Ella siguió llorando, abrazándolo con fuerza. Pocos minutos después el de cabellos rubios oro sorprendido al ver a la princesa llorar, apoyó una mano en su hombro, dejando el leño que le tocaba cargar en el suelo. En realidad había ido con ellos para avisarlos de que ya debían regresar y se encontró con la escena.

- ¿Por qué pasó?- sollozó.- ¿Por qué os alejaron de nosotros?- Kenai miró extrañado al rubio apagado.

- La vida es injusta, pequeña... los celos... la envidia... La gente sin empatía se vuelve más peligrosa cuando tiene el poder.

- P-pero... pero... ¿Q-Que tiene todo esto que ver con nosotros? ¿Por qué simplemente no intentaron tener hijos en vez de robarlos? Es injusto...

Ahí entendió el tema y el por qué de las lágrimas de la joven.

- El rey es mi hermano mayor...- Álex se estremeció y miró fijamente al más alto de los dos.

- ¿Q-qué?- abrió los ojos en shock.

- Te lo explicaremos...- la arropó con un abrazo sobreprotector.- Vamos...- tomó el gran trozo de leña junto a una de las cestas.

Tres horas explicando toda la historia, y dando las razones de porque había pasado todo aquello, las razones que daban para intentar protegerla, que los creyera y que no hubieras dudas o preguntas, que todo quedase aclarado y que nada quedase sin explicar, porque ella lo merecía, porque no merecía sentir lo que sentía, no merecía estar llorando a mares abrumada por la confusión. Por lo que, ahora, al estar delante de aquel hombre que por casualidades del destino acabó en la misma celda y que ahora resultaba ser su padre... Lo abrazó con fuerza, él, sollozando también al volver a tener a su hija en sus brazos, la abrazó como si no quisiera soltarla jamás.

- Quince años lejos de mi pequeña y ahora vuelvo a tenerte conmigo... quién lo diría...- acarició sus cabellos mientras ella dormía. En la otra celda contraria, el chico estaba apoyado en los barrotes de forma relajada y sonreía dulce.

- Solo nos falta Keenan para volver a ser una familia...

- Lo sé, pero por el momento me conformo con que no me la vuelvan a quitar...- miró a Álex.

Al día siguiente, después de recoger el trigo hasta el mediodía, ambos, padre e hija, fueron llevados a la fuerza y casi con empujones hasta la cocina, donde fueron obligados a preparar un gran banquete para casi cincuenta personas ellos dos solos porque los cocineros habían sufrido una intoxicación extraña con unos frutos y se estaban recuperando.

- Supongo que algún evento especial se celebrará hoy...- suspiró Silver pelando ya la décima patata mientras Álex pelaba las zanahorias y las manzanas.

- Quizás Keenan se haya casado con alguien y debemos hacerle la comida a todos los invitados.

- Para un casamiento suelen haber cientos de personas, imagino que será la toma de la mano... aunque es extraño, porque estamos en el reino del príncipe...- explicó tomando otra patata.

- Puede ser cierto...

- O quizás haya sido un banquete normal y corriente, simplemente invitar a algún reino vecino aliado.

- También puede ser...

- ¡Oye!- los dos se estremecieron y se giraron al mismo tiempo hacia la puerta.- Estaría mejor que dejasen de especular como criadas que son, ustedes solo cocinan, no tienen derecho a quejarse.

- Lo sentimos, su majestad, solo hablábamos para que el silencio no nos abrumase, si así lo desea podemos mantenernos en sile. . .

- Si, mejor, cállense, bastardos...- escupió.- Y más vale tenerlo todo listo en menos de media hora.

- Si, mi señora...- musitó el hombre con una mueca asqueada e irritada en su rostro.

No había cosa que le fastidiase más que tener que ser amable, educado y formal con una prostituta del pueblo que había sido acogida en el palacio.

- Madre... ¿Qué sucede?- ahora los dos casi dejaron caer el cuchillo al suelo al escuchar la voz que ahora entraba en la cocina.- ¿Hicieron mal la comida?

- Estaban especulando sobre vos, hijo mío, los esclavos no deberían entrar en la cocina, están sucios, seguramente infectarán la comida- la madre puso una mueca asqueada.- Y menos si no saben manejar un cuchillo- se marchó de allí a paso ligero y bastante irritada.

El adolescente, ante aquella mueca tan terrible puesta por su madre, miró a ambos y sus ojos se abrieron en shock, su mandíbula se abrió dejándose caer y dos décimas de segundo después los dos hermanos se estaban abrazando como si no se hubieran visto en años, cuando en realidad solo habían pasado un mes sin verse.

- Tenía miedo de que te expulsaran del reino, no sabía donde estabas, te busqué por todos los rincones, no sabía qué hacer, padre ha desaparecido del reino y los invitados se reúnen en privado por él, ni siquiera madre ha podido verlo, y a mi solo me habla un día sí o tres no, y ninguna criada tiene tiempo para hablar conmigo o pasar tiempo conmigo, porque todas ellas tienen muchísimo trabajo y estado solo todo este tiempo, no podía parar de pensar en si tu estarías bien, si te habrían hecho daño o si estarías viva...- todo aquello sin soltar a sus hermana ni dejar de llorar como una magdalena, casi pareciendo un par de cascadas las que salían de sus ojos. Álex solo lo tenía agarrado en un abrazo fuerte y cariñoso, había pasado demasiado tiempo lejos de su hermano, no quería soltarlo.- ¿Dónde has estado todo este tiempo?- ahora se separó para tomarla por los hombros.

- En unas mazmorras subterráneas donde tienen encerrados a todos los esclavos... Solo salimos para trabajar el día entero y nos vuelven a encerrar allí por las noches...

- ¿Tu estás bien? ¿Te han hecho daño? ¿Te tratan bien? ¿Te alimentas bien?- Álex soltó un par de risillas.

- Estoy bien, Keenan...

Keenan suspiró aliviado.

- No puedo evitar preocuparme cuando llevo un mes sin saber nada de ti... Ha pasado demasiado tiempo... Ni siquiera lo pasé tan mal cuando fuimos a la fiesta del reino White.- Álex soltó un par de risillas y achuchó a su hermano.

- Bien mis amores, traje bastante leña y muchas ganas de ay. . . Keenan...- el rubio oro se quedó congelado al entrar en la cocina con seis pedazos de madera cortada entre sus brazos que cayeron estrepitosamente contra el suelo.

- ...- Keenan miró al hombre y después abrazó a su hermana casi posesivo- ¿Cómo sabéis vos mi nombre?- acercó su mano libre a la espada.

- Keenan, cálmate...- pidió la mujer deteniendo la mano de su hermano.- No pasa nada...

- ¿Cómo sabe como me llamo si nunca nos hem. . .?- su hermano fue a reclamar, pero su hermana mayor le tapó la boca.

- Tiene el carácter nuestro tío, desgraciadamente.

- ¿Nuestro qué? Pero si nunca hemos conocido a los hermanos de papá, ni siquiera tiene hermanos.

- Mejor calla, hermanito bonito.

- No quiero.

- Si quieres.

- No, no quiero.

- Pues te hago callar...- sonrió ella ampliamente atacando a su hermano con un achuchón de cosquillas.

- ¡No! ¡Álex! ¡Para!- exclamó escapando de su hermana por la cocina y ella detrás de él.

Los dos adultos se miraron al mismo tiempo que los dos menores jugaban como niños pequeños, uno con los ojos cristalizados por la felicidad que sentía al ver a sus hijos juntos, felices, con tan buena relación a pesar del tiempo, y simplemente encantado por poder verlos tan cerca de él, por fin volvía a tenerlos a su lado; y el otro con una rebosante felicidad marcada en una sonrisa perfecta. No importó el estruendo que armaron ambos, tampoco importó que tuvieran solo media hora para cocinar la comida de todos los comensales y que no estuvieran usando ese tiempo, no importó que la cocina acabase destrozada por una guerra campal que se montaron los dos hermanos escapando uno del otro para no hacerse las cosquillas, no importó la edad cuando el mayor de los dos adultos se metió en la pelea, no para pararlos, sino para jugar con ellos también, tampoco importó que uno de los hermanos estuviera en desventaja frente a la otra. No importó que Álex, cuando Kenai se cambió de equipo en un momento a otro conspirando con su hermano pequeño, le gritase: "Papá eso no vale" y después de varios minutos de cosquillas y carcajadas en el suelo cuando la inmovilizaron entre los dos, gritase: "Papi, ayúdame", para captar la atención del de un ojo tapado, quien estaba sollozando por la felicidad tapándose la boca, y cuando lo llamaron se lanzó a por los tres, tirándose al suelo de rodillas y los abrazó estallando finalmente en lágrimas por la alegría de volver a tener a sus hijos con él, a Kenai con ellos y, simplemente, volviendo a ser una familia. Los dos hermanos todavía con risillas tontas abrazaron a los dos adultos, ella realmente feliz, el otro confundido por la alegría de su hermana al abrazar a aquellos dos hombres.

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AJHDSKUFCJNDWJVNBWHVBWHJBVWHJS

Felicidad. Máxima.

POR DIOS, QUE GANAS DE LLEGAR AQUÍ QUE TENÍA

Pero, lamentablemente todo lo bueno se acaba y si, la historia está llegando al final...

Calculo que quedarán un capítulo o dos como mucho...

Así que... Por ahora vayan despidiéndose de los hermanos, al menos en esta historia, porque tengo muchas otras que contar sobre ellos dos...

Ósea, en este caso solo hicieron el papel de príncipe y princesa, en otras historias también hay increíbles escenas, hazañas o cosas curiosas por las que ambos pasan hasta el final de la historia... También tengo muchas cosas que contar sobre mis otros personas William Atxa y Robert López...

Aunque claro, no volveré a cometer el error de meter a tantas personas LGBT+ en la misma historia, como hice en "Doncel", sé, después de un comentario queme hizo reflexionar mucho, que cometí el error de definir la historia como "real" cuando solo había una pareja heterosexual... Y sí, aunque yo con "real", me refería a la enfermedad que padece Ryan, también me di cuenta de que la historia, tal y como está escrita, no es tan real como yo esperaba que sería... Sé que tendría que haber eliminado personajes, y sé también que o tendría que haber hecho muchas de las escenas, pero ya qué... Ya aprendí la lección y desde ahora en adelante, escribiré historias en las que haya originalidad, realidad y que la ficción sea mínima...

....

Me acabo de ir por las ramas...

Fuk xddd

Esto es lo que pasa cuando te pones a sincerarse y a decir cositas bonitas y hacer promoción y Spam de tus propias historias...

XDDDDDDDDD

Ahora en serio...

Espero que os haya gustado, hacédmelo saber con un voto, y nos vemos en el próximo capítulo

Bye~

By Ecchisforlife

[1774 Palabras]

P.D.: 207 Palabras de relleno XDDD