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Capítulo 3

--No puedo creer que Jungwon esté detenido, nunca lo vi como un delincuente, por eso aprobé tu amistad con él pero nunca se terminan de conocer las mañas de la gente.--

--Jungwon no es un delincuente, papá.--

--Anda y dile eso a un juez.--...--Jimin suspira.--

--Para eso tomé el caso. Sacaré a Jungwon de ese problema.--...--Es lo único que puede agregar. Jungwon le contó lo que ocurrió con aquellos tipos a los que les debe dinero, quienes son de armas tomar, o caso contrario, Jungwon no estaría donde está ahora mismo esperando fecha de juicio.--...--Pero él es inocente te lo aseguro así que no seas tan rudo con el.--

--Si tu lo dices.--

Es lo último que dice antes de dirigirse a la cocina. La señora Beom, quien ha sido vecina de su padre por mas de treinta años es quien siempre le cuenta sobre lo que hace su padre (porque él se lo ha pedido y debe tenerlo vigilado de alguna forma) y al pendiente de que no cometa una estupidez ya que pues, su padre es un señor bastante terco. Eso también sumado a que está enfermo y se niega a tener una enfermera que se haga cargo de él y sus cuidados.
Jimin va a visitarlo casi todos los días pero no puede quedarse el tiempo que quisiera gracias al trabajo. Estaría mas tranquilo sabiendo que una persona capacitada y responsable cuida de su padre, pero este se niega rotundamente a dejar que un desconocido lo atienda.

--Bueno, si tu amigo está encerrado me supongo que tu le llevas comida y ropa ¿verdad?--...--Su padre vuelve al living con dos tazas de té.--

--Así es. Sabes que no tiene a nadie mas.--

--Pobre chico. Ojalá que tengas razón con respecto a que es inocente ¿qué tan difícil está su situación?--...--Se sienta a su lado.--

--Es muy complicada pero si obtengo un poco de tiempo puedo tener una buena audiencia y ganar el juicio.--

--Tú los ganas todos hijo y esta vez no será la excepción.--

--Espero que así sea, papá.--...--O caso contrario no podría mirar a Jungwon a los ojos de nuevo, sería tan doloroso tener que ir a visitarlo a una cárcel, ansiar por que se cumpla la condena para poder disfrutar juntos de nuevo como los mejores amigos que son en libertad.--...--¿Ya te tomaste tus medicamentos? no puedes pasarte de la hora.--

--¿Y cómo quieres que la tome si estoy aquí hablando contigo? Ash, hasta las había olvidado. Voy por ellas.--

Deja la taza en la mesita de vidrio y se va escalera arriba en busca de sus pastillas.

Termina su té y observa en silencio el living el cual conoce demasiado bien, como cualquier otro lugar de la casa, pues vivió aquí desde que nació, era la casa de sus padres con muchos recuerdos de esquina a esquina que los tiene para el mismo como el mayor de los tesoros.
Habían pasado tres años desde la última vez que pintaron las paredes, por lo que el color naranja y verde de las mismas ya estaba un poco desgastado pero su padre se niega en remodelar la casa; dice que si así le gustaban a Nayeon permanecerían así hasta que el muriera.

Nada se había cambiado de lugar desde hace tres años, tiempo que su madre llevaba muerta.

--Ya, ya aquí están. Las tomaré con el té.-- Su padre vuelve con el botecito de pastillas y toma una capsula.--

Pero no era necesario cambiar de lugar unas pertenencias, pintar paredes, botar revistas viejas… la vida de los Park dio un giro de trecientos cincuenta grados cuando Park Nayeon murió, llevándose la alegría del hogar, una parte del corazón de Jimin partió con ella y su padre; Park Jeno se echó al descuido total prefiriendo la muerte.

Lo peor de todo es que parece que su pedido ha sido tan bien escuchado por las fuerzas del universo o Dios que, el cáncer terminal que padece puede acabar con su vida en cualquier momento.

Y Jimin se entristece cada vez que lo recuerda.

--Bien, te vigilaré para que las tomes.--

--Ah muy bonito todo ahora eh, el hijo cuidando al padre. Hijo, soy bastante capaz de tomarme unas pastillas por mi mismo. No soy un inútil.--

--Inútil no.--...--Le ofrece la taza de té.--...--Pero si un señor muy olvidadizo. La vez pasada conté las pastillas y había mas de la cuenta.--

--Se me pasa la hora eso es todo.--...--Se toma la pastilla y Jimin lo mira con ternura.--

--¿Te gustaría que te compre otro bannie? No sé, hay unos con estampados que te pueden gustar, tú solo pídeme alguno que yo lo buscaré para ti.--...--Gracias a las quimioterapias su padre ha perdido todo el cabello, pero le satisface que a este le guste usar bannies de colores.--

--No tengo uno rojo, tráeme uno rojo, sin estampado está bien.--

--Bien, pasado mañana te traigo el bannie rojo y así podrás lucirlo en la próxima salida que tengamos.–...--Y con salida se refiere a las próximas sesiones de quimio.--

--A Samuel le gustan como se le ven pero prefiere ponerse gorras. Igual no creo que se le vean tan bien como a mi.--

--Claro que no. A nadie se le ven mejor que a ti.--...--Le da un beso en la mejilla a su terco padre de ojeras purpuras y mirada cansada por el dolor de una ausencia impensable que abordó a la familia Park para no dejarla jamás.--

.

Angie Leomont era una buena asistente, al menos eso era lo que decía su jefe cada vez que uno de sus colegas insinuaba que ella era molesta y que debería ser despedida por hablar mucho, pero es que a ella le gustaba dar detalles de lo que creía importante. Es una buena asistente, y lo cree porque el hombre mas exigente que conoce lo dice y le dio la oportunidad de trabajar a su lado cuando ella no tenia la experiencia que una asistente debería tener pero la ha ganado con el tiempo. El señor Jungkook le ha tenido mucha paciencia y ella ha dado lo mejor para aprender un poco más cada día.

Siempre sabe qué hacer y cómo manejar la tareas de su jefe… pero es justo en estos momentos donde no sabe qué hacer.

--Dígale al señor Jeon que Park Jimin está aquí y desea hablar con el.--

--¿Tiene alguna cita con el hoy?--...--Sabe que no la tiene, pues si así fuera en su agenda constara pero no.--

--No.--...--Angie quiere mantenerse firme pero le es difícil hacerlo cuando una persona tan de buen físico y voz delicada te habla. Para darle mas peculiaridad a todo esa persona tiene el cabello de color azul intenso, lentillas de contacto color gris y un poco de labial en su labios abultados. No puede ser cierto, Angie había deseado siempre tener unos labios con buen grosor, llamativos y ahora un abogado se presentaba a sonreírle con esa boca que ella deseaba tener. La vida enserio es tan injusta.--...--Pero de verdad necesito hablar con él ¿eres su secretaria?--

--Asistente.--

--Bueno ¿podrías por favor avisarle que estoy aquí afuera? él podría aceptar verme. Tengo un caso que va a dirigir y me gustaría preguntarle ciertas cosas.--

Angie sabía que no era necesario verse para preguntar lo que sea que debe… para eso existen los correos y los fiscales que sirven como intermediarios para las informaciones de tales juicios. Pero si el abogado quiere ver a su jefe ella no podía pedirle que se fuera aún si este no tenia una cita pautada para hoy, el señor Jeon es quien sabrá que hacer.

--Deme un minuto por favor.--...--Agarra su teléfono de mesa y le marca a su jefe que apenas da dos repiques atiende.--

--¿Qué ocurre?--

--Señor Jeon hay alguien aquí afuera que pide verlo.--

--Hoy no voy a recibir a nadie, estoy muy ocupado.--

--Eh si señor, pero verá, quien lo busca es el abogado Park Jimin.--...--Hubo un silencio en la línea por lo que la asistente decide hablar de nuevo.--...--Dice que le gustaría hablar con usted sobre una audiencia.--

Jimin, quien trataba de mantenerse lo mas fresco posible movía su pierna gracias a los nervios. Nunca imaginó estar en esta posición: yendo ante la presencia de un juez antes de una audiencia siquiera. Es que si alguien lo supiera comenzarían los rumores y…

--El señor Jeon lo recibirá en su oficina. Sígame por favor.--...--La pelinegra lo guía hacia donde está la oficina de su jefe y Jimin mordisqueaba su labio inferior.-- Me retiro.--...--Y con ello la mujer se retira dejando a Jimin frente aquella puerta de madera.--

Tomó una respiración profunda y le dio dos golpecitos a la puerta.

--Adelante.--

Las manos del abogado sudaban frío. No tenía que estar nervioso con lo que sería una simple conversación ¿verdad? solo ha venido hasta aquí para hablar con el juez, pedirle que cambie la fecha del juicio ¿eso era posible? definitivamente no, era prohibido e iba en contra de la autoridad del juez, sin embargo, situaciones desesperadas requieren medidas desesperadas y él estaba muy desesperado hasta el punto de no poder dormir bien por estar en busca de una solución para Jungwon, sumado a que no puede jugar al detective y al abogado al mismo tiempo en solo un lapso de una semana… Es tan cansado y frustrante.

Es esa misma desesperación y frustración la que lo ha traído a esta oficina, ante el juez mas estricto y respetado de la nación pese a conocer los riesgos y lo incorrecto que es.

Dirige su mano a la perilla de la puerta para girarla y entrar en la oficina fría y con olor a limpio.

--Buenas tardes señor Jeon.--

--Buenas tardes abogado Park.--...--El peli azul buscó la mirada del hombre ya que por ningún motivo demostraría lo nervioso que estaba y fue entonces que se dio cuenta que el hombre era mas moreno en persona que en televisión, su cabello era muy azabache, pero algo que si era lo mismo ante las cámaras y en persona era que su mirada no mostraba emoción, era como si te estudiara con desdén.--...--Me ha sorprendió mucho que haya venido hasta aquí para verme. Tome asiento por favor y cuénteme el motivo de su visita sin aviso anticipado.--

Jimin corre un poco la silla frente al escritorio y se sienta.

--Apenas ayer le enviaron una solicitud para dirigir un caso, el caso del señor Lee Jungwon y como se habrá dado cuenta yo soy el abogado del señor Lee.--

--Si, me quedó claro cuando leí su nombre en la solicitud.--...--Jungkook era consiente de que a veces era muy estereotipado pero procuraba no serlo ya que eso es cosa del pasado, el mundo va cambiando y las costumbres de cada persona igual, sin embargo se pregunta cómo un abogado tan famosillo como el que está sentado frente a él justo ahora lleva el cabello teñido de un color para nada discreto. Debería ser prohibido, o a menos eso era lo que le decían cuando aún era un universitario pero he aquí a un abogado menor encargado de muchos casos, ganando todos con el cabello de color azul y labios levemente pintados.--...--Debo suponer que está aquí por ese caso ¿o me estoy equivocando?--

--No, no se está equivocando. He venido aquí para hacerle una petición.--...--Pasa saliva.–...--Una petición referente al caso del señor Lee.--

Con tales rumores del señor Park, Jungkook había esperado un soborno directo.

--¿Qué petición seria esa?--...--Recuesta su espalda de la silla esperando lo que el hombrecillo tenga para decirle.--

--Para que cambie la fecha de la audiencia.--

Jeon arqueó una ceja y Jimin sentía el aire acumulado en su pecho renuente a salir.

--¿Y por qué yo haría eso? he dado una fecha y no puedo cambiarla.--

--Usted puede, sabe que si. Podría dar fecha de audiencia hasta para dentro de un año y nadie lo cuestionaría, ya la audiencia y sentencia le corresponde a usted, yo no tendría que estar explicándole esto, el juez aquí es usted no yo.--

Jeon ladeo su cabeza de tal forma que Jimin tuvo ganas de retroceder el tiempo y sujetar su lengua. No estaba en posición de dejar que su arrogancia y "seguridad" le ganara, por esta vez debe ceder y bajar la cabeza si es necesario, pues está en juego la libertad de su mejor amigo. Pero como no puede retroceder el tiempo, su mejor opción disponible era salir de ahí.

Pero no lo haría.

--Tiene razón, yo podría hacer lo que quiera con la audiencia, mi palabra es ley ¿no teme ni un poco por lo que yo pueda estar decidiendo?--

--Usted dará el veredicto una vez sean presentadas pruebas.--

--Pruebas que usted deberá presentarme ¿acaso eso no es lo que hacen los abogados? en lugar de pedir mas tiempo tendría que tener preparada su buena defensa para la audiencia. Ya no puedo cambiar la fecha, señor Park, va en contra de mi ética.--

--No estaría aquí si no fuera importante.--...--Se hace hacia adelante. Nunca pensó que tendría que rogar por algo y menos ante un juez, pero uno suele hacer lo impensable por las personas a las que ama.--...--Necesito tiempo, solo eso, no estoy pidiendo que sea mas flexible ni que se incline a mi favor… tal ves una semana mas.--

Jeon se hubiera reído, pero no se lo tenía permitido ni a él mismo hacer tal cosa.

--Usted necesita tiempo y yo necesito estar firme a mi palabra. Aún si cambio la fecha solo usted y su cliente saldrán beneficiado ¿qué ganaría yo con darle una semana más?--

El hombre tenía razón, no había forma de que hiciera caso a su petición, era absurdo pero aun así Jimin había querido intentar. Fue un estúpido, no estaba tratando con un juez más del montón, este era el mas severo de todos y si mostraba estabilidad en una audiencia fuera de ella no debería ser muy diferente.

Había estado muy metido en sus pensamientos que al volver su mirada al hombre mayor se encontró con los de él encima suyo, pero la sorpresa fue grande cuando fue consiente de que estaba enfocado en su boca.

Oh

Quizás… quizás no todo estaba perdido, se suponía que haría lo que fuera necesario para conseguir el tiempo que necesitaba para liberar a Jungwon. Entonces ha de continuar.

--Usted podría ganar algo si así lo desea. -- Jeon volvió su mirada a los orbes grises del menor.--...--Yo podría hacer cualquier cosa que usted pida, señor Jeon.--

Algo cambió en la mirada del hombre pero Jimin no sabe con exactitud si fue bueno o malo.

--¿Me está proponiendo lo que creo que me está proponiendo, abogado?--

--Podría ser.--...--Juega con el agarradero de su maletín. --

--He de suponer que no conoce muy bien mi reputación pero no soy alguien que acepta sobornos ni cae en insinuaciones como las que usted me acaba de hacer. Por su bien, señor Jimin será mejor que se vaya y arme su defensa para dentro de una semana que es que se llevará a cabo la audiencia porque no cambiaré la fecha a cambio de la propuesta inmoral que me hizo. Haré mi trabajo, usted haga el suyo también.--

Con ello desvió su mirada de su rostro y la fijó en los documentos que estaba atendiendo antes de que el abogado llegara.

Jimin se quedo con la boca abierta y sin nada para decir. Fue un imbécil, pero creyó que había una oportunidad así fuera una muy mala y grosera porque no se supone que los hombres te vean los labios solo porque si. Jimin había querido prenderse de la posibilidad de que le pareciera atractivo al juez y sacar provecho de ello, pero no resultó.

Ocurrió un completo desastre.

Ahora no solo había perdido la oportunidad de que Jeon Jungkook le diera tiempo para defender a Jungwon, sino que se sentía humillado y rechazado en todos los aspectos posibles.

Se puso de pie con sus piernas temblando y las ganas de llorar que lo invadieron, tal vez al llegar a casa pueda hacerlo libremente por un rato.

--Disculpe las molestias señor Jungkook. Que pase una buena tarde.--

Y con aquella despedida salió de ahí lo mas rápido que se lo permitió, con la cabeza en alto pero todo su interior revuelto por la preocupación ¿qué se supone que haría ahora?

Se giró una vez fuera de la corte, mirando lo grande y llena de ventanas que estaba. Tan grande como le quedó Jeon Jungkook y su convicción de alcanzar la meta.

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Uy ¿Qué vemos por acá un hombre difícil? Jsjsjs

Nos leemos la semana que viene soldadxs ❤️

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