Después de esas palabras, Ofiuco decide aplastar dos veces más el gatillo.

La paciencia del chico con jaqueca está por acabar y no todos se atreverían a llegar a ese límite.

"Déjame decirte que soy buena persona. Aún quedan dos balas más y he decidido no dispararlas para no molestarte".

Cansado de toda esa mierda cierra los ojos y respira pausadamente. No debe alterarse, sabe que si se bloquea mentalmente puede ser un tanto molesto. El dolor de cabeza aumentaría y seguro gritaria sin importar que.

"Habla, así acabamos y te alivias antes..." las palabras con tono burlesco eran lo más repugnante.

Un suspiro audible y un carraspeo suenan antes de que comience.

"Caleb Tomlinson, no tengo padres y mi tiempo es el justo y por ahora el necesario".

Ofiuco resopla. Pero agradece mentalmente que todo haya sido tan breve.
Está desesperado y esas absurdas presentaciones son sólo para ganar tiempo. Necesita pasar a la acción. Pero no debe ser descortés y ha de escuchar las últimas dos historias.

Antes de eso decide terminar las balas y molestar a Caleb.

Este último grita y acaba exhasperado, respirando de manera fuerte, intentando calmarse y recuperar un poco de cordura. Sabe que si dice lo que pasa por su mente, acabará muerto. Por ahora está bien como está.

Mailyn