La primera persona en reaccionar es una chica pelirroja.

-¡AYUDA!- lo primero que hace es gritar, llamando así la atención del resto- ¡SACADME DE AQUÍ!

Todos la observan. Nadie sabe que hacer. Estan perdidos en sus pensamientos. Unos se lamentan, otros piden por salir vivos de allí y a unos pocos les da igual.

Pronto todos estan gritando desesperados. Saben que si se les presenta una oportunidad, tal vez, sólo tal vez, saldrían vivos de allí.

El hombre, que anteriormente estaba situado en una esquina, hace acto de presencia y manda a callar a todos simplemente aplaudiendo.

"Bienvenidos a mi refugio" El hombre de apariencia robusta comienza a hablar "os he traído aquí porque quiero jugar" el silencio se apodera de nuevo de la habitación "¿Sabíais que estar apartado de la gente aburre?"

Su risa retumba en el lugar apartado. Todos lo miran atentos.

"¿Qué quieres de nosotros?" una chica de cabello negro pregunta entre sollozos "déjanos salir de aquí por favor. Y juro que no abro la boca, no le cuento nada a nadie. Por favor..." la chica habla desesperada suplicando por su libertad.

El hombre la ignora por completo.

"Espero que disfrutéis de vuestra corta estancia... por cierto, bonita muerte."

Mailyn