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↘ʙᴀʟᴀ ᴍᴀ́ɢɪᴄᴀ






  【chapter four】



Ariel estaba en la clase de Historia sentada detrás de Danny. La maestra les estaba devolviendo sus exámenes, y aunque la popular adolescente no estaba preocupada por su calificación, sabía que tendría que ser discreta cuando recibiera su examen. Lo último que quería era que alguien se enterara de su calificación.

La maestra colocó la prueba de la niña frente a ella, boca abajo. Ariel levantó suavemente el borde del papel para ver una A + en la parte superior de mi ensayo en tinta roja brillante. Una pequeña sonrisa apareció en sus labios cuando rápidamente empujó la prueba en su libro.

- ¿Qué obtuviste? - Preguntó Danny, volviéndose para mirar a la joven.

- Uhh - comenzó Ariel, sus ojos azules recorriendo la habitación en busca de una idea de qué grado debería decirle a Danny. Hizo una pausa y notó que la chica a su lado había sacado el periódico. Al leer atentamente la nota en la esquina del papel, sonrió.

- D-menos - Ariel se mordió el labio, tratando de parecer avergonzada por su baja puntuación, y cubrir su culpa por mentirle a su amigo más cercano.

- Hombre, necesitas un tutor - le dijo Danny en broma a la pequeña morena, sin molestarse en llamarla por su mentira. El niño sabía desde hacía años que las gemelas Martin eran niñas inteligentes, pero mantuvo su secreto. No cuestionó por qué querían permanecer fuera del radar.

Ariel dejó escapar un suspiro feliz, creyendo que Danny se había enamorado de su mentira, "Mhm", asintió con la cabeza, jugando con un anillo en su dedo. Sin darse cuenta de que el adolescente espástico sentado a la izquierda de su escritorio había estado escuchando toda su conversación.

Stiles se inclinó sobre su escritorio mientras observaba con asombro cómo la hermosa niña frente a él le brindaba la oportunidad de poner en acción su plan de diez años.

- Yo - yo puedo ser tu tutor.

Ariel no levantó la vista al principio, debatiendo si sería prudente reconocer al chico que su hermana le había advertido que ignorara. Ariel sabía que debía ignorar a Stiles, pero también pensó que sería una buena idea tener un tutor que explicara sus altas puntuaciones.

Haciendo caso omiso del consejo de su hermana, Ariel se volvió para mirar al chico, haciendo que su desordenada trenza de cola de pez cayera sobre su hombro.

- ¿Tú puedes?" -Preguntó tímidamente, tratando de actuar con indiferencia, para que la gente no creyera que estaba demasiado interesada en el chico espástico frente a ella. Ariel sabía que solo hacía falta un rumor para que Lydia se enterara de toda la conversación.

- Sí - Stiles se sonrojó, distraído por su opaco tono azul verdoso que se mezclaba alrededor de las motas doradas cerca de su córnea.

Ariel se mordió suavemente el labio antes de volver a su asiento.

La expresión emocionada de Stiles se convirtió en un ceño fruncido mientras se inclinaba hacia atrás en su asiento, pensando en lo tonto que era al creer que Ariel Martin alguna vez querría pasar tiempo con él después de la escuela.

Ariel rápidamente garabateó su nombre en una hoja de papel de su bolso antes de entregárselo a Stiles. La morena esperó a que el aturdido chico tomara su número de teléfono de sus dedos antes de volverse hacia Danny, quien había estado observando en silencio la interacción entre los dos.

Ariel vio como Danny sonreía, mirando a Stiles quien estaba asombrado por el papel en su mano.

- La pobre Ariel está enamorada - sonrió Danny viendo como las mejillas de su amigo se sonrojaban.

Decidiendo reírse, Ariel puso los ojos en blanco.

- Como sí.



El día había pasado rápido desde que Lydia, Allison y Ariel se dirigían a la biblioteca para pasar el rato durante su tiempo libre. Ariel estaba en su teléfono leyendo el texto que Stiles le acababa de enviar unos segundos después de que salieran de clase.

[Stiles: Hey, hoy estoy libre después de la escuela. Podemos estudiar en mi casa si quieres. Puedo darte un paseo.]

No puedo evitar sonreír, es tan dulce. Respondo rápidamente antes de volver a la conversación.

[Ariel: ¡Suena bien! Syl.]

- ¿Scott vendrá esta noche? - Lydia le pregunta a Allison mientras subimos las escaleras.

- Solo estamos estudiando juntos - se encogió de hombros Allison.

- "Solo estudiar" nunca termina con solo estudiar. Es como, entrar juntos en un jacuzzi, alguien eventualmente se enfrenta a una sensación - explica Lydia, lo que hace que su dulce hermana vacile al entender lo que quiere decir. Ariel sabía que su hermana tenía más experiencia que ella cuando se trataba de chicos, pero su poco conocimiento del tema la ponía nerviosa al pensarlo.

- Bueno, entonces, ¿qué estás diciendo? - Allison pregunta, lo que hace que Ariel se vuelva hacia su hermana, queriendo saber lo mismo. La morena estaba interesada en aprender más.

- Solo digo, ya sabes, asegúrate de que se cubra", Lydia se encogió de hombros mientras seguía caminando, dejando a las otras dos chicas desconcertadas.

- Cubrir, ¿qué pasa? - Preguntó Ariel con cautela.

Lydia mira entre los dos de su amiga antes de poner los ojos en blanco.

- ¡Hola, Santa María y Blancanieves! Hazlo con condón.

Ariel se asusta internamente por la franqueza de su hermana mientras ve a su amiga ponerse roja como una remolacha.

- ¿Estás bromeando? ¿Después de una cita?

- No seas una mojigata total. Dale un poco de sabor - Lydia se encoge de hombros, haciendo que Ariel piense inconscientemente en Stiles. La mente de la chica imaginó con culpabilidad la propia experiencia de Stiles. La chica se había dicho a sí misma que no le agradaba, pero se preguntaba qué haría si Stiles se acercaba a ella. Mordiéndose el labio rosado, sabía que no se opondría.

- Bueno, yo - quiero decir, ¿cuánto es "un poco de sabor"? Pregunta Allison.

- Oh, Dios. Te gusta mucho, ¿no? - Ariel le sonrió a su amiga, apartándose de sus pensamientos.

- Bueno, él es diferente. Cuando me mudé aquí por primera vez, tenía un plan. Sin novios hasta la universidad. Simplemente me mudo demasiado. Pero luego lo conocí, y él era diferente. Yo - no sé. No te lo puedo explicar - Allison se encoge de hombros y se mira los pies.

- Puedo. Es tu sangre inundada de feniletilamina - afirman Lydia y Ariel al unísono.

- ¿Qué? - Allison parecía confundida.

- Te diré qué hacer. ¿Cuándo vendrá? - Pregunta Lydia.

- Después de la escuela - responde Allison.

- Mmm.

- Tengo un tutor - dijo Ariel en voz alta, sin poder ocultarle un secreto a su hermana. Le contó todo a su gemela y no quería mentirle. Ella simplemente quitaría algunos hechos.

- Oh, ¿es lindo? - Lydia sonrió.

"Sí", pensó Ariel antes de volver a la realidad. Le puso los ojos en blanco a su hermana, dándole a Lydia un pequeño empujón con el hombro.

- Lydia, es solo una tutoría. No terminaremos haciéndolo.

- ¿Haciéndolo? Teniendo sexo, Ariel. Y quién sabe, ¿quizás lo harás? - Lydia se encogió de hombros con una sonrisa.

Ariel negó con la cabeza, no queriendo pensar más en eso. El pensamiento le provocó una sensación extraña en el estómago que Ariel sabía que no podía significar nada bueno. Cuanto menos pensara en Stiles, mejor.

- Stiles. Se ofreció a enseñarme - murmuró Ariel mientras entraban en la biblioteca.

- Ja, tienes razón. Ambos están dando clases particulares - Lydia miró a su hermana - ¿Entendido?



- Gracias de nuevo por ayudarme a estudiar - le dijo Ariel a Stiles mientras se subía a su coche. - Eres un salvavidas.

Stiles se sonrojó, buscando a tientas poner sus llaves en el encendido.

- N-no hay problema.

La morena arrojó su mochila al suelo cerca de sus pies, mientras Stiles subía el jeep. Mientras Ariel se abrochaba el cinturón de seguridad, notó una figura vestida de negro lanzándose hacia el jeep de Stiles. Los ojos de Ariel se agrandaron mientras lo veía extender su mano.

Stiles pisa el freno con los ojos tan abiertos como platos. Ariel dejó escapar un pequeño grito cuando Stiles extendió su brazo para evitar que la pequeña niña entrara por la ventana. Ambos adolescentes se estrellaron contra su asiento cuando el coche se detuvo.

- Oh, Dios mío - Ariel resopló, en un tono exasperado, mientras trataba de calmarse después de ver a Stiles casi golpear a un chico. Apartándose el pelo de la cara, trató de asomarse por la ventana para ver si el hombre estaba bien.

- Tienes que estar bromeando. Este tipo está en todas partes - dijo Stiles, molesto, pero para nada preocupado de que casi cometiera un delito. Ariel dejó de mirar por la ventana para mirar a Stiles en estado de shock.

- ¿Qué demonios? - Stiles comenzó a gritar mientras salía del auto. Ariel lo vio caminar hacia Scott con expresión enojada. Ariel vio como Scott y Stiles se gritaban el uno al otro; Stiles parecía el más molesto. El estruendo de los cuernos llenó sus oídos, haciéndola mirar por la ventana, una vez más, para ver que Stiles había comenzado a detener el tráfico.

Jackson y Allison habían llegado al lugar, lo que provocó que Ariel saliera del coche.

- Necesito que averigües qué tipo de bala usaron - exigió Derek.

- ¿Cómo diablos se supone que voy a hacer eso? - Preguntó Scott.

- Porque ella es una Argent. Ella está con ellos - el tipo gimió de dolor, lo que hizo que Ariel pensara "¿Por qué están hablando de Allison?"

- ¿Por qué debería ayudarte? - Scott cuestionó.

- Porque me necesitas - respondió el chico.

- Bien. Lo intentaré. Oye, sácalo de aquí - Scott le ordena a Stiles antes de darse cuenta del Martin de cabello castaño.

- ¿Ariel? - Scott miró confundido entre Stiles y Ariel haciendo que este último lo saludara nerviosamente. No tenía idea de lo que estaba pasando, pero sabía que tenía algo que ver con los dos chicos que tenía delante.

Scott le envió una pequeña sonrisa con la esperanza de calmar los nervios de la niña, sabiendo lo que estaba pasando a continuación.

- Estarás bien - aseguró.

- Te odio tanto por esto - suspiró Stiles mientras ayudaba a Derek a subir al auto, rezando para que Ariel todavía hablara con él después de esto. Ariel trepó rápidamente al respaldo del asiento, dándose cuenta de que en realidad estaban conduciendo a Derek Hale.



Había pasado aproximadamente una hora desde la última vez que contactamos a Scott, y todos estaban visiblemente cansados ​​de conducir por la ciudad. Nadie habló mientras nos sentamos en el auto con torpeza, rezando para que algo sucediera pronto.

Derek había comenzado a oler a muerte, y la terrible sensación en mi estómago comenzaba a hacerme sentir mal. Me sentí asfixiada y no quería nada más que ir a la casa de Stiles y estudiar como habíamos planeado.

Dejé escapar un profundo suspiro cuando escuché el teléfono de Stiles sonar mientras esperábamos a que Scott respondiera.

Noté que Derek se estaba debilitando a medida que pasaba el tiempo. Me incliné sobre la consola para susurrarle a Derek.

- Oye, ¿estás bien? - Le pregunté. Me fulminó con la mirada.

No podía soportar tener la muerte de Derek en mi conciencia, pero sentía que las probabilidades de que él se mantuviera con vida eran cada vez más escasas con el paso del tiempo. Tratando de pensar en algo que pudiera hacer para ayudar a controlar el dolor, miré hacia la herida.

- Sabes, si levantas el brazo por encima del corazón, la hinchazón se ralentizará - trato de ofrecer.

Derek me fulmina con la mirada, pero yo solo lo miro expectante, esperando que responda. Simplemente me mira antes de hacer una mueca cuando otra ola de dolor lo golpea.

A regañadientes, levanta el brazo por encima de la cabeza. Sonrío cuando noto que sus hombros se hunden un poco en alivio.

Scott debió haber contestado el teléfono porque escuché a Stiles comenzar a hablar por teléfono.

- ¿Qué se supone que debo hacer con él? - Y, por cierto, está comenzando a oler - Como la muerte - Derek lo usa con una expresión molesta que causa para sonreír ante la situación un poco divertida - ¿Qué hay de tu jefe? - No vas a creer a dónde me dice que te lleve.

Era tan lindo cuando hablaba en serio. Era como un lado diferente de él que solo revelaba cuando las cosas estaban realmente mal. Me hizo sentir seguro.

Derek le arrebata el teléfono a Stiles.

- ¿Lo encontraste? - Mira, si no lo encuentras, entonces estoy muerto, ¿de acuerdo? - Entonces piensa en esto. El alfa te llamó en contra de tu voluntad. Lo hará de nuevo. Siguiente" Es hora de que mates con él o te maten. Así que, si quieres seguir con vida, entonces me necesitas. Encuentra la bala.

¿Alfa? Creo que acabo de entrar en una secta.



- ¿El acónito azul del norte significa algo para ti? - Stiles le preguntó a Derek.

Ariel frunció el ceño mientras entraba a la oficina veterinaria.

- ¿Wolfsbane?

- Es un tipo raro de matanza de lobo - Derek asintió con la cabeza hacia la chica.

- Tiene que conseguirme la bala - suspira Derek.

Ariel empezó a juntar las cosas mientras miraba su herida.

- Eso es con lo que te dispararon, ¿no? Y ahora lo necesitas para revertir los efectos. Cura homeopática - terminó riendo con asombro. Esta sería la primera vez que ve a alguien intentar probar la homeopatía - ya que la mayoría de los estudios han demostrado que es una pseudociencia - reflexionó Ariel para sí misma mientras miraba su herida.

Stiles solo miró a la chica con asombro, lo que hizo que Ariel se congelara de inmediato, dándose cuenta de lo que acababa de hacer. "Ahora él sabría con certeza que no necesitaba ayuda para estudiar", Ariel se palme mentalmente.

Ariel le envió su mejor mirada, tratando de imitar a su hermana, "Cuéntale a alguien sobre esto y te terminaré".

Stiles inmediatamente se puso serio y asintió con la cabeza antes de volverse hacia Derek.

- ¿Qué te pasa si no entiendes la cosita homeopática?

Ariel le dio al chico pálido una mirada extraña mientras lo veía descuartizar la palabra homeopatía.

- Me muero - le dijo Derek a Stiles.

- Está bien. Sabes, eso realmente no se parece a nada de equinácea, y una buena noche de sueño no podría solucionarlo - dijo Stiles, haciendo que Ariel se riera de su comentario. Solo él logró hacerla sonreír cuando estaba asustada.

- Cuando la infección llegue a mi corazón, me matará - suspiró Derek.

- La positividad no está en tu vocabulario, ¿verdad? - Stiles se burló.

- Si no llega a tiempo con la bala, último recurso - dijo Derek mientras se inclinaba sobre la mesa de metal.

- ¿Cuál es? - Pregunta Stiles.

Derek sacó un cortador de huesos de uno de los gabinetes de la habitación - Vas a cortarme el brazo.

Ariel soltó una risa nerviosa.

- ¿Amputación?

Stiles y Ariel se miraron antes de volverse hacia Derek con la misma expresión dudosa.

- Oh, Dios mío. ¿Qué pasa si te desangras hasta morir?

- Se curará si funciona - refunfuña Derek mientras ata una banda elástica alrededor de su brazo para detener el flujo de sangre.

La pequeña morena negó con la cabeza, provocando que su cabello hasta la cintura cayera sobre sus hombros.

- No hay forma de que te recuperes a tiempo, y no tenemos los materiales necesarios para injertar tu piel.

- Uf, mira, no sé si puedo hacer esto - suspiró Stiles.

- ¿Por qué no?

- Bueno, por el corte a través de la carne, el aserrado de los huesos y especialmente la sangre - explicó Stiles.

Derek obviamente estaba muriendo a cada segundo; la herida de bala tenía sangre roja carmesí que goteaba de ella y estaba rodeada de venas a lo largo de su brazo que eran de un color negro, que se extendían hasta su hombro y bajaban hasta su mano.

- ¿Te desmayas al ver sangre? - Preguntó Derek.

- ¡No, pero podría ver un brazo cortado! - Stiles exclamó.

- Hazlo tú - Derek miró a la chica que lo había molestado hasta ese momento.

Ariel se señaló a sí misma, incapaz de formar palabras. La chica no era a quien acudir cuando se trataba de una cirugía, debido a que le temblaban las manos cuando estaba nerviosa.

Derek parecía molesto y se volvió hacia Stiles.

- Está bien, está bien. ¿Qué tal esto, Stiles? O me cortas el brazo o yo le cortaré la cabeza a tu pequeña novia.

"Solo somos amigos" pensó para sus adentros, cansado de que la gente pensara que eran algo más.

- Está bien, sabes qué, no me trago tus amenazas... - comenzó Stiles antes de que Derek lo tirara del cuello.

- ¡Derek! - Ariel gritó, moviéndose para ayudar a Stiles.

- ¡Oh, Dios mío! Está bien. Está bien, comprado, vendido. Totalmente, lo haré. Lo haré - tartamudea Stiles, haciendo que Derek lo aleje.

- ¿Está seguro? - Ariel le preguntó gentilmente a Stiles - Puedo hacerlo.

Stiles sonrió a la chica de ojos de ópalo, mirando sus manos que aún temblaban levemente a los costados.

- Estoy seguro.

- ¿Qué? ¿Qué estás haciendo? - Stiles mira a Derek, que parecía que se iba a caer.

- Santo Dios, ¿qué diablos es eso? - Stiles gritó disgustado cuando Ariel saltó hacia atrás. Vio a Derek vomitar frente a ella, haciendo una mueca de disgusto.

- Es mi cuerpo, tratando de curarse a sí mismo - respira Derek. Se veía terrible. Su piel estaba tan pálida como la nieve y sus ojos estaban hundidos y apagados.

- Bueno, no está haciendo un buen trabajo - replicó Stiles.

- Ahora. ¡Tienes que hacerlo ahora! - Derek demandó mientras miraba a Stiles.

- Mira. Honestamente, no creo que pueda - le dice Stiles.

Derek agarra a Stiles por el cuello.

- ¡Dios mío! ¡Está bien, está bien!

- Oh, Dios mío. Muy bien, aquí vamos - suspira Stiles. Ariel hizo una mueca mientras cerraba los ojos con fuerza, pero antes de que Stiles pudiera cortar a Derek, escuchó a Scott.

- ¡Stiles!

- ¿Scott? - Ariel gritó, abriendo los ojos para ver a Stiles encorvado sobre la mesa, aliviado-

- ¿Qué demonios estás haciendo? - Scott le preguntó a Stiles. Stiles simplemente soltó el cortador de huesos, suspirando aliviado.

- Oh, acabas de evitar toda una vida de pesadillas.

Ariel asintió con la cabeza, secándose la única lágrima que había caído por su mejilla cuando cerró los ojos cerrados.

- Y terapia.

- ¿Lo obtuviste? - Preguntó Derek. Su frente estaba cubierta con una fina capa de sudor, y parecía que podría desmayarse en cualquier segundo.

Scott le entrega una pequeña bala a Derek.

- ¿Qué vas a hacer con ella? - Stiles pregunta mientras se movía para pararse a mi lado.

- Voy a - voy a - Derek comienza a balancearse mientras mira la bala. Resopla antes de soltar la bala y caer al suelo.

- No, no, no, no, no - Scott corre hacia donde cayó la bala para agarrarla. Ariel vio cómo rodaba debajo de la mesa, pero antes de que pudiera atraparlo, Derek comenzó a balancearse, lo que la hizo correr hacia Derek con Stiles mientras Scott intentaba agarrar la bala.

- Derek. Derek, vamos, despierta. Scott, ¿qué diablos vamos a hacer? - Stiles se asusta, mientras se inclina sobre Derek, tratando de despertarlo. Empiezo a golpear ligeramente su brazo para despertarlo.

- ¡No lo sé! ¡No puedo alcanzarlo! - Scott grita mientras busca la bala debajo de la mesa. Ariel respiró hondo, tratando de ignorar la locura de la situación y mantener la calma.

- ¡No se está despertando! - Stiles anunció.

- Vamos - Scott gime mientras se empuja más.

- Creo que se está muriendo. Creo que está muerto - les dijo Stiles a los dos adolescentes en la habitación, mientras Ariel negaba con la cabeza, moviéndose para comprobar el pulso de Derek.

Esperando unos segundos, la chica comenzó a sentir un suave golpe.

- Está vivo, pero apenas aguanta - La sensación en su estómago comienza a apretarse, haciendo que Ariel quiera dejar salir lo que sea que esté burbujeando en su pecho.

- ¡Sólo espera! Vamos. ¡Oh, lo tengo! ¡Lo tengo! - Scott grita mientras les muestra a los dos la bala. Ariel se quedó boquiabierta mientras miraba las uñas alargadas de Scott, que definitivamente no eran humanas.

- Por favor, no me mates por esto - reza Stiles, atrayendo su atención hacia Derek. Stiles lo golpea en la cara antes de estrechar su mano con dolor - ¡Ugh! ¡Ow! ¡Dios!

- ¿Estás bien? - Ariel le pregunta a Stiles, acercándose para mirar su mano, quien asiente alejándose de Derek cuando se recupera.

- Dame... - Ariel escuchó decir a Derek antes de que se acercara y le arrebatara la bala a Scott. Ariel retrocedió mientras los chicos ayudaban a Derek a acercarse a la mesa de metal.

Derek muerde la bala abriendo la carcasa para liberar un polvo azul que tenía que ser Wolfsbane. Derek agarró el encendedor y lo encendió antes de recoger el polvo brillante y presionarlo en su herida. Ariel jadeó cuando una niebla azul comenzó a salir de su herida.

Derek cae al suelo mientras gime de dolor, su dedo se clava en el agujero de bala. Sus gruñidos llenaron la habitación mientras arqueaba la espalda de dolor. Scott, Stiles y Ariel observaron conmocionados cómo las venas comenzaban a desvanecerse hasta que la herida desapareció, dejando nada más que piel limpia.

- ¡Eso fue increíble! ¡Sí! - Stiles exclamó, haciendo un extraño movimiento de puño.

- ¿Estás bien? - Scott le preguntó a Derek mientras la mujer morena decía - ¿Estás bien?

- Bueno, excepto por el dolor agonizante - respondió Derek con sarcasmo.

- Supongo que la capacidad de usar el sarcasmo es una buena señal de salud - sonrió Stiles.

- Está bien, te salvamos la vida, lo que significa que nos vas a dejar en paz, ¿entiendes? Y si no lo haces, volveré con el padre de Allison y le contaré todo - dijo Scott. amenazado.

La gemela Martin miró a Scott confundido.

- ¿Sr. Argent?

- ¿Vas a confiar en ellos? ¿Crees que pueden ayudarte? - Derek cuestionó, ignorando la pregunta de Ariel.

- Bueno, ¿por qué no? Son mucho más amables que tú - afirma Scott.

Derek solo lo miró con incredulidad.

- Puedo mostrarte exactamente lo agradables que son.

Scott arqueó las cejas.

- ¿Qué quieres decir?



Stiles estacionó el auto frente a la casa de los Martin mientras la Martin más joven jugaba torpemente con la cremallera de su mochila en silencio. Ella había estado en silencio después de toda la escena en la oficina del veterinario. No sabía lo que había visto y no podía comentar nada de eso, sabiendo que los chicos obviamente estaban tratando de mantener un secreto.

Stiles rompió el silencio.

- Entonces ...

- Entonces - dijo Ariel. Observó la mirada abatida de Stiles antes de decidir borrar las últimas horas de su memoria. La morena sonríe agarrando su bolso y abriendo la puerta - ¿Darme clases en otro momento? - Ella le preguntó, mientras él solo asentía con la cabeza, jugando con sus dedos. No sería hasta después de que la chica Martin se fuera que él entendió lo que ella dijo.

Ariel se rió.

- Impresionante - le dio un pequeño beso en la mejilla, antes de bajar del auto - Realmente me vendría bien ayuda en la clase de ciencias - la chica le guiñó un ojo juguetonamente al chico espástico antes de volverse a su casa.

Miró hacia atrás para despedirse como antes de entrar a su casa. No le preguntaría a Stiles sobre lo que acaba de pasar si él no hablara de que ella es inteligente. Parecía ser un trato justo para la chica que no sabía cuán grande era el secreto que Stiles y Scott estaban escondiendo.

- ¿Por qué estuvieron juntos tan tarde? - Escuchó Ariel tararear a Lydia mientras cerraba la puerta. Ariel casi se cae cuando se dio la vuelta para mirar a su hermana. Poniendo los ojos en blanco, dejó caer su mochila junto a las escaleras.

La chica de ojos de ópalo se encogió de hombros, no estaba de humor para jugar a los juegos de su hermana.

- Perdimos la noción del tiempo.



La trama y la historia fueron escritas por Gentle8Kisses. Solo lo estoy traduciendo al español. así que Ariel y la trama le pertenece.

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