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18. DESEO

-cuando salí a buscar al atacante de Stark, no tarde en encontrar la calle dónde le provocaron la herida, sin nadie a los alrededores al que se pudiera tomar como testigo, pero noté que el lugar se encontraba en una zona donde habitan obreros en su mayoría, debido a la cercanía a las industrias-comenzo a explicar, caminando hasta la ventana-Supuse que si Sanders lo guió hasta ahí fue porque conocía el lugar, a la hora que había ocurrido el incidente, todos estarían aun trabajando, con una rutina sin variacion entre ir al trabajo y luego salir a un bar con sus compañeros de trabajo, cerca de donde vivia Curtis había uno, asi que cerca de ahí tenía que haber otro, si Sanders se movia por esos lugares alguno de los obreros debía haberlo visto alguna vez, así que me dirigí al bar más cercano, que es al que fuimos esta mañana, hable un poco con el barman, preguntandole acerca de Curtis Jennings, ya que como recordaran, para ese tiempo aun no teníamos su verdadero nombre ni usted había despertado aún para darnos sus caracteristicas-

-le mostraste el retrato hablado que te dio Lestrade-adivinó Watson.

-así es, fue ahí cuando me entere que el Curtis que había sido asesinado, frecuentaba antes ese bar, pero que ya no lo había visto desde hace algunas semanas, además, tambien me comento de que el hombre en el retrato había comenzado a ir desde hace algunos días, habria servido de mucha ayuda si hubiera sabido su nombre pero al parecer lo desconocía, le pregunte donde podía encontrarlo, fue ahí cuando menciono Marcus Pemberton, me dio los datos de sus visitas al bar con sus respectivos horarios ¿por que razón Jennings acudiría a un bar al otro lado de la ciudad teniendo uno cerca de casa? Debía tener algun trato especial con Pemberton, uno que involucraba dinero de seguro, ya que el trabajo de obrero ya es en si duro, más aún si iba a aquel bar en lugar de llegar a casa a descansar, hasta ese momento resultaba obvia su situación-

-para mi no es obvia-se quejo Tony.

-Curtis Jennings buscaba ingresos extras para cubrir sus constantes faltas al trabajo, informacion que logre deducir gracias a la visita de su hermano. Curtis solia faltar para poder quedar a solas con la esposa de Alfred, razón por la cual este no veía a nadie entrar ni salir de su casa-explicó Holmes, tratando en medida de lo posible, de ser breve en su explicación.

Watson podía seguirle con más facilidad, pero debía ser mas detallista si quería que el millonario le siguiera rapidamente.

-por el tiempo que se le veía a Curtis por el bar, resultaba obvio que llevaba mucho tiempo trabajando para Pemberton, pero como bien sabe doctor, una vez que entras aun grupo así es muy dificil salir. Curtis iba a citas regulares de tres veces por semana, la unica razón por la cual dejo de acudir debió de ser por algo que le causara temor o preocupación, lo único que le podia causar eso era que ellos ya estuvieran enterados de su traición, de lo contrario seguiría ahi manteniendo las apariencias, pero no, decidió desaparecer, creyó que la policia atraparia a Pemberton y sus hombres, por eso dio todos los detalles, según me conto Lestrade después, al estar a punto de retirarme fue cuando tuvo lugar la pelea, aunque ahora saben que solo fue un intento de encubrir mi necesario asesinato, aunque el hombre que me conto todo si termino muriendo, salió en el periódico, lo lei antes de regresar a casa aquel día-termino de decir el detective, sin ponerle demaciada importancia a eso último.

-Curtis le conto a la policia del intento de secuestro que se llevaria acabo contra la señorita Rutterforth, Pemberton contrato a Sanders y mando a dos de sus hombres para espiarlo y que ayudaran a Frank para asesinarlo a cambio de favores y uno de ellos posiblemente era asesinarme-comentó Tony, verificando que hubiera entendido bien.

-asi parece, lo más probable es que las faltas continuas de Curtis a su trabajo le dieran la facilidad a Pemberton de meter a sus hombres sin que Jennings sospechara algo-respondió Watson.

-pero aún queda algo que no tiene sentido ¿por qué Sanders mató a Pemberton?-preguntó el millonario.

-tal vez lo hiso para cubrir sus huellas, al saber que habíamos llegado hasta Marcus debió hacerlo actuar para evitar que recolectaramos informacion acerca de él-dijo Holmes después de haberlo pensado unos momentos.

Tony paso bruscamente la mano por sus cabellos, despeinandolos en el acto, algo tenso sin duda.

-mató a Curtis y a Pemberton sin que nadie pudiera evitarlo o preverlo, si llega a aburrirse de "jugar" conmigo ¿que evitara que también me maté? Tiene todo a su favor, aquí casi nadie me conoce y en el futuro nadie sabe donde estoy, apenas acabe con el trabajo avanzara en el tiempo sin temor de que lo atrapen por sus crimenes, no podra ligarse mi asesinato con él-

-nosotros lo ayudaremos Stark, atraparemos a ese hombre-trato de convencerlo el doctor sin mucho éxito.

-podría incluso meterse aquí dentro sin que nadie lo note-

-cada segundo que pase aquí sera de latente peligro, sin embargo podemos evitar esa conclusión-le dijo Holmes con seguridad-sera cuestion de tomar ciertas medidas preventivas al respecto, tenemos una cita en la arena ¿recuerda?-Tony suspiro de forma cansada, pero terminó asintiendo, levantandose del sillón en dónde se encontraba-no tengo nada mejor que hacer así que...andando-

-yo debo volver con Mary, iremos con sus padres por la mañana para avisarles de su embarazo-dijo Watson, también levantandose de su asiento, mirando al detective sin hacer ningún otro movimiento.

-¿su esposa esta embarazada?-preguntó Tony un poco incrédulo-¿lo ven? ¿que clase de código usan que no me entero de la mayor parte de la conversación?- terminó quejándose.

-que yo sepa no tenemos ningún código-le respondió el doctor, quedando después los tres en silencio, con Holmes y Watson mirandose mientras que Tony los observaba esperando cualquier acción.

-bien, ya entendi, voy... allá-acepto el castaño mientras salía de la habitación, sintiendose un poco incómodo con aquellos dos, que simplemente parecían no ser capaces de demostrarse su amor en público.

Estaba bien que era el siglo XIX y que esa clase de relaciones estaba prohibida por la ley pero ¡el era del futuro! De una época dónde la mayoria de las personas sabía aceptar a las parejas, incluso a las familias formadas por personas del mismo sexo, pero decidió no presionarlos, así éstos le hicieran desesperar.

-tiene mucho en que pensar doctor-le dijo Holmes una vez que Tony salió-aceptare sea cual sea su decisión-

-hay una gran diferencia entre lo que debo hacer y lo que quiero hacer, no es una decisión, es una elección- respondió Watson-una que no pienso hacer-sonrió al recordar lo ocurrido en aquel bar, jamás había visto al detective así de sonrojado y nervioso, le gustaba verlo así, que fuera él quién causara esa reacción-te vere luego Holmes-se despidió, acercandose al detective para robarle aquello que le pertenecería de ahora en adelante.

Apreso sus labios sin admitir resistencia de ningún tipo, sabireando sus labios.

Holmes podría ser de las personas más inteligentes del mundo, pero al sentir ese choque entre sus bocas, todo en su cerebro se resumio a solo dos palabras, un nombre y apellido: John Watson.

Una mano presionando contra su espalda le impidio separarse del cuerpo del doctor, quien se debatía entre el limite que esta rompiendo, pero igual que la primera vez, llego a la conclusión de que seria buena idea vengarce un poco del detective, por todos esos comentarios inapropiados y su actitud ante los demás.

Con una mano tomó del cabello del detective, enredando sus dedos en el mismo, jalandolo levemente para que esté dejara su cuello al descubierto, permitiendole depositar algunos besos en él.

Lo que estaba haciendo era completamente inapropiado, incluso podría considerarsele depravable.

-Watson algo extraño me pasa-susurro Holmes apenas se separo un poco.

-¿qué cosa?- preguntó el doctor mientras aun repartia besos por su cuello.

-son demaciadas corrientes eléctricas, siento mi latidos demaciado acelerados y con deseos...-

-...de más- le completó Watson, sintiendo un temblor por parte de su compañero al haberlo dicho tan cerca de su piel-según mi opinion médica...estas excitado Holmes-ante tal respuesta, el detective hiso un enorme esfuerzo para separarse de su compañero.

Había sentido el aumento gradual de su temperatura corporal, como su cuerpo parecía despertar.

-se a dónde lleva esto y no es el mejor lugar para llevarlo acabo-terminó diciendo el detective, tratando de volver en sí.

Watson agradeció que esté lo hubiera detenido, dudaba que el mismo lo hubiera hecho, poco le había faltado para mandar la descencia y la razón por la ventana y continuar con lo que tanto deseaba hacer.

-tienes razón-sonrió-me tengo que ir-Holmes solo asintió, viendolo salir mientras tocaba inconsientemente su cuello, recordando aquella agradable sensación que el bigote de Watson le causaba.

Sacudió la cabeza buscando alejar esas ideas, jamás le había resultado tan difícil recuperar la concentración.

-Stark-lo llamó Holmes una vez que pudo calmar aquel remolino de emociones-no hay que perder más tiempo, debemos irnos si queremos tener la arena sola-

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