Le restringieron el alcohol por unos momentos a Jin para que se le bajara un poco el que ya había en su sistema y que le pudiera aclarar a Taehyung de que estaba hablando con Jungkook.

Y Jungkook seguía en la pista de baile junto a Jimin, quien estaba feliz por saber que su amigo se estaba divirtiendo de verdad, no era secreto que a ambos les gusta a bailar con la diferencia de que, Jimin lo hacía todo el tiempo y Jungkook no, realmente ninguno de los dos recordaba la última vez que lo hizo.

Hoseok y Changkyun se fueron tiempo después hasta la barra para unirse a la conversación, Yoongi miraba de vez en cuando a dirección donde estaba Jimin para asegurarse de que estuviera bien, claro que el menor no desperdiciaba ninguna oportunidad para provocarlo con movimientos sexys y claro, Yoongi poco a poco estaba cayendo.

— Ya lo he decidido. — Jin llamó la atención de todos sus amigos. — Neurocirugía. Seré neurólogo. — Todos lo miraron con sorpresa. — Es tal vez la rama más tediosa y complicada, pero justamente por eso la quiero. Quiero que sea difícil para no aburrirme.

— Bueno, no lo digas como si experimentaras con los pacientes. — Le dijo Taehyung.

— La medicina, cualquier rama de ella, no sólo se basa en cortar, Tae. A lo que me refiero con no aburrirme es que, la investigación del cerebro es muy compleja aún, también todos los procedimientos existentes para tratarlo. ¡Me gustaría llegar a hacer algún buen descubrimiento!

— Serás Derek Shepherd, solo te falta lo guapo. — Bromeó Yoongi, Jin lo miró con superioridad.

— Soy aún más guapo que él. — Empujó su cabello hacia atrás como toda una diva y todos volvieron a pedir un trago.

Jungkook y Jimin por fin volvieron hasta sus amigos por la necesidad de tomar algo estaban sudados y extasiados. Jimin se sentó sobre las piernas de Yoongi y Taehyung le ofreció su asiento a Jungkook.

— Dos tarros de cerveza, por favor. — Le pidió Hoseok al bartender y este comenzó a preparar el pedido. — Jungkookie, será la primera vez que tomas alcohol, no lo bebas rápido o se te subirá, te pediré unas botanas también.

Ciertamente, Jungkook llegó con la mentalidad de no beber, pero estaba tan eufórico que hasta sintió que se le antojó, además, una no es ninguna. Una al año, no hace daño.

— Está bien, hyung. Gracias. — Alzó su dedo meñique pero, con todo el ruido al rededor no sabía identificar con exactitud dónde estaba Hoseok, sólo sabía que estaba por su lado derecho. — Tae, ¿Si estoy apuntando a Hobi hyung? — El mayor sonrió, tomó la mano de Jungkook y lo movió sólo unos centímetros en la dirección correcta.

— Ahí sí. — Le susurró, Jungkook carraspeó y le agradeció.

La cerveza fue puesta justo frente a él, tanteó la superficie de la barra hasta tocar el frío vidrio del tarro, se sentía como un oasis entre todo el calor que tenía encima, tomó el recipiente con las dos manitas y le dio el primer sorbo. En realidad, no estaba nada mal.

— Jimin y yo nos iremos un rato. — Avisó Yoongi, poniéndose de pie. El menor lo veía con triunfo. — Llámenme si ocupan algo o cuando nos vayamos.

— Provecho. — Le dijo Taehyung con una sonrisa coqueta, Yoongi solo rodó los ojos y se fue de allí con Jimin de la mano.

Hoseok y Changkyun volvieron a la pista de baile, Jungkook decidió descansar un poco más y se quedó hablando con Seokjin sobre su historia con las cataratas pero no duraron mucho cuando notaron que Namjoon ya estaba algo ebrio y medio dormido sobre la barra. Decidieron que mejor seguirían los pasos de Yoongi y se fueron a la habitación, aunque claro, no con las mismas intenciones que Min, solo para que pudieran dormir y que se les bajara un poco el alcohol para poder conducir.

Y Taehyung se quedó solo con Jungkook.

— ¿Te estás divirtiendo? — Le preguntó el mayor acercándose a su oído para que lo lograra escuchar.

— Mucho, en realidad. — Respondió imitando la acción de su hyung. — La cerveza sabe muy bien, ¿Porqué no la probé antes? — Taehyung rió un poco.

— Si comienzas a sentirte mareado me avisas, ¿Si? — Jungkook asintió. — Y también me dices cuando quieras irte a casa.

— Mis padres no están, ciertamente no quiero ir y estar solo. Puedes divertirte, hyung. No viniste solo para cuidarme. — Le aclaró dando un sorbo a la cerveza.

— No. Vine para estar más tiempo contigo. — Jungkook no esperó eso, rió con timidez.

— Hyung, ¿Estás ebrio?

— No. Casi no he tomado. — Le respondió con simpleza. — Y aunque lo haya hecho, no soy PL.

— ¿PL? — Le preguntó confundido.

— Peso ligero. — Le respondió Taehyung mirando el rostro de Jungkook, limpió el sudor en su frente con el dorso de su mano. — Soy muy tolerante con el alcohol, no me emborracho con facilidad.

— Jimin tampoco. — Le contó tratando de dispersar los nervios, sentía el aliento de Taehyung chocar contra su mejilla. — Supongo que es la experiencia. — Bromeó y comenzó a reír al escuchar la expresión indignada que soltó Taehyung.

— Oh Jungkookie, ¿Ya te está afectando la cerveza? — Jungkook negó.

— En realidad, me siento muy bien. — Y no mentía, ya llevaba la mitad.

— Mmm... No lo sé... — Taehyung lo dudó un poco. — Ponte de pie, si te mareas, es que estas ebrio.

Jungkook rodó sus nublados ojitos con diversión, ¡Lo estaba volviendo a subestimar! Colocó el tarro en la barra y en menos de dos segundos, el menor estaba parado frente a Taehyung sin ni un solo tambaleo o señal de querer vomitar.

— ¿Lo vez? — Murmuró, sintió que estaba aún más cerca de Taehyung, y por algún motivo, no se volvió a sentir tímido.

— Vaya Jeon, al parecer tu tampoco serás PL. — Ahora sintió el aliento de Taehyung chocar contra su frente.

Fue cuestión de que Jungkook levantara solo un poco la cabeza para que sus ojos se toparan, Taehyung lo miró con tranquilidad, de repente, el bulluicio y la música dejaron de escucharse al rededor de ambos. Sus respiraciones entrelazadas y sus corazones se sentían tranquilos.

Alguien empujó accidentalmente a Taehyung, pegándolo aún más a Jungkook, fue cuando el menor volvió a tener raciocinio.

Taehyung peinó con delicadeza un mechon de cabello de Jungkook colocándolo tras si oreja y fijándose que sus mejillas estaban pintadas en un lindo rosa pastel, sonrió poquito y sin pensar claro, lo tomó por la cintura, apegándolo a la barra.

— H-Hyung... — Le habló Jungkook en un susurro que por suerte, logró escuchar. — Si lo siento tan cerca... Puedo cometer un error... — Taehyung ladeó la cabeza, volviendo a peinar hacia atrás el cabello del menor.

— ¿Ah, si? — Preguntó en el mismo tono. — ¿Quieres cometerlo o quieres quedarte con las ganas? — Rió un poco al ver la manzana de adán del menor subir y bajar, sus ojitos parecían temblar de nervios. — Jungkookie es un niño bueno que no comete error alguno, así que... Solo dime y el que cometa ese error, seré yo.

Jungkook no iba a negarlo, estaba tentado y quería hacerlo. No sabía si el alcohol en su sistema le estaba ayudando pero de un momento a otro, se vio asintiendo con seguridad.

— Hazlo, Taehyung.

No iban a esperar más, Taehyung afianzó el agarre en la cintura y Jungkook enrredó los brazos en el cuello del más alto.

Taehyung se movió solo unos centímetros hasta rozar levemente sus labios, enviando miles de descargas por todo su cuerpo, repitiendo el movimiento un par de veces más hasta que junto sus labios por completo, un pequeño beso de a penas un segundo. Jungkook no pudo evitar sonreír enormemente contagiando a Taehyung y solo volvió a besarlo.

Esta vez, comenzó a mover sus labios contra los fríos de Jungkook, quien trató de llevar su ritmo, logrando acostumbrarse rápidamente. Taehyung besó con afán el labio superior del menor, sintiendo la mano contraria enredarse en su cabello donde dejaron un pequeño estirón, sus manos bajaron a la cadera de Jungkook para devolver el gesto con gentileza.

Ambos ladearon la cabeza al lado contrario para profundizar el beso, Jungkook soltó un suspiro en medio de la acción y Taehyung aprovechó ese pequeño segundo para introducirse en la boca del menor sin ningún permiso ni aviso, Jungkook soltó un casi inaudible jadeo cuando la lengua de Taehyung lo exploró por completo.

Hasta que sus cuerpos suplicaron por oxígeno se separaron, Taehyung mirando encandilado al menor y Jungkook sintiéndose casi mareado.

Fue una buena noche, se había divertido y recibió su primer beso con el chico de sus sueños.