DOS
— Quizás deberíamos dejar de vernos. — Pronunció el pelinegro susurrando, entre besos.
Taehyung estaba sentado sobre el regazo de Jungkook, ambos estaban en el vestuario de la universidad, esperando que diese la hora para que vinieran el resto de integrantes del equipo.
— ¿Qué dices? — Preguntó Taehyung jadeante, en susurros.
— Si alguien se llega a enterar de lo nuestro tendríamos problemas. —
— Da igual, que todos se enteren. —
— Estás demasiado excitado, no sabes de lo que hablas.
— No dejaría que nadie nos separe. — Dijo mientras desabrochaba el cinturón que llevaba Jeon.
— Detente... Dentro de poco llegará el resto.
— Por favor...
— No insistas...
— Por favor, acéptame, hazme el amor. ¿Me quieres, cierto?
— Demasiado.
— Entonces hazlo...
— De acuerdo, solo por esta vez.
Se besaron mientras Taehyung acababa de desabrochar el pantalón. Separaron sus bocas al sentir que les faltaba la respiración. El mayor trataba de buscar la mirada del castaño, pero este solo estaba ocupado sacándole la ropa.
— Mírame. — Ordenó y el contrario obedeció rápidamente.
Kim lo miró con las pupilas dilatadas y los labios entre abiertos, brillosos por la saliva que acababan de compartir entre besos.
Tan bonito... Pensó mientras rodeaba la cintura del contrario.
En ese instante sintieron unas voces acercarse y un ruido de llaves. Se separaron rápidamente y cada uno se sentó a una punta del vestuario, fingiendo estar con su teléfono. Sus compañeros entraron y saludaron.
— No sé cómo no os habéis matado. — Dijo Hoseok entre risas. — Parecíais tan tranquilos.
— Hoy no estoy de humor... — Musitó Jungkook mientras se cambiaba. — Cuanto menos me moleste o dirija la palabra mejor.
Miró a Taehyung disimuladamente, quien hablaba con Jimin.
— Por fin has aprendido, ya era hora. — Jin le dio unos golpecitos en el hombro. — Tú tampoco lo molestes y todos contentos.
Asintió y salió ya cambiado.
El entreno empezó con normalidad, y como el entrenador solía hacer, los separó en dos equipos, claramente separando a Jungkook y Taehyung, quienes se peleaban todo el rato. Lo que no sabía nadie es que llevaban un mes viéndose fuera de horario de clases y entrenamientos. Momentos en los que tenían citas y pasaban noches de sexo, aunque no eran nada serio, solo decían que se querían y era muy probable que pronto empezaran una relación.
Fingían llevarse mal durante los entrenamientos y echarse pequeñas pullas, sin embargo, ambos sabían que nada de lo dicho era cierto y que era muy probable que ambos acabarían esas mismas noches en la cama del otro, follando o dándose mimos.
Jungkook se había vuelto muy cariñoso y algo más abierto con Taehyung, mostrando un poco más allá de su personalidad fría, mostrando aquel lado cariñoso y quizás algo ruidoso.
Y Kim había hecho lo contrario, mostraba un lado un poco más tímido e íntimo, en el que se sonrojaba ante las palabras de cariño que le decía Jeon.
Jugaban un pequeño partido y al estar con la pelota entre los pies, varios del equipo contrario trataban de sacarle la pelota, entre ellos Taehyung, y consiguieron hacerle caer de tantos pies que había en sus piernas.
— ¡Falta! — Gritó Yoongi a lo lejos.
El entrenador pitó para que hicieran penalti, algo que Jungkook agradeció, ya que los ganaban por un punto.
El portero del equipo de Taehyung era Jimin.
— Venga, ¡chútala! — Gritó Park.
Los chicos del equipo cuando jugaban les gustaba provocar al resto, algo que tanto Jeon como el entrenador odiaban.
— Cállate, Jimin. — Le dijo desde su sitio.
— ¡Venga! — Gritó Taehyung. — ¡Eres muy lento!
Lo miró, fulminando literalmente y chutó, para después ir donde él. Vio al castaño reír y se mordió el labio inferior para no sonreír.
Como siempre, empezó una lucha entre esos dos que ahora ya no era real, sino que la fingían tener.
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— Pronto llegarán los exámenes... — Se quejó Hoseok. — Odio no tener tiempo para nada.
Todos caminaban por el pasillo que había entre las mesas del comedor de la universidad. Solían sentarse por grupos o por equipos según el deporte que jugaban, así que ellos eran conocidos por ir siempre juntos.
Charlaban con tranquilidad, cada uno metido en una conversación diferente, sin embargo, aquel día, Taehyung y Jungkook charlaron junto a Namjoon y Yoongi, a los cuales les sorprendió mucho que pudieran hablar con tranquilidad, algo que jamás habían hecho. Y desde luego que no perdieron la oportunidad de comentarlo con el resto de chicos.
— El otro día en los vestuarios también los vi raros... — Dijo Jin. — No sé qué les pasa.
— Quizás han hecho las paces. — Opinó Namjoon. — Son personas maduras y seguramente han decidido arreglar sus malentendidos.
— O quizás han follado. — Añadió Hoseok haciendo reír a todos.
— No lo descarto, pero no parece eso. — Park habló por primera vez. — Solo sé que Jungkook está juntándose con alguien bastante a menudo porque nunca puede quedar, quizás esté saliendo con alguien.
— Taehyung tampoco puede quedar mucho, dice estar ocupado. — Yoongi explicó. — Hace un tiempo solíamos ir a tomar algo casi diario, pero ahora de repente está ocupado siempre.
— ¡Todo encaja! ¿Lo veis? — Hoseok se emocionó. — ¡Seguro están juntos!
— No hay manera de comprobarlo. — Pronunció Park.
— Claro que sí. — Hoseok insistió.
— ¿Cómo?
— Siguiéndolos, por supuesto. — Compartió.
— No vamos a hacer eso.
— ¿Queréis saber si están juntos o no? Si no, no hay manera de saberlo.
Todos suspiraron, no querían hacer eso, pero la curiosidad mató al gato y acabaron aceptando. Decidieron ejecutar el plan para el día siguiente después del entrenamiento. Lo que harían es salir antes que ellos dos del vestuario y esconderse en algún sitio para poder seguirlos.
Así fue como lo hicieron, los cinco chicos esperaban escondidos tras unas gradas. Vieron a Taehyung salir, seguido de Jungkook. Iban al lado del otro, charlando.
— ¡Están hablando!
— Eso no significa nada, tonto.
Los siguieron durante el camino a la residencia, estando a varios metros de ellos. De golpe, el pelinegro y castaño se pararon, haciendo que el que iba delante de los cinco "espías" parase y todos chocaran.
— ¡Ey no pares tan de golpe!
— Shhh.
Observaron como los dos chicos se miraban, seguidamente Jungkook miró hacia los lados, comprobando que no hubiera nadie y seguidamente besó a Taehyung. De inmediato, Jimin tapó la boca de Hoseok para que no gritara.
Todos estaban sorprendidos por la escena, aunque en cierta parte se lo olían. Aun así, se alegraban por ellos a pesar de que no lo contaran.
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Jin llamó a la puerta de la habitación de Jungkook. Hacía días que los chicos sabían de la especie de relación que tenían Taehyung y Jeon, así que Jin, como la especie de "hermano mayor" que era para el pelinegro, fue a preguntarle respecto al tema.
— Hola Jin. ¿Qué haces aquí?
— Venía a ver a mi niño favorito.
— No hacía falta.
Se sentaron en la cama de la habitación.
— Quería preguntarte y comentarte algo.
— Claro, dime.
Seokjin se acomodó en la cama y miró al menor.
— Verás, el otro día estaba volviendo del entrenamiento... — El pelinegro asintió. — Y vi algo que no debería haber visto y quería decírtelo.
— ¿El qué?
— Tú y Taehyung.
— ¿Qué? — Se alteró. — ¿Se lo has contado a alguien?
— No, tranquilo... Pero solo quería preguntarte por eso... ¿Desde hace cuanto que estáis...?
— No estamos juntos... Simplemente, estamos en ese proceso.... Tenemos sexo y somos... algo, pero no lo llamaría relación. Es bastante reciente, un mes y poco.
— ¿Y por qué no me lo has contado?
— Ya sabéis que solemos pelear y siempre hemos dicho que nos caemos mal, así que sería extraño que de un día para el otro os dijéramos que somos algo.
— Todos sabíamos o que acabaríais follando o juntos.
— ¿Qué? — Rio.
— Era muy obvio...
Jungkook suspiró y se tiró sobre la cama.
— No queríamos decirlo.
— Pues... Lo sabe todo el equipo.
— ¡¿Qué?! — Se escuchó a Taehyung saliendo del baño, dejando a Jin confundido.
— Tae... — Jungkook cerró los ojos con fuerza.
— Lo siento Jin, prometo que solo he escuchado eso. Bueno... Un poco más.
El mayor de los dos Kim rio y se levantó.
— No pasa nada, pero ya lo sabéis... Pero deberíais decídselo al resto, creedme que les alegraría mucho saberlo de vuestras bocas.
Taehyung asintió y se despidieron del mayor.
— ¿Crees que deberíamos? — Preguntó el castaño.
— No lo sé.
— Pero ya lo saben.
— Pero me molestarán con eso.
El menor suspiró y miró a Jungkook, se acercó y le dio un beso en la mejilla.
— Quizás es lo mejor. — Jeon asintió. — Y respecto a lo de que no somos nada...
— Es vierto, no hay nada establecido, ninguna etiqueta, no somos pareja.
— ¿Y si establecemos ya eso?
El pelinegro frunció el ceño.
— ¿Lo dices en serio? A penas nos conocemos.
— ¿Por qué no?
— Pero... Cuando te vay-
— No pienses en eso.
La conversación de que Taehyung debería marchar a Daegu nuevamente ya había ocurrido entre los dos, decidiendo no iniciar nada debido a esa razón. Pero ahora, Kim parecía estar seguro de querer empezar una relación y por mucho que Jungkook quisiera, el pensamiento de tener una relación a distancia cuando el castaño se fuera no le gustaba.
— Vale... Entonces seamos... novios.
— Suena bien decirlo. — Taehyung sonrió con su bella sonrisa a los ojos de Jeon.
— La verdad es que sí. — El mayor lo miró lleno de amor.
El castaño se subió sobre Jungkook para poder abrazarlo y así marcar el inicio de su relación.
FIN
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