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➳ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ ᴅɪᴇᴢ







꧁ "No, no lo hagas, soy demasiado adorable" ꧂


Lelia había viajado a la habitación de Bridget y las dos se habían dirigido a su primera clase, que era runas. Lelia era increíble en otras materias en Alfea, pero las runas eran algo con lo que luchaba inmensamente.

Lelia estaba compartiendo un escritorio con Bridget y las dos chicas estaban tratando de trabajar en la tarea que se les dio a toda la clase. Los dos mejores amigos estaban haciendo varias cosas al mismo tiempo haciendo el trabajo y hablando de anoche.

De camino a esa clase, Lelia le había explicado lo que sucedió anoche con el quemado aproximadamente, solo para que Bridget pudiera tener una idea de lo que sucedió, pero eso no fue suficiente para la hada del agua.

- ¿Cómo se veía? - Bridget comenzó a interrogar.

- ¿Quieres bajar la voz? No quiero que la gente hable de esto - Lelia regañó al hada del agua mientras miraba rápidamente alrededor de la clase para asegurarse de que nadie estuviera escuchando.

- Lo siento, pero en serio, ¿cómo se veía? - Bridget preguntó en voz baja esta vez.

- Yo-yo no pude verlo bien antes de que la Srta. Dowling comenzara a atacarlo - Lelia confesó mientras fruncía el rostro pensativo.

- ¿Nada? - Bridget preguntó más.

- ...Sólo diré esto, hemos visto dibujos e imágenes de cómo se veían en clase, que pensamos que daban miedo como el infierno... - comenzó a decir Lelia. - ...pero fue aún peor - Lelia admitió mientras evitaba mirar a la chica a su lado.

- Todavía no puedo creer que hayas pasado la barrera - Bridget negó con la cabeza con incredulidad mientras apartaba los ojos de su asignación de runas y miraba a la rubia como lo haría una madre cuando regaña a su hijo.

- Tenía que... Bloom necesitaba ayuda - Lelia murmuró mientras intentaba escapar de los regaños.

- Por supuesto que Stella, la perra real, pondría a alguien en peligro así - Bridget se burló con amargura. - ...ella es peligrosa todos juntos - Bridget declaró refiriéndose al incidente con Rikki.

Lelia se tensó en su silla. Quería desesperadamente defender a su amiga rubia, pero sabía que Stella no quería que nadie se enterara de que había perdido el control, así que Lelia simplemente evitó incómodamente la mirada de las hadas del agua y esperaba que hubiera un cambio de tema.

Lelia volvió a mirar su trozo de papel que tenía innumerables runas dibujadas para que Lelia dijera cuáles eran. - Todos ellos parecen iguales - Lelia se quejó, no entendía nada de eso.

- Es simple - Bridget simplemente dijo mientras trabajaba en su artículo con facilidad.

Al igual que Lelia era buena en ciertas materias, Bridget era buena en las clases de runas y magia, siempre se destacó en esas dos lecciones.

- Fácil para ti quieres decir - Lelia tomó represalias cuando empezó a golpear la mesa con el bolígrafo repetidamente por frustración y porque estaba loca de aburrimiento.

La hada del agua al lado de la rubia no se molestó en levantar la vista de su pedazo de papel mientras agarraba la muñeca de la hada del aire para evitar que golpeara la mesa.

- Para - Luego soltó su muñeca cuando supo que la rubia se detendría y continuó con su trabajo de runas.

- Todavía no puedo creer que no me estés ayudando - Lelia negó con la cabeza y fingió estar enojada a pesar de que en realidad estaba un poco molesta porque su mejor amiga no la ayudaría.

La hada del agua simplemente se volvió para mirar a la chica divertida.

- Eso es porque nunca escuchas de todos modos. Es inútil - Bridget le dijo a sabiendas.

Lelia hizo una mueca de insulto.

- Estoy ofendida - La rubia se burló mientras colocaba una mano sobre donde pensaba que estaba su corazón.

- Tú sabes que es verdad - Bridget apuntó con su bolígrafo hacia el hada del aire.

- Tu no estas equivocada - Lelia puso los ojos en blanco dramáticamente mientras escribía lo que creía que eran las respuestas a las preguntas en su hoja de papel.

Ya no le importaba si estaba mal, al menos tenía que hacer que pareciera que estaba haciendo el trabajo y que lo estaba intentando. Lo peor que podía hacer su maestra era proporcionarle un tutor.

Si su maestra hiciera eso, podría pedirle a Bridget que la asesorara, ya que era una de las mejores estudiantes de runas.

- Entonces... - Lelia se calló y Bridget vio la sonrisa maliciosa en los labios rubios. - ¿Stephanie? - Lelia comenzó a burlarse de la chica a su lado mientras seguía escribiendo conjeturas al azar.

- No empieces. - Bridget gimió juguetonamente mientras enviaba una mirada de advertencia a su mejor amiga.

- No dije nada. - Lelia negó con la cabeza burlonamente.

Bridget se volvió hacia la niña con incredulidad y se rió de ella.

- Tu ibas a. - Bridget le dijo a la hada del aire.

Lelia inclinó la cabeza hacia un lado coincidiendo con el hada del agua.

- Está bien, ¿y qué si lo fuera? - Lelia se encogió de hombros con inocencia.

- No estamos hablando de esto... - declaró Bridget mientras comenzaba a negar con la cabeza rápidamente mientras Lelia la miraba divertida. - ...Stephanie y yo terminamos. Sin sentimientos en absoluto, ninguno. Zero, nada. Zilch... - Bridget tercamente le dijo. ya que no solo estaba tratando de tranquilizarse a sí misma, sino también a la hada del aire. - ...esta es una zona sin burlas - Bridget le dijo seriamente a la rubia, pero entrecerró los ojos en broma mientras hacía una pausa en su escritura antes de continuar de nuevo.

- ¿Para qué están las amigas? - Lelia cuestionó retóricamente continuar con su acto inocente.

- Te odio - Bridget fingió hablar en serio.

- No, no lo haces, soy demasiado adorable - Lelia negó con la cabeza al hada del agua y chocó su hombro con el suyo mientras le guiñaba un ojo juguetonamente.

- Hmm, no estaría muy segura de... - Bridget se calló cuando la maestra pasó junto a su escritorio y las dos fingieron que todavía estaban trabajando y no estaban distraídas.

Después de demorarse unos segundos mientras miraba a las dos chicas, esperando que una de ellas se equivocara y viera su tapadera, la maestra pasó sin decir una palabra.

Las dos chicas sentadas una al lado de la otra se rieron en voz baja para no llamar la atención.

Los dos continuaron con su trabajo, aunque Lelia todavía estaba escribiendo cosas estúpidas que probablemente no tenían nada que ver con el tema de las runas.

Sin embargo, la hada del aire finalmente sobornó a Bridget para que la ayudara con las últimas preguntas con bolos gratis y ese fue un trato que la hada del agua no podía dejar pasar.

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