Tachiiri Kinshi

Quizás Mafumafu había dormido bien junto a Nisa, y quizás las pesadillas se habían tomado un descanso al menos por una noche. Sin embargo, esa tranquilidad la interrumpió Luz al, sin pedir consentimiento, tomarles una foto abrazados y dormidos dentro de la tienda.

Quizás ya había pasado el problema entre Luz y Soraru, y quizás el mayor había dejado de estar enojado con el otro. No obstante, esa pequeña oferta de paz que se hicieron terminaría cuando el azabache descubriera, de la peor manera, que el castaño había tomado la foto.

No escribió nada; simplemente vio cómo esa foto subida en Twitter generaba más polémica. Apenas se cansó de ello, fue hasta la casa del otro. Ya no quería arreglarlo de forma pública, puesto que no había dado efecto las veces anteriores. Siempre volvió a hacer lo mismo.

Pero no contó con que Mafu estaría ahí y vería como casi le daba un puñete en el rostro a Luz.

— ¡Oye, cálmate! —exclamó el más alto, asustado.

— ¿Soraru-san...?

El mayor no dijo nada, y sólo miró con furia al castaño.

—Sabes porqué estoy aquí y no me digas que no.

— ¿Qué activó tu ira esta vez? No te hice nada —espetó el otro.

—No me jodas, sabes bien lo que hiciste.

—Si no tiene que ver contigo no sé porqué te enojas. Yo creo que él puede defenderse solo.

—Maldito hipócrita, apuesto a que todavía ni siquiera sabe qué fue lo que pasó.

— ¿Qué...? —murmuró Mafu, aunque luego se detuvo porque su celular vibró.

Lo revisó rápidamente. Era una notificación de Twitter... Alguien mencionó su nombre en un tweet de respuesta. Al principio no le dio mucha importancia, mas entonces vio que era Luz.

— ¿Feliz? —cuestionó este a Soraru.

—Idiota.

Mafu revisó el tweet principal. Su mano tembló. Casi llorando, vio también los tweets de respuesta de los fans. Algunos lo defendían porque ya había dicho públicamente que Nisa era su amigovia, y otros...

Sólo bloqueó su celular, se levantó del sillón en donde estaba y salió de casa de Luz. No quería escuchar los gritos de Soraru, o las súplicas de Luz. Lo único que tenía ganas de hacer era llegar a su casa y encerrarse en su cuarto, en un mundo donde la crueldad de las personas no esté presente. Quizás Nisa lo ayudaría con algo así, pero simplemente sentía que no podía meterla esa vez.

Prohibido el paso, incluso si este yo que no sirve para nada es empujado hacia la bondad.

˗ˏˋ a little bit of darkness later... ˎˊ˗

Durante las siguientes tres semanas nadie volvió a saber nada de Mafumafu. Se aisló del mundo lo suficiente como para dejar de subir videos o publicar tweets. Muchos se preocuparon por eso, aunque no había forma de evitarlo. Ni siquiera Soraru fue capaz de hacerlo salir de su habitación.

Un día, la muchacha decidió que iría y lo sacaría cueste lo que cueste. Soraru la ayudó a entrar a la casa, aunque no sabía si sería una buena idea.

— ¡Mafufu! ¿Estás bien? ¿Puedo entrar? Dime que sí...

De alguna manera, el chico abrió la puerta. La miró con indiferencia, aunque en sus ojos se notaba que había estado llorando.

Nisa inclinó las cejas y, acto seguido, lo abrazó.

Por favor sólo dime una cosa... Que está bien para mí vivir.

˗ˏˋ next ↬ ˎˊ˗