Oh hermano, cachai que estaba raja durmiendo po, y no weona, siento una wea en la cara y me asuste po' pelua' la wea y ma' encima hedionda. Tipo no podía respirar por la rechucha. Abro lo' ojo' y weon, el gato culiao me tenía la raja en la cara. 

Y no empieza a gritar el reconchesugato, MIAAAU decía el culiao. Pero no es como los gatos lindos, esos cuicos que hasta ingrastam tienen po'. Wea de gato roñosa, hedionda y grita como las weas.

Igual lo quiero, pero weno, esta es mi historia.

#storytimeeeeeeeeeeeeeeeeee.

Hermano, el Tamaki se tragó todo mi sanguche' toi' caga' de hambre, y no han pasado ni cinco minutos aquí adentro. Voy a escribir mi testamento, me voy a morir de hambre.

"Querida gentuza que lea esta wea, les presento mi testamento:

Le voy a dejar mis weas al Hitoshi, a nadie más. Todos los demás cagaron, porque es el único que me da comida porque sí. Al Tamapollo le dejo mi corazón.

Mis riñones si quiere también, para que las venda al mercado negro, que saquen plata por último."

Listo, buenardo me quedó.

—Oe' washito rico, dame un beso por ultimo po' cabro culiao, te di comida. Pasando pasando me dijo mi ama'

— ¿Qué? —preguntó confundido.

—Ah weon, chupalo.

Me ignoró este saco wea', ya culiao, te pasai.

Igual estamos en lo oscurito, a ver...

Por debajo de la mesa, te acaricio la rodilla.

Aguanta, es mi rodilla.

Puta que soy weona.

Tamaki, hazme un hijo y págame el aborto.

Cachen un amix del autor le hizo un memingo.

Mira weon, cinco minutos. Buenardo.

Hasta la prooximaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa *dubstep music*