante el terror del momento pero el sentir la mano del hombre tomar su intimidad le hizo abrir los ojos y a su vez alterarse, miró con horror a Saga clavando sus pupilas verdes sobre las ajenas sin embargo algo le hizo desviar la mirada, vió un bulto dentro del saco de aquel hombre que se remarcaba incluso sobre la tela... Por un momento volvió a su realidad, contempló nuevamente todo viendo que lo que había visto y sentido de cierto modo no había sido verdad, Saga se encontraba sobre de él presionandole con fuerza el cuello intentando privarlo del aire mientras a su vez quería pincharlo con una aguja pero en ningún momento Saga  tocó su pierna o más allá... ¿Su mente le había engañado?

Aturdido ante la reciente falta de aire y sin notar que Saga ya estaba inyectando en él aquella droga para dormirlo actuó rápido sacando el arma de dentro del saco del hombre, rápidamente apuntó a Saga por debajo de la barbilla mientas hacía lo posible por liberarse de él.

Saga lo miró, con cierta burla, ya había terminado de drogarlo solo debía de esperar a que la droga hiciera efecto en su cuerpo, se puso de pie victorioso importandole menos que Shun tomara su pistola, lo observó desde arriba mientras se acercaba solo un poco para cargarlo y llevarlo con los demás afuera de la casa pero Shun se negaría inmediatamente al intuir su intenciones.

El muchacho se sentó en el suelo de inmediato sin bajar por ningún momento el arma que aún llevaba consigo y mientras Saga se acercaba él se alejaba arrastrado su cuerpo desnutrido por el cuarto sin percatarse que estaba llegando a la esquina donde él mismo se encerraría ahí....

Simplemente de un golpe en su espalda sintió la pared chocar con su cuerpo, miró rápidamente detrás de él notando su grave error, su cuerpo comenzó a temblar, sus lágrimas se hicieron cada vez más presentes y su miedo se apoderó de él rápidamente.

—¡Aléjate!—

Desesperado gritó con su voz ahogada en su dolor y agonía incapaz de ver algo más que a Saga frente a él, su visión empezó a fallar cuando dejó su miedo y ansiedad controlar su cuerpo. Su respiración se aceleró más rápido de lo normal y sus manos poco a poco eran incapaces de sostener el arma debido al efecto de la droga.

Entre llantos desesperados volvió a gritar rogando se alejara más esto como de costumbre no resultó, su mente colapso en el momento de ver a Saga acercarse de más hacía él con la intención de tocar su cuerpo (según lo que él veía), inmediatamente quitó el seguro al arma y disparó en contra de Saga cegado por su miedo pero sobre todo por su trauma. La bala salió disparada en el momento en que presionó el gatillo pero está no impacto en el hombre al haber desviado la mira, intentó nuevamente mientras gritaba que se alejara en un grito desesperado pero no lo logro, por muy cerca que estuviera, si disparaba mientas cerraba sus ojos y desviaba la vista no iba a lograr herir a Saga... Sin embargo, aún sin ver y con sus manos temblando logró herir el abdomen del otro logrando que de momento el otro se alejara.

Aunque solo una bala había impactado contra Saga, desconocía que los disparos anteriores habían sido escuchados por la policía en la entrada de la casa llamando la atención de todos pero en especial de Ikki.

El detective desconociendo el paradero de su hermano y solo guiándose de aquellas balas que había logrado escuchar corrió hasta el pasillo de dónde él suponía había venido el ruido sin percatarse de que detrás de él venían policías siguiéndolo en conjunto con Shiryu y Geki quien no pudieron dejar que los demás lo trajeran de regreso.

Ikki entro al pasillo donde miró con cierto repelús y preocupación las habitaciones que había dentro, bajó el ritmo de su andar al notar cada una de ellas pertenecientes y protagonistas de algunos de los videos que había tenido la oportunidad de observar, su respiración fue yendo cada vez más lenta al ver el set de grabación donde su hermano había estado, se quedó un momento frente al cuarto contemplando su interior haciendo que los recuerdos volverían a él provocándole un dolor profundo en el fondo de su pecho pero que solo se intensificó al oir los gritos de quién parecía ser su hermano.

Volteó la vista de inmediato hacía donde provenía aquella voz, su cuerpo actuó de inmediato corriendo hacía el lugar cargando consigo su arma aunque su mente apenas podía procesarlo todo... Sin imaginarlo llegó, finalmente había llegado al cuarto blanco donde su hermano se encontraba aunque no solo él había llegado sino también el resto de policías que no pudieron cumplir su palabra de llevar a la entrada a Ikki al contemplar lo que ocurría dentro de la habitación blanca.

El detective miro atónito dentro del cuarto, su cuerpo se paralizó al notar a Saga arrodillado frente a su hermano intentando quitarle la bata que llevaba puesta mientras el joven se negaba intentando alejarlo. Inconscientemente de sus movimientos y dejando a su cuerpo actuar libremente disparó a Saga desde la entrada que era donde estaba.

Saga volvió a quejarse del dolor doblegandose hacía adelante al sentir la bala impactar en su brazo, inmediatamente volteó detrás de él para ver quién era el estúpido que lo había atacado... Ikki no dejó que Saga reaccionara ya que volvió a disparar pero ahora dejando que toda su cólera y furia fueran el motor que impulsaban sus movimientos.

Saga lo maldijo intentando ponerse de pie mientras observaba a Ikki entrar al cuarto sin dejar de apuntarle con la pistola a su vez que notaba a los otros policías también queriendo entrar.

—¿¡Qué pasa!?, ¿¡Finalmente vienes por él!? —entre su dolor y su cuerpo sangrando se acercó a Shun en la esquina quien esté debido al momento volvía a entrar en paranoia siendo incapaz de ver qué ahí ya se encontraba su hermano— ¡Mira a tu querido hermano!, ¿¡Realmente creíste que podías rescatarlo!?

Gritó en tono de burla tomando del cabello a Shun para arrojarlo al suelo intentando que el muchacho se golpeará el rostro contra el piso, logrando su cometido al hacerlo al ver que el chico no había opuesto resistencia alguna. Ikki miró la acción e inmediatamente se acercó a su hermano arrodillandose frente a él para ayudarlo a sentarlo mínimamente, dejó su arma a su lado para tomar con delicadeza a Shun con el objetivo de levantarlo, al hacerlo, logrando haberlo sentado frente a él contempló el rostro de su hermano, estaba pálido, sus ojos estaban cansados, su cuerpo se sentía helado... Con un dolor fuerte en su pecho acercó su mano al rostro del niño para acariciarlo lamentándose de haber llegado demasiado tarde pero al momento de rozar su mano con la cara de Shun, el menor reacciono violentamente girando a verlo, de un manotazo goleó su mano queriendo quitarla de su rostro mientras intentaba a toda costa alejarse de él a su vez que le gritaba que se alejara  siendo a ese punto incapaz de reconocer a su hermano mayor frente a él.

Ikki miró consternado intentando acercarse para abrazarlo creyendo que con eso Shun se calmaría pero ese intentó solo resultaba dar el efecto contrario, su hermano lloraba desesperado notandose en el tono rojizo de su rostro debido a la fuerza daba en cada gritó donde pedía que se alejara. Su atención se vio distraída al escuchar a Saga reir y a sus compañeros caminar para esposar a aquel hombre, inmediatamente tomó su arma y disparó múltiples veces a Saga logrando impactar en el cuerpo del otro en un par de ocasiones pudiendo escuchar finalmente lo que siempre quiso oír, los gritos de Saga representando el dolor que expremientaba al recibir cada bala.

Motivado con estos gritos y con la mirada de odio expresada por Saga al notar como de un momento q otro simplemente había disparado siguió atacando olvidando de dónde y con quién estaba, ignorando incluso a su hermano tras de él y es que eso era por que tenía un solo objetivo, matar a Saga con sus propias manos. Sus compañeros se detuvieron en seco al ver qué el cartucho de la pistola de Ikki se había acabado pero el detective sacó otro de su saco y mientras se acercaba a Saga arrinconado en la esquina exigiendo que se detuviera tal y como Shun en un momento tambien pidió lo mismo cuando tuvo que grabar cierto vídeo e involucrarse con algunas personas, Ikki teniendo solo en su memoria tal recuerdo siguió disparando consumido por su irá apuntando directamente en el rostro de aquel tipo haciendo que la sangre saltará y manchara su uniforme y las paredes de aquel cuarto blanco que había sido el infierno vivo para su hermano. Ikki solo disparaba sin descanso las balas de su arma de alto calibre, recargando la pistola cuando las municiones se acababan...

Solo paró un segundo para ver un momento su obra de arte, su respiración era rápida pero por la adrenalina del momento y por todas las emociones y sensaciones que estaba experimentando en conjunto con un éxtasis que le generaba observar como el líquido carmesí cubría en su total a Saga, se acercó un poco nada más para tomarlo de la corbata y acercarlo lo suficiente a su cuerpo para hablarle directo al oído.

—Esto no es nada a comparación con lo que vivió mi hermano—

Murmuró molesto notando en su hablar el enfado, la irá y ahora su tono autoritario y dominante que dejó ver a la luz desde el instante en qué dió el primer disparo en contra de el. Sin esperar alguna contestación por parte del otro y sintiendo nada más una rigidez en Saga lo aventó hacía la esquina del cuarto notando cómo el hombre se golpeaba su espalda al chocar contra la pared cambiando de rol ahora siendo que ahora quién se encontraba cautivó en la esquina era él y no el muchacho...

Disparo tras disparo, a veces variando el lugar pero el objetivo era el mismo, por un momento Ikki dejó de pensar para ahora solo actuar y dejarse llevar por el momento sintiendo satisfacción y calma el ver la sangre brotar de los agujeros hechos por sus balas; Se acercó aún más a Saga para seguir disparando pero las balas se le habían acabado pero esto no iba a detenerlo, volteó a ver a su equipo de inmediato, con una expresión intranquilamente sería, tiró su pistola lejos y extendió su mano.

—La pistola—

Ordenó agravando su tono de voz que generaba un aura tétrica debido a su apariencia, su rostro manchado con la sangre de Saga al igual que su traje mientras que detrás de él la pared blanca estaba manchada de un rojo carmesí y en la esquina Saga recostado de pie sobre la pared, con su rostro desfigurado siendo incapaz ahora de ser reconocido. Con cierto temor algunos se negaron ante la petición realizada por el detective pero Ikki volvió a gritar que le entregaran el arma, uno de los policías cumplió su deseo dándole la pistola.

El detective la tomó y siguió arremetiendo contra Saga quien ya se encontraba a ese punto muerto pero Ikki desconocía este hecho, el solo veía al hombre aún riéndose frente a él, él solo veía al agresor de su hermano...  Disparó todo el cartucho contra el cuerpo de Saga para cuándo el cartucho se acabará, se acercará a él tomando impulso olvidando la herida en su brazo con el arma para golpear al hombre frente a él.

Golpeó hasta que se cansó encontrando cierta felicidad al ver qué en un momento el cuerpo de Saga no soportó estar mucho tiempo de pie y cayó al suelo, se acercó colocándose sobre de él para seguir atacandolo encontrando aquella felicidad que creyó no recuperaría, entre cada golpe dado al rostro de aquel imbécil, entre maldiciones y gritos Ikki siguió actuando cobrando venganza por su cuenta mientras los policías, Shiryu y Geki observaban con horror lo que su amigo había hecho, Saga ya estaba muerto, su cuerpo tenía tantos agujeros causados por las balas que a ese punto sería la pesadilla de cualquier persona tripofobica, además de contar la hinchazón en el cuerpo del reciente difunto, la sangre saliendo de su cuerpo manchando tanto la pared donde había estado recostado como ahora el suelo donde se almacenaba la sangre derramada...

Algunos tuvieron que desviar la mirada inmediatamente al ver los ojos del hombre salir de sus cuencas, al igual de contemplar como Ikki apuñalaba el pecho del hombre con su navaja provocando que eventualmente se llegará a notar algún órgano perteneciente a Saga. La mayoría no toleró la imagen que Ikki estaba transmitiendo, alguno intentaban soportar el vómito mientas otros simplemente cubrían su mirada sin embargo Geki siendo uno de los que simplemente se giró para no ver tal acto contempló en la esquina contraria a Shun inconsciente permaneciendo recostado en el suelo a causa de la droga, inmediatamente al notarlo informó a su compañero.

Shiryu vio al joven para luego mirar a su amigo muy en contra de su voluntad, respiró profundo intentando no mirar hacía Saga mientras se acercaba lo suficiente como para que Ikki pudiera notarlo.

—¡Déjalo ya!— exclamó sintiendo las arcadas hacerse presentes en su cuerpo al pisar accidentalmente el líquido rojizo en el suelo

Ikki paró solo por un segundo para contemplar a Shiryu pero este solo señaló con su vista al joven de dieciséis años atrás de él, el detective muy en contra de su voluntad giró viendo a su hermano inconsciente en el suelo. Soltó la navaja y se puso de pie para ir inmediatamente con él, se agachó e intentó tocarlo pero vio sus manos pintadas en su totalidad por aquel tono rojizo... Se vio impotente nuevamente pero para poder ayudarlo se quitó lo que restaba de su saco para limpiarse las manos desechando luego el saco tirándolo lejos de él.

—Dame el saco— ordenó mirando a uno de sus compañeros

El hombre se quitó inmediatamente su saco para dárselo a Ikki quien esté lo ocupó para ponérselo cubriendo parte de su ropa manchada debido a lo que había hecho, tomó finalmente a Shun con delicadeza para acercarlo a su cuerpo, la frialdad que emanaba Shun no le generaba ningún tipo de tranquilidad además de verlo inconsciente. Abrazo a su hermano un momento guardando silencio por unos pocos segundos hasta que finalmente reaccionó volteando a ver a uno de los policías que llevaba puesto una chamarra, no hizo falta que ordenará nada, el policía se la quitó y se la dio en un intento de impedir la molestia de Ikki por tener que obligarlo a dársela. El detective tomó con rapidez la chamarra y con algo de cuidado se la colocó a su hermano teniendo miedo de lastimar su cuerpo al sentir la fragilidad del mismo debido a su reciente bajo peso.

Ikki miró ahora con mayor tranquilidad a su hermano permaneciendo desmayado en sus brazos, su rostro pálido y delgado, su cabello maltratado, sus brazos heridos y sus piernas a ese punto inútiles... El detective finalmente limpio sus lágrimas con su antebrazo luego de dejarlas fluir durante todo ese tiempo en donde había permanecido dentro del cuarto pero por más que las limpiaba no dejaban de salir; Abrazó con ligera fuerza a Shun solo para reafirmar que ya estaba nuevamente con él, que ahora "estaba seguro"...

El detective cargó de manera nupcial a su hermano cuando él pudo tener el control de sus lágrimas para decidir parar de llorar, abrazó q su hermano tratando que el rostro del joven fuera incapaz de ser visto por cualquier otro. Respiró profundamente y se dio media vuelta observando por consiguiente el cuerpo de Saga acribillado por él mismo en aquella esquina, era repugnante y grotesco de observar, era a ese punto incapaz de alguien reconocer a ese hombre debido a la severidad de la agresión con la que fue tratado pero en vez de ahora sentir lástima o mínimamente sentirse mal con él mismo por haber asesinado a una persona su temperamento no cambiaba, disfrutó el haberlo matado, ver con cada bala lanzada por él la expresión de Saga, observar el como se desangraba con cada golpe con su pistola y su navaja y escuchar los gritos provenientes de este tipo le hacían sonreír al querer revivir el momento solo para poder contemplar nuevamente el posible terror a la muerte que pudo experimentar ese hombre cuando él comenzó a disparar pero ahora ese tipo estaba muerto y todo gracias a él...

—Quién se atreva a decir algo sobre esto, tenga por seguro que no vivirá para contarlo —amenazó girando a ver al resto de sus compañeros sabiendo que sus palabras resonarían con mayor fuerza ahora que lo habían visto "en acción"— ¿Entendido?

La mayoría asintió teniendo que guardar el secreto pero a la vez intentando encontrar una mentira que se pudiera decirle a Shion para justificar el que Saga ahora estuviera finalmente...

Muerto.

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Nota:

Debido a las nuevas políticas de Wattpad está historia está en riesgo de ser eliminada por la temática que estoy abordando, en dado caso que se llegará a eliminar mi cuenta quiero informar que en AO3 está un respaldo de está misma historia, actualizo ambas plataformas el mismo día por lo que no hay diferencia. Mi usuario es karomela1288, gracias por leer ❤️