Se levantó relativamente temprano para ser vacaciones, se duchó y se puso ropa cómoda para desayunar con su familia, Hyungwon lo maquilló solo un poco para tapar las ligeras ojeras que comenzaban a nacer bajo sus ojos, enchinó sus pestañas, y puso un poco de sombra obscura para poder dar un efecto de profundidad en la mirada apagada de su hermano y para finalizar, algo de gloss con apenas un destello rojizo.

— Ah, realmente soy genial. — Se halagó Hyungwon a él mismo, mirando con orgullo a su pequeño.

— Si pudiera ver, te diría si es cierto o no, pero como no puedo... — Se encogió de hombros, poniéndose de pie.

Le agradeció a su hermano y huyó antes de que comenzará con su típico monólogo de que es malo bromear con su condición porque, inconscientemente se hacía daño. Era pura mierda, si se tomaba todo tan a pecho solo viviría deprimido, además, la ceguera era algo con lo que nació y con lo que vivirá para siempre, no podía lamentarse por eso para siempre.

Bajó las escaleras con cuidado y regresó a su habitación, presionó el botón con el que se desbloquea su celular dos veces seguidas y le dictó la hora, nueve treinta cuatro, enseguida, el aparato anunció un mensaje de Jimin avisándole que ya iba por él. Terminó todo justo a tiempo.

Se despojó de la "ropa de indigente" que usaba  como pijama y se vistió con un pantalón de vestir negro y una camisa blanca formal, finalizando con unos zapatos negros. Agradeció como siempre a Hoseok, quien fue el que se encargó, un día antes de conseguirle el conjunto.

Salió y en seguida comenzó el birote de parte de su familia, Jiyu alardeando de tener un par de hijos preciosos, Hyungwon siguió halagando su gran trabajo con el maquillaje y Jiwon, viendo con todo el amor posible a los tres miembros de su pequeña, feliz y cálida familia.

Un claxon fuera de la casa paró la lluvia de mimos hacia Jungkook y supo que era momento de salir si quería llegar a tiempo a la universidad.

— Toma, no se te olvide esto. — Jiwon puso un ramo de flores sobre sus brazos, para después darle unas leves golpes sobre su hombro. — Dile a Wooseok que muchas felicidades.

— ¡Recuérdale que la comida será mañana! — Le pidió Jiyu. — ¡Ah, y que me envíe su comida favorita, aún no lo hace!

— Es el sushi, mamá. — Le dijo Jungkook, acomodando el ramo sobre sus brazos. — Saldré con él después de la ceremonia, nos vemos más tarde.

Cada quien dejó un beso por el rostro del pequeño y salió, tanteó el lugar y sintió la mano de Jimin tomar la suya. El rubio sonrió extensamente y sin soltarlo, lo ayudó a entrar a su auto.

— ¿Estás feliz? — Le preguntó, poniéndose en marcha. — Tú novio se va a graduar.

— Estoy orgulloso. — Confesó, sonriendo con felicidad. — Estoy algo nervioso por la presentación, pero me preparé todo el semestre para esto.

— Es curioso. — Dijo Jimin en medio de una risa. — Tú y Wooseok pelearon por esa presentación y ahora, son parejas y tú cantarás para él.

Jungkook rió, si, aún recordaba las audiciones para la presentación de la ceremonia de graduación. Recuerda que al anunciar los resultados, Wooseok se le acercó enojado a reclamarle la victoria, claro que Hoseok y Jimin lo apartaron en ese instante.

Realmente era gracioso, empezaron ese semestre totalmente diferente a como lo terminaron. Juntos.

— Llegamos. — Anunció Jimin, estacionándose donde solía hacerlo siempre. — ¿Ya llegaron? — Jungkook le facilitó su móvil al mayor, quien le hecho un vistazo. — Ya llegaron. — Confirmó, saliendo del auto.

Se dirigieron hasta el auditorio de la universidad, entraron por puertas diferentes, pues Jungkook abriría el evento.

— Por acá, Jungkook. — Un maestro le ayudó a llegar a la mitad del escenario, sintió el micrófono entre sus manos y los nervios explotaron por todo su torrente sanguíneo.

Escuchó la corta presentación y respiró hondo. Su familia sería un gran apoyo, pero la graduación era sólo para los familiares de los de último año.

El telón fue abierto y el silencio nació, respiró hondo y en su mente apareció el rostro de una sola persona, sabía que él estaba entre todos los alumnos y tenía que dar lo mejor de sí, solo por él.

Oh, estoy pensando en nuestra juventud
Solo estábamos tú y yo
Éramos jóvenes, aventureros y libres

Ahora nada puede alejarte de mí
Hemos estado por ese camino antes
Pero eso ya terminó
Me haces volver por más

Cariño, tú eres todo lo que quiero
Cuando estás acostado aquí en mis brazos
Me cuesta creerlo
Estamos en el cielo

Taehyung se sentía encandilado, nunca había escuchado cantar a Jungkook. Su voz era preciosa, su pronunciación del inglés y la canción...

Y el amor es todo lo que necesito
Y lo encontré ahí en tu corazón
No es muy difícil notarlo
Estamos en el cielo

Oh, una vez en la vida encuentras a alguien
Que cambiará tu mundo
Que te alegra cuando te sientes mal

Si, esa canción era definitivamente de ellos dos. Ya la había escuchado antes, sin embargo, nunca le había prestado verdadera atención a la letra, y ahora, que la analizaba como lo hacía con el rostro de Jungkook, llegaba a la misma conclusión.

Sí, nada podría cambiar lo que significas para mí
Oh, hay muchas cosas que podría decir
Pero solo abrázame ahora
Porque nuestro amor alumbrará el camino

He esperado por tanto tiempo
Para que algo llegara
Para que el amor viniera

Ahora nuestros sueños se hacen realidad
A través de los buenos y los malos tiempos
Sí, estaré justo a tu lado

Lo había logrado. En cuanto la melodía terminó, sonrió en grande. Todo ese tiempo invertido en esa presentación había valido completamente la pena, y lo reafirmó cuando el auditorio entero se lleno de aplausos y gritos de emoción.

Hizo una reverencia ante las personas y pronto sintió a un chico al lado de él, quien lo ayudó a bajar del podio, le agradeció en cuanto sintió la loción de Jimin cerca, lo abrazó con felicidad y ambos se fueron a sus asientos para terminar de escuchar la ceremonia. Ahí estaban Namjoon, Yoongi, Seokjin y Changkyun, quienes lo saludaron con entusiasmo y elogiaron la magnífica presentación.

Al termino de la asamblea, salieron casi corriendo del auditorio para esperar pacientemente a sus recién graduados.

El primero en salir fue Hoseok, quien corrió hasta sus bebés, fundiéndose en un cariñoso abrazo, los demás los veían con felicidad.

Ah~ los mayores recordaron cuando vivieron ese momento.

Después, salió Taehyung solo que estaba con Sana pero no duraron mucho juntos, la chica se veía molesta y se fue al lado contrario de donde estaban ellos, el castaño se acercó con una sonrisa enorme. Sus amigos no tardaron en rodearlo en el abrazo que ellos mismos inventaron para reconfortarse y felicitarse entre todos al mismo tiempo, dejando al recién graduado entre el pequeño cuadrado que formaron los mayores y Changkyun.

— Valió la pena soportarte toda la carrera, mocoso. — Taehyung le sonrió a Yoongi. — El mejor promedio de la carrera, siguiendo mis pasos.

Jungkook sonrió con timidez y se acercó a él. Taehyung notó el ramo que sostenía y su imaginación era muy buena, creía que eran para él, pero ciertamente, recibió algo mejor que eso. Recibió un caluroso abrazo del menor, no dudó en cobijarlo entre sus brazos. Era probablemente, el abrazo más real que se habían dado después de todo.

— Felicidades, hyung. — Murmuró el azabache.

— Gracias, Kookie. — Le respondió en el mismo tono, el menor se separó entonces.

— Kook, ahí viene tu novio. — Avisó Hoseok.

El menor de inmediato trato de sentir su aroma, Taehyung quiso rodar los ojos pero se resistió.

— Jungkook, tienes la voz más hermosa del puto lugar. — Le dijo mientras lo abrazaba con fuerza, el menor rió enternecido, pero frunció el ceño al olfatear un aroma desconocido cerca de ellos.

— Hyung, yo debo felicitarte a ti por graduarte. — Le regañó separándose solo un poco. — Estoy muy orgulloso de ti, cariño.

— Istiy mii irgillisi di ti, ciriñi. — Imitó Taehyung cerca de Changkyun, quien apretó los labios para no reírse de él.

— Bebé, te presento a mi madre. Jung Suni. — El menor hizo una reverencia formal hacia donde Jimin lo había direccionado.

— Es un gusto, señora Jung. — La mayor sonrió.

— El gusto es mío, no sabes cuanto he escuchado de ti. — Jungkook sonrió al escuchar las quejas del mayor. — Y tú voz es preciosa, casi me haces llorar.

— Oh, muchas gracias, en serio. — Sintió las mejillas rojas y escuchó las expresiones de ternura a su alrededor.

— Espero que puedas ir a comer pronto a casa, Kookie. — Jungkook asintió, feliz. — Ahora, los dejaré, tengo que volver al trabajo.

— Fue un honor conocerla, señora Jung. — Se despidió brevemente. Wooseok le dio un beso en la frente y la mujer se fue. — Ah~ tú mamá es tan linda.

— Lo sé, me parezco a ella. — Jungkook alzó una ceja con diversión, Wooseok rió y lo abrazó por los hombros.

Los demás, quienes se habían alejado un poco para darles su momento familiar, volvieron a acercarse a ellos.

— Ey, iremos a comer todos juntos, ¿Vienen? — Los invitó Namjoon, Wooseok los vio con algo de pena.

— Oh hyung, gracias pero ya tenemos planes. — Se disculpó Jungkook. — Pasaremos el día en el departamento de Wooseokie viendo películas, el es el graduado así que el decidió su forma de celebración.

Alto. Eso no le agradó nada a Taehyung. ¿Celebración? ¡Ese idiota quería celebrar de una forma que no lo podía permitir! Porque claro que escuchó a su madre decir que iría al trabajo, lo que significaba que estarían solo, no, ¡De hecho Wooseok vivía solo! Eso solo daba más señales de alerta.

— ¿De verdad no vendrás con nosotros, Jungkook? — Preguntó con seriedad, el menor suspiró.

— Si, es la graduación de mi novio, estaré con él y haremos lo que él quiera.

Oh no, no podía permitir que Jungkook hiciera lo que Wooseok quería hacer.

— Pero tus amigos también nos graduamos. ¡Dile, Hobi hyung! — El mayor miró a Taehyung con los ojos entrecerrados.

— Pero Wooseok es su pareja, Taehyung. Además, es su decisión. — Jungkook sonrió.

— Déjalo ya, Tae. — Susurró Yoongi tras él. — No hagas una escena, no con él aquí.

Y no tuvo más opción, Jungkook y Wooseok se despidieron y se alejaron del grupo. Taehyung deseaba ser el chico que sostenía la mano del menor en ese momento.