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10 dias, 10 hermanas.

Fecha de publicación: 31/07/2020 23:50

Correcciones: 30/09/2020 13:16

Casa Loud 17:30, sábado.

Silencio, era todo lo que se podía oír al interior de la residencia Loud, un abrumado y pesado silencio el cual nadie quería acabar, parecía incluso que la casa estuviera abandonada, cosa para nada fiel a la realidad, es más, toda la familia se encontraba dentro de la vivienda, con cada uno de sus habitantes dentro de sus cuartos, dedicando ese precioso tiempo en... absolutamente nada, solo recostarse en sus camas y quedarse así por horas, dejando pasar el día hasta que caía la luna y los llamaban a cenar, una cena bastante fría e incómoda, y no precisamente por los alimentos. Todos los hermanos y los padres estaban sentados en la mesa, pero era como si no hubiera nadie allí, no había peleas, ni conversaciones sobre lo acontecido ese día, ni siquiera un mal chiste que rompiera este ambiente, solo miradas fijas en la comida y pocas entre ellos, siendo estas de decepción, súplica, dolor y hasta una que otra vengativa, pero a los destinatarios parecían no importarles, solo alzaban la vista para dar a entender que, en efecto, sabían lo que querían decir, pero su vuelta a los platos era una respuesta más contundente que las palabras. Después de esto todos se iban al baño a cepillarse los dientes. O, mejor dicho, ir por su cepillo de dientes y un balde al baño y llevárselos cada uno a sus respectivos cuartos. Después del cepillado devolvían todo a su sitio, se iban sin decirse una sola palabra, como si cruzarse con tus propias hermanas fuera ya una obligación y un castigo, volvían a sus cuartos, se alistaban y se iban a dormir. Lo único que diferenciaba a la casa en esos momentos a por la tarde era que las luces estaban apagadas.

Y así es un fin de semana Loud desde hace 2 meses.

Habitación de Lincoln, 22:30

Lincoln estaba acostado en su cama junto a un computador portátil, teniendo una conversación con algunos de sus amigos, en principio sobre lo que iban a hacer estas vacaciones de verano, pues ayer viernes por fin habían terminado clases y querían aprovecharlas al máximo con las nuevas aventuras planeadas y las antiguas que no pudieron completar el verano anterior. Cada uno de contaba con alegría lo que planeaban hacer, con sorpresas, buenos deseos, incluso alguna que otra burla por lo complicado de sus planes, pero todo dentro de ese aire de amistad que había.

-Vaya chicos -dijo con entusiasmo el peliblanco- sin duda sus vacaciones serán estupendas.

-Y que lo digas amigo, estas serán las mejores vacaciones de verano

-Si, una pena que no podamos vernos durante este tiempo y solo nos podamos hablar por videollamada

-Tranquilos, chicos, Stella y patético -interrumpió Ronnie-Anne, a lo que todos rieron menos Lincoln, aunque solo sonreía con una mirada seria hacia la latina- no se preocupen por eso, después de estas vacaciones nos volveremos a ver seguro, así que dejen de ponerse sentimentales ¡y disfruten que por fin estamos libres de tarea y pasaremos el mejor verano de todos! -esto último lo dice con la voz alta-

-Ronnie-Anne, bájale a tu voz, algunos queremos dormir- gritó María Santiago, la madre de Ronnie, pues al parecer la segunda se emocionó de más y no midió el volumen de su voz.

Sus amigos, tras el incidente, empezaron a reírse, a lo que ella solo pudo cruzar los brazos con un leve tono rojo de vergüenza en sus mejillas, aun así, luego también suelta una que otra leve carcajada, para luego reírse sin para al igual que sus amigos.

Y así siguieron hablando durante una media hora más, hablando más a fondo de sus planes, prometiendo traer algún recuerdo para mostrárselo a los otros de regreso, y, sobre todo, hablando de en un ambiente agradable donde se notaba ese compañerismo, esa confianza y la sensación de tener personas con quien contar.

23:08

Poco a poco los chicos se fueron desconectando, quedando solamente Clyde, Ronnie-Anne y Lincoln, hablando de temas un poco más personales, pero sin mayor importancia.

-La doctora López me dijo que mis avances han sido satisfactorios, y que posiblemente la del lunes sea la última -decía con un orgullo desbordante un poco ridículo, pero eso no quitaba la felicidad de sus amigos, aunque...- aunque no sé qué sentir chicos, por fin pude superar mis miedos y problemas, pero ya la consideraba incluso parte de la familia, realmente la voy a extrañar -esto último lo dijo con mucha tristeza-

-No te pongas así Clyde, solo piensa lo orgullosa que ella debe estar de que hayas mejorado, lo último que creo que ella quiere es que estés triste -dijo comprensivamente Lincoln a su amigo moreno-

- ¿Eso crees?

-Por supuesto que sí -interrumpió Ronnie-Anne antes de que el peliblanco pudiera decir algo- solo piensa todo lo que se esforzó para verte mucho mejor, sin duda estará muy feliz, y esto no significa que no la volverás a ver, ¿no nos dijiste que tus padres y ella son amigos? -Clyde asintió- pues eso, diles que un día que no esté ocupada la inviten a cenar, seguro va a estar feliz.

-Saben que, tienen razón, muchas gracias chicos.

-Para eso están los amigos ¿no? -dijeron al unísono el peliblanco y la pelinegra, que, al darse cuenta de la situación, se sonrojan levemente y ríen con vergüenza-.

-Sin duda son el uno para el otro -pensó el chico McBride, mientras sonreía tranquilamente- bueno chicos, quisiera seguir hablando con ustedes, pero ya es tarde y la batería de esta cosa se va a terminar, así que me voy a descansar. Buenas noches Lincoln, buenas noches Ronnie-Anne.

-Buenas noches Clyde -volvieron a decir en unísono, con la misma reacción anterior, a lo que el moreno sonrió y se desconectó de la llamada-.

Quedando solo los 2, se hizo un silencio bastante incómodo, y sus caras rojas eran muestra clara del motivo. Ninguno se atrevía a romper el silencio, hasta que...

- ¿Sabes? -dijo Ronnie, a lo cual Lincoln la observa- creo que nos va a costar acostumbrarnos a llevarnos como pareja.

-Tienes razón -asintió el albino- igual no lo veo necesario, sé que no te agrada el mostrar cariño en público, los apodos cursis y el estar compartiendo cada paso que damos y decir "lo mucho que nos queremos" por redes sociales, a mí tampoco, simplemente es innecesario, mientras nos queramos lo demás es secundario Nini -concluyó diciendo esto último en tono de burla, esperando poder exasperar un poco a su novia-.

Ronnie-Anne estaba entre conmovida y enojada, igualmente estando acostumbrada a esas bromas del chico Loud, otra razón por la cual lo consideraba un buen chico, gran chico y excelente novio. Sin embargo, lo descrito antes por él le hizo recordar a unas personas que eran exactamente lo que él describía, lo que le generó una pequeña duda.

-Patético-en un tono algo serio, logra que Lincoln deje de reír y le preste atención- ¿Cómo vas con eso?

-Ah... ¿eso? -sorprendido y nervioso por la pregunta, piensa en que responder- No te preocupes, te prometo que convenceré al resto de que dejen las bromas sobre nosotros.

-Lincoln, no me refiero a eso y lo sabes -la mirada inquisitiva de la chica Santiago decía claramente que necesitaba la verdad-, pudiste engañar al resto, pero a mí no, en toda la conversación fuiste el que menos habló y ni siquiera contaste tus planea este verano.

Las contundentes palabras de Ronnie hicieron que Lincoln se resignara a la verdad.

-No lo sé, las cosas siguen demasiado tensas, ya ninguna se habla con ninguna, perdieron la motivación por todo, ya ni siquiera salen de la casa, solo las menores van a la escuela, el resto hacen estudio en casa -su tono revelaba tristeza y un poco de desesperación-.

-Ok, y supongo que no les has dirigido la palabra a ninguna, excepto a Lily obviamente -dejo la latina en forma de reprimenda-

- ¡Sabes que no puedo perdonarlas, así como así!, simplemente no confió en ellas, ellas se los buscaron.

-Eso ni tú te lo crees Lincoln -dejando su furia de lado, Lincoln le pone atención- mira, sé que lo que hicieron tus hermanas no es justificable, créeme que si fuera yo me costaría perdonarlas.

- ¿Pero? -ya intuyendo lo que le iba a decir su novia-

-Pero tú no eres así Lincoln, y yo lo sé, ¿crees que no me doy cuenta de lo triste que estás por esta situación? ¿de cómo cuentas que cada una ha sido ignorada por sus viejos amigos? ¿de cómo Luna no ha podido volver a su grupo de música? ¿de cómo Lori ya ni ganas tiene de ir a Fairway? ¿de cómo Luan tuvo que cerrar su canal, su negocio y hasta hacerlo socialmente?

-Ronnie... -murmuró Lincoln, pero Ronnie seguía-

-Y qué me dices de las menores, ¿No me has dicho que están tan desanimadas que ya ni siquiera Lana juega con sus animales, Lola va a algún concurso y que Lucy apenas llega de estudiar se va al ático y prácticamente vive allí? ¿Acaso no me cuentas todo eso con dolor, como si eso te hiciera sentir mal?, ¿no que ya no te importaba lo que hicieran?, Lincoln, deja de engañarte, tú no eres así de rencoroso, sé que aún las quieres y quieres perdonarlas, deja de hacerte esto, si sigues así solo te sentirás peor -Ronnie sintió que por fin se desahogaba de todo lo que quería decirle a Lincoln-.

Lincoln por su parte no salía de su asombro, pues Ronnie tenía toda la razón en lo que decía, realmente creyó cuando inició todo esto que si ignoraba a sus hermanas se sentiría mejor pues "había perdido la confianza en ellas" se decía a sí mismo, pero simplemente cada día se sentía mal por ver en lo que se habían convertido la casa y su familia, nada que ver con la vida alegre y caótica de antes.

Aun así, sentía que era mejor seguir con esa ley del hielo. ¿La razón? El miedo a volver a sentirse traicionado por su familia, de volver a caer en esa espiral de sufrimiento que los orilló a esto. Después de todo, era mejor prevenir que lamentar ¿No?

Unos segundos que parecían horas se adornaron con un silencio bastante tenso, con Ronnie-Anne con cara furiosa esperando la respuesta de Lincoln, el cual tenía el rostro agachado, una mueca de disgusto y los ojos cerrados. Este último es el que decide romper aquella incómoda falta de palabras.

-Necesito tiempo -fue la respuesta del peliblanco-.

-Has tenido 2 meses, ¿no crees que es demasiado tiempo? -respuesta que no fue bien recibida por Ronnie-Anne- lo que necesitas es un plan e iniciativa para querer solucionar todo este problema, ¿quieres que todo vuelva a ser como antes? -Lincoln asentía a la cámara- entonces mañana empieza a solucionarlo, para algo eres "el hombre del plan" patético.

Lincoln suspiró, pensaba responderle, pero quería resolver una duda.

-Ronnie, ¿por qué te preocupa tanto esto? -preguntó el albino- creía que odiabas a mis hermanas y que no las querías volver a ver ni en pintura.

Suspiró antes de darle su respuesta

-Aún no confió en tus hermanas, de hecho, siento que 2 de ellas aún te odian -agacha la cabeza- pero sé que en el fondo las otras realmente quieren disculparse y extrañan al viejo Lincoln, lo noto cada vez que voy a tu casa de visita. Además... -decide ver directamente a la cámara de su portátil, como si viera directamente los ojos del peliblanco- lo hago por ti, quiero volver a ver al Lincoln alegre de verdad, el que siempre se le ocurría un plan ingenioso para cada situación, el que se preocupaba por sus hermanas y hacía todo por ellas, yo también extraño a ese Lincoln Loud, extraño a mi patético -al decir esto último una lágrima le cae a su mejilla-.

-No llores por favor Ronnie, sabes que no me gusta verte llorar -trató de calmarla con sus palabras- escucha, te prometo que intentaré, no, prometo que me reconciliaré con mis hermanas, lo haré por ellas, por mis padres, por mí, y también por ti Nini, haré que todo vuelva a ser como era antes -termina el albino con una cara de comprensión la cual cambia a duda al ver a su novia reír-.

-Ya te dije que odio ese apodo, solo Bobby puede decirme así -dice esto con una mano tapando su boca- realmente te vuelves demasiado cursi cuando te lo propones -decide darle una sonrisa de confianza-. confió en ti patético, tienes todo mi apoyo en esto, no lo olvides.

-Gracias Ronnie -el solo asentía a sonreír- eres la mejor novia que pude pedir.

-Y tú el mejor novio de mundo -dijo cediendo un poco a las cursilerías ocasionales de Lincoln, luego revisa el reloj-, uh, ya es muy tarde, le prometí a mi madre que no me dormiría tan tarde.

- ¿Pero qué hora es? -dice algo alterado revisando el reloj de su portátil- ¿¡Las once y media!? Tienes razón, es hora de dormir, nos hablamos mañana, prometo arreglar las cosas con mis hermanas. Buenas noches Ronnie, te amo -le lanza un beso-.

-Confió en ti Lincoln, buenas noches, también te amo -responde también lanzando un beso-.

Los 2 deciden cerrar sus laptops, pero escuchan un ruido en los pasillos, esto proveniente de la casa Loud.

- ¿Qué fue eso? -dicen en unísono la latina y el albino-.

Lincoln va a abrir la puerta, solo para encontrarse con el pasillo vacío y oscuro. No le toma mucha importancia y tras cerrar la puerta se despide de su novia, cierra la laptop, se alista para dormir, apaga las luces y se mete en su cama.

-Espero que esto funcione -dice mirando al techo antes de dormirse-.

Cuarto de Lynn y Rita Loud, 23:40.

-Confiamos en ti hijo -dice la madre antes de cerrar su ojos-.

Y así la casa Loud entraba a dormir, a esperar un nuevo día

Casa Loud 8:30, Domingo.

El sol daba con sus rayos a los cuartos de los hijos Loud, de los cuales ninguno se había levantado ni parecía querer hacerlo, como si ese pequeño sitio fuera el único donde querían estar ahora y siempre. Tuvieron que desechar esa idea de repente al oír el llamado de sus padres.

-Chicas, bajen ahora a nuestra habitación, es urgente -gritaron al unísono Lynn y Rita- luego se bañan y arreglan, las necesitamos rápido.

Al oír el llamado de sus padres, las chicas bajan de una manera ordenada, saliendo una por una de sus cuartos: Primero Lori y Leni, donde la hija Loud mayor fue al cuarto de Lisa y Lily para cargar a la bebé y de paso apurar a Lisa, y la modista la esperaba, viendo Lori como esta iba muy desganada con ella, a lo que Lori hace una mueca de dolor. Luego salen Luna y Luan, a ambas se les podían notar sus ojos rojos y unas ojeras que hacían ver muy demacrado su estado, esto sumado el cabello suelto pero despeinado de la comediante y la pequeña cicatriz en la mejilla derecha de la rockera, iban a las escaleras juntas, pero sin ningún atisbo de ánimo de querer bajar. La siguiente en salir fue Lynn, la cual vestida con su ropa habitual llevaba una pelota de fútbol, pero a esta la miraba con odio para luego patearla hacia la pared con fuerza, repitiendo el proceso esta vez hacia las escaleras, bajando a pasos lentos y pesados, con un rostro de pocos amigos. Le siguieron las gemelas, primero saliendo Lana yendo rápido hacia las escaleras, luego salía Lola, de ella poco se podía destacar, más que su cabello desordenado y un rostro sin emociones, así que dio un bostezo y bajó a paso rápido hacia sus padres. La última en salir es Lisa, estando raramente vestida como de costumbre y sin ningún cambio significativo, tomando rápidamente las escaleras, esperando no perder mucho tiempo en esta "inútil reunión" según ella.

Con todas ya en la habitación de sus padres, todas quieren preguntar que era tan urgente, para encontrarse con que ellos no estaban presentes.

-Literalmente ¿Dónde están mamá y papá? -preguntó Lori bastante extrañada-

- ¿Y dónde está Lucy? -también con extrañeza preguntó Luan, recibiendo nula respuesta por parte del resto-

-Aquí estoy -dijo Lucy apareciendo de repente y asustando a todas sus hermanas- suspiro, tampoco vi a mamá y a papá.

Las chicas lanzaban todo tipo de preguntas, extrañadas de todo aquello.

- ¡¿Qué hacen ellas aquí?! -hasta que una voz masculina, reconocible para todas, las llevó a voltear hacia la puerta- Mamá, papá ¿qué es todo esto? -dijo un joven albino dirigiéndose a Lynn y Rita, quienes estaban al lado de él-.

Las hermanas estaban mudas y sorprendidas, entre todo lo que se les hubiera ocurrido no estaba que sus padres las llamaran para hablar con Lincoln, era lo único que pasaba por su cabeza, pues no encontraban otro motivo para que el chico estuviera allí. Las miradas variaban entre duda, sorpresa y alguna con furia, mientras que por el otro lado Lincoln se veía inexpresivo, no sabía que sentir, esperaba algún regalo de sus padres o una salida de los 3 con Lily, pero nada que, de momento, involucrara a las demás Loud, por lo cual solo se limitó a preguntar a sus padres, los cuales se veían en diferentes tesituras, con un Lynn padre entre una sonrisa nerviosa y sudando mucho mientras que Rita tenía una mirada seria hacia sus hijas, para luego dirigirse a su hijo varón, dando a entender que quería silencio total por parte de todos.

-Chicas, Lincoln, necesitamos hablar muy seriamente todos, así que les pido que por favor presten atención -La forma de hablar de la madre denotaba una autoridad firme, a la cual nadie discutió y siguieron escuchando- miren, su padre y yo ya estamos cansados de todo esto, ya no salen afuera ni para tomar el sol, nos estamos complicando demasiado con la escuela en casa y las que van aún a clases los maestros nos han informado que las han tenido que llevar al director más veces que antes, ya es que ni siquiera se hablan entre ustedes, estamos preocupados por ustedes ¿verdad Lynn?

-Tienes razón cariño, ya ni siquiera hemos vuelto a planear vacaciones por el miedo a que pase algo entre ustedes -decía el padre afirmando todo lo que su esposa decía-

-Pues ya todos sabemos quién es el culpable -decía Lynn Jr. con un tono de disgusto, para luego ser golpeada por Lori en la espalda, viendo la mirada seria de la rubia y de sus otras hermanas y sus padres- olvídenlo.

-Bueno -Rita volvía a tomar la conversación- como decía, sé que esto nos está molestando a todos, y nosotros ya no lo soportamos, así que queremos que resolvamos todo esto cuanto antes.

-Mamá, literalmente todas -interrumpía Lori, que al hablar le echa una mirada de odio a Lynn Jr., - queremos resolver todo esto, pero Lincoln no nos quiere hablar, ni siquiera ahora quiere vernos -terminó la rubia mayor al señalar a su único hermano-

-Eso no es cierto, su hermano si quiere arreglar esto, nos lo dijo ayer en la noche ¿verdad hijo? -respondió Rita mirando a su hijo-

Lincoln al escuchar esto mira a sus padres con duda, no recordaba haberle dicho algo así a sus padres, de hecho, recordaba todas las veces que estos intentaron preguntarle y solo con una sonrisa vacía decía "estoy bien dejen todo así" y se iba a su habitación a leer comics o hablar con sus amigos o su novia por llamada, tratando de ignorar el tema por completo.

Iba a cuestionar las palabras de su madre, pero un recuerdo de la noche anterior le hizo conectar las cosas: Fueron sus padres los que estaban en el pasillo, seguramente escuchando la conversación que tuvo con Ronnie-Anne.

Por eso habían organizado esta extraña reunión, sabían que, si alguna de las chicas se enteraba, se iba a formar un caos, uno de los malos, y del cual no estaban seguros que él lo quisiera así, y si le contaban que lo habían escuchado, seguro lo estaría negando como muchas otras veces. Esto, junto a las manos de sus padres en su espalda le hicieron entender la situación.

-Esperen -este pensamiento fue interrumpido por Lisa, alertando a los padres- si es cierto que nuestra unidad fraternal les comentó sus inquietudes ¿por qué parece que cada día hace lo posible por mantenernos alejadas?

Lynn padre iba a responder, hasta que su hijo le interrumpe.

-Porque tengo miedo -el murmuro del albino alertó a toda la familia, y todos los presentes pusieron su mirada en él, atentos a lo que dijo- no quiero que si las perdono pueda volver a pasar lo mismo, tengo miedo a pasar otra noche en el patio trasero con un traje de ardilla mientras me culpan de todo lo malo que les pasa -su ojos empezaban a soltar unas pequeñas lágrimas, dando un suspiro corto para proseguir- d-de como ya no era su h-h-hermano y-y no les importaba lo que me pasara

Aún con la voz quebrada y apunto de llorar, se contiene para terminar de hablar

-Y aún con todo eso, no puedo seguir con esto, las extraño, extraño las locuras y el caos de esta casa, tu manera fuerte de cuidarnos Lori, lo distraída y tierna que eres Leni, tus bromas malas pero entretenidas Luan, tu hermosa música Luna, que la casa esté llena de tus elementos deportivos Lynn, tus poemas y apariciones fantasmales Lucy, tus fiestas de té y concursos de belleza Lola, las aventuras con tus mascotas y en el lodo Lana y ayudarte en tus experimentos Lisa -todo esto lo dijo mirando a la respectiva hermana- extraño poder ayudarlas y pasar tiempo de calidad, poder vivir la locura que es tener 10 hermanas tan distintas y únicas, poder contar con ustedes cuando las necesite... -suspira melancólicamente para terminar- poder ser parte de la familia Loud.

El discurso del albino conmovió a todos los presentes, pues expresaba en el no solo sus miedos más profundos, sino también decía lo que las chicas y los padres querían decir, así como revivía una pequeña luz de esperanza, aquella familia ruidosa y caótica de Royal Woods podía volver a ser la de antes, puede que faltara mucho, pero saber que Lincoln estaba dispuesto a perdonar era un gran inicio.

-Muy conmovedor y todo -interrumpía Lisa- pero unidades fraternales ¿alguno tiene una idea para hacer todo eso?

Las miradas de casi todos se posaron con furia hacia la genio, pero tenía un punto, ninguno tenía un plan, ni siquiera Lincoln el autodenominado "hombre del plan", el cual no tuvo tiempo para pensar uno. Los ánimos decayeron casi tan rápido como habían subido, pero en eso una voz propone una solución.

-Esperen -llama la atención Lori- escuchen, literalmente tengo una idea ¿Qué tal si Lincoln pasa un día con cada una de nosotras?

- ¡¿Qué?! -exclamaron todos al unísono, pareciendo no entender las palabras de la mayor-

-Ahí, literalmente Lincoln extraña pasar tiempo con nosotras, pero aún nos tiene miedo ¿verdad Lincoln? -el albino asiente- entonces creo que podríamos cada una de nosotras preparar un día con Lincoln, haciendo lo que nos gusta y así de paso demostrarle a nuestro hermano que puede confiar en nosotras de nuevo ¿qué opinan? -terminó por decir la rubia mayor-.

Ninguno de los presentes se mostró indiferente, la idea de Lori fue lo suficientemente llamativa para todos, la analizaban detenidamente, lo que derivó en un corto silencio. Después de pensarlo, las hermanas Loud apoyaban.

-Como que la idea de Lori suena muy bien -decía alegremente Leni-

-Suena perfecto, sin duda esa idea tiene su gracia ¿entienden? -decía animada Luan, a lo cual curiosamente no hubo queja alguna-.

-Música para mis oídos, espero poder rockear con Lincoln pronto -Luna mantenía el ánimo que emanaba el grupo-

-Perfecto, espero que tontolón pueda soportar mis rutinas de campeona -dijo Lynn con algo de malicia, pero se notaba alegre-

-Suspiro, creo que has logrado calentar este oscuro corazón Lori, espero que mis versos puedan dejar a un lado la tristeza y la soledad que envolvió a esta casa -las palabras de Lucy fueron acompañadas con una diminuta sonrisa-

- ¡Si!, por fin volveremos a pasar tiempo con nuestro hermano -dijeron abrazándose y dando saltitos las gemelas-

-Según mis cálculos no parece que vaya a ser infalible el plan de nuestra unidad fraternal mayor -aquellas palabras de Lisa le hacen ganarse las miradas de odio del resto- a-aunque viéndolo mejor, suena una idea muy factible a mi parecer jeje -sonreía nerviosamente mientras unas gotas de sudor caían en su frente-

-Po-po, incoln -balbucea Lily mirando a su hermano de manera tierna-

-Por mí suena perfecto -comentaba con entusiasmo Lynn padre- aunque ¿cómo organizaremos quien pase el tiempo con su hermano? -mira a sus hijos para obtener respuesta-

En principio Lola pide ser la primera, para que luego su gemela también lo haga, luego Lucy, Luan y así todas empiezan a pelear por ver quien era la primera, creando una nube de humo donde se estaban golpeando entre sí. Hubiese llegado a más de no ser por el grito de su madre.

- ¡Alto! -tras ver que sus hijas se quedan quietas, prosigue- creo tener la solución, que su hermano pase tiempo con ustedes de la mayor a la menor, ósea, que empiece con Lori, luego con Leni, después con Luna y así hasta llegar a Lily.

-Un momento ¿por qué Lori tiene que ser la primera? ¿por qué no las menores primero? -preguntaba Lana con curiosidad-

-Esperen, ¿por qué también Lily? -dijo Lincoln, a lo cual la bebé de la familia lo mira con furia- je je, no me malentiendan, solo que no he tenido problemas con Lily, de hecho, hasta hemos salido los 2 con mamá y papá jeje -empezó a reír nerviosamente-

-Cálmense -dice Rita- esto no se trata de favoritismos, se trata de que arreglemos esto como familia ¿cierto? -todos asienten- perfecto, entonces, lo primero, Lana, es porque queremos que Lincoln pueda volver a confiar en ustedes, y lo lógico es que primero pueda sentir que puede contar con las mayores, después de todo, son el ejemplo que debe seguir, por eso necesitamos que confíe en ellas primero, y así podrá ser ese buen hermano mayor para ustedes ¿entendieron? -Lana asiente y queda conforme con la explicación, igual que el resto- y Lincoln, si bien es cierto que Lily no tiene que ver en esto, últimamente tu padre y yo te hemos visto alejado de nosotros incluso, casi ni pasas tiempo con la bebé, así que esta puede ser una buena oportunidad también para que vuelvas a compartir con ella ¿qué dices hijo? -termina Rita, la cual también carga a la bebé-

-Uhh, tienen razón, y me gusta tu idea mamá, así que sí, estoy dispuesto a pasar un día con cada una de ustedes -la cara de felicidad del albino no se podía comparar con nada en estos meses-

A esto las hermanas dan un grito al unísono mientras brincaban alegres, para luego unirse los 13 integrantes de la familia en un cálido abrazo familiar, algo raro en estos tiempos, pero nunca olvidado, ya que en el fondo todos lo extrañaban. Tras unos segundos fraternales las chicas se van corriendo a sus habitaciones, todas empezando a organizar por separado el día que pasaría con su hermano, pues desde mañana iniciaba el plan "recuperar la confianza de nuestro hermano y la alegría de esta casa y pensar en un nombre más corto para la operación", nombre creado por Lori y apoyado por todos, esperando que las cosas salieran bien.

Lincoln por su parte subió a su habitación, estaba incrédulo, no porque dudara de sus hermanas, sino por los sentimientos encontrados que le producía esta nueva situación pues una parte de él seguía en la idea de no perdonar a sus hermanas y dejar que el tiempo pasara, una idea que no era nueva, había convivido con ella durante este tiempo, aun a pesar de ser inculcada a la fuerza por sí mismo tenía llegó a creérsela del todo, y aún estaba en su subconsciente, generándole desconfianza y algo de miedo, pero que luego de un rato ignoró.

-Seguro solo es solo paranoia, voy a estar bien -dijo mientras alistaba su ropa para ir a bañarse y después prepararse para estos 10 días-

El resto del día pasó entre filas largas para el baño, pelea por la comida y un caos mientras las 10 chicas Loud organizaban sus actividades, pudiéndose ver a las mascotas sueltas y siendo perseguidas, unos murciélagos volando, balones en el pasillo, humo saliendo por uno de los cuartos, un pequeño auto recorriendo la casa, un parlante del que sonaba un solo de guitarra tocado a tope, una castaña que sostenía una araña falsa la cual atemorizaba a una de las chicas y una bebé caminado como si nada.

Lo cual parecía un caos insoportable e incontrolable, para Lincoln era sin duda un sueño del cual no quería despertar. Se sentía de nuevo en casa.

Sótano de la casa Loud 22:30

- ¿Estas seguras que nadie puede oírnos?

-No te preocupes unidad fraternal mayor, todos en este momento están en su descanso de 8 horas rutinario y da por hecho que nada va a poder despertarlos -decía con una confianza y un siseo constante- entonces ¿qué es tan importante para arruinar mi merecido descanso?

-Tú sabes mejor que nadie el motivo -dijo con enojo- si "mala suerte" es perdonado por las demás, volverá a juntarse con nosotras como antes, y terminaremos peor de lo que lo hemos estado este tiempo, no podemos permitir que ese apestoso las convenza -dijo determinada-

-Homosapiens sin pelo conocida como Lynn, sé que te he apoyado con todo esto desde que te sacaron de tus equipos y prácticamente las otras te han hecho a un lado, igual ¿no crees que has llevado este odio irracional al extremo?

- ¿Irracional? -pregunta con disgusto, pero su tono cambia- ahí, ya entiendo, también te lavó el cerebro ¿verdad? -su mirada dejaba ver su enojo, a lo que Lisa quedó muda- ¡Lo sabía! Ya te engañó con todo ese discurso de "yo no doy mala suerte, quiero perdonarlas" -dice imitando en forma de burla la voz de Lincoln y haciendo comillas-

Lisa estaba petrificada, conocía el carácter agresivo de Lynn y como esta iba a reaccionar si le cuestionaba, pero no llegó a pensar que llegaría a ponerse así de furiosa, y lo peor es que solo era el inicio. Lynn prosigue, pero antes toma de los brazos a su hermana, levantándola cual muñeco de trapo, llevándola a que la mire a los ojos.

- ¡Despierta de una vez enana! Todo lo malo que nos ha pasado es culpa de ese apestoso, y si vuelve a juntarse con nosotras volverá a pegarnos su mala suerte, ¿o acaso olvidas que por su culpa perdiste aquel concurso de ciencias? ¿qué me dices de cuando te expulsaron de ese club de científicos que tanto amabas por "no estar a la altura"? ¿Ehh? ¿y qué me dices de la muerte del abuelo?

Eso último terminó cegando a la científica, ¿cómo olvidar cuando su abuelo enfermó y a pesar de todos sus esfuerzos no pudo curarlo? Fue un golpe duro para toda la familia, del cual Lisa se sentía muy frustrada, y Lynn la terminó convenciendo de que el culpable era Lincoln y su mala suerte, cosa que, entre su orgullo científico y su frágil estado emocional, normal en una de su edad, le hizo ser de las pocas que no tenía intenciones reales de perdonarlo. Ahora Lynn utilizaba de nuevo esa fórmula.

-Entonces ¿ya recapacitaste pequeña genio? -dijo Lynn con una sonrisa burlona-

- ¿Qué tienes en mente deportista? -dijo con la voz resignada y la cabeza gacha, resignada-

Lynn sonríe victoriosa y confiada, segura de contarle su plan para arruinar el de sus hermanas...

Cuarto de Lincoln, 7:00, lunes

La alarma suena, y Lincoln despierta con cierta rapidez, se podía notar una cierta alegría en su rostro y en su forma de actuar, y en esa actitud estaba alistado todo para ir a bañarse.

-Oh, hola, tanto tiempo sin hablar sin ustedes, ¿Qué tal? -preguntaba entusiasta mientras buscaba su ropa interior y medias- pues ¿qué les puedo contar? Digamos que han pasado muchas cosas durante estos meses, pero luego se tendré tiempo para hacerlo -continúa hablando mientras saca del cajón su camiseta y luego su pantalón y los deja encima de la cama- ahora voy a pasar un día con mi hermana Lori -dice para luego tomar su toalla y dirigirse hacia la puerta- así que si me disculpan voy a ir a bañaa ¡aaahhhhh!

El albino se sorprende y asusta al abrir la puerta y ver parada a Lori al frente de él, cayendo al suelo de espaldas.

-Hola Lincoln -decía animosamente la rubia mayor- ¿literalmente estás listo para pasar el mejor día con tu hermana mayor?

-Lori ¿cuánto tiempo llevas para allí? -pregunta mientras se levanta del suelo-

-Más o menos desde antes que empezaras a hablar solo -dijo mientras ayudaba a su hermano a pararse, estando este algo apenado- pero eso no importa, ven, vamos rápido a camioncillo para aprovechar este mejor día.

-Espera Lori -dice Lincoln quitándose del agarre de su hermana- todavía no me he ido a bañar, y seguramente voy a tardar por la fi... ¿la? -pensaba seguir, pero ve sorprendido que no haya nadie esperando en el baño- ¿dónde están todas?

- ¿Las chicas? Literalmente hablamos entre todas y prometimos que ninguna se entrometería en el día de ninguna.

- ¿Enserio? -el albino ve a Lori asentir- vaya, sí que lo tienen todo planeado.

-Así es hermanito, escucha, ¿Qué te parece si te espero en la van mientras te alistas? -dice motivada la rubia-

-Perfecto, prometo no tardarme -dice Lincoln para luego irse rápidamente al baño, a lo que Lori baja hacia el garaje para sacar la van-

- ¡Lincoln! -grita la mayor a medio camino- olvidé decirte, tu desayuno está en la cocina ya preparado, solo caliéntalo y listo.

-Gracias Lori -dice desde el baño- sin duda se están esforzando, espero que sea un buen día.

6 horas después, Autopista, 14:00

Y hasta ese punto tenía razón, el día con su hermana mayor fue, cuanto menos, entretenido y variado: Primero fueron a la tienda de comics a comprar uno de los últimos números de Ace Savy, extrañamente Lori le pasó una capucha naranja, parecida a la que ella llevaba, diferente en el color, siendo azul la de ella, no preguntó por qué y se la puso, y ya dentro del sitio pudo conversar sobre Ace con ella, no siendo experta, pero sabiendo lo básico y prestando una genuina atención a cada cosa que Lincoln decía, preguntando si no entendía algo, alegrando enormemente al chico el interés.

Luego fueron al campo de golf, el cual estaba vacío, donde Lincoln ayudaba a su hermana a practicar, haciendo las veces de Caddy, ya teniendo experiencia en el asunto. Confirmando que su hermana era una experta, realmente era agradable ver como ella se desenvolvía con una sencillez digna de profesional, pero también ayudándolo en unos disparos de prueba que quería hacer, siendo Lori muy paciente y comprensiva explicando cosas de posición, fuerza etc...

Y para terminar el plan era ir al mall a comer un poco y comprar algo de ropa, pero antes decidieron conducir un poco, no tenían prisa, así que lo hacían tranquilamente y conversaban un poco. ¿Los temas? Un poco de moda y Ace Savy, era raro, pero ninguno quería decir algo de más, pero Lori quería romper un poco la monotonía.

-Lincoln -murmuró captando la atención de su hermano- y... ¿cómo te ha ido en la escuela?

La pregunta tomó desprevenido al albino, así que en principio toca el tema muy por encima.

- ¿La escuela? -dijo algo nervioso- pues muy bien la verdad, he sacado buenas notas, no me he metido en problemas y me la paso bien con mis amigos, nada raro jeje -dice con una sonrisa nerviosa y sudor en su frente-

Lori lo mira con desconfianza, sabía que Lincoln era malo mintiendo y seguramente le ocultaba algo, y necesitaba saberlo.

- ¿Estás seguro? -pregunta interesada-

-Por supuesto Lori, todo está muy bien -los nervios del albino eran más evidentes- hablemos de otra cosa ¿ok?

Lori ya estaba molesta, seguramente su hermano lo estarían haciendo bullying, quería ayudarle, pero si no sabía quién le era imposible. Esto la enfurecía aún más.

-Lincoln, estoy segura que literalmente algo te está pasando en la escuela, así que necesito que me lo digas ahora mismo -el tono cambió a uno más agresivo por el desespero-

-Te lo juro Lori, no ha pasado nada -a contraparte Lincoln estaba cada vez más nervioso y asustado, y su forma de hablar lo demostraba- no me ha pasado nada

-Lincoln -lo mira dudosamente, dándole más nervios al albino- lo hago por tu bien, dime que te pasa

-Nada Lori, lo juro, no ha pasado nada.

- ¡Te dije que me lo digas de una vez enano! -gritó ya furiosa por la negativa de su hermano- así que, o literalmente me lo dices ahora o te juro que te voy a... -dejó de hablar al ver a su hermano asustado a punto de llorar-

Tras ver esa escena, le vino a la mente las veces que ella lo amenazó durante mucho tiempo, en especial cuando empezó a amenazarlo con golpearlo porque, según ella y sus otras hermanas, por causar mala suerte y ser el culpable de todos sus problemas. Los gritos de dolor, sus disculpas y quejidos era un recuerdo que la atormentaba día y noche tras darse cuenta de su error, y verlo ahora le recordaba ese oscuro capítulo, sintiéndose miserable.

Viendo que casi llegaban al mall, decide estacionarse rápidamente.

Lincoln estaba en acurrucado en su silla posición fetal, con mucho miedo de recibir algún daño, pero al sentir que la van no se movía decide alzar la mirada, solo para recibir un inesperado abrazo de su hermana, la cual estaba llorando mientras no se cansaba de pedir perdón, cosa que paralizó al albino.

-Lo siento Lincoln, literalmente no fue mi intención gritarte, por favor perdóname hermanito -decía entre sollozos y lágrimas con arrepentimiento-

-Lori -murmuró el albino a su hermana- cálmate, sé que no fue tu intención.

-Pero si no te hubiera insistido con eso nada habría pasado

-No Lori, fue mi culpa -dice esto separándola de él, dejando con duda a su hermana- tu solo te estabas preocupando por mí, y debí decirte

-Lincoln, no, al fin y al cabo, es tu vida y son tus problemas, si no quieres que me meta en ellos no lo voy a hacer.

-No es por eso Lori, lo que pasa es que es un mal recuerdo y no quiero hacerte sentir mal -dijo desviando la mirada-

Lori vio la cara de su hermano, y con ello llegó a una conclusión: no se lo llegó a contar a sus padres, se lo había estado guardando y tenía que ver con lo de la mala suerte. Seguro era por eso no se lo quería contar, para no hacerla sentir mal en este día, pero ella no quería ver a su hermano sufrir más por su culpa, sabía que tenía que desahogarse, así que lo toma del hombro para que haga contacto visual. Lincoln al ver a su hermana con un gesto de comprensión entendió el mensaje.

- ¿Enserio quieres saber? -Lori asiente con la cabeza, así que suspira para hablar- bueno, fue hace casi 2 meses y fue cuando volví a la escuela...

Lincoln le relató, en resumidas cuentas, como en principio lo profesores habían logrado que Lincoln se reintegrara a los estudios y a su grupo de amigos, el cual al enterarse de todo prometieron cuidarle, pero fue complicado cuando Chandler, enterado de la situación como casi todo Royal Wood, aprovechó para jugarle bromas y hacerle bullying. Sus actos consistían en hacer comentarios sobre su supuesta mala suerte, sus hermanas y padres, burlarse de él con bromas de mal gusto a la salida de la escuela y aprovecharse de sus trabajos escolares, amenazándolo con golpearle si lo delataba, todo con el apoyo de sus secuaces. Pero la gota que colmó el vaso fue 2 semanas después de que iniciara todo, pues le dijeron que fuera al gimnasio después de clases, el aceptando, fue sin saber lo que le esperaba. Al llegar, el sitio estaba solitario, o eso creía, ya que al momento es inmovilizado por los secuaces de Chandler, viendo aparecer a este con un traje de ardilla, similar al de su infierno anterior.

Lincoln sin poder hacer nada, solo pudo ver cómo le ponían el traje a la fuerza, tratando de resistirse, pero siendo inútil, dejando de hacerlo al darse cuenta de un detalle. Pegamento. Los idiotas habían aplicado una gran cantidad de pegamento en el traje, dejando al albino imposibilitado para salir de él. Tras meterlo ahí, solo les bastó un golpe en el estómago para inmovilizarlo, dejándolo tirado allí mientras se reían felices por lo que hicieron.

Lori estaba impactada y furiosa, iba a preguntarle a Lincoln donde estaban esos chicos para convertirlos en pretzel humanos, pero antes de hacerlo, como si el albino terminó el relato, diciendo que fue encontrado por su amigo Liam, el cual lo buscaba para ir a su granja a pasar el día, y al verlo no duda en llamar al resto de sus amigos y a una ambulancia para venir a recogerlo. Al preguntar por adultos responsables de él dijo que llamaran a su abuelo, la razón por la cual ni Lynn ni Rita se enteraron. Al quitarle eso dijo claramente todo lo que sufrió y quienes lo habían hecho, logrando a momento ser expulsados de la escuela, y Lincoln llevado a un psicólogo, claro, tras convencer a su abuelo de que sus padres no se enteraran.

-Lincoln -con sus ojos aguados y voz a quebrada le murmura a su hermano- no lo sabía, enserio lo siento mucho

-No te sientas mal Lori, no lo conté porque sabía que no necesitábamos más problemas en casa -dice mirando a su hermana- además, pude contar con Pop-Pop, mis amigos y con Ronnie-Anne, gracias a ellos pude superarlo y sentirme mejor -Lincoln mira a su hermana con la cabeza gacha, luego recuerda que mencionó a su novia, la hermana del exnovio de Lori- Hermana, yo...

- ¿Cómo está Bobby? -preguntó espontáneamente Lori, dejando pasmado al albino- perdona la pregunta, pero sabes, puede que él y yo ya no seamos nada, pero no deja de ser una persona que amé, un buen hombre que perdí por mis errores, solo quiero saber si está bien.

-Ahh, entonces bien, él está bien, sigue trabajando en la tienda de la familia, sigue siendo el mismo Bobby de siempre, amable, pero algo inocente e infantil, pero es un gran amigo -dijo Lincoln con tranquilidad- y si preguntas, aún no tiene novia.

-Gracias Lincoln, pero no me des falsas esperanzas, no creo que él quiera volverme a ver, me lo merezco, lo nuestro es pasado -asegura con nostalgia y dolor-

Lincoln se sentía mal, le había dicho la verdad, pero omitió que Bobby también había preguntado a él por ella, claro, tratando de fingir indiferencia, pero era malo mintiendo, en especial cuando se le salió sobre si tenía novio.

Sabía que a pesar de todo él también la extrañaba, por lo menos quería saber si estaba bien, pero también que los Casagrande odiaban a los Loud.

- ¿Y cómo te va con Ronnie-Anne? -de nuevo una pregunta de Lori- por lo que me dices parece que son una bonita pareja

-Si, tienes razón, Ronnie es genial, y estos meses he podido pasar muchas cosas con ella, es increíble -decía con alegría en su rostro-

-Si, a pesar de todo tienes una linda novia a la que le importas Lincoln

Lori mira a su hermano y dirige su mano al hombro de chico, haciendo contacto visual.

-Promete que la cuidaras como ella lo ha hecho contigo

Y le da una sonrisa cálida, a lo cual el albino responde poniendo también en el hombro de ella, sonriéndole

-Lo prometo Lori -fueron sus palabras-

Tras decir eso, Lori asiente y decide mirar las ventanas, solo para darse cuenta que seguían en el parking del mall, así que la chica le señala al albino para bajarse y hacer la última parte de su viaje, a lo que Lincoln accede. Todavía estaba algo confundido, pues hablar de Ronnie y Bobby le hizo recordar un día en concreto, el día que supo que podía confiar el Ronnie-Anne, el día que su familia vio la verdad y supieron que se habían equivocado, el día donde las cosas en la casa Loud dejaron de ser las mismas. Un día que todos recordaban, pero eso será para otro día. Por ahora, estaba decidido a simplemente disfrutar con Lori lo que quedaba de día.

Cuarto de Lori y Leni, 9:00, martes

La habitación estaba calmada, con solo 2 hermanos haciendo trabajos de modistería, con un chico albino haciendo de maniquí de un traje negro de camisa blanca, del cual una rubia estaba terminando de coser el pantalón

-Bueno, solo unos retoques más y pasamos pronto terminamos -decía Leni, concentrada y con unos movimientos con esa aguja bastante hábiles -

-Vaya Leni, enserio que has mejorado con esto de hacer ropa, ya sabía que eras buena, pero ahora eres una experta

La rubia abre los ojos algo shockeada, esas palabras le vinieron como un golpe al corazón, pero en un buen sentido.

-E-e- ¿Enserio lo dices?

- ¡Claro que lo digo!, te aseguro que podrías presentar tus diseños en las mejores pasarelas del mundo

La sonrisa del albino demostraba sinceridad, transmitía una tranquilidad que a Leni le enternecía, por lo cual de repente va y le da un abrazo. Un acto inesperado del cual solo atinó a corresponder, pues empezaba a sentir la calidez, aquel amor de hermano que le faltaba hace mucho y creyó perdido.

Tras separarse del abrazo los dos siguen en su labor, la cual Leni siguió completando con una facilidad casi quirúrgica que sorprendería a cualquiera, terminando por fin con el pantalón.

-Link, voy a ir con más hilo

En eso el albino solo asiente, por lo que solo se espera a que su hermana tome los hilos de su tocador, dejando las agujas en la mesa. Pero resulta que, mientras ellos no miran, alguien cambia la aguja por una más grande. Leni prosigue a seguir con su trabajo, Lincoln igual, pero al iniciar el trabajo Lincoln empieza a quejarse.

- ¡Auch! Leni, cuidado

-Ups, lo siento Linky

-Solo que espero que no vuelva a pasar

Leni asiente, pero el proceso se repite, con Lincoln sufriendo punzadas por la aguja cada 3 segundos, quejándose a cada instante y la rubia disculpándose, para que de nuevo se repita el proceso de sufrimiento. Esto hasta que el albino colmó su paciencia

- ¡Ya basta! -dice sacando su ira acumulada- Leni, por favor concéntrate y usa la cabeza, por favor

- ¿Pero por qué? ¿Qué te pasó Linky? -la rubia no entendía el enojo de su hermano-

- ¡¿Qué no estás viendo que me estás pinchando con la aguja?!

-Pero no sé qué está...

Leni observa su mano ve su mano al darse cuenta que la aguja que tiene es más grande, cosa que ella no recuerda así, pues no la había cambiado ella,

-Ups, lo siento Lincoln, no me di cuenta, yo...

- ¡Pero claro que no te diste cuenta!, ¡se nota que sigues siendo la misma tonta de siempre!

-Lincoln... -empieza a aguarse los ojos-

- ¡Pero Lincoln nada! -termina de gritar con una respiración pesada-

Esas últimas palabras terminan haciendo entristecer a la modista, terminando de soltar su tristeza con un llanto. Lincoln, tras calmarse, se da cuenta de lo que acababa de hacer, por lo que decide alejarse un poco, chocando con el armario y abriéndolo en el proceso, encontrándose con un suéter, pero no un suéter normal, uno bordado con su cara y la de su hermana abrazados.

-Fue un regalo que te quise hacer -le comenta de repente, logrando captar su atención- era mi regalo de disculpa por todo lo que sucedió, como no dejarte entrar a casa en los días de lluvia.

Leni escucha un silencio, imaginando que su hermano se había ido. Sorpresa fue la suya cuando Lincoln la abrazó por la espalda, dejando caer varias lágrimas.

Lincoln la abraza para disculpase, pero no sabía si perdonarla del todo. Era la duda en su corazón

Cuarto de Luna y Luan 9:00, miércoles

Lincoln decide hacer un mini ensayo con su hermana Luna, algo tranquilo, pues solo quería divertirse. Al principio todo va bien, pero al darse cuenta que sonaba bastante bien (hasta ella se sorprende de lo que escucha).

Luna ve con buenos ojos el grabarlo, a lo que Lincoln accede con cierta duda, pero confiando en su hermana castaña. Luna decide ponerse los audífonos para poder manejar el sonido, conecta su guitarra a la toma y lo pone a mitad del volumen, por lo que decide probar tocando un acorde. Resulta que mientras Lincoln estaba revisando la afinación de su contrabajo, termina volando hacia la pared del pasillo, dándose un golpe en la cabeza. Asustado, llama a Luna para avisarle que está muy alto, pero parece no escucharle y ahora prueba tocando más acordes seguidos, provocando esta vez un golpe aún más duro, dejando la pared, incluso dejando el cuerpo de Lincoln marcado. Luna toca una canción de prueba, Lincoln, furioso, empieza a gritarle demasiado fuerte, pero esta no oye, así que a contracorriente de las ondas musicales el trata de llegar al parlante para desconectarlo, cosa que logra. Ella se empieza a quejar, a lo que el con un tono muy grave le muestra sus motivos para estar furioso, como la pared rota, a lo que la rockera trata de disculparse, cosa que el albino no ve y mantiene su tono de regaño, echándole en cara todo lo malo que hizo.

Luna se siente herida, pero lo ve como algo normal, así que solo se dirige a su cama, en lo que Lincoln decide guardar el contrabajo, pero en eso ve en la guitarra de Luna 2 fotos: Una que le regalaron el día de concierto de Smooch y otra junto a Sam en un concierto. En eso Luna le explica un poco como terminó su relación con Sam, en especial porque se hizo un secreto a voces el caso de Lincoln, el cual los padres (por pedido de los Casagrande) decían que fue a tomar unas vacaciones. Sam al saber del hecho empieza a sentir repudio hacia Luna, así como toda su banda, por lo cual es echada al poco tiempo, Lincoln se va de allí

Cuarto de Lincoln 22:30, jueves

Lincoln está en llamada con su novia Ronnie-Anne hablando de la familia de la latina, hasta que esta le pregunta por cómo va su plan, Lincoln ya se lo había comentado en días anteriores de esta idea de reintegrarse con sus hermanas, no le había comentado los resultados hasta hoy, día en el que estuvo con Luan. Le cuenta un resumen del día, que era algo sencillo, ayudar de nuevo a Luan en negocios graciosos, la diferencia estaba en que no había tanta clientela. De paso pudieron animar unas fiestas con temática de Ace Savy, cosa donde, además del pastel, el albino recibió comics y uno que otro artículo coleccionable de su héroe favorito.

Todo fue bien, hasta cuando volvían a casa, a pesar de que Luan no contaba ningún chiste malo por el camino, las cosas parecían calmadas, hasta que los 2 entran, Luan, por cortesía, ofreciéndole a Lincoln el poder entrar primero, cosa que acepta con confianza. Lo que sucede es que le cae un balde con agua fría tras abrir la puerta, cosa que sorprende a Lincoln, el cual mira a su hermana algo furioso, mientras esta niega que lo hubiera hecho. Este le dice que se tranquilice, pues en el fondo no la culpaba, pues ella era así y la entendía. Pero el resto del día fue más de lo mismo: Artefactos con pasteles para pegarle a Lincoln, cojines sonoros, su ropa teñida completamente de rosa etc..., esto llevándolo ya a un límite insoportable, donde toma la tarjeta de negocios graciosos y la rompe en mil pedazos en la cara de Luan, a lo que esta suplica jurando que no fue ella, de eso estaba segura, pero Lincoln no le cree, enumerándole el sin fin de bromas de ese estilo, por lo que se va indignado a su cuarto, eso sí, con todas las cosas que le dieron, dejando a una bromista destrozada.

Al contarle todo eso a su novia, esta no hace más que mostrarle apoyo, pero sin llegar a insultar a Luan, buscando que Lincoln se calme y tenga fe en que las demás no le darían tanto problema, para luego recordar que la siguiente era Lynn Jr., por lo que es esta Ronnie le dice que no se rebaje a su nivel, proteja de cualquier golpe que pueda recibir de la deportista, y, sobre todo, que no se deje humillar por ella, lo cual acepta y se despiden. En eso Lincoln busca entre sus objetos algo de ropa que haga las veces de pijama, pero en eso encuentra el libro de chistes de Luan, el cual por algún motivo decide echarle un ojo. En principio lee cada uno de los chistes por encima, y se ríe levemente, pues no niega que eran divertidos, pero al pasar las páginas encuentra que pasó de ser un libro de chistes a un diario de Luan, donde ella cuenta como Benny la dejó, la mala fama por el tema de la mala suerte (secreto a voces, ojo) hizo que el negocio perdiera en clientes y su sueño de presentarse en el teatro de Royal Woods ya fuese inalcanzable. Tras leer esto se siente mal, pero sin cambiar su semblante, así que pone el cuaderno encima de su mesa, junto al suéter de Leni y la foto de Luna

Patio de la casa Loud 15:00 viernes

Lincoln se le podía ver con ropa deportiva, agotado, pero con una mirada decidida, mientras en el otro extremo podemos ver a Lynn Jr. un poco menos agotada, pero con algo más de rabia mirando a su hermano, y podemos ver como estaban los 2 en un pequeño campo de lucha, del cual llevabas usando hace media hora, todo eso tras haber practicado distintos deportes como fútbol americano, fútbol soccer, hockey sobre césped y unas carreras.

Pese a que Lynn le había ganado en cada una de estas, Lincoln estaba dando buena lucha, llegando incluso en las carreras casi superarla, y esto la molestaba, por lo que había decidido jugar a algo más de contacto para sacar toda su ira. Pero la cosa no iría mejor, pues era cierto que Lincoln nunca fue a la ofensiva y solo se dedicaba a esquivar los agarrones, golpes y llaves que le propinaba la castaña, el simple hecho de salir sin casi herida alguna era sorprendente. Conste que Lincoln también lo intentaba, pero Lynn en ese aspecto ya era otra liga. La lucha siguió y la idea no cambió mucho, hasta que en un momento donde el albino quiso recuperar el aliento, esta aprovechó y le hizo una llave lo bastante fuerte como para oír el crujir de sus huesos. Lynn se dio por ganadora, quería restregárselo a su hermano.

Sorpresa se llevó la deportista al ver que Lincoln ya no estaba en el piso, sino simplemente recogiendo su toalla, ropa de cambio y bebida, algo cojo, pero nada que indicase que le hubiese hecho un movimiento destroza-huesos. Lincoln solo se dirigió a Lynn para darle una palmada en la espalda y decirle ''Buena lucha, se nota que has mejorado'' entrando a la casa y dejando a una Lynn inmóvil. Tras salir de su shock toma una pelota de fútbol americano y quiere lanzársela a Lincoln, pero en eso aparece una voz robótica que la llama a desde el subsuelo, sabiendo quien era, decide acudir a ella con fastidio, y la vemos desaparecer de la escena. En eso vemos a Lincoln en la cocina yendo por algo para tomar, pero también poniéndose bolsas de hielo por todo el cuerpo. Mira hacia el espectador

- Si, creo que ya sé que hacer -explica mientras pega con cinta más hielo en su pierna-)

Casa abandonada 22:00 sábado

Mientras Lucy trataba de hacer un ritual para tratar de invocar espíritus, Lincoln acomodaba la cámara de Luan en modo nocturno para poder grabar alguna aparición fantasmal. El albino voltea a ver a su hermana gótica, sabía que no era muy expresiva, pero tenía un aura un poco tensa, cosa que venía sintiendo desde hace tiempo, prácticamente desde que volvió a su hogar, y suponía que incluso de antes, a veces hasta veía marcas de lágrimas cuando la cruzaba con el pasillo.

Sin embargo, hoy tenía la sensación de que se sentía mejor, pues a pesar de seguir hablando de forma muy fría, volvió a aparecerse de repente, cosa que le casi le causa un infarto y aun así extrañaba de ella. Fueron al ático en búsqueda de los libros de la bisabuela Harriet, los cuales encontraron junto a otros materiales que les sería útiles para la búsqueda, como también una pequeña bolsa con monedas antiguas.

- ¿Eh? - Lincoln observaba la bolsa con mucha duda - ¿qué hace esto aquí?

-Eran de Pop-pop -responde Lucy tras él, volviendo a causarle un susto de muerte- el abuelo los guardaba como un tesoro, pero después de... -empieza a sollozar- no supimos más de ellas, hasta que decidí ir a buscar en el asilo y las encontré, quería dártelas como un regalo de disculpas y un recuerdo del abuelo, pero no encontraba el momento para hacerlo

Lincoln sabía que iba a llorar, así que entre un impulso de hermandad y el agradecimiento que tenía por aquel regalo, la abrazó. No pudo encontrar palabras para decirle, solo quería que se calmara y sintiera mejor, pero no sabía cómo decírselo con palabras, así que solo una muestra de afecto pensó que sería suficiente para hacerle saber que se lo agradecía. Después de al menos un minuto, se separamos.

-Lucy - miró a su hermana a los ojos - muchas gracias hermana, es un detalle bastante hermoso de tu parte

Pude ver como ella iba a volver a llorar, así que solo volví a abrazarla con todas mis fuerzas

-No llores hermanita, por favor

Ella no decía nada, pero sentía sus lágrimas en mi hombro. No podía sentirme peor conmigo mismo, por cómo había tratado a mis hermanas en los días anteriores, pues ellas estaban dando lo mejor de sí para disculparse, y por errores que a cualquiera les pueden pasar las traté de una forma muy horrible. Pensé que mejor esperaría a los días siguientes para disculparme, por ahora me quedaban las gemelas y tenía ahora que hace sentir mejor a Lucy.

Ya habíamos acabado de acomodar todo lo necesario, mientras esperábamos a que el espíritu apareciera, Lucy escribía unos poemas, yo solo atiné a acercarme un poco a ver, a lo que ella me dedicó una corta pero cálida sonrisa, sonrisa que me hizo sentirme mejor y dejó con calma. Calma que no duraría mucho.

El piso empezó a temblar, cosa que puso alerta tanto al albino como a la gótica, los cuales tomaban sus posiciones: Lincoln con la cámara, la aspiradora y el interruptor para alguna que otra trampa manual que hicieron con Lucy; la gótica en el centro de un círculo lleno de libros y velas encendidas y alguna caja abierta, habiendo en el medio uno de los libros abiertos, más específicamente en el ritual para poder alejar al espíritu o, en su defecto, atraparlo. De repente una ventisca rápida hizo que las puertas se movieran y las velas se apagaran, cosa que hizo que el albino encendiera una linterna y se la pasara a Lucy, mientras él mantenía la cámara en modo nocturno y mira por todo el lugar a ver si encontraba algo, manteniendo siempre a su hermana a la vista para evitar que le pasara algo.

-Lucy- preguntaba el albino

-Tranquilo Lincoln, todavía no se manifiesta del todo, no puedo sentir su alma, suspiro -decía con su típica forma de hablar-

- ¡¿Entonces que fue todo eso?!- decía el albino algo exaltado por la situación

Lucy estaba a punto de responder eso, pero de repente una de las ventanas de romper, y de paso las demás en la habitación se estaban rompiendo, esto hizo que de golpe los hermanos se juntaran, ya ambos temblando de miedo, pues no podían divisar a ningún espíritu, Lucy no lo sentía y Lincoln por más que miraba por todos lados con su cámara, lo que volvía a la situación peor en todos los sentidos.

De repente ellos ven como las velas del ritual de Lucy eran contadas por la mitad, haciendo que los 2 griten y empiecen a correr hacia las trampas, pensando que iba a poder guiarlo hacia allí, mientras Lucy aún mantenía su libro en las manos, esperando el momento adecuado para usarlo, el cual, por sorprendente que parezca, no era este. Lincoln quería reclamarle a su hermana, pero lo que menos quería en esta situación era tener una pelea, además, confiaba en el criterio de su hermana para estas cosas, por lo que solo se limitó a seguir mirando por la cámara. Al estar ya cerca de las principales trampas que pusieron empiezan a pensar que hacer en ese momento, Lincoln trata de preguntarle a la gótica, pero esta solo miraba el libro desesperada, no tenía idea de lo que estaba pasando, cosa que transmitió a Lincoln más miedo y algo de rabia. Pero se le olvidó en un instante.

De repente los libros del ritual de Lucy empiezan a flotar, para acto seguido ser lanzados hacia ellos con bastante fuerza, por suerte los 2 estaban atentos y lograron esquivar el ataque, y tras reponerse de este vuelve a mirar a la cámara, esta vez sí pudiendo divisar una figura oscura, pero esta no tenía forma, parecía humo andante. Antes de que esta volviera a lanzar más objetos Lincoln toma la aspiradora y la pone en máxima capacidad, esperando poder atraparlo. Poco a poco parecía ceder, se hacía más pequeño conforme la aspiradora lo succionaba, pero cuando quedaba poco del ente este empezaba a hacer contrafuerza, logrando de a poco zafarse del electrodoméstico, hasta al final salir del todo, causar un corto y haciendo que Lincoln se vaya por los aires, pegándose contra la pared y quedando débil para seguir. Lucy miraba esto y se sentía frágil, ver a su hermano así le trajo malos recuerdos, recuerdos que sabía que había que enterrar, así que, no muy segura, empieza a lanzar el ritual, curiosamente escrito como un poema, para poder salvar al albino.

-Alma vagabunda, alma errante, sé que tu pena abunda, que tu hogar está distante, en tu alma la bondad secunda, tu odio muestras en este instante, más siento que tu placer se hunda, en un rencor que te apresa bastante -recitaba la gótica- volver es tu deseo, tener paz te motiva, más tu esencia te apresa, tu libertad es cautiva, ya tranquila no se expresa, por eso ahora una luz más viva, que ahora quedará en tus ojos impresa, llevará aquel sueño de alma brava a aquel lugar donde el dolor no estresa

Lucy recitó las palabras, y por un instante todo pareció estar en silencio, aquel silencio que precedía a que el alma del espíritu regresara a su sitio de origen. Sin embargo, esto no fue así, pues tras unos segundos donde nada se movía el ente elevó el libro de Lucy y lo lanzó lejos, poniendo en una situación complicada a los 2 hermanos, pues Lincoln se encontraba algo bien físicamente, pero algo aturdido por el golpe, y Lucy quedó congelada, pues no salía del shock que le causó el que el ritual saliera mal, además del terror que le causaba el sentir que estaba a punto de morir.

La lluvia de repente arrecia en la ciudad, y se podía ver desde la ventana como las calles quedaban vacías y algunas casas ya apagadas. Parecía el escenario perfecto para la situación actual, un guion perfecto para un final así, incluso la caída de un rayo cerca del lugar era el detalle final a la situación, un rayo tan estruendoso que el brillo iluminó aquella oscura casa y retumbó en las paredes de esta. Los 2 hermanos esperaban atentos su posible final, pero parecía que ya no había nadie, que todo era solo el sonido de las múltiples gotas cayendo afuera lo que decoraba aquel silencio extraño. Lincoln toma la cámara y ve que no está el ente, que desapareció por completo, pero no se permite reaccionar ante esto, pues rápidamente Lucy le da un abrazo acompañado con los sollozos de sufrimiento que tenía.

-Lo siento hermano, no debí haber hecho esto, perdóname -se disculpaba entre llantos la gótica- mi alma no soportaría verte en el más allá.

Lincoln no reaccionaba, tenía muchas cosas en su cabeza, como un reproche a su hermana por confiar en ella, pues su ritual falló, y más encima no hizo nada más que leer el poema para detener al ente, además de hacerlo demasiado tarde, cuando supuestamente ella podía sentir cuando los espíritus estaban cerca. Por otra parte, trataba de ser comprensivo, sabía que ella solo tenía 8 años y que era complicado lidiar con algo así, también tenía en cuenta que ella estaba sufriendo por la situación y llevaba todo el día disculpándose. Entonces solo atinó a abrazarla débilmente, para no hacer la situación peor de lo que ya era.

-Recojamos todo esto, esperemos a que deje de llover y nos vamos para casa sin que mamá y papá se enteren ¿te parece? -dice el albino con una voz casi sin emociones, como un Lucy 2.0-

Eso su hermana solo asiente, entendiendo lo que pasaba por la cabeza de Lincoln, reprochándose el no haber ayudado más y culpándose de todo lo sucedido hace tiempo. Los 2 se separan para recoger su parte, Lincoln las trampas y los restos de la aspiradora, Lucy las velas cortadas, las cajas, los libros y el mantel donde puso todo. Tras guardar todo en una caja, Lincoln se dispone a ir por los restos del electrodoméstico dañado, tomándolos uno a uno, pero en eso encuentra una hoja de papel escrita, la cual toma con una mano para ojearla, dándose cuenta al instante que era el poema que su hermana había estado escribiendo mientras esperaban al espíritu. Decide leerlo, no era tan largo.

El dolor de la desconfianza

Camino lento que parece no tener final,

nuestras conciencias están matándonos poco a poco,

sí solo pudiéramos con palabras perdonar,

nuestras bocas nunca callarían,

si estos meses negros se marchitaran hasta morir

esperando a que nazca un nuevo amanecer brillante y claro

no dejaríamos de cuidar de aquella hermosa planta.

La oscuridad era más de lo que queríamos creer,

pues realmente aparece cuando menos te la esperas

o quieres hacer que no está allí,

que quieres cree que esa es la luz,

ahí es cuando dejas que te domine,

te aplaste, te lleve y al final te deje,

solamente para reírse de lo que logró.

En eso Lincoln bajó la hoja, la dobló y la puso en su bolsillo, quedando con más dudas que antes.

Ninguno sabía ahora que era lo correcto.

(...)

Cuarto de Lincoln 20:00, martes

Lincoln regresaba a su cuarto agotado, con unas vendas en sus manos y algo de ungüento en su cara, recostándose en su cama adolorido, pero más de eso sin ninguna emoción, solo mirando al techo en clara señal de desconcierto, y todo por lo que sucedió con las gemelas.

Flashback Lunes 8:00, Patio de la casa Loud...

Lana se había ofrecido a reparar aquella bicicleta extraña que hizo para su amigo y él, así como pasarían un día entero cuidando a las mascotas, un día relajado, pues en teoría la mecánica ya había logrado adiestrarlos. El día fue calmado, los 2 hermanos disfrutaron de embarrarse, montarse en la bici viajando por parte del pueblo, reparando la van, algo que Lincoln no manejaba, pero Lana le tuvo paciencia y le dio una pequeña guía para reparar a Vanzilla, la cual ayudó solo un poco, pero pudieron divertirse. Tras eso decidieron ir a cuidar a las mascotas, con las cuales jugaban de varias maneras, ya sea con retos entre ellos, bolas de lana con el Cliff, el frisby con Charles, reconstruyendo la casa para aves de Walt, haciendo ejercicio con el hámster y revolcándose en el lodo (de nuevo) con Brinquitos, todo iba perfecto.

Después de un rato Lana le dice a Lincoln que vaya por el alimento de las mascotas, mientras ella ponía los detalles finales a la casa de aves. El albino va motivado por la comida y los comederos de Cliff y Charles, encontrándose con las respectivas bolsas de comida en un rincón de la cocina, y una de semillas para el hámster, llevado todo cargado en sus hombros y dirigiéndose al patio trasero.

Lincoln lanza todo manera no muy cuidadosa al suelo, pero asegurándose de que nada se hubiera roto. Con eso confirmado y esperando a que Lana llegara y le ayudara a traer a las mascotas, empieza a llenar cada comedero hasta el tope, empezando por los de Cliff y Charles, yendo hasta la casa de aves de Walt y la llena con su alimento respectivo, y ya con casi todo listo lanza un chiflido sonoro, hacia una bola de humo, de la cual sale Lana, la cual repite el mismo gesto, dispersándose el humo y viendo a las mascotas en una pelea por un juguete, el cual ignoran al ver el alimento que a simple vista resultaba apetitoso, a lo cual fueron corriendo dejando a su paso un viento baste corto pero fuerte, empezando a tragarse todo como si no hubiera un mañana, con Lana acompañándolos con su plato de comida que Lincoln no tenía ni idea de donde había sacado, pero le daba igual, se veía bastante contento ante el panorama a su alrededor, y en eso una pequeña bola de plástico le empuja la pierna, dándose cuenta de Geo, el cual tenía una expresión de ternura, a lo cual Lincoln solo se le acerca, diciendo que no se ha olvidado de él, abre el compartimiento y hecha tanto alimento que deja la bola llena hasta la mitad, dejando bastante alegre al roedor, el cual solo nadaba entre la comida como si lo hiciera en el mismísimo cielo, haciendo que el albino riera y siguiera con su buen humor, el cual complementó sacando de su bolsillo su bocadillo por excelencia: El sándwich de mantequilla de maní y chucrut, dando un buen complemento a ese día que había sido, hasta el momento, el más tranquilo que había tenido en mucho tiempo. Pasaron 2 horas, y las cosas no cambiaban, la mecánica y el hombre del plan seguían divirtiéndose con las mascotas, corriendo, jugando, embarrándose hasta los pies, incluso fueron útiles para terminar la reparación de Vanzilla, no se podía pedir más.

Ahora jugaban atrapadas, siendo Charles el que trataba de atrapar al resto, con clara desventaja sobre Walt por poder volar, pero eso era lo de menos, pues charles iba por Cliff, el cual se salvó al subirse al árbol y el perro quedar atrapado en la rueda, al salir va por el hámster, pero este también logra huir, quedando solo Lana y Lincoln, la primera usando una técnica racanera, tirándole lodo en los ojos cuando estaba a punto de alcanzarlo, perdiendo visión temporalmente y tiempo que la rubia utilizaba a su favor, mientras que el albino era el que menos suerte tenía, al ser el más grande de todos y no ser el más ágil las cosas se le dificultaban, aun así lograba esquivar a Charles varias veces, manteniéndose así a salvo. Lincoln solo corría en círculos, esperando a que eso cansara al perro antes que, a él, y parecía funcionar bien. hasta que una piedra llevó sus ilusiones a tragar tierra. Estando ya prácticamente inmóvil por el cansancio y el dolor de la caída, solo espera a que Charles llegue y consiga retenerlo, pensamiento que se va de golpe al sentir como los dientes del canino son incrustados en su tobillo, soltando un alarido audible en todo el cuadrante, pero a que nadie respondió. Volviendo a la situación, Lincoln empieza a rodar en el piso, aún con Charles aferrado a su pierna cada vez con más fuerza, mientras una Lana asustada trataba entre llamados, chiflidos e incluso tratando de quitarlo de allí, pero de repente siendo apartada por las otras mascotas, que de repente también se dirigieron a atacar a Lincoln, siendo picoteado en la cabeza y los ojos, arañado en sus brazos y su pierna derecha y golpeado en su pecho y partes bajas con una bola plástica, con Lana tratando de separarlos, siendo botada lejos de la tortura que parecía iba a largo, de no ser porque un gran chorro de agua logró dispersar a esos animales endemoniados, Lana incrédula mira y ve a Brinquitos con la manguera y haciéndole un gesto de apoyo, a lo que ella instantáneamente corre a la casa, y en menos de 20 segundos logró ponerle a Charles una correa y atarlo al árbol, meter en sus respectivas jaulas a Cliff, Walt y Geo, los cuales seguían con cara de rabia y una posible sed de sangre.

Tras lograr evitar un daño mayor, Lana se dirige a la casa y vuelve trayendo el botiquín de emergencias, aplicando rápidamente el alcohol, el agua oxigenada, varias vendas en el cuerpo, casi estilo momia, una que otra curita en la cara y luego pasando una compresa fría y poniéndosela en los ojos, todo mientras el albino se quejaba de dolor. Tras acabar los primeros auxilios, Lincoln solo atina a pararse mirando mal a Lana, con ella con la cara agachada sabiendo de que iba la situación, Lincoln le grita preguntándole sobre el actuar de las mascotas, a lo que ella asegura que no sabía, generando un sinfín de reproches que solo quedaron en la mayor de las gemelas llorando y yéndose a su cuarto casi a punto de llorar, a lo que Lincoln en un momento de tranquilidad atina a agradecerle por la atención brindada, cosa que solo hace que se sonría débilmente y corra hacia la casa acompañada de su fiel Brinquitos. Lincoln ve que las demás mascotas ya están dormidas y decide que es mejor descansar, después de todo fue un día agotador, tanto en el buen como en el mal sentido, viendo de casualidad una herramienta, una pequeña llave inglesa, asume que a Lana se le cayó del bolsillo, así que tras pensarlo un poco decide que es mejor esperar a que terminen estos días y se lo devolverá, para no agregar más sal a la herida.

Flashback Martes 8:00, Cuarto de Lola y Lana...

Lincoln imaginó que, al no ser una época de concursos, con Lola sería mucho más fácil tener un día bastante calmado en teoría, y en la práctica fue, pues en principio se dedicaron a preparar en unas 5 teteras algunos sabores demás, hornear algunas galletas, en su mayoría de chocolate, pero también con diversos sabores, organizando un poco la fiesta que solo tenía de invitados a los peluches de la chica y a ellos 2, de hecho Lincoln hizo el ademán de ponerse el traje de mayordomo, a lo que Lola solo negó con la cabeza, dando a entender que sería los 2 degustando lo que prepararon, gesto que hizo sonreír al albino y su hermana correspondió. Viendo que al preparar el té primero se les enfrió, decidieron calentarlo en la estufa de juguete de Lola mientras degustaban algunos de los postres y charlaban de sus cosas, claro, los 2 tratando de evitar tocar temas sensibles.

En eso Lincoln se enteró de que esto parecía haber afectado a su hermana modelo menos de lo que pensaba, pues su círculo de amistades seguía siendo el mismo, seguía asistiendo a los mismos concursos y seguía cosechando buenos resultados, victorias fáciles a nivel local y puestos de honor y hasta alguna victoria a nivel regional, llegando a participar a nivel nacional, no teniendo mucho éxito, pero se veía la ilusión de la rubia en volver a participar, cosa que alegró al albino y le hizo ver que había aprendido de sus errores, pero le dejaba con la duda de como las menores parecía no haberles repercutido en sus respectivos círculos sociales, a diferencia de las mayores que parecían solo ser queridas en su casa, y con dudas sobre aquello. Dejándolo pasar, degustan el trabajo que habían hecho, y bromean diciendo que son mejores cocineros que su padre, pues las galletas quedaron deliciosas, ¡este momento era perfecto!

El sonido del té hirviendo los interrumpió, pero no mató el ambiente, pues los 2 van a tomar las teteras y las acomodan en la mesa, esperando poder disfrutar los bocadillos con algo de esa deliciosa bebida y uno o dos terrones de azúcar. Lincoln sirve a Lola un té de manzanilla, disfrutándolo y dejando claro que la temperatura era la ideal, Lincoln se sirve un poco y lo comprueba, acompañándolo de una buena galleta de limón. Repite el proceso con un té verde, pero antes de servirse Lola le dice que ella quiere servirle como gesto de cortesía, cosa a la cual asiente sin duda, dándole la tetera y dejando que le sirva, pero, de repente, Lincoln siente que su mano se calienta y en 2 segundos suelta la taza, haciendo que esta se rompa en el piso y dejando una mancha de líquido café en el piso, mientras el albino se sacudía tratando de enfriar su mano, para luego chuparse el dedo índice, el cual estaba demasiado rojo, casi profiriendo improperios de no ser por su hermana presente, pero entonces ahí estaba el problema. Lola, que vio como una de sus piezas de su preciado juego de té se rompía, no salía del shock, queriendo muy seguramente reclamarle a su hermano, y eso solo en el mejor de los casos. Pero decide calmarse, inhalando y exhalando logra bajar su ira, viendo le gesto de dolor de Lincoln, entiende que tal vez ella no sirvió bien el té, que la taza estaba dañado algo por el estilo, por lo cual va y le pregunta a su hermano por su situación, a lo cual el responde que no es nada, y que sigan con la fiesta, esperando que solo sea un infortunio. Lastimosamente, Lincoln quiso servir ahora, esta vez con el té rojo, y cuando toma la tetera, se vuelve a quemar, lanzándola por los aires, rompiendo la tetera y ensuciando no solo la mesa, sino varios de los peluches que estaban sentados y el vestido de Lola, Lincoln, sin importarle el dolor en su mano, trata de disculparse con Lola, pero esta solo tenía una mirada de muerte e ira, la cual empeoró cuando esta se paró y empezó a mirar a su hermano, señalándolo con el dedo índice, haciéndolo caminar hacia atrás del miedo

-Tú -dice con odio Lola- niño ardilla, ¡mira lo que hiciste!

-Y-yo yo, lo siento -responde tratando de contener sus lágrimas-

- ¡No me importa que lo sientas! ¡Tú y tu mala suerte volviendo a arruinar todo!

Pero la ira de Lola se despeja al ver a su hermano llorar, agarrado de sus piernas tratando de hacer lo menos visible posible su llanto. La rubia se da cuenta de lo sucedido, tratando de disculparse desesperadamente

-Lincoln, enserio perdóname, no quise decirte eso, no quería

-N-no, tranquila -llamó la atención de su hermana, aun llorando- s-sé que n-no querías hacerlo, p-p-pero es normal, dañé tu juego de té, t-tus peluches y t-t-tu vestido, yo lo siento

- ¡Cállate!

El grito asustó al albino, pero es sorprendido con un abrazo de su hermana, la cual solo incrusto su cara en su pecho, mojando la camisa naranja con una combinación salada de lágrimas y mocos.

-Por favor, no digas eso, s-solo no digas eso -se aferra más con su abrazo-

Lincoln solo corresponde el abrazo, tratando de que esta se calme. Quedan en la misma posición durante 2 horas...

Y ahí estaba, recostado tratando de curar las heridas de su disputa animal, que logró disimular bastante bien con Lola, pero peor era su estado emocional, pues cada vez se sentía más indeciso, pues con cada hermana, algo había salido mal, incluso lo amenazaron de distintas maneras, lo cual le hacía pensar que no habían cambiado, pero miraba la otra cara de la moneda, que ellas hicieron muchas cosas que le gustaban, la mayoría del día se portaron bien con él y también llego a tratarlas mal sin motivo alguno, pues siempre se disculpaban o estaban arrepentidas por esos problemas, incluso cuando no tenían explicación, y de ahí salía el punto gris de esa situación: Se daba cuenta que en todos los problemas, exceptuando el de Lori, ninguna de sus hermanas lo podían explicar, como si alguien más lo hubiera planeado.

-O, mejor dicho, si 2 personas lo hubiesen planeado -dice esto fijado su mirada en el calendario de su cuarto, fijándose en el día siguiente y la persona que representaba

-Espero tener respuestas mañana

Dicho esto, se cambió de ropa para dormir, apagó las luces, dejando una pequeña caja que le dio Lola y se metió en su cama, cerrando sus ojos al instante. Segundos después la puerta se cerró sola).

Cuarto de Lisa y Lily 05:00, miércoles

La luz seguía encendida a pesar de que el sol ni se había salido, se podían escuchar a los líquidos derramarse en envases de vidrio, mientras que algo de estática se podía sentir, y allí se podía divisar a una niña bastante pequeña de cabello castaño bastante desorganizado, vestida con un suéter verde y pantalón rojo, acomodándose sus gafas de marco negro.

- Veamos, si pruebo esto y lo combino con... no, no va a funcionar, y si mejor aplico 4 gotas de, ¡No!, es imposible, ya no sé qué hacer para poder acabar con... -suelta un grito de cansancio-

- ¿Acabar con qué exactamente, Lisa?

De repente la científica siente un frío recorrer su espalda, no era capaz de imaginar porqué estaba detrás suyo, si todos sus cálculos eran correctos, esto debió haber llegado 3 horas después, incluso alcanzó a oler y no sintió atisbo alguno de sudor ¿enserio no se dio cuenta que había pasado a bañarse? Seguro estaba tan concentrada en su plan que no se dio cuenta de esos detalles. En fin, tanto que pensar y tan poco tiempo, solo quedaba actuar como siempre y aparentar tranquilidad, seguro que no lo notaría.

-Veo que llegas temprano unidad fraternal mayor

- ¿Sabes? pensé que querrías pasar el día completo con tu hermano mayor, y por eso quise prepararme temprano, además vi que estabas muy ocupada, y que algo de ayuda no te vendría mal

-Estoy bien, esos proyectos tu diminuta mente de simio no comprendería, así que estás aquí para absolutamente nada homosapiens, vete y en unas horas nos veremos

La manera de hablar de Lisa, con su característico siseo, se notaba bastante evasiva, no solo por su típica muestra de ego, sino también por algo su tono, que no era el inexpresivo de siempre. Se le escuchaba resentida, algo que Lincoln esperaba, pero no sabía el porqué, o a lo mejor si lo sabía, solo que no le parecía lógico. Aún con todo, el vino con un propósito y no lo iba a dejar pasar.

-Lo siento Lisa, pero mamá y papá quieren que pase más tiempo con ustedes y lo sabes, y pensé que mi error con las otras fue no haberlas acompañado desde la mañana, sé que ya no sirve de mucho, pero se puede empezar con algo ¿No? -dice ciertamente decidido, algo que molesta a la castaña-

-Ahhggg, está bien -dice resignada- solo espero que destruyas nada, que todo esto es muy importante

- ¿Y exactamente de qué se trata?

-Información clasificada, así que no te importa. Mejor ven y ayúdame con unos prototipos robots, son para dentro de un mes, pero con tu ayuda creo que puedo adelantar un poco ese trabajo.

- ¿Segura que no necesita ayuda con eso?

-No insistas simio sin pelo conocido como Lincoln, solo ayúdame con esto y veremos que más actividades recreativas podemos hacer más tarde

Lincoln ve con incredulidad a Lisa, pero sabía que su plan tenía que seguir, en marcha, así que sin pensarlo más tiempo acepta, sacando de un cajón los robots y probando el repararlos, mirando cada pieza, cada engrane, cara resorte, cada todo, aunque sin mucho detenimiento.

Sus ojos estaban postrados en la mesa en la que estaba su hermana con su extraño experimento, del cual no tenía del todo interés si lograba su cometido, pero primero tenía que sacar a Lisa de la mesa para poder hacerlo, así que empezó a probar opciones.

-Lisa -llamó la atención de la científica- ¿me puedes ayudar con esto por favor? es que estoy seguro de que tengo que arreglar

- ¿Enserio? -lo mira con una ceja levantada-

-Si, solo una pequeña ayudita y ya no te molesto más

Dudando un segundo, suspira resignada de nuevo, lleno a la mesa en la que estaba el albino, dando algunos detalles básicos a los cuales Lincoln solo puso atención al principio para que no sospechara, aprovechando lo distraída que estaba para tratar de acercarse a la mesa de ella, tratando de tomar un tubo con una mezcla de color naranja.

-Lincoln, ¿Entendiste lo que quise decir?

Maldición, pensaba en sus adentros el albino, a lo cual solo le dio tiempo de acomodarse y asentir con una sonrisa lo mejor disimulada que pudo, lo suficiente para poder engañar a la niña castaña, la cual solo se limitó a irse de nuevo a su mesa. Eso dejaba en mal lugar a Lincoln, su primer plan había fallado, ahora solo le quedaba pensar en otro, y para no levantar más sospechas siguió arreglando los robots, algo que no era tan complicado como pensaba. Arreglo uno en unos 5 minutos, tiempo que le permitió pensar en un plan que podía ser infalible en esta situación, es cual solo necesitaba el cruce erróneo de unos cables.

¡BOOM!

La explosión se sintió en toda la habitación, suerte que los padres se habían llevado a la pequeña Lily a dormir con ellos, pedido expreso por parte de Lincoln. En ese momento una nube de humo se levantó, haciendo que los 2 hermanos empezaran a toser demasiado y que no pudieran ver nada, teniendo que esperar 5 segundos a que se despejara y todo volviese a la normalidad, pues, aunque pareciera sorprendente, nada se había roto o ensuciado.

-Ahora solo espero haber tenido suerte- pensaba Lincoln

-Ahgg, ¿Qué pasó? ¿por qué veo todo de manera menos nítida? - se quejaba lisa, la cual se podía ver que estaba sin sus gafas.

-Bingo- en eso él trata de orientar a su hermana, tomándola de la mano y subiéndola a una silla -lo siento Lisa, no sé qué pasó, pero de en un instante estaba arreglando otro robot y al otro todo explota-

-Ish, no importa ¿podrías buscar mis lentes? sabes lo necesarios que son para hacer mi trabajo

-Tranquila, tú solo quédate aquí mientras yo los busco, ¿de acuerdo?

-Bueno, no es que pueda hacer algo más, ¿cierto?

Ignorando el comentario irónico, el albino se puso a buscar los lentes, los cuales encontró al lado de la cuna de Lily, pero antes de tomarlos va a la mesa de Lisa, toma ese líquido naranja y lo derrama en el suelo, poniendo el tubo de ensayo también en el piso, dando la impresión de que se hubiera derramado con la explosión. Ya con esa parte hecha, toma los lentes y va donde su hermana

-Listo Lisa, aquí tienes -le coloca los lentes con sumo cuidado- ¿ya ves mejor?

-Si hermano, ya veo mejor, ahora si me disculpas, voy a continuar trabajando, ah, y la próxima vez no cruces el cable rojo con el morado, acabas de ver por qué.

Lisa se dispone a seguir, pero al llegar a la silla se da cuenta de que al lado el líquido está derramado

-Maldición -profiere la castaña- bueno, lo importante es que se puede hacer con elementos que se pueden conseguir en el frigorífico, así que no hay problema -dice tratando de calmarse, dirigiéndose a la puerta- Unidad fraternal mayor, necesito bajar un momento, por favor asegúrate de no romper nada ¿entendido?

-Entendido Lisa, no voy a romper nada mientras no estas

Tras escuchar eso, ella se va caminando hacia la cocina. Lincoln va a la puerta y espera que ella tome las escaleras para perderla de vista. Al hacerlo, no pierde tiempo y empieza a buscar en cada uno de los rincones de la habitación, desde los cajones, debajo de las camas, incluso dentro de algún invento, todo sin resultado alguno.

Ahhg, no puedo -empezaba a desesperarse, no sabía qué hacer, hasta que mira algo que lo hace dudar-

Vio hacia la pared y a un bulto en esta, no era notorio a simple vista, pero era algo inusual, incluso para ser la casa Loud. Sin pensárselo 2 veces va hacia la pared, la toca sintiendo algunos objetos sólidos, además de sentir algo de papel que la cubría, así que al instante arranca el papel...

Lisa estaba preocupada, no encontraba nada de carne en la nevera, parte crucial de su experimento, poniéndose furiosa e inquieta, preguntándose porqué sus padres no habían hecho compra de ese alimento tan crucial en la casa. Poco importaría luego

Escucha unos pasos en la escalera, de la cual esperaba que fuera Lynn y una rutina extraña que tomó de beber algo antes de las 6:00, lo cual era perfecto, tenía ganas de hablar con ella sobre algo bastante serio. Lástima que se terminó encontrando con su hermano mayor, el cual baja con cara bastante seria, y algo que cargaba en sus brazos.

- ¿Qué necesitas unidad fraternal? ¿de nuevo necesitas ayuda para reparar esas cosas insignificantes para bebes? -decía fastidiada y restándole importancia a la llegada del albino-

-No, nada de eso Lisa, solo quiero que me explique qué es esto

Y al decir esto termina tirando lo que cargaba en brazos, lo cual revelado dejó pálida a la niña genio: El juego de té de Lola, la comida que les daba Lana de las mascotas, algunas partes del parlante de Luna, mecanismos de las bromas de Luan y un plano con la dirección de la casa abandonada en la estuvo su hermano con Lucy. Un vaso de leche entera era incluso menos blanco que la cara de Lisa en ese momento

-Lisa, ¿por qué? -sorprendentemente, Lincoln solo tuvo un tono algo calmado, pero buscando respuestas, raro para la situación-

El genio no pudo aguantar, pareciera haber reaccionado ante la evidencia, como si un golpe de culpa le hubiera llegado de repente, por lo cual solo atinó a llorar y abrazar a su hermano como si fuera lo único pudiera hacer en el mundo, soltando sus lágrimas y sus sollozos con bastante fuerza, a lo que Lincoln solo correspondió como pudo

-Ya ya, tranquilízate mi pequeña genio, ya pasó -decía esto solo por calmarla, en su interior ya no sabía que esperar, aun así, su cariño seguía siendo sincero-

Tras varios minutos allí sentados deciden levantarse, Lincoln cargando a su hermana como si fuera una bebé, mientras esta seguía sollozando más levemente, llevándola a su habitación para poder hablar.

Ya en la habitación, Lisa se sienta y tras limpiar sus lentes y calmarse, se sienta al borde de su cama con su hermano.

-Entonces, ¿qué quieres saber?

- Primero, ¿Cómo hiciste todo esto? porque sé que por más inteligente que seas no pudiste hacerlo sola, y luego ¿por qué?

La castaña solo seguía suspirando, sabía que tenía que decir la verdad, no lo quedaba de otra.

-Empecemos por lo básico, me ayudó Lynn con todo esto, ella me convenció y yo la seguí, aunque puedo ver en tu rostro que todo esto ya lo sabías

La cara del chico lo delataba, desde un principio sospechó que Lynn estaba involucrada, solo le faltaba confirmarlo, pero dejando eso de lado quiso seguir escuchando las explicaciones de su hermana.

Supo que Lynn fue la que cambió las agujas de Leni por unas más grandes, haciendo más difícil de manejar para la modista, que aprovecharon el día anterior para alterar el parlante de Luna, el cual sin importar el volumen que colocara siempre se escucharía al máximo, pero que en el control de sonido pareciera normal. También como las 2 lograron hacer un pasillos de bromas exactamente igual a uno que haría Luan, siendo el más difícil de lograr, así como, sabiendo que esa casa abandonada era un sitio que Lucy tenía marcado para sus invocaciones, yendo allí 3 días antes para crear un fantasma falso, el cual la gótica no percibiría por no tener esa aura que ella aseguraba poder sentir, de cómo creó una bacteria que podía hacer que los seres que las consumieran se pondrían bruscos tras unas horas de consumo y cómo la introdujo en la comida de las mascotas y logró hacer una copia exacta al juego de té de Lola, con microchip incrustado dentro de las tazas y tetera que hacía que por medio de un control remoto se calentaran.

Tras escuchar esto, el albino tenía una combinación de sorpresa, rabia y pena, pero la dejaría pasar.

-Lisa, te lo pregunto de nuevo, y esta vez quiero que me respondas ¿por qué?

-Lincoln, fui muy tonta al creer en esa tonta superstición, y cuando te fuiste de casa seguí tan metida en mi pensamiento, creyendo que tenía razón y si dabas mala suerte, pero no lo podía decir en voz alta, porque de a poco todas se fueron arrepintiendo, solo Lynn y yo éramos las que estábamos seguras de tu mala suerte, y así fue incluso cuando regresaste.

-Pero no lo entiendo, sé que Lynn me tenía algo de rabia, pero a ti te vía tratándome mejor con el paso de los días

-Eso fue hasta que murió el abuelo -dijo de con la mirada gacha, apunto de llorar de no ser por el abrazo de su hermano- a pesar de todo lo que hicimos, que yo hice por tratar de salvarlo la vida, simplemente no pude, como dicen ustedes, le había llegado la hora. No lo quise entender así, pensé que lo había hecho todo bien, y me autoconvencí de que era culpa tuya. Lo siento -dice lo último volviendo a estallar en lágrimas-

Lincoln entendía, recordaba a su querido Pop-pop, el apodo que tenían todos para su abuelo Albert, en especial durante esa etapa, el primero que le pidió que tratara de perdonar a su familia, el que hizo las veces de adulto mayor responsable durante un tiempo, aquella persona con la que contó para hablar de sus problemas durante esta época que la casa Loud no era..., bueno, muy Loud.

Lamentablemente, no era eterno, y la edad comenzó a hacer su efecto en el pobre Albert, el cuál empezó a enfermar rápidamente. Cómo toda la familia, el albino trató de hacer las últimas de Pop-pop lo mejor posibles, visitando el recinto de ancianos cada día, llevándolo a su casa una vez por semana, escuchando sus historias, yendo a bastantes sitios como si nada, seguramente para que no se fuera pensando en que era una carga.

Pero Lisa no pensaba igual, y durante día y noche trató de crear alguna medicina que, al menos, pudiera alargar el periodo de vida de su abuelo, ya ni siquiera iba a estudiar o asistía a las reuniones y conferencias de ciencia que tenía, pues sabía que esto era más importante, y eso lo pensó durante 2 semanas. Después de ese tiempo logró hacer algo que estaba segura que podía funcionar, así que sin pensarlo convenció a su abuelo de que lo bebiera, esperando que funcionara.

Lamentablemente solo fue una ilusión que duró unos días, pues a pesar de mostrar una leve mejoría de la que los médicos incluso se mostraban sorprendidos, solo pasaron horas para que de repente al Albert le diera un ataque al corazón el cual ni el desfibrilador ni las maniobras de RCP pudieron salvarle la vida, estando Rita y Lynn presentes cuando el ritmo del bombeo del padre de esta dejo se sonar, dejando solo tristeza y dolor en la familia, la cual, a pesar de sus diferencias por lo ocurrido con Lincoln, asistieron todos, todos destrozados, pero ninguno como Lisa, la cual sentía que había fracasado como científica, siendo este su peor fracaso.

Lincoln trataba de entender a su hermana, sabía lo duro que fue para toda la muerte del abuelo, pero era peor para Lisa, la cual entre la frustración de hacer todo y que no sirviera para nada, y que no fuera capaz de aceptar que no funcionó, tratando de buscar un motivo, algo que ella creía le daría una explicación de lo sucedido.

-Lisa, todos sabíamos que el abuelo no iba a salvarse de esta, a pesar de haberse salvado de tantas cosas, esa no iba a poder, y nos dolió a todos al ver que no podíamos hacer nada

-Pero yo creía que podría salvarlo, dediqué todo mi tiempo para crear una cura

-Lo sé, y no sabes lo orgulloso que estoy cuando supe lo que hiciste, pues el acto más hermoso que alguien de la familia hizo, nadie te dijo nada porque muy en el fondo de nosotros creíamos que podrías lograrlo, pues no conocemos a nadie más que fuera capaz de algo así.

-E-enserio -alza la mirada viendo a los ojos a su hermano-

-Así es, aunque no lo creas cada vez que te veíamos mal nosotros también sabíamos que te sentías mal por fracasar, y el día que estuviste tan feliz, a pesar de que no nos contaste y lo supimos después, esperábamos que lo hubieras logrado

-Lincoln, yo, enserio lo siento, debí saberlo, solo quise creer que no me podía equivocar, fui una tonta, por favor perdóname

El albino solo lanzó un resoplido sonoro, a lo cual solo abrazó por última vez a Lisa antes de irse de su cuarto, dejándola sola como una clase de castigo implícito, el cual la pequeña genio captó, recostándose en su cama.

-Lynn, sé que estás allí, ¿puedes salir? quiero hablar contigo

Y tal como lo suponía, la deportista salió de la parte trasera de la puerta del cuarto. Salió con una cara de tristeza, lástima y pena.

-De hecho, yo también quiero hablar.

Sala 10:00, jueves

Lincoln estaba sentado en la sala, con cara de aburrimiento, viendo a su hermanita Lily dibujar en el piso, pero poco más tenía que hacer, la verdad era que no quería estar allí, no porque no quisiera a la pequeña bebé, sino más porque ya quería dejar el tema de sus hermanas de lado, ya se había convencido de que no las iba a perdonar.

Tras todos los hechos durante esos días, concluyó que no podía estar seguro de perdonarlas, pues en momentos de presión pudo ver lo peor de algunas de ellas, además de sentirse traicionado por Lisa y Lynn Jr. Para él eso era suficientes argumentos para no perdonarlas, prefiriendo dejar las cosas como estaban, haciendo su vida aparte de ellas, con aquel aire sepulcral que lo incomodaba desde que volvió, pero si lo soportó por 2 meses ¿Por qué no lo iba a hacer más? Al final, tenía a sus amigos y a Ronnie, no necesitaba más, o eso pensaba.

Sin embargo, al encontrar a sus padres y pensaba decirles todo aquello, estos lo convencieron de que cuidara a Lily, pues ellos tenían que salir y las demás estaban ocupadas, cosa que se le hizo bastante extraña, pero no tenía intenciones de poner peros, así que solo aceptó lo que le pidieron, y por eso estaba allí, sentado esperando a que la bebé pidiera algo, tuviera que cambiarle el pañal o se durmiera, lo que pasara primero.

En ese momento tomó un comic de Ace-Savy, pero ya sin su vieja costumbre de leer en ropa interior, y dejó que pasara el tiempo entre páginas, dibujos y bastante acción, haciendo que se perdiera durante casi una hora, hasta que escuchó un balbuceo que lo sacó de onda. Se voltea y ve la su hermanita rubia de apenas 1 año de edad jalándole el pantalón

-Wincon -dice la bebé mientras seguía halando el jean de su hermano-

-Qué pasa Lily ¿tienes hambre?

Lily asiente, pidiendo también con el gesto de alzar los brazos de que lo cargara, petición que cumple el albino, llevándola a la cocina, acomodándola en su silla y, sin tantas dificultades como la vez que la cuidó con Clyde hace un tiempo, logró darle su papilla, la cual Lily disfrutaba con mucho gusto, cosa que hizo que el albino se sintiera orgulloso de sí, pero dándose cuenta de que faltaba la mantita morada, yendo por ella hacia la sala. Allí la encontró, tirada en el piso justo a los crayones de colores con los que ella dibujaba hace un rato, tomándola rápidamente y casi yéndose, sin embardo, se da cuenta que la manta estaba tapando el dibujo que llevaba haciendo Lily durante casi 1 hora, y decide darle un vistazo.

El dibujo era toda su familia justa, sus padres, sus 10 hermanas y él, jugando en un parque, con un sol radiante y varios árboles a su alrededor, todos con caras alegras u juntos, como una familia unida. Claro, hecho por una bebé, pero no quitaba la sensación que le hacía falta a Lincoln, el amor familiar.

El dibujo le dejó al albino con una sensación extraña, pero con alegría, queriendo ir a donde Lily para felicitarla. Grande fue su sorpresa al ver que no estaba en su silla.

- ¿Lily? -preguntaba preocupado- ¡Lily! ¡¿dónde estás?!

Empezó a desesperarse ante la situación, mirando por todo lado sin mayor pista, eso hasta que vio un camino de papilla en el piso que daba a la sala, el cual siguió estando seguro que lo guiaría hacia su hermana.

Al ver el camino ve que pasaba por detrás del sofá y lo llevaba hacia la escalera, volteando hacia la derecha y viendo que lo llevaba a... ¿su habitación? lo tomó por sorpresa, sorpresa que aumentó al ver que Lily trataba de alcanzar algo de su tocador, así que va rápido a su cuarto.

- ¡Ahí estas! - fue rápido y la tomó rápido- ¿Qué buscabas?

-ba ba ba -balbuceaba la bebé mientras señalaba la hacia el tocador, más específicamente al cúmulo de cosas de estaba en allí.

Lincoln dejó a Lily en su cama y tomó un objeto al azar, viendo que era la llave inglesa de Lana que debía devolverle, la observó más a fondo y se dio cuenta que en el mago había una inscripción: para mi hermano Lincoln. Dándose cuenta de que era un regalo de ella que pensaba darle después pasar el día con él.

Al ver eso solo lo deja en su cama y toma otro objeto, siendo este el cuaderno de Luan, lo abre y encuentra un montón de chistes los cuales ahora le estaban haciendo gracia, entonces hace lo mismo y toma otro cuaderno, esta vez el de Lucy, quedándose en un poema corto dedicado a él: Montaña nevada, actitud viva de sol de verano, solo parece estar agobiado, más un plan siempre estar pensando.

Esa sensación en su corazón se tornaba más fuerte, y esa sensación solo se reforzó al seguir mirando cada objeto, como la foto de Luna de aquél concierto, y el suéter que le tejió Leni, el cual se puso a pesar del calor que hacía, a estas alturas no importaba, y mirando la caja que le regaló Lola, abriéndola y encontrando una pulsera de tela, con una combinación entre rosado, azul, negro, rojo y naranja, con la inscripción Te 3 Lincoln en letras amarillas y blancas intercaladas, la cual se pone en su mano derecha, mirándola con una sonrisa y casi llorando. En eso le viene a la mente el día que pasó con Lori, los buenos momentos que pasó con Lynn y aquellos buenos actos de Lisa, además de sus personalidades, las de todas en general, dándose cuenta de lo mucho que le hacían falta, y cómo las trató a pesar de que se disculparon de forma sincera.

Y antes de que cayera la primera lágrima, una diminuta mano se posa en su mejilla, haciendo que se voltee a ver si encuentra a su hermanita la cual le muestra aquella foto familiar que se tomaron con motivo del día del padre, aquella familia perfecta que eran. Eran y aún podían ser

-Lily, ¿tú planeaste todo esto? -hace la pregunta sin pensar mucho, al final, solo era una bebé-

-Po po -dice y saca una sonrisa inocente de bebé-

Lincoln solo atina a alzarla y darle un abrazo

-Gracias

Cualquiera que pudiera ver ese momento no podría negar que era algo hermoso, que no quería que terminase. Pero lo hizo de la manera más inesperada para ese entonces.

¡PUM!

La puerta del cuarto de Lincoln es derribada ¿el motivo? sus otras hermanas que se agolparon para escuchar lo que ocurría

- ¡Chicas! ¿Qué hacen aquí? -preguntó Lincoln con sorpresa-

Las chicas estaban en el suelo, mirándose sin saber que decir, pues la situación era bastante incómoda

- ¡Todo fue idea de Lynn y Lisa! -gritó Lola tratando de pasar las culpas, cosa que el resto siguieron-

-Es verdad literalmente todo fue idea de ellas

-Si, ya sabes hermano, solo nos lynnmitamos a seguirlas. Jejeje ¿entienden?

-Si, ya sabes, prefería estar jugando con Brinquitos jejeje

-Claro bro, chismear no rockea, nunca haríamos algo así.

-Eso no le gustaría los espíritus

-Cierto, ¿esperen? pero Lynn y Lisa solo nos dijeron que querían disculparse con Linky, y todas acordamos que iríamos todas, pero al escuchar que hablaba con Lily decidimos espiarlo

Con eso, todas menos las mencionadas se palmean la cara, siendo expuestas por su hermana modista

-Bueno, eso no importa, ¿escucharon todo lo que dije?

-También lo vimos todo -termina de decir Lynn

. ¡Lynn! -gritan todos al unísono-

- ¿Qué? ya sabe que lo espiábamos ¿qué nos queda por ocultar? -dice haciendo que el resto de mire y asienta-

-Lincoln, lo que importa es que lo sabemos todo -asegura Lori, poniendo su mano en el hombro-

Escucha todo y su arrepentimiento solo se hacía más grande, y aprovechó para poder desahogarse.

-Chicas... enserio perdónenme, me porté como un completo patán con ustedes, solo querían disculparse y yo las alejé, enserio lo siento, se preocuparon por hacer que pasara grandes días con ustedes y luego...

- ¡Tranquilo tontolón! -grita Lynn Jr., recibiendo la mirada inquisidora del resto- perdón, Lincoln, lo que quiero decir es que cálmate, todas te comprenden, y soy yo la que debería disculparse, pero no soy buena con las palabras, así que...

Se acerca y le da un abrazo bastante fuerte, casi asfixiándolo, pero lo deja pasar, pues en él estaban todas las palabras que podía decir para disculparse. Tras ver eso las demás solo se acercaron e hicieron el mismo gesto, dejando una hermosa postal de una familia unida, después de mucho tiempo y dificultades, unida por ese amor que es más fuerte que los errores que cometemos. Postal que era observada desde afuera por los 2 padres

- Fue una buena idea aprovechar la Lily para esto -decía Lynn padre a su esposa Rita-

- Cariño, no lo digas así, solo nos ayudó con poder unir de nuevo a esta familia

- Si. tienes razón, ¿deberíamos unirnos?

- Uhm... no, dejemos que disfruten, es su momento

Tras mirarse los dos, Lynn asiente y solo se quedan admirando esa escena de familia. Su familia, la familia Loud.

Fin...

(...)

Bueno, por fin termino este escrito que, sin duda, es lo mejor que he hecho, con sus errores que se pueden mejorar, siendo consciente de que, excusas aparte, terminé esto a último minuto, pero veo el resultado y me enorgullezco, eso sí, esperando ver que ven mejorable.

Hagamos esto, solo quiero que comenten que ven de malo y/o se puede mejorar. Pongamos un ejemplo para que nos entendamos, si al leer esto su comentario es, por ejemplo, Buen one-shot, realmente me encantó la historia, pero creo que hay partes que se sienten incompletas y debiste completarlas, pero por lo demás bastante bien, borren lo bueno y solo pongan lo malo. Ejemplo: creo que hay partes que se sienten incompletas y debiste completarlas. Es un pequeño ejercicio para no caer en el alago y la mediocridad y centrarme en los que es mejorable.

En fin, me siento orgulloso de poder participar y ver hasta dónde puedo llegar, tampoco espero mucho, pase lo que pase, haber participado será un logro y una bonita experiencia.

Bueno, sin más que decir, espero les haya gustado y tengan un/a buen/a día/tarde/noche. Chau.

Atte.: Cristian

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