UNO
Habían pasado 5 años desde aquel momento. Taehyung bloqueó de inmediato a Jungkook después de que este intentara ponerse en contacto.
Por lo que los rumores contaron, Jeon Jungkook supuestamente estaba con Taehyung porque era un omega que cualquiera querría, pero Kim sabía que eso no era cierto, que el pelinegro en algún momento de su relación lo amó al igual que él lo hacía. Pero al final, nunca podría sacar esos rumores de las bocas de la gente.
El omega de pelo rubio decidió no hacer caso a esos rumores y dejarlos de lado, iniciando una nueva vida. Cuando decidió mudarse junto a Jungkook, dejó el trabajo, dedicándose a tiempo completo de su casa. Era un método muy antiguo, según todos, pero a Taehyung le gustaba ser servicial con su (según él en ese entonces) futuro esposo y a demás de que tenía mucho tiempo libre en el que podría hacer otras cosas. Sin embargo, las cosas no fueron bien y debía buscarse un trabajo.
Después de varios meses, optó por dedicarse a algo a lo que todo el mundo llamaría prostitución, no obstante a Kim no le gustaba llamarlo así. Su trabajo consistía en hacer pequeños espectáculos en los que bailaba con escasa ropa en pole dance delante de muchos alfas que le daban dinero por ello. A demás de que a un coste muy elevado, podía llegar a hacerlo de manera privada e incluso mantener relaciones sexuales con estos. Eso sí, ganaba mucho dinero con ello, podía llegar a ganar 50 mil dólares en una noche y ese dinero efectivamente compensaba con lo que tenía que escuchar por parte de la gente que decidía opinar de su vida.
Después de casi 5 años dedicándose a ello, estaba seguro de que con el dinero que tenía ahorrado podría dejarlo y poder vivir sin ningún problema. Sin embargo, Taehyung era ambicioso y no le desagradaba dedicarse a lo que hacía, ya que, siendo un poco presumido por su parte; amaba sentirse deseado por aquellos alfas que lo miraban bailar sensualmente, intentando seducirlos y desde luego que lo conseguía, consiguiendo que incluso alguno lo contratara en una sesión privada, pagando miles de dólares por él.
El local en el que trabajaba, junto a otros omegas, era uno en el que tenías bastante libertad para poder escoger qué tipo de público querías tener y era algo que el rubio agradecía, ya que jamás le tocaría tratar con un señor mayor de 40 años.
Cuando lo dejó con Jungkook tenía tan solo 22 años, después de una relación de 4 años. Y en aquel momento ya tenía 27, siendo un chico bastante maduro para su edad y haciendo lo que él quería con su vida.
— El otro día me encontré con Jungkook. — Le dijo su amigo Jin, mientras tomaba un sorbo de su café.
— ¿Ah sí? ¿Hablasteis? — Preguntó Yoongi, quien estaba también.
— Un poco, sí... Y me preguntó por ti, Taehyung. — Jin lo miró.
— ¿Le dijiste algo?
— No, solo le dije que estabas bien, pero nada más, sé que no quieres que sepa nada de ti. Iba con su grupo de amigos, así que no hablamos mucho. Solo me contó que ya no vive aquí desde hace 4 años y que estaba de viaje con sus amigos por su cumpleaños, ya que hacía mucho que no venía.
— Es cierto... — Murmuró Taehyung.
Estaban a 31 de agosto, un día antes del cumpleaños de su exnovio. Cuando estuvieron juntos lo pasaban al lado del otro, celebrando de diferentes maneras.
Jungkook y Kim no estuvieron más de 5 años juntos, así que no hubo ninguna marca en el cuello del omega, afortunadamente. Pero recordaba perfectamente cuando el alfa le decía que lo quería o cuando lo miraba con aquellos ojos llenos de amor, algo que desapareció poco a poco. No estaba seguro de qué pudo suceder, quizás había encontrado a otra persona y le ponía los cuernos, pero era algo que descartaba por completo.
Terminó porque debía hacerlo y así fue.
— Bueno, no hay que darle importancia. — Contestó Yoongi. — Han pasado muchos años y ahora Tae está feliz.
— Sí... — Se levantó. — Bueno, chicos, debería irme a casa... — Suspiró mientras recogía sus cosas.
— Tae, ¿estás bien? No debería haber contado eso. — Dijo Jin mientras también se levantaba a recoger sus cosas.
— No, no te preocupes, ha pasado mucho tiempo, he superado a Jungkook.
Vio de reojo como sus dos amigos se miraban entre suspiros. Sabían que era mentira, que muchas veces decía haberlo superado, pero aún le costaba. Jeon Jungkook había sido su primer y único amor, aquel de la adolescencia que tanto duele.
Ellos fueron una pareja muy bonita, sus amigos y familiares los veían muy enamorados. Y absolutamente nadie entendió por qué se separaron.
...
— Te quiero. — Susurró en su oído un Jungkook de 20 años.
El rubio de 18 años lo miró con una sonrisa dibujada en sus labios antes de besarlo.
— Te quiero tanto.
Podía ver el mundo entero reflejado en los ojos de su novio pelinegro cuando este lo miraba. Aquella mirada era una que absolutamente nadie había visto en Jeon, solo él y lo hacía sentir especial.
La pareja se conoció cuando tenían 15 y 17 años, en el instituto en el que ambos estudiaban. Jungkook, como un estudiante excelente, casi graduado de preparatoria con una matrícula de honor, fue a hacerle una charla a los chicos que estaban a punto de entrar a preparatoria, entre ellos Taehyung.
El pelinegro quedó flechado de inmediato por Taehyung, aquel adolescente tímido que estaba en una esquina de la clase, que levantó ligeramente la mano para hacerle una pregunta y el único que se atrevió a hacer preguntas primero.
Jeon jamás olvidaría como tuvo el coraje de acercarse a Kim después de la clase y decirle "Hola, soy Jungkook, encantado" y recibir una respuesta que le sacó una sonrisa "Sé cómo te llamas, lo acabas de decir en la clase". En ese instante supo que quería estar junto a Kim Taehyung, con aquel chico que le quedaba tan bien el uniforme de la secundaria, aquel rubio despeinado con los libros en sus brazos.
No mucho después, el pelinegro se graduó e inició en la universidad. Aunque para ese entonces hablaba mucho más con el chico que aún era un cachorro omega, ya que no había tenido su primer celo, a diferencia del alfa.
El menor manifestó su primer celo un año después, a los 17, así que en ese momento pudo sentirse atraído hacia el aroma de Jungkook porque ya empezaba a percibir aromas, a demás de que su atracción sexual también era más alta que antes. Simplemente, quedó flechado por aquel alfa alto y pelinegro.
No mucho después comenzaron una relación, aquella que duraría 4 años, unos llenos de amor, excepto algunos meses antes de terminar. Una relación que llevaría a ambos a perder sus virginidades y a demás de pasar por primera vez el celo de otra persona con el otro. A demás de irse a vivir juntos y provocar que Taehyung no siguiera estudiando y a penas trabajando, ya que Jungkook era un graduado universitario que ganaba bastante dinero.
Ambos pensaban que acabarían juntos, que eran el uno para el otro, que establecerían un lazo y contraerían matrimonio. Eso fue así hasta aquellas dolorosas palabras fueron pronunciadas por Jungkook: "— Porque no quiero estar contigo, no siento nada por ti, ya no te quiero."
...
— De verdad, no os preocupéis por mí, a demás, de que mi jefe me llamó esta mañana para ver si podría dar un espectáculo esta noche y una sesión privada porque a mi compañero le ha surgido una cosa.
— ¿Estás seguro? — Preguntaron sus dos amigos a la vez.
— En serio. — Los abrazó antes de despedirse.
Después de marcharse de la cafetería fue en dirección al lugar en el que trabajaba. Fue al autobús que lo dejaría en 40 minutos y se sentó al fondo del vehículo. Pensando mientras escuchaba música y miraba el paisaje de las afueras de Seúl.
¿Por qué piensas tanto en Jungkook, idiota? Hace años de eso. Pensó mientras se daba golpes mentales.
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