Esa mañana, tras masturbarse intensamente, Claudia por fin se sentía lista para ir a trabajar. Al llegar la esperaba nuevamente aquel "simp". Esta vez le había traído unos dulces y le recitó un poema que le hizo sentir arcadas. Todo ello de camino a la oficina.

Una vez dentro se separaron y finalmente pudo reunirse con su amado jefe, joven, poco mayor que ella y de buen porte. Trabajaban juntos, aquel día hablaron lo necesario.

Al llegar a casa y acostarse, cerró los ojos y la imagen de aquel "simp" apareció en su mente. "Aquí vamos de nuevo", pensó.

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NOTA DE AUTOR: Un simp es un hombre que le ofrece su devoción, tiempo y dinero a una mujer que no le da nada a cambio.