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¿Quiénes son los Parcas?

Los parcas son una banda delictiva dedicada al narcotráfico, sicariato junto con otros delitos. La temida banda coreana que ha estado sembrando caos durante mas de dos décadas fue creada y liderada por Kim Jiwa, un hombre de nacionalidad china que se estableció en Corea cuando tenía diecinueve años de edad y desde entonces se dedicó a la venta de drogas, creando poco a poco lo que sería la banda de los Parcas. A lo largo de los años se les ha relacionado con la mafia continental, una menos escandalosa pero que todos conocen como los Anclas, por lo que se tiene asomo de que ambas están conectadas, lo más cercano a una alianza.
Kim Jiwa fue hallado muerto en una de sus propiedades en las afueras de Seúl el cinco de agosto del dos mill catorce, justo cuando se ejecutaba un operativo para encontrarlo y darle un ultimátum.

Ha pesar de que el mundo sabía la identidad del cabecilla de la banda, los Parcas no han parado con sus delitos, sin embargo muchos de dichos delitos no son visibles ni evidentes para las autoridades, aparentemente. La temible banda sigue causando estragos día tras día, sin hacerse notar, son como un cáncer incurable que poco a poco va creciendo y dañando nuestro país, nuestra sociedad.

Actualmente se desconoce al nuevo líder de dicha banda dado a que desde que Kim Jiwa murió los Parcas dejaron de hacer ruido para dedicarse a sus fechorías desde las sombras.

Como reportero y ciudadano coreano pido en nombre de todas aquellas familias que han perdido seres queridos a mano de los Parcas que se haga justicia por ellos, por las estafas y daños inminentes que provocan a nuestra sociedad.

Queremos seguridad, queremos paz.

Artículo escrito por: Kim James, reportero del diario “Tomorrow is today”

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--Carajo.--…--Deja caer su cabeza encima del espaldar el sofá.--

--¿Qué pasa hijo?--…--Jeno se acerca a su hijo mientras se seca las manos con un trapo de cocina.--…--No es típico de ti decir groserías.--

Jimin niega y deja su laptop a un lado y se frota los ojos dado a que le picaban por todo el tiempo que estuvo frente a la pantalla brillante.

--Estoy harto de no encontrar una buena información sobre los Parcas.--

--Ah, esos malditos asesinos.--…--Expresó con mucha molestia aparente.--

--Mmm ahora el que maldice es otro.--…--Da una sonrisa débil que no llega hasta sus ojos.--

--¿Y como para qué estarías buscando información sobre ellos?--

Jimin se remueve en su puesto pasando saliva. No puede decirle a su padre que el caso de Jungwon está relacionado con esa gente, pues por su reacción, Jimin no quiere hacer preocupar a su enfermo padre.

--Hay un colega que tiene un caso en relación con los Parcas y yo me comprometí a ayudarlo.--…--Miente.--

Su padre se lo queda viendo no muy seguro.

--Pensé que solo te dedicarías al caso de Jungwon.--

--Solo estaba tratando de recolectar un poco de información pero no he tenido mucho éxito con eso.--…--Todo lo que conseguía eran unas cuantas “biografías” de la banda y el último artículo fue diferente en cuestión, pero no eran más que los escritos de un hombre que buscaba llamar la atención de las autoridades para que hicieran algo, atrapar a los malos y darle fin a la banda, pero fuera de ello, no había información valiosa que a Jimin le pudiera servir.--

Tenía bastante rato buscando en cada página y encontrando casi lo mismo. No había algo relevante que lo ayudara con el caso de su amigo. Todo era demasiado plural amplio, tan grande que a Jimin le mortificaba estar buscando una aguja en un pajar.

--Recuerdo que cuando esos delincuentes ganaban popularidad tú tenías siete años así que no me sorprendería que no recordaras sobre las noticias que salían en la televisión y los periódicos, pero fue una época bastante terrible. La cantidad de asesinatos era impresionante y nunca antes vista en Seúl. Muchos jóvenes se vieron seducidos por la buena paga de esos tipos y ya fuera por necesidad o ambición entraron en la banda y fue creciendo cada vez más y más hasta que se extendieron por otras ciudades y Estados. Todo era muy peligroso. Muy aparte de ser distribuidores de droga, asesinos y psicópatas eran estafadores, unos aprovechados que siempre iban detrás de los más necesitados a llenarlos de deudas.--

--Yo… no recuerdo nada de eso.--…--Estaba muy pequeño. Eso sumado a que por lo que su padre le decía él no fue el tipo de niño que amaba la televisión en exceso.--

--Una conocida de tu madre se quedó en la calle ya que la suya se había incendiado, entonces uno de los integrantes de esa banda le dio una casa, no era lujosa ni estaba amueblada, pero era una casa a final de cuentas para ella y su hijo. Tuvo que pagarle alquiler a esos tipos, cuidar de todas las armas y drogas que ellos dejaban allí y se volvió cómplice sin quererlo, pero no podía hacer nada más en aquel momento. Alguien informó que en esa casa guardaban cosas ilegales y al descubrir que era cierto ella fue encarcelada y su hijo fue a parar a un orfanato. Se sabe que nada es gratis en esta vida, pero ellos se hacían pasar por tipos empáticos y amables pero no era así. Uno no puede ser débil ante sus ofrecimientos y el caso de la amiga de tu madre fue uno de los tantos que ocurrieron en esa terrible época dónde la muerte y droga eran pan de cada día.--

--¿Y… ha cambiado algo?--

--Todo está más tranquilo ahora después de que el líder de la banda haya sido asesinado, pero esos hijos de puta siguen por ahí aprovechándose de la gente necesitada y matando, dañando. Aunque ahora podemos salir a la calle con menos miedo pero de lo que estoy seguro es que siguen siendo unos desalmados en cantidad enorme y no creo que sus fechorías acaben. Solo debemos procurar que si nos topamos con ellos, no caer en sus propuestas, ni en su sucio mundo ¡Mierda, la lasaña!--…--Se va corriendo hacia la cocina ya que se le había olvidado que tenía una deliciosa lasaña en el horno. Ojalá y no se haya quemado.--

Jimin se queda pensativo ante todas las cosas que le dijo su padre. Sin duda supo más de los Parcas con su padre que con internet y eso era… curioso. No hay mejor información que la que te da un espectador… un testigo.

Hablando de testigo…

Jimin miró la hora en su reloj de muñeca notando que eran las seis con treinta y cinco minutos.

--Joder, esto de estar corriendo de aquí para allá no me hace bien.--…--Se le estaba haciendo costumbre llegar con las justas a los lugares y citas acordadas. En su defensa solo puede decir que está muy estresado por los últimos acontecimientos.--…--Cierto, cierto.--…--Estaba a punto de salir de casa pero fue directo a la cocina encontrando a su padre picando la lasaña.--…--Me tengo que ir ahora papá pero prometo que apenas termine vendré para cenar juntos ¿Está bien?--

Su padre solo asintió para proceder a tapar la lasaña para que no se enfríe rápidamente.
Jimin salió de casa de su padre yendo hacia su auto para ir hacia la casa de la señora Woo, la vecina de Jungwon. 

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Jungkook miraba a Somi desde una esquina de la habitación mientras ella se vestía sin siquiera mirarlo. Parecía muy entretenida en colocarse adecuadamente el vestido, abrochar bien sus tacones, maquillarse bien que… no tenía que enfocarse en la presencia de su esposo. Jungkook tampoco sabía qué era exactamente lo que esperaba de ella, pero sabe que no es un beso ni un abrazo. Él la estaba acusando con la mirada, casi pidiendo telepáticamente que confiese su infidelidad.

--¿Qué tanto me miras, Jungkook?--…--Pregunta mientras se pinta los labios.--…--Pareces una estatua allí parado ¿Tienes que decirme algo acaso?--

Pero era lógico que ella no diría nada.

Jungkook no la confrontaría tampoco.

--Solo me preguntaba adónde se supone que va mi esposa a esta hora después de salir del trabajo.--

Somi termina de pintar sus labios y tira un beso a su espejo de mano.

--He quedado con unas amigas hoy. No me esperen para cenar que no voy a llegar.--…--Se levanta y agarra su cartera.--…--Iré a despedirme de los niños. Mañana yo los llevaré a la escuela.--…--Y con ello sale de la habitación.--

El esposo se queda viendo un punto fijo del suelo y prácticamente puede escuchar cuando la puerta de la casa se cierra dejando en claro que su esposa ha salido y debe estar yendo al estacionamiento para buscar su auto e irse.

Lo que estaba a punto de hacer era una pésima idea pero una vez que Jungkook toma una decisión no puede desistir de ella ya sea por su buena voluntad o su orgullo, así que se dispuso a correr hacia la salida de su hermosa y gran casa y apenas vio el auto de su esposa salir, no perdió tiempo en ir al suyo propio y ponerlo en marcha. La estaba siguiendo con cuidado de no ser descubierto. ¿Para qué estaba siguiendo a Somi exactamente? Es claro que lo engaña ¿Qué quiere conseguir?

Y como el que busca encuentra…

Jungkook estacionó su auto no muy lejos de donde su esposa había ingresado el suyo; justo en un motel.
Jungkook respiro hondo mirando las instalaciones del motel ¿Quién será el tipo con el que su esposa se encuentra para que la tenga viniendo a estos lugares? No ha de ser muy brillante ya que no era un lugar lujoso. Sería una pena que esté viéndose con alguien corriente, espera que al menos Somi no haya cambiado su exigencia y que no haya caído tan bajo con cualquier tipo.

Cómo sea, estaba estresado.

Tuvo una idea y así de rápido como la tuvo la puso en marcha sacando su teléfono y marcando el número de cierto abogado.

Jimin se detuvo en seco al leer el nombre del contacto que lo llamaba: “J Jeon”

--¿Y qué se supone que quiere a esta hora?--…--No era tarde, pero no se esperaba que lo llamara ahora.--…--¿Aló?--

--Buenas noches, Jimin.--

El nombrado frunció los labios ante la confianza del juez pero no dijo nada al respecto.

--Buenas noches, Jungkook.--…--Ok, eso salió bien.--

--Nos vemos en el parque olímpico a las siete.--…--Jimin alejó el teléfono de su oído y miró la hora: seis y cuarenta y nueve.--

--¿Qué? ¿Ahora? Solo faltan once minutos para que sean las siete.--…--Protesta el abogado.--

--Gracias por informarme lo que ya sé, Jimin. Nos vemos y espero de verdad que no llegue tarde. No me gustan las impuntualidades. Estaré en la entrada de la viejos columpios.--

Y colgó.

Jimin maldijo en voz baja mientras veía desde pocos metros de distancia la casa de la mujer que podría ser su mejor carta y testigo crucial para demostrar la inocencia de su mejor amigo. Sin embargo, la conversación que planeaba tener con la mujer iba a esperar porque ahora tenía que correr hasta el bendito parque para encontrarse con el impredecible y mandón juez. 
No perdió tiempo y se dirigió hasta su auto para acelerar sin mucho cuidado hasta el parque. No le llevó mucho tiempo llegar. Estaba agradecido de que al menos los semáforos hayan estado en verde el par de veces que se los topó y no tuvo que esperar… o pasarse la luz roja por la prisa.

Jimin fue hasta donde Jeon dijo que estaría y visualizó una gran camioneta negra parqueada, la única, y es lógico que dentro debe estar aquel juez.
Jimin parqueó su auto detrás del ajeno y bajó para ir a confrontar al mayor. Da dos toques en la puerta a lo que Jeon baja el vidrio.

--Es algo tarde ¿No lo crees?--…--Alza su muñeca enseñando su reloj.--

El mayor quita el seguro de la puerta.

--Sube.--...--El peli azul rueda los ojos y se sube de mala gana.--…--Recuerdo haber hecho un trato contigo, trato el cual aceptaste sin problema. ¿Debimos acaso haber hecho un documento? No creí que de verdad tuviéramos que recurrir a ello.--

--Recuerdo muy bien el trato.--…--Es solo que no esperó que fuera a llamarlo en un momento importante donde estaba a punto de encontrarse con alguien que podría hacerle ganar el caso de su amigo.--…--Y como le dije, no necesitamos ningún documento para mantener nuestra palabra.--

--¿Entonces cuál es tu molestia?--…--Seguido de esa pregunta, Jungkook cerró la boca rápidamente ¿Por qué debería estar preguntando? No le tiene que importar ni un poco las emociones de un abogado que solo está aquí para satisfacerlo a cambio de tiempo.--

--Ninguna que pueda interesarte.--…--Y Jimin tampoco respondería honestamente a algo que no viene al caso.--…--Estoy aquí, Es lo que importa ¿o no?--…--Se cruza de brazos.--…--Así que dime ¿Qué quieres que haga justo ahora con tanta prisa?--…--Jungkook se acomoda mejor en su asiento y no son necesarias las palabras para que Jimin entienda.--…--¿Acá? Estamos en un parque.--…--No lo culpen… no es amante de exhibirse, tampoco le prende ese tipo de adrenalina.--

--Si bajas bien la cabeza nadie te verá. No tienes de qué preocuparte, es bastante solo por acá por si no lo has notado.--…--Dice con demasiada simpleza. ¿Acaso hay algo que pueda descolocarlo o al menos hacer que se vea con temor?--…--No hay guarda parques por este lugar así que estoy seguro de que puedes hacerlo sin problema. Ahora.--

Park quiso quejarse pero no estaba en una buena posición para permitirse tal privilegio, por lo que simplemente se giró un poco hacia la izquierda y guio sus manos a la bragueta ajena. Iba a ser la segunda vez que se la chuparía al hombre pero la diferencia de la primera vez con esta es que se siente más molesto que nervioso. No puede creer que esté ahora en estas condiciones cuando podría estar interrogando a la vecina de su amigo. Jeon es un imbécil.

Un imbécil al que debe chuparle la polla.

Una vez que tuvo acceso al pene del hombre lo masajeo con seguridad y sin preocuparse demasiado en mirarlo, no pasó mucho para que este se endureciera bajo su tacto y apenas se erguio Jimin respiró y llenó su boca con aquel miembro sin rechistar, sin pensar demasiado en la tarea y fue entonces que ya tenía el glande suave golpeando contra su garganta.
La mano del juez apretó su nuca sin exigencia alguna y Jimin no se guardó el gemido que se escapó de su garganta en medio de la felación.

--Mmmm~ 

No se preocupó en ello y siguió en lo suyo. Lo que si puede notar es que de pronto la molestia que tenía encima se fue disipando, dejándolo menos tenso y dispuesto a la tarea de chupar, respirar, masturbar con su mano y llenar su boca para hacer trabajar su lengua.

Giró un poco su cabeza, solo un poquito por curiosidad para ver a Jeon y lo vio; sus ojos entrecerrados no se apartaban del frente, su boca semi abierta solo para respirar lo necesario lo que su nariz no llegaba a inhalar lo suficiente debido al momento intenso. Es increíble cómo solo puede verse accesible y “vivo” en estos momentos de placer, no se ve como un robot ahora ni alguien cruel, solo… solo un hombre que puede excitarse y sentir placer como cualquier otro.

Jungkook se sentía menos molesto e irritado por lo de Somi, hasta se puede decir que olvidó su descaro en todo este momento y es increíble porque solo existe él, un abogado y su buena boca haciendo un buen trabajo en su polla, prácticamente llevándose todo el malestar que tenía. No se supone que los abogados deban chupar una polla con tanta facilidad y maravilla.

Bueno, no es como que alguien aparte de Somi le haya chupado la polla y la última vez que lo hizo fue hace tanto que olvidó la buena sensación. Le gustaba, siempre le había gustado el sexo oral y ahora mismo lo aceptaba.
Cuando Jimin chupó fuerte en su glande y movió su mano rápidamente en la base. Jungkook se corrió entre suspiros mientras su mano se enterraba en la piel del cuello ajeno. Jimin gimió y no se quejó por no haber sido advertido del semen que se impactaría en su boca. Solo lo tomó sin quejas y se separó luego de una casta lamida.

--¿Algo más?--…--Pregunta con un tono muy bajito debido a lo sensible que se encuentra su garganta. Espera que para mañana no esté ronco, sería problemático.--…--¿Puedo irme ya?--

Jungkook se arreglaba los pantalones y Jimin no dejaba de mirarlo. A Jimin le resultaba muy divertida la forma en cómo Jungkook, siendo un hombre tan inexpresivo y aparentemente estricto al límite parecía derretirse cuando estaba excitado, era un humano con buen líbido y que puede respirar erráticamente, sudar y empujar sus caderas, y todo por ese momento hasta que la excitación drena con una corrida y vuelve a ser el mismo juez frío. El peliazul lo ve así y le parece irreal que de verdad pueda haber consentido todo esto ¿Enserio ha tenido la polla del juez más importante del país en su boca? Bah, de seguro es un sueño.

--Puedes irte. Seguiremos en contacto.--

Pero no es un sueño ni un espejismo.

--Adiós.--…--Abre la puerta y se baja para ir a su auto. Joder, no tenía siquiera ganas de manejar.--

Jungkook miró con disimulo por el retrovisor la figura del hombrecillo, luego del auto rodear el suyo propio y desaparecer del parque. Coloca sus manos en el volante y respira profundo.

--Ya está hecho.--…--Dice para luego encender el motor y dar marcha hacia su casa sin estrés, sin peso… solo aceptando de una vez por todas lo que estaba haciendo y dejando de lado cualquier remordimiento.--

La aceptación no llega rápidamente, no, lo hace sin que lo planes y no está en ti  manejarlo a tu antojo, pero cuando llega, una vez que la tomas y digieres no hay vuelta atrás. Has aceptado.

Y vas a continuar.

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¿Qué tal mis Soldadxs hermosxs? 👀 Espero estén bien y cuidándose <<33