"Te quiero— susurró con algunas lágrimas resbalando por sus mejillas—, pero no puedo amarte. Adiós"

Takemichi no dejaba de sollozar y farfullar algunas maldiciones, mientras Mikey sonreía como idiota y devoraba con devoción unos taiyakis, todo su esfuerzo, cada minuto soportando los ridículos planes de Matsuno habían valido la pena. Ahora podía pasar sus días al lado de Hanagaki admirando sus radiantes orbes azulados.

Su amado Mitchy lloraba lleno de impotencia abrazando una almohada, la razón realmente no estaba al tanto de la película solo le importaba admirar al chico. Las lágrimas empezaban a caer y él no podía desaprovechar ese momento, limpió las saladas gotas de agua que decoraban los ojos y acarició su rostro embelesado.

Las mejillas de Takemichi se tiñeron de un tenue rosa y esquivo la mirada del rubio.

Todo iba de maravillas en su cita cuando su celular empezó a sonar, rodo los ojos y desbloqueó el móvil dejando al descubierto su fondo de pantalla que era una fotografía de Takemichi sonriendo.

—Hola Mikey, ya tengo listo nuestro siguiente paso —el tono alegre de Matsuno no pasó desapercibido por el rubio.

Mikey se alejó un poco de Hanagaki para hablar con tranquilidad y evitar que escuchara sus planes.

—Ahora estoy ocupado Chifuyu —constestó—Estoy con Take en una cita, no puedo creer lo que voy a decir pero gracias Chifuyu tu plan de algún modo tuvo resultados.

—Lo sé, soy increíble. Ahora el siguiente paso.

—Creo que ya no necesitaré tu ayuda

—¿Qué?

—Quiero hacerlo so-

—No, aún necesitas mi ayuda ¿Take se te confesó? Tienes que estar cien por ciento seguro, además como piensas confesarte a Take tu confesión debe ser memorable, memorable. Mi socio no merece menos.

—Esta bien, hablamos después Mitchy me esta llamando

Mikey pasó toda la tarde conversando con su crush aprovechando algunos momentos para abrazarlo y hacerle cosquillas. Se despidió por la noche del rubio para marcharse a su hogar.

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Matsuno corría por su habitación alagandose por su maravilloso trabajo, aún no podía procesar que el intento de cita tuvo resultados, esperaba que Mikey lo matara a chanclazos incluso empezó a rezar cuando se libró de las estupidas abejas pero ese momento nunca llegó.

Después de reírse solo en su habitación como un lunático levantó al pequeño Peke J y empezo a hablarle como si este entendiera a la perfección sus palabras recibiendo como respuesta unos maullidos.

Dejo escapar al minino y se recostó en su cama, no lo pensó mucho y agarro su celular para leer algunos mangas, soltó un grito de emoción cuando vio que habían actualizado y sus orbes brillaron de emoción.

Al día siguiente tendrá unas ojeras enormes pero eso no importa, lo que realmente importaba era leer ese capítulo nuevo.

—Una carta de amor es un gesto muy tierno, oh Mikey debe hacer eso, estoy seguro que a Take le encantaría. —musitó al terminar de leer y meditar un poco sobre su siguiente plan.

Entra al chat que tiene con los demás y escribe un corto mensaje mientras tararear una canción.

Chifuyu: Mañana tenemos una nueva reunión en mi casa. Todos deben venir no acepto un no como respuesta

Draken: 😒 ya ni lo dejan descansar a uno. No me pagan lo suficiente

Mikey: No te pagamos

Smiley: 😂 solo porque quiero ver como arruinan todo voy

Mañana a primera hora Draken se encargaría de golpear a Chifuyu si todo salía mal, no dudaba que el rubio mandara todos sus esfuerzos a la basura y tener a un Mikey deprimido no estaba en sus planes.

Mientras las neuronas de Chifuyu trabajan a mil y empieza a elaborar su siguiente paso, no hay dudas Manjiro debe confesarce a Take por medio de una carta. Una declaración que grite: "Te amo cásate conmigo o tu mejor amigo se va a morir"

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Las risas y murmullos es lo único que se escucha en la habitación de Chifuyu, Draken arquea las cejas esperando que el rubio empiece con la reunión.

—Estamos en una nueva reunión para unir al jefecito y mi socio

—Oh estoy seguro que algo va a pasar ya me acostumbré a tus fracasos Matsuno —musito Draken— Así que aquí están los números de los bomberos y una ambulancia —. Se levantó para repartir unos papeles a todos los presentes —,y si por si acaso, por las dudas se arma un desmadre el de la policía.

—Draken tu crees que la policía me deje secuestrar a Take —preguntó con un puchero
Mikey.

—Oh ese es el plan de respaldo —Chifuyu se ganó un golpe por alentar a Manjiro.—, pero vamos a evitarlo no queremos acabar en prisión de nuevo. Lo que vamos a hacer es una carta.

—¿Una carta? —preguntaron todos al unísono.

El rubio asintió

—No hay mejor forma de enamorar a una persona que con una carta, te ayudaré talvez sea nuestro último paso. En la carta debes indicar una fecha y dirección y todos te ayudaremos a confesarte.

—Estoy nervioso.

—Tu puedes Mikey hazlo por Take él se lo merece

—Ve por tu hombre —vociferó Kazutora con sorna.

—Y si me dice no.

—Ya tengo el plan B, confía en mi. Nada puede salir mal

Que equivocado estaba.

Manjiro se pasó la tarde escribiendo una carta con ayuda de Chifuyu y Mistuya quienes le aconsejaron expresar sus sentimientos con libertad.

Hakkai, Kazutora y Baji se encargaron del cartel que tenía escrito  "¿Quieres ser mi novio?" en lettering obra de Hakkai, Kazutora y Baji se encargaron de dibujar un Mikey chibi con un Takemichi con vestido y llenarlo de brillantina.

—Es hermoso —exclamaron orgullosos de sus dibujos.

Mitsuya solto una pequeña risa al ver el rostro de Hakkai con brillantina y manchas de pintura por culpa de Baji.

Chifuyu y Mikey seguían discutiendo sobre su seudónimo y Draken rodaba los ojos con disgusto.

—Chanclas locas es un buen seudónimo.

—Me gusta más invencible.

—Solo pongan M. S. —el tono amenazante d Draken asustó a ambos rubios que aceptaron a regañadientes.

—Kazutora, tú vas a la escuela de Take así que entregara la carta nosotros te esperaremos junto a Mikey en el parque —Chifuyu terminó de hablar para entregarle la carta de color blanco con unos stickers de dorayakis y taiyakis.

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Kazutora no podía creer lo que estaba haciendo, sus pasos son lentos y arrastra los pies con pereza se acerca a los casilleros y saca la carta de su bolsillo.

Examina cada casillero hasta que da con el de Takemichi, no lo piensa mucho y aprovecha que nadie viene para meter la carta dentro, sonríe y sale corriendo a sus clases.

Se va tan rápido que no se percata cuando una azabache se acerca y abre el casillero para encontrar la carta y sonrojarse al leer el contenido.

Kazutora cometió el peor accidente en la historia.

El reloj marcaba las 3:00 pm y todos se preparaban para la declaración en el parque Smiley no deja de reírse al ver el cartel y Chifuyu le regaba a Koko que le prestara un poco de dinero para comprar las rosas que se olvidó, el azabache aceptó para que se calmara.

Mikey no dejaba de caminar en círculos por los nervios, por fin se declararía a su rubio y estarían juntos para siempre.

—Kazutora dejaste la carta en el casillero de Take, ¿no?

—Sí, Fuyu ya debe llegar.

Una chica de cabellos oscuros se acercó temerosa hacia ellos, todos se miraron confundidos,  Chifuyu pensó que talvez la chica buscaba a alguno de sus amigos grande fue su sorpresa cuando se acercó a Mikey y lo llamó.

—Tu eres quien me envió esta carta —. Todos  quedaron estupefactos y Kazutora se veía siendo golpeado por toda la ToMan.— Me sorprendió

Chifuyu rogaba, imploraba a cualquier dios que su amigo no apareciera por el parque, pero ese día la suerte no le sonreía y a lo lejos pudo divisar el rubio cabello de su socio.

Draken que se recuperaba de la escena volteo a ver a Chifuyu para buscar alguna explicación, Draken podía jurar que nunca vio a Chifuyu tan asustado y no pasaron muchos segundos cuando encontro la respuesta al estado del rubio.

Takemichi Hanagaki.

Se acercaba de lo más sonriente hacia ellos y fue testigo de las palabras de la chica.

—Me encantaría ser tu novia.

Mikey intentó explicarle a la chica que habían cometido un error y que él nunca aceptaría a otra persona que no sea su preciado Mitchy pero la chica se fue sin escuchar sus palabras porque tenía unos asuntos que atender.

Takemichi solo escucho una oración, unas palabras que calaron en lo más profundo de su alma, su mundo se caía a pedazos y sus ojos empezaban a soltar algunas lágrimas.

Manjiro escuchó la voz de Takemichi, los tenues susurros que soltaba, se apresuró a acercarse a él e intentar explicar la escena de la fue partícipe.

—No tienes que darme explicaciones Mikey-kun tú y yo no somos nada, me alegra que encontraras a alguien especial —los orbes azulinos se veían opacados y una sonrisa melancólica adorno su rostro— Sé feliz.

Mikey no se movió ni un centímetro cuando el rubio de ojos azules salió corriendo del parque, se quedó estático con la mirada perdida y sin poder decir algo.

—Mikey te encuentras bien

—Lo perdí Kenchin.

La voz apagada del rubio asustó a todos.

—Chifuyu hazte una limpia —musitó Smiley sin su típica sonrisa, no era el mejor momento, pero todos coincidían en una cosa: la mala suerte perseguía a Chifuyu.

Matsuno solo pedía que la tierra se lo tragara y lo escupiera en cualquier lugar, todos sus avances se fueron a la basura por un error.

Takemichi caminaba con los ojos llorosos por las calles de Tokyo, recordando una y otra vez a Mikey declarándose a esa chica, su corazón dolía, pero nada podía hacer.

Llegó a su hogar, no había nadie para recibirlo y  tampoco lo habría lo más seguro era que Mikey se distanciaria de él por su pareja, subió las escaleras contando cada peldaño para distraerse, no demoró mucho en volver a sollozar con fuerza al recordar el regalo que tenía para el rubio, las pulseras a juego que no tendrían la dicha de ser usadas.

¿Por qué no fue lo suficientemente valiente para confesarce?

—Eso ya no importa a Mikey-kun le gusta una hermosa chica, nunca podría ser una mejor opción para él —sus propias palabras le causaban angustia— Desearia ser ella.

Manjiro no era consciente de lo que pasaba a su alrededor, nada tenía sentido. Su pecho dolía y sus ojos de color oscuro empezaron a mojarse.

Sus amigos lo acompañaron hasta su hogar y lo dejaron en su habitación, Draken quiso quedarse, pero Manjiro no lo permitió, deseaba soltar todo lo que tenía guardado y para eso debía estar solo.

Ambos chicos sollozaban por la misma razón y sus amigos, en especial Chifuyu, no podían permitir que eso continura.

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F por Mikey y Chifuyu, bueno no quería dejar la historia con Take y Mikey en un drama por una confusión pero era necesario.

El siguiente capítulo ya está casi listo pero no tenía claro que canción le dedicaría Mikey a Take para que lo perdone por la confusión así que pueden dejar algunas sugerencias.

Muchas gracias por leer, votar y comentar.