Un año más tarde.

—¡¿Por qué haces ésto, Hoseok?! – una mano aterrizó en la mejilla del joven.

—JiWoo...– la chica le interrumpió manoteando en el aire.

—¡No, Hoseok! ¿Crees que yo le voy a mentir a YangMi sobre ésto? Joder, ¡Es la mejor amiga de tu esposa con la que estás metiendo tu asqueroso pene!

—¡Eso no interesa! – ambos hermanos estaban cabreados por la situación – YangMi mantiene una relación con Taehyung, ¿No te das cuenta cómo se tratan?

—¡Mira que estupideces estás diciendo, hermano! – tomó su teléfono y lo puso frente a él – puedo llamar a YangMi en éste preciso momento y decirle todo. Tengo videos, tengo fotos y tengo grabaciones, ¿Y tú qué pruebas tienes de lo que dices?

—Y-Yo...– el silencio cobijó el ambiente.

—Ya sabía que sólo hablas a lo idiota para justificar tu infidelidad – JiWoo suspiró – si Namjoon llega a enterarse de todo, te matará y no podré meterme, porque tú sólo te has metido en todo ésto.

—¿Has vuelto a hablar con Jimin? – ella negó frotando sus ojos.

—Él no va a hablarme hasta que enfrente a Hoseok, Nam – el chico tomó la mano de su hermana – hoy es su cumpleaños y no sé si hablarle o no.

—¿Taehyung te ha dicho algo sobre cómo está él? – YangMi asintió.

—Está dolido, dice que bebe más seguido y no quiere hablar con nadie más que con Tae.

—YangMi, ¿Sólo peleaste con Jimin porque Hoseok haya llegado tomado a casa o hay algo que estás ocultando?

La chica desvió su mirada y con su mano libre comenzó a jugar con la tela de su vestido. Sabía que si su hermano se llegase a enterar de lo que estaba haciendo Hoseok, era capaz de irlo a buscar a su trabajo y romperle toda la cara.

Estaba por contestarle a su hermano pero una llamada robó su atención, tomó su teléfono y se alejó de donde estaba.

—¿Diga?

—Si de verdad quieres saber con quién se revuelca tu marido, ven a la entrada de Gangnam y encontrás un sobre amarillo entre los arbustos, espero que te des cuenta lo patán que es Jung Hoseok.

—¿Quién eres? ¿Cómo es que has obtenido mi número?

—Soy alguien que quiere ayudarte, y que conoce a la perfección a ese hombre.

—¿Hola? – sus manos comenzaron a temblar – ¡Yah! ¡Regresa carajo!

Namjoon corrió hasta donde YangMi estaba.

—¿Estás bien? ¿Qué ocurre?

—N-Nada Nam, sólo fue una broma telefónica – sonrió reponiendose – ¿Vamos a comer?

9 meses después.

—Vamos, házlo – YangMi caminaba por toda la recámara mientras hablaba sola – no puede ser tan difícil.

—¿MiMi? – la chica sonrió ante aquella presencia – por Dios, chica, estás bellísima.

—MiDo, tu no te quedas atrás, el gimnasio te ha venido de maravilla, tus caderas, ¡Son geniales!

Seok sonrió con superioridad ante las palabras de su amiga.

Tu marido se come ésto todas las noches, pensó.

—¿Cómo va todo con Hoseok? – MiDo trató de fingir preocupación – Namjoon me pidió que viniera, ¿Todo bien, cariño?

Yang suspiró mientras negaba.

—MiDo, quiero que seas sincera conmigo – ambas guardaron silencio – ¿Tu serías capaz de liarte con mi esposo?

—Nena...– Seok habló con suavidad mientras cogía entre sus manos las de YangMi – jamás haría eso, eres tan valiosa para mí que no te haría una traición de ese tipo.

YangMi estaba dispuesta a creerle, su expresión denotaba aflicción y se negaba a pensar en que ella le estuviera haciendo daño, después de todo, desde que fue a buscar ese sobre, no había sido capaz de abrirlo y para evitar la tentación, lo enterró en una parte de su jardín, por la misma razón que antes.

Creer en las personas que ella consideraba importantes.

Taehyung le había incitado a qué abriera ese sobre de una vez por todas para que saliera de su mundo de fantasía, pero simplemente se negaba. Intentó llamarle a Jimin, pero no contestaba sus llamadas, así que hace algunos días le había dejado un mensaje.

Jimin, no puedo soportar seguir así contigo, quizás esté cegada, pero te necesito a mi lado, los necesito a Taehyung y a ti junto a mí. Cuando tengas tiempo y cuando quieras, ven a casa, ya sabes el código, porque necesitamos hablar.

—¿Tú me crees, cierto? – su amiga la sacó de su burbuja de pensamientos, aterrizándola en el presente.

—Claro, no debería de dudar de ti, eres mi mejor amiga.

Ambas forjaron un abrazo, sin embargo, el sonido de la puerta abriéndose les hizo separarse.

Taehyung y Jimin veían la escena atónitos, enseguida Tae tomó el brazo de Jimin para detenerlo pero éste se soltó de manera brusca.

—¡Eres una zorra descarada! – se aproximó a nosotras – ¿Cómo puedes presentarte aquí después de que estás acostándote con su esposo? ¡Hoseok y tú son tal para cual!

—Jimin...– nuevamente interrumpió.

—Y tú, YangMi – los ojos de ambos se cristalizaron – ¿Para ésto me pediste que viniera a verte? ¿Realmente me necesitas como tanto lo dices?

—Realmente te necesito a mi lado – YangMi sollozó – ella me ha dicho que no se lió con Hobi, y le creo.

Como si de una daga se tratase, Park sintió una presión en su pecho y un dolor en su corazón.

—Me queda más que claro que le crees a ella antes que a mí – retrocedió un poco – porque a mí me mandaste a la vil mierda, aún cuando te traje pruebas de las asquerosidades que este par ha hecho.

—Jimin, por favor...– ella se vió interrumpida por las palabras del rubio.

—Perfecto, es tu vida, no me meteré más y tu sabes cómo la diriges, si hacia el cielo o hacia el infierno.

—¡Jimin, espera!

Él salió azotando la puerta, YangMi tenía la firme intención de irlo a buscar y solucionar todo de una vez por todas, pero MiDo le detuvo tomando su brazo.

—Yo me encargo de hablar con él, ¿Si? – ella asintió – Taehyung se quedará contigo, ¿Cierto?

Seok miró a Kim, siendo éste último el primero en entender lo que ella quería decir. Taehyung caminó hasta Yang y con los brazos abiertos la recibió. MiDo caminó con rapidez para alcanzar a Park, refutó en el camino al lastimarse con sus zapatos en el trayecto con tal de lograr entablar una conversación con él.

—¡Jimin! – el nombrado se detuvo apretando los puños – espera por favor.

Por educación, volteó hacia donde estaba la chica, quedando frente a frente.

—¿Qué quieres?

—Vamos Jimin, no te hagas el difícil – MiDo se acercó, sacando un poco sus pechos – sé que me deseas y odias que Hoseok me toque como tú no puedes hacerlo.

—¡Joder no! – Jimin la empujó lejos de él, ganándose una mirada de sorpresa por parte de ella – ¡Eres patética! ¿Acaso me crees tan idiota y necesitado como para caer en tus redes?

—O quizás gustas de YangMi.

—Carajo, tu sí que estás loca – Jimin se acercó nuevamente a ella – sé perfectamente que sólo eres una mustia frente a YangMi, te he visto follar con Jung, no puedes negarme que él le es infiel a ella y tú le mientes diciéndole que no.

Seok sonrió.

—Pensé que serías un poco más inteligente, Park – ella suspiró – aunque te vivas una vida diciéndole a ella que ambos somos unos mentirosos – se acercó a su oído susurrando – jamás te va a creer.

—¡Pero yo sé la verdad! – Jimin explotó – ¡Todos sabemos la verdad!

—Pruébalo – nuevamente ella sonrió – pruébale que Hoseok y yo somos unos mentirosos y habrás logrado tu cometido.

Ella se fué contoneando sus anchas caderas, haciendo cabrear más a Jimin. Con la rabia impregnada en su ser y las lágrimas fluyendo de sus ojos, llamó a algunos amigos que le debían favores.

Taehyung y YangMi merecían ser felices, lejos de las mentiras de Hoseok y MiDo.

¡Disfruten mucho éste capítulo y gracias a las personas que me apoyan! ❤️