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Capítulo 16

Oh my gosh!
Don't you know I'm a savage? 💁🏻‍♀️

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Jimin estaba en casa de Jeon Jungkook.

Si, exactamente, ya estaba ahí caminando por el patio de la casa luego de haber tocado el timbre con mucho nerviosismo. La trabajadora de la casa le abrió la puerta y luego de notificar quien era, esta lo dejó entrar sirviendo como guía por la enorme casa. Y pensar que Jimin vive en un modesto departamento, bien alejado del suelo y para colmo el ascensor dañado.

Muy bonito, muy bonito.

--El señor Jeon lo está esperando.--...--Por supuesto que lo está esperando. Vaya calamidad.--...--Está en el living.--...--La mujer baja y de unos cuarenta años más o menos estuvo hablándole, pero Jimin estaba aún con el arranque de adrenalina y los nervios peleándose dentro suyo, así que solo se dedicaba a asentir o responder afirmativamente a lo que decía.--

Cuando llegaron al living Jungkook estaba de pie en medio de este. Se notaba que acababa de llegar del trabajo tal y como Jimin lo predijo, aún así, estaba muy bien peinado y vestido, tan pulcro y presentable como siempre. Jimin cuando termina su día de trabajo siente que es lo más desordenado del planeta. Para colmo que su cabello agarra un friz terrible.

--Déjanos solos.--...--Se dirigió a la mujer quien hizo una reverencia y se fue luego de un "con permiso" y entonces quedaron solos, Jimin y Jungkook, mientras este último no le quitaba los ojos de encima al abogado.--...--¿Desde cuándo haces lo que quieres?--

Fue una pregunta simple pero Jimin sintió como si le hubiesen tirado ácido encima.

--¿Mhm?--...--No es tonto y sabe lo que Jungkook quiere saber, pero quiere saber qué opina al respecto.--

--Estas en mi casa luego de pedirme la dirección con urgencia ¿Qué quieres? Pudiste conversar conmigo por teléfono, no venir hasta acá.--

--Si no querías que viniera pudiste no darme la dirección y ya.--...--Finge estar interesado en la decoración de la sala.--

--Parecías desesperado.--

*Es porque lo estaba, aún lo estoy.* Piensa el menor.

--Pues así mismo suenas cuando me llamas y me pides que haga lo que quieras.--...--Dice desinteresado.--

No lo ve, pero sabe que Jungkook no ha de tener una buena expresión justo ahora que le dijo eso.

--Solo yo puedo hacerlo. Nadie dijo que podías llamarme y pedir algo, hacer lo que quieras y disponer de mi. Conoce tu lugar, Jimin.--...--El nombrado pasó saliva y frunció los labios dejando su mirada en uno de los cuadros del living, era bastante pintoresco. Se siente regañado y con justa razón, pero el saber lo que está pasando y el límite que está cruzando no le quita el motivo que lo llevó hasta esa casa.--...--¿Dónde quedó lo que hablamos al principio? ¿Acaso no eres lo suficientemente serio y responsable para mantener un trato de palabra?--

--Soy responsable.--...--Solo que hoy ha tenido otro motivo para actuar como lo hizo y aunque no ha sido lo más sensato que ha hecho, cree que es necesario.--

--No parece. ¿Qué haces aquí? No creo que hayas venido a mostrar lo que pasa cuando te llamo. Tienes tu tiempo para el juicio, y yo hago lo que quiera con el tuyo, contigo específicamente.--

Ante eso Jimin no pudo seguir ignorando a Jungkook y le miró, notando su recta postura, las manos cruzadas sobre su pecho y aquel ceño fruncido que era tan característico suyo, sin embargo ahora se debe a estar disgustado y no porque sea un gruñón.

Independientemente de todo Jimin había pensado que Jungkook estaba siendo comprensivo, pues hizo cosas que lo dejaron en claro (como cambiar la fecha del juicio) y dijo cosas que le hicieron pensar que se preocupaba por él, o que al menos le tenía consideración. Pero luego tiene estas actitudes que le hacen cuestionarse, también lo hacen sentirse estúpido por creer que un hombre tan cambiante y estricto, simple y mandón le pueda parecer bello, que le guste.

--Estos días has sido un maldito chicle conmigo--...--Sentía como si tuviera un hoyo en su estómago y no sabe exactamente si era temor, ansia o rabia, pero no era la mejor sensación del mundo. Quería alejarla y dejar de sentirla.--...--Nuestro maldito trato involucra sexo, no pasar a lo personal y aún así lo hiciste.--...--Da unos pasos cerca del mayor para que este pueda escuchar todo lo que tiene que decirle.--...--Con toda tu mierda de que puedes hacer lo que quieras y que estamos en igualdad de condiciones te has pasado del límite que tú mismo has establecido ¿Entonces, quién debe conocer su lugar realmente? Dudo mucho que hayas ocupado el tuyo en algún momento, Jeon.--

--Nunca tuviste problema con eso.--...--Y hasta parecía estar de acuerdo.--

--Tal vez, pero que me quieras reprender por romper un poquito tus reglas es hipócrita de tu parte cuando te has limpiado el trasero con ellas.--...--Estuvo lo bastante cerca del juez como para poder oler su perfume, sentir como la presencia de este lo consumía sin necesidad de contacto sabiendo que puede aplastarlo de muchas maneras placenteras y no tanto. Eso, eso daba miedo, pero al mismo tiempo era fascinante por muchos factores y el más importante e impactante es el que Jimin tenga en claro lo aburrido y simple que es Jeon, pero eso y sus cualidades cuestionables lo hacen ver... majestuoso.--...--Eres injusto conmigo, juez de la nación.--...--Si no estuviera acostumbrado al comportamiento hostil del juez, Jimin tendría miedo de sus propios pensamientos, pero ha descubierto que alguien que puede parecer carente de emociones y sin personalidad llamativa puede ser igual de atractivo que alguien socialmente activo.--...--Tú mismo rompiste tu palabra. No me señales, traidor.--

La mandíbula del Jungkook se tensó al ser llamado traidor de esa forma, pero en lugar de hacer algo que demostrara su furia solo estaba tentado en preguntarle a Jimin porqué no llevaba sus lentes de contacto, y el porqué tenía el cabello algo desordenado ya que no es típico de él verse desarreglado y poco estético.

--Hago lo que quiero.--...--Desde siempre.--

--Y yo también quiero hacer lo que quiero. No solo tu puedes irrumpir a mi departamento como si nada y querer meterte en mi cama.--...--Su vista fue directamente a los labios del mayor.--

--¿A qué has venido a mi casa? ¿Quieres hacer algo aquí?--...--Jimin no respondió, solo le dio una fugaz mirada a sus ojos y siguió mirando sus labios.--...--A diferencia de ti yo estoy casado, no puedes venir a mi casa de esta forma. Conoces mi situación.--

Porque le dijo lo que estaba pasando con su vida ¿Hizo bien en contárselo al abogado? Este acontecimiento lo pone en duda.

--Yo solo...

--¿Tú solo qué, Jimin?--...--El tono de Jungkook fue más fuerte, casi cabreado. Irritado pero en Jimin no provocaba nervios. Era hasta normal.--

Sin embargo, algo que siempre le ha gustado a Jimin es hacer que Jungkook muestre más. Le gusta jugar con su tolerancia. Probar su aguante y quebrarlo.

Jimin levantó el mentón con orgullo para proceder a decir:

--¿Qué quieres de mí?--

Jungkook parpadeó varias veces.

--¿De qué hablas?--

Ni Jimin sabe a qué se debe esa pregunta, pero trae demasiado trasfondo consigo y no quiere explicarlo.

¿Quiere su cuerpo? ¿Quiere su esencia? ¿Le parece bello o hermoso? ¿Solo quiere su compañía? ¿Quiere experimentar? ¿Quiere sentir? ¿Quiere usarlo como desahogo? ¿Cómo una venganza? No tiene derecho a querer hacer tantas preguntas, pero aún así quiere respuesta para todas ellas.

Porque Jungkook a veces es predecible con sus actos, pero tan impredecible con sus pensamientos que... joder, es complicado para Jimin no saber lo que busca o a dónde quiere llegar. Si Jungkook no hubiese hecho tantas contradicciones Jimin no estaría en su casa buscando explicaciones, buscando demostrarse que todo seguía como en un inicio, que nada ha cambiado a pesar de que el Juez prácticamente ha roto las pocas reglas que ha hecho en este trato, le hace lo más cercano a los mimos, quiere cercanía, la obtiene y luego hace como que no ocurre nada.

Le desespera y lo mantiene a la expectativa, es tedioso y emocionante.

--He preguntado que qué quieres de mí.--

Jungkook solo pensaba que todo estaba claro desde un principio ¿A qué se refiere Jimin con esa pregunta?

Antes de poder seguir en su análisis sintió un tacto suave, con un agarre preciso en su quijada ya que Jimin lo estaba presionando justo ahí, luego deslizó su dedo medio por sus labios.

--Jimin...

--¿Qué buscas?--...--Presiono su dedo dentro de la boca ajena hasta que logró tocar la lengua del mayor, quien ya no tenía esa expresión molesta, solo se dedicaba a mirarle desde su altura con cierta confusión. Esa confusión le causaba fascinación al abogado porque habían hecho tantas cosas, pero aún así Jungkook podía verse conmocionado por sus actos que le causaba estragos deliciosos a su ego.--...--¿Qué buscas con un hombre como yo, eh? ¿Al menos te parezco guapo?--...--Dirigió su otra mano al cuello de Jungkook para acariciarlo con cuidado y paciencia mientras este no hacía más que mirarlo dejándose tocar.--

Descruzo sus brazos y pasó sus manos por la cadera del menor para atraerlo más hacia su cuerpo y ese fue el detonante para que Jimin dejara salir un suspiro mientras sentía que se ponía duro bajo sus pantalones. No podría creer lo que estaba pasando, ni lo que estaba haciendo y diciendo.
Bueno, hoy ha sido un día donde parece hacer las cosas sin pensar actuando por impulso.

Sacó su dedo de la boca del juez y este bajó sus palmas hasta las nalgas del abogado dónde dio unos buenos apretones que le hicieron jadear, pero por nada del mundo se alejó ni se quejó.

--Ahora eres tú quien está diciendo cosas extrañas. Es curioso, abogado.--

--Me la debías. Una por una no es trampa.--...--Sonríe ladino sin mucha gracia. La situación no es graciosa en lo absoluto.--

Con las manos de Jungkook apretando su trasero Jimin estuvo de acuerdo en que ese tacto se sentía muy bien, muy excitante también.

Pero estaría mejor sin ninguna tela de por medio.

No dijeron nada durante unos segundos hasta que Jimin decidió ponerse de puntillas, Jungkook vio la intención y no tuvo que esperar, pues él acercó su cabeza lo suficiente para que ambas bocas se unieran en un buen beso, el mismo que no fue cuidadoso ni tranquilo ya que desde el inicio hubieron mordidas y succiones intensas que le sacaban a Jimin ciertos jadeos y a Jungkook le hacían apretar más y más aquel trasero, atraer más el cuerpo del abogado al suyo queriendo un poco más.

Fue un beso eufórico y caliente que no tenía mucho que ver con lo que sea que estuvieron hablando hace poco porque eso quedó en segundo plano cuando sus bocas se unieron.

Jimin deslizó sus manos hasta tocar los botones de aquella camisa y tenía la intención de sacarlos, sin tan si tan solo...

--¡Papá!--

Jungkook al escuchar aquella voz chillona se separó rápidamente del abogado mientras su corazón estaba acelerado. Su vista viajó por el living notando que no había nadie más que él y el abogado. Eso quiere decir que sus hijos lo estaban llamado desde afuera.

--Espera aquí.--...--Le dice a Jimin y sale de ahí.--

El abogado pasa saliva y cae sentado en uno de los muebles. Estaba duro, ansioso, perturbado, excitado y ahora solo con toda la cabeza hecha un lío.

Tal vez lo mejor sea que se vaya. Ha sido más difícil que otras veces, pero puede decir que no ha cambiado nada y Jungkook sigue siendo el mismo de siempre aún si en ciertos momentos hace cosas que Jimin no espera.

Se pone de pie y camina con intenciones de irse pero se detiene en seco cuando ve a Jungkook parado frente a dos chicos, muy, muy parecidos y después de agudizar su vista se dió cuenta de que eran gemelos, vistiendo ropa deportiva. Se esconde detrás del umbral pero ve apenas lo que pasa porque la curiosidad le puede.

--¿Cómo les fue en su curso hoy?--

--¡Muy bien! Mantuvimos una conversación en inglés con nuestra profesora y estuvo súper. No nos corrigió en nada.--

--Me alegro mucho, Sunno.--

--Si, aunque no pude participar más de dos veces en sus preguntas.--...--Jungkook se agacha frente a Suho.--

--¿Y eso?--

--Habían ciertos verbos que no comprendí y no quería hacerlo mal, me restaría puntos.--

--No te preocupes hijo ¿Sabes que puedes preguntarme cualquier cosa, verdad? Podría ayudarte con esos verbos para que participes en la próxima clase ¿Ok?--

--Está bien papá, eres el mejor.--

--Ustedes lo son, nunca duden de sus capacidades. Pueden lograr cualquier cosa que se propongan.--...--Agarra una mano de cada uno y deja un beso en la parte superior.--...--Son unos chicos estupendos.--

Y con ello les dedica la sonrisa más grande, radiante y sincera que Jimin haya podido ver en Jungkook. Fue preciosa y Jimin tuvo que llevarse la mano al pecho justo donde su corazón latió frenético, pero sus ojos no se despegaron de la escena, de aquel rostro pacífico y amable que mostraba una faceta bella y paternal a aquellos chicos que luego se fueron encima del juez a darle un gran abrazo.

Jimin no pensó que Jungkook tuviera una sonrisa tan contagiosa y al mismo tiempo preciosa. Era todo lo contrario a su personalidad fría y dura.

Nunca había visto esa sonrisa y no imaginó que existiera en Jungkook.

--Yo mismo le dije a Suho que podías ayudarlo ¿Verdad que lo dije eh?--...--Le da un codazo a su hermano.--

--Si, lo dijiste.--...--Ambos se separan de su padre.--

--Deberían ir a cambiarse ¿Tienen tareas que hacer?--

Ambos negaron.

--Por hoy estamos libres.--

--Eso es bueno, vayan a jugar un poco o a relajarse. Papá los quiere.--

Los chicos asintieron y corrieron por el pasillo donde Jimin supuso, estaban sus habitaciones.

Jimin caminó al centro del living ¿Ese de ahí afuera era el Jungkook de siempre? No parecía, era como ver a alguien completamente diferente. Siempre estuvo ahí ¿Verdad? Un lado lindo y amoroso, pero solo sale a flote con sus hijos, solo con ellos porque debe amarlos demasiado.

¿Jungkook sería capaz de sonreírle de esa forma algún día...?

*DÉJALO YA* Se dio un golpecito en la frente y se quedó quieto cuando unos pasos se escucharon muy de cerca.

--¿Ha pasado algo?--...--Pregunta como quien no quiere la cosa y cómo si no hubiera visto lo que pasó afuera.--

--No te hagas el desentendido. También eres algo curioso, lo acabo de notar.--

Los colores subieron al rostro del menor pero no sé dejaría avergonzar.

--Iba de salida y los ví, no quise interrumpir.--

--Claro, hasta te quedaste escuchando.--...--¿Dónde quedó esa bella sonrisa de hace poco? Se fue por completo para dejar al Jungkook frío de siempre. El abogado se quiso estrellar la cabeza contra la pared por sentirse decepcionado.--

Jimin quería ver esa sonrisa de nuevo, pero no cree que la merezca, ni siquiera sabe si alguien aparte de sus hijos la ha contemplado. Jeon Somi tal vez la obtuvo en algún momento, pero ahora Jimin lo duda.

--No fue intencional.--...--Se encoge de hombros.--...--Tus hijos... son muy tiernos ¿Qué edad tienen?--

--Catorce.--

--Oh, son... muy lindos.--...--Sonríe y mira sus pies.--...--Yo mmm ¿Me podrías decir dónde está el baño?--

Jungkook asiente.

--Al fondo a la izquierda.--

--Gracias.--...--Agradece y de verdad que tenía la intención de ir al baño y mojarse un poco la cara para recuperar un tanto de consciencia, recapacitar sobre sus actos y pensamientos alocados, él quería.--...--Por una mierda.--

Fue lo que dijo antes de acercarse al mayor y tirar de su corbata con fuerza para que lo siguiera.

--Jimin, ¡¿Qué haces?!--...--Caminaba como podía siguiendo al menor que lo jalaba.--

--Cierra la boca y sígueme.--...--Encontro el baño e hizo que ambos entraran. Cerró la puerta con seguro y encaró al mayor que estaba mirando la puerta detrás de Jimin.--

--¿Estás loco? Mis hijos están aquí.--

--Deja que vayan a relajarse.--...--Y si Jungkook tenía la intención de decir algo se quedó mudo cuando el abogado de cabello azul empezó a quitarse su saco, luego su camisa y no pudo detenerlo.--...--Qué se diviertan en sus cuartos. Tu diviértete conmigo.--

Jungkook abrió los ojos por esas palabras algo atrevidas.

--Sigo casado, esta es la casa de mi matrimonio.--

--Si lo que me dijiste es cierto pronto ya no lo será, y tú matrimonio parece de todo menos uno. ¿Qué diferencia hay? Quiero follar contigo.--

La sorpresa no se borraba del rostro del juez.

--Pero hoy no quiero hacerlo.--

--Mientes, siempre quieres follar conmigo. Dices que no podemos hacerlo aquí, pero por dentro lo deseas. Deberías tocarme, vamos, tócame.--...--Dejó un beso de pico en los labios ajenos.--...--Por favor.--

Jungkook no podía resistirse a esas palabras, pues nunca las había escuchado de esa forma tan necesitada y aguda, casi como una súplica y fue alucinante sentir que Jimin quería su tacto. Somi nunca le pidió con tanto esmero que la tocara, ni siquiera cuando estaba muy excitada ya que su orgullo podía más que cualquier cosa. Jungkook bajó su derecha hasta la entrepierna del abogado tocando por encima de la tela dando con su erección, notando el rostro delicado del abogado sonrojándose.

--Nunca diría que eres una puta.--...--Frotó con un poco más de fuerza a lo que Jimin gimió bajito.--...--Pero a veces te comportas como una.--...--Y con aquello procedió a besar al menor, quien solo pudo tener agarre de los hombros ajenos.--

Las manos del juez se dirigieron a los pantalones del abogado en busca de sacar el cinturón y la prenda, Jimin lo ayudó con torpeza mientras sus piernas se sentían débiles. Escalofríos lo invadían por aquí y por allá y fue un alivio cuando su espalda impactó contra la pared dándole sustento mientras su boca era atacada por la de Jeon, sus labios tironeados y su lengua succionada. Él también quería poseer esa lengua afilada, pero Jungkook estaba decidido en doblegarlo con su fuerza, Jungkook es más fuerte que él físicamente y puede tomar el control, y para Jimin no es demasiado problema, no cuando su principal problema era el no ser tomado.

Jungkook se separó algo desesperado para bajar los pantalones ajenos mientras Jimin ayudaba quitándose los zapatos a una rapidez que a él mismo le sorprendía. Lo siguiente fue Jungkook quitando el bóxer de Jimin hasta dejarlo completamente desnudo de la cintura para abajo. Jimin quiso preguntar algo por la tardanza del mayor, su cuerpo quería ser tocado, su boca necesitaba algo que besar.

--Jungk…--…--Se quedó con las palabras atoradas en la garganta cuando dio con Jungkook agachado y sin dejar de mirar su entrepierna erecta, como si la estudiara. Si, otra vez.--…--Ey.-

Jungkook no le hizo caso y acercó su índice al glande húmedo y rojizo del abogado, quien al simple toque se removió.

--Te gusta que te toquen aquí, en la punta específicamente. Lo he notado.--…--Ladeo su cabeza antes de agarrar el miembro ajeno por completo, solo dejando su pulgar a la altura del glande pulsando ahí, moviendo en círculos sin perderse detalle de lo húmedo que estaba su dedo, de lo suave, de lo pegajoso de aquel glande mientras su palma contemplaba la dureza de la extensión y, con cada movimiento suyo en esa zona Jimin se encogía, se removía y mordía sus nudillos para guardar silencio.--

Jungkook siguió moviendo su pulgar y dejando su atención en el miembro de Jimin como si estuviera haciendo un experimento y las reacciones del abogado fueran los resultados del mismo. Por si no fuera poco, cada pequeña reacción de Jimin le provocaba una sensación buena pero dolorosa a la vez en su polla, una sensación ya conocida y que quería quitar con sexo, sexo con este hombre una vez más porque solo estando dentro suyo podrá deshacerse de ella, podrá sentirse bien.

--Jungkook.--…--Susurra su nombre casi sollozando por ser privado de los gemidos, estar en una posición incómoda y tener que aguantar toda la atención del juez en su polla, tan cerca que podía sentir su respiración chocar contra su miembro dolorido.--…--Ven, sube por favor.--

Jungkook es débil ante esos “por favor” aunque quiere pensar que suenan más excitantes que los gemidos. El sentirse deseado, necesitado e importante para el sexo de otra persona es maravilloso.

El que un hombre tan experimentado como Jimin pida su polla, su atención, su toque y atención es… pues Jungkook solo puede decir que le gusta más de lo que debería.

--Pudiste citarme en un hotel, en tu casa, en mi oficina incluso.--…--Subió y presionó su cuerpo contra el del abogado que tenía una mirada tan brillosa y excitada que Jungkook se vio reflejado en ella.--…--Pero vienes hasta mi casa solo para que te folle.--

--Si ¿y qué? No finjas que no te gusta. Quieres esto tanto como yo, incluso desde antes.--…--Muestra una sonrisa coqueta mientras va quitando el cinturón de Jungkook con manos temblorosas y espera que no se note demasiado que su actitud segura no está a la par de su cuerpo nervioso ¿Por qué tanta cosa? Ha follado con Jungkook varias veces, no es un terreno desconocido. Jimin lo conoce.--

--Es mi casa.--…--Cuando Jimin dio con la polla gruesa del juez este tensó su mandíbula y lo miró con autosuficiencia desde su altura. Jimin tenía una sonrisa coqueta, seductora y podría decirse que hasta burlona.--…--Donde vivo con mis hijos. Con mi esposa.--

--¿Eso es lo que te pone a pensar demasiado? Tu esposa debe estar ahora con su amante. No pienses tanto en tu terrible matrimonio.--…--Jimin quiere pensar que no manipula a la gente, pero que es bueno para conseguir lo que quiere y siempre logra lo que se propone.--…--Solo estoy yo aquí.--…--Jimin tensa su agarre en aquel falo tibio a lo que Jungkook junta un poco sus cejas.--…--Eso debería ser suficiente ¿O no?--

--Lo es.--

Y con ello, Jungkook presionó sus labios contra los otros, con más rudeza mientras que en la cabeza de Jimin todo daba vueltas. Estaba tan excitado que cerró sus ojos y se dejó llevar por la calentura, el cuerpo de Jeon aprisionando el suyo. Tan bueno, por todos los cielos.

Jungkook lo alzó sosteniendo sus piernas en alto y bien abiertas.

--Mételo, vamos hazlo.--…--Pide entre el beso.--

Aunque Jungkook se separa y lo mira con entera confusión.

--No tengo condones aquí. Podría ir a buscar uno a mi habitación.--

Jimin negó y negó.

--Vete a la mierda.--…--Su ética estaba realmente decepcionada de su comportamiento y sus palabras, pero Jungkook le sacaba de quicio con toda esa rectitud suya.--…--Sin condón está bien para mí.--

--Eso sería muy irresponsable. Tampoco hay lubricante.--

Jungkook lo alzó mejor hasta que la espalda de Jimin chocó contra la pared por completo y llevó sus manos hasta la cadera de Jimin para mejor soporte. Todo aquel movimiento hizo que su miembro rozara contra las nalgas ajenas y un poco más allá haciendo que Jimin estuviera al borde de la desesperación.

--No me importa. Lo quiero.--

Jungkook chasqueo su lengua rendido.

--Eres un hombre tan irresponsable, Jimin.--

Movió su pelvis para que su polla hinchada encontrara la meta; aquella entrada ansiosa que se cerraba alrededor de la nada y deseaba ser llenada.

Jimin bajó su mano para agarrar ese pene grueso y que este apuntara en su entrada, lo suficiente para que entrara poco a poco a un ritmo lento que Jungkook estaba llevando y aguantando al mismo tiempo. Si antes pensaba que la sensación era asfixiante, pues ahora era el doble y para sumarle más, quemaba al ras porque sentía las paredes internas de Jimin cubrirlo, presionando y él solo pudo contener la respiración hasta que estuvo dentro por completo.
Jimin tenía sus ojos cristalizados, la boca entreabierta para respirar mejor porque sentía que el aire no le era suficiente peleando contra la sensación placentera y el dolor que se mezclaban. Hacia demasiado tiempo que no lo hacía de esta manera; sin condón y sin lubricante, sin ninguna preparación.

Pero no estaba arrepentido.

--E-eres tan irresponsable como yo ahora.--…--Suspira y sonríe enfocando su mirada en la de Jungkook.--

--Creo que también me gusta así.--

--¿Mhm?--…--No estaba entendiendo muy bien. Pero por supuesto, Jungkook no le explicaría nada y lo próximo a continuación fue una embestida lenta y certera que hizo al menor sostenerse del cuello ajeno.--…--Ah~--…--Gimio con sorpresa. Jungkook hizo lo mismo sin dejar de mirar el rostro excitado del abogado, tampoco dijo algo cuando las uñas del abogado se enterraron en su nuca y arañaron ahí.--…--J-jungkook mmm ah, ahhh.--

El mayor enterró su cara en el cuerpo del abogado haciendo que el cuerpo de este quedara doblado a la mitad, Jimin prácticamente lo abrazó mientras se movía y llegaba más profundo, mas rápido y certero haciendo que fuera imposible retener los gemidos que querían salir.

--Shh.--…--Pidió Jungkook, bueno, fue una orden y Jimin la acató sin molestia, sin negarse pero con frustración a flor de piel, y esa frustración fue en aumento cuando Jungkook rozó su próstata.--

--Ohhm --…--Cerro sus ojos y concentro la poca fuerza de voluntad que tenía en hacer silencio pero lo odiaba, odiaba estar callado cuando el nudo en su garganta era pesado y ardiente.--…--Jungkook, más, más.--

El juez apretó mucho más la cadera del menor y embistió más rápido, el sonido del choque entre sus cuerpos delataba lo que sus bocas callaban, dejando en claro el sucio y caliente acto que estaban llevando a cabo en ese baño mediano, todo en secreto y que nadie se llegaría siquiera a imaginar.

--Papá ¡¿Dónde estás?!--...--Jungkook se detuvo al escuchar la voz de uno de sus hijos y estaba seguro de que era Suho.--…--¡Papá!--

Jimin iba a decir algo pero antes de que lo hiciera Jungkook se apresuró a tapar su boca con un movimiento tan ágil y rápido que sin duda fue una maniobra.

--¡Estoy acá dentro! ¿Pasa algo?--…--Es increíble como hasta la voz de Jungkook parece cambiar a una menos estricta cuando se dirige a sus hijos.--

--¿Estás ocupado, papá?--

Jungkook miró al abogado solo de reojo. Algo tan simple como mirarlo en medio del sexo no tendría que descolocarlo tanto.

--Estoy cumpliendo con mis necesidades básicas, hijo.--

Si fuera una situación diferente o menos comprometedora Jimin se hubiera reído con descaro y de la manera más burlesca, sin embargo se removió. Si ese chico tan solo supiera que su padre no estaba en el baño usando el bendito inodoro cumpliendo con necesidades "básicas" diarias, sino que estaba supliendo otra necesidad y que requería más trabajo. Una necesidad muy sucia y carnal.

--Mmm bueno Sunno y yo estaremos en la alberca ¿Nos acompañas?--…--La voz de su hijo se escuchó más cerca y dedujo que este estaba parado ahí mismo al otro lado de la puerta.--

--Apenas salga los alcanzo ¿Está bien?--...--Le fue imposible no sonreír un poco como el padre amoroso que es. Le gustaba que sus hijos pidieran su compañía.--

Lo que sea, al menos estaba algo cuerdo pese a sentir que su pene explotaría si seguía quieto.

--Está bien. Te esperamos, papá.--…--Se va trotando.--

Estaban solos de nuevo.

Jungkook fue bajando su mano con lentitud para descubrir la boca del abogado, solo que este fue mas rápido y logró capturar su pulgar en su boca y lo mordió, luego empezó a chupar haciendo soniditos de puro gusto mientras observaba al juez por debajo de sus pestañas largas y húmedas. Todo el acontecimiento hizo que la cabeza de Jeon diera vueltas y enserio que su polla dolió, dolió como nunca.

--Mmm, mmmh~ --…--Jimin estaba chupando con ímpetu y ganas su pulgar, se veía que lo disfrutaba y la posición en la que estaban lo hacía ver todo mas sucio de lo que podría siquiera imaginarse. Jimin tenía su polla en su interior, sus cuerpos unidos mientras le hacía un oral a su dedo sin ningún tipo de filtro, sin quitarle la mirada, sin verse un poco avergonzado por su boca y gemidos calientes.--

Y Jungkook se dejó ir por completo moviéndose furiosamente, con embestidas certeras que podrían confundirse con golpes. Jimin terminaría con las nalgas rojas por cada impacto, pero estaría satisfecho, ahora mismo era el ser mas extasiado y excitado del planeta entero y sus gemidos lo demostraban, sus expresiones igualmente.

--Jodes mi paciencia.--…--Dijo Jungkook sin parar ni por un solo momento.--...--Eso es… cansino, pero tan propio de ti.--

Jimin no estaba muy al pendiente de descifrar lo que Jungkook le estaba diciendo.

--Mas~--…--Estaba muy cerca ya y quería correrse.--

Jungkook empujó su pulgar dentro de aquella boca lo más que pudo a lo que Jimin cerró sus ojos deteniendo unas arcadas, el aire le faltaba pero todo eso hizo que su orgasmo llegara más fuerte que nunca llevándolo a correrse con fuerza entre quejidos agudos y lastimeros.
Jungkook siguió embistiendo hasta que sintió que iba a llegar pronto por lo que sacó su dedo de la boca del abogado y lo remplazo por sus labios en un beso fúrico y desordenado hasta que se corrió dentro del abogado.

Jimin sentía como Jungkook se descargaba en su interior con chorros que parecían no tener fin, que eran espesos y calientes hasta el punto de hacer que ardiera, pero de una forma bastante agradable y que lo tenía jadeando, con su ceño fruncido y todo esto, mientras Jungkook lo besaba como un salvaje que castigaba sus labios, su lengua, y no dejaba espacio para palabras.

La situación se fue calmando mientras los minutos pasaban y ellos se habían separado.

--¿Necesidad básica?--...--La picardía descorbaba del abogado.--

Jungkook se encogió de hombros.

--Pues si, necesidad basica.--

Jimin rodó los ojos negando. Jeon Jungkook es tan el.

--Te corriste dentro de mi. Fue sorpresivo.--…--Dice muy sincero y sus manos tocaron suavemente la nuca ajena, misma que tenía sus rasguños.--

--No pensé que te molestaría.--

--No lo hizo, es solo que… no sueles hacer algo irresponsable sin que te lo pida, al menos conmigo es así.--

--Es que agotas mi calma, Jimin.--…--El nombrado frunce los labios.--…--Pero ya he entendido que eres así. Eres como un ser humano fuera de mi órbita.--

--Oh, vaya ahora me siento como un extraterrestre.--…--Rueda los ojos.--

--Y de mi entendimiento, rebasas mi tolerancia y parece ser un júbilo para ti.--...--Habla como si lo último que dijo Jimin no hubiese existido.--

--Supongo que eso te molesta muchísimo ya que no te gusta que nada amenace tu paciencia y control. Siempre responsable, siempre cabeza fría, siempre la voz de lo correcto. Perdona ser la oveja negra de tu enorme rebaño.--

--Desempeñas muy bien el rol de la oveja negra. Naciste para ello. No se puede moldearte ni un poco ¿Verdad?--

Jimin hizo una mueca orgullosa con su boca.

Jungkook salió de Jimin y se removió un poco.

--Ey, no vayas a bajarme todavía o me voy a caer.--…--Sus piernas estaban muy débiles aún y no cree poder mantenerse en pie durante un buen rato.--

--No tenía pensado soltarte.--…--Camina con Jimin aún en brazos y va hasta el inodoro para sentarse en la tapa de este con Jimin en su regazo.--…--Podre ser irresponsable con tu culo, pero a la larga soy tu hyung y debo cuidarte. Conmigo no tienes que preocuparte porque yo no te dejaría caer.--

Jimin sabía que Jungkook hablaba todo con mucha transparencia y sin nada oculto, pero no tiene demasiado en cuenta como pueden sonar sus palabras y ser interpretadas ante los demás. Ante él en este caso y se sonrojó inevitablemente porque, tal vez, las interpretó como no debía.

--Claro que no. Eres el hombre más cumplido que conozco hasta ahora.--…--Y probablemente de su vida.--

--Eso quiere decir que conoces mucha gente sin principios ni valores. Suena lamentable.--

--Muchísimo.--

Jimin odiaba que creyeran que conseguía ganar los casos por su cara bonita y juventud, pero a la larga terminó siendo aquello que tanto odiaba, pero estando con Jeon Jungkook no puede decir que lo odia del todo.

Nunca pensó que perdería los estribos de su propia vida y en un arranque de necedad le haya llamado, gritado, mandoneado y ordenando cosas a Jeon Jungkook solo para demostrar que nada había cambiado y que todo se mantenía como en un inicio.

La cosa aquí es que algo dentro suyo si cambió y no tiene que ver con cuánto logre descolocar a Jungkook, el sacarlo de sus casillas y el orgullo que siente cuando Jungkook se ve confundido por cosas que cualquier hombre pasado de los treinta debería saber.
Es algo más complicado de descifrar.
Y sea lo que sea que haya cambiado en el, con Jungkook cerca y su bendita cara de pocos amigos hace que sea un poco menos revuelto.

No puede ser que estén pasando tantas cosas con alguien que le ha permitido hacer lo que nunca quiso, lo que más rehuía y odiaba como abogado de la nación.

Jungkook pegó su frente del pecho del peliazul y cerró los ojos pensando que todo lo que tenga que ver con Jimin siempre será un desorden, una rutina impredecible y agotadora, todo lo que no espera y puede controlar ya que no importa cuánto lo intente… Jimin siempre se le escabullía de las manos y aunque Jungkook estuvo de acuerdo en gran parte de todo lo que Jimin hacía, Jungkook sabe que no podría estar de acuerdo con nadie más.

Era ese condenado abogado que tenía todo lo contrario a su ley propia que lo hacía ceder, otras veces, sentir cosas como lo serían la preocupación, ahínco, algo de expectativa y pueda que un poco de admiración.

Pero con Jimin estaba cometiendo lo que más odiaba y le causaba aborrecimiento y no era nada más, ni nada menos que la infidelidad. No recuerda cuando fue la última vez que se sintió tan retraído como cuando descubrió que Somi le era infiel, pero procedió a hacer lo mismo tomando una decisión no muy inteligente que digamos.

Con Jimin había hecho todo lo que pensó que nunca haría, cosas que no pensó posibles y todo fue como una sorpresa porque no lo predijo; no predijo que tuviera una boca tan buena, un cuerpo estupendo, una cara bella, cabello manejable y sedoso con un color poco común en este mundo de leyes.
Y que alguien con todas esas características y seguridad pudiera verse tan indefenso y delicado estando en un ataque de pánico, confesando la razón para proponer un sucio trato, o simplemente dándole la espalda en la cama.

Con Jimin todo era un sube y baja de acontecimientos.

Nunca pensó que llegaría a ceder ante un “soborno” para un juicio ya que iba en contra de la ley, que sería infiel, que haría cosas tan impensables como follar con su “amante” en casa, con sus hijos corriendo por la misma siendo ajenos a como su padre tenía sexo duro en uno de los baños y que no pudo parar. Y aún después de correrse no salió de ahí rápidamente, no, sino que se quedó con su “amante” en su regazo descansando.

Es más, a todas estas ni siquiera pensó que estaría involucrado con un hombre de forma íntima.

Pero con Jimin todo lo que aborrece se siente menos incorrecto, es hasta pasable, tolerable diría él, y a decir verdad… no puede ni concebir la idea de hacer lo que hace con Jimin con alguien más. La simple idea se siente equivocada.

No puede ser que esté pasando tantas cosas con alguien que lo ha llevado a hacer lo que nunca quiso, a lo que más le huía como esposo, padre y juez de la nación.

Realmente, habían hecho todo lo que siempre detestaron juntos, hasta el punto de que ya no lo odiaron como deberían.

He aquí la ironía común del juez y el abogado.

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Llegueeeee
Con el capítulo de la semana eh, eh <33

Espero les haya gustado el capítulo 😘 me encanta leer sus comentarios la verdad ✨ también agradezco la espera semanal <3

Tomen mucha agua, duerman lo suficiente y esperen hasta la semana que viene.
Nos leemos luego soldadxs ❤

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